Capítulo #2
Se que mi vida quizá no era la mejor de todas sin embargo sabía que al menos tenía una familia junto a mi apesar de que no me quisieran del todo, pues muy en el fondo de sus malvados corazones, al menos mi madre tenía que sentir algo lindo por mi porque ella "me había traído al mundo" años atrás y el tenerme en su vientre durante 9 largos meses hacía casi 5 años tuve que provocarle amor o ternura porque ella no me abortó cuando tuvo oportunidad, por eso, en algunas veces me culpaba a mí misma por su crudo rechazo, ya que tal vez si hice algo muy malo en el pasado que rompió con nuestra perfecta relación de madre e hija y terminó por hacerme a un lado de mi hermana Alina, no obstante, el día de hoy mi mamá me sorprendió de verdad porque era mi sexto cumpleaños y ella me regaló un precioso osito de peluche desilachado que probablemente sacó de la basura pero recordó mi aniversario y de ese extraño modo me demostró que si me quería un poquito después de tanto tiempo de ser ignorada, más por ende ese casual gesto no iba a curar todas las heridas que tenía por culpa de una fea decisión del pasado que terminó por extraviar mi camino.
—¿Linseth?, amiga mía, ¿Qué dice el test?, ¿Seré de tía de nuevo?, ¿Acaso es por eso que tardas tanto ahí dentro?, vamos, ¡Me preocupas muchísimo! —Preguntó la mejor amiga de Linseth la cual se llamada Hellen Tratchtemberg, pues ella la estaba esperando fuera del baño de mujeres un tanto inquieta.
—¡AY NO!, ¡Si, Hellen!, ¡Serás tía por segunda vez!, ¡Ohhhh! —aseguró Linseth encontrándose helada de la impresión mientras temblaba un poco tras salir del baño.
—¡Ohhhh!, ¡Qué gran bendición del cielo!, Mariangel tendrá un hermanito o hermanita, ¿Y Cristian? ¡Ohhhh!, ¡Dios mío!, ¡Él estará muy feliz!, ¡Tendrán otro hijito! —aseguró Hellen con una gran sonrisa.
—... ¿Bendición del cielo, dices?, ¡Oh no!, ¿Y ahora qué haré?, ¡Mi esposo Cristian no estará de acuerdo con este embarazo!, ¡Ya es demasiado con la primera niña que tuvimos hace años porque nosotros no la esperabamos tampoco pero mi ingrata madre me obligó a tenerla aunque yo me opusiera. —dijo Linseth con un tono de voz lleno de desesperación y miedo, pues rompió en llanto cuando la prueba dio positiva además de que se lastimó con unos vidrios rotos de un espejo del baño que accidentalmente quebró.
—¡Ohhhh!, ¿Estás bien?, ¿Lin acaso te lastimaste?, ¡Sabes que soy enfermera en mis tiempos libres así que puedo ayudarte si estás herida!
—¡Si, estoy herida!
—¿Ah?, ¿Y dónde te lastimaste?, ¡No veo que tengas sangre o alguna herida!, ¿O si?
—Si, tengo miles de heridas y están sangrando dentro de mi alma por culpa de este maldito estorbo que está creciendo dentro de mi cuerpo.
—¡Ay Dios!, ¡Linseth cuidado con lo que dices!, ¡Recuerda que estás embarazada y los bebés nos pueden escuchar desde el vientre!
—¡No digas estupideces y ya cállate que me aturdes!, ¡Este bebé es un vil parásito que vino a causarnos muchos problemas!
—¡Ohhhh!, ¿Entonces quieres decir que no quieres a tu nuevo hijo que viene en camino?, ¿Y qué pasará con él o ella sin ti, eh? —Preguntó Hellen tras hallarse muy agobiada y preocupada por su amiga.
—No lo se pero créeme que no me preocupa en lo más mínimo y jamás lo voy a querer, ¡Él o ella es solo un maldito error porque el condón se rompió!, ¡Uff!, creo que lo daremos en adopción apenas nazca ya que no lo quiero ni ver, si, ¡Seguiré con mi vida normal después de deshacerme del bebé porque actuaré como si nunca hubiera nacido, pues para mi mala suerte ya es demasiado tarde como para abortarlo, ¡Debo tener como 2 o 3 meses!, ¡Soy una asquerosa vaca por lo gorda que estoy!
—¡Ohhhh!, ¿Es enserio?, ¿Abortarías a tu propio hijo?, ¡No!, ¡Definitivamente estás loca, de eso no hay duda!, pero Linsy después te arrepentirás de... —dijo Hellen estando algo exaltada, pues le dio muchísima rabia y dolor el ver como aquel bebé no era deseado.
—¡Shhh!, ¡Dije que te callaras, Hellen!, ¡Es mi cuerpo y yo decido lo que hago, no tú!, ahora lárgate de mi casa que no quiero verte nunca más, por favor, ¡Pero rápido! —dijo Linseth encontrándose muy molesta con su mejor amiga porque muy en el fondo sabía que tenía razón, sin embargo ignoró sus sentimientos mientras tomaba una toalla húmeda para limpiarse las lágrimas.
—Okey, me voy pero te juro que te arrepentirás después porque ese bebé que esperas te pesará en la conciencia para siempre, ¡Dios!, ¡Es tu segundo hijo y se que no eres tan malvada!, ¡Se que ese bebecito los unirá aún más como familia pero es tu decisión y yo ya no me meteré más en este delicado asunto aunque me duela ver lo que haces! —aseguró Hellen mientras trataba de convencer a Linseth de que no regalara o asesinara a su hijo, pues cuando se iba lloró un poco.
Linseth, ese era el bellísimo nombre de mi pobre y afligida madre biológica la cual estaba mal influenciada por parte de los demás menos de la tía Hellen porque cuando mi mamita quedó encinta de mi tan solo era una bella adolescente de 19 años junto a mi padre, quien tenía 21 y como ella no estaba listo para traer a otro niño al mundo luego de que mi hermana mayor se me adelantara por 4 años de diferencia, sin embargo a ella si la comenzaron a amar muchísimo conforme crecía y a mi no, a mi me olvidaron y el juramento que mi madre le hizo a la tía Hellen se cumplió al odiarme a muerte solo por venir al mundo en un mal momento para mis jóvenes padres.
Por otro lado, desde el vientre de mi mamita podía sentir su corazón latir junto al mío y ese sonido era de amor verdadero aunque ella no lo quisiera aceptar, ya que mi conexión con ella era imposible de romper por más que nos quisieran separar y si, puede sonar absurdo lo que diré pero aún podía recordar su hermosa & melodiosa voz, además, su mirada verde penetrante quedó plasmada para siempre en mi frágil memoria y su rostro enmudecido por las miles de lágrimas que derramó por culpa de los demás jamás desaparecieron de mi a pesar del tiempo aunque por ahora, yo, su segunda hija, la "no deseada" no la pudiera recordar del todo porque al final si arrancaron nuestros lazos de madre e hija así como todo sentimiento que nos vinculara por muchos años.
...
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