Alina había logrado salirse con la suya y sacar su fiera interior, pues en efecto, la chica llamada Mariangel era la más popular, hermosa y de buena posición económica de su elegante secundaria razón por la cual mi valiente hermana logró ser su amiga solo por mi al no dificultársele hacer nuevas amistades gracias a su sociabilidad, belleza y prestigio los cuales usó como armas para descubrir la verdad de mi pasado, ya que si yo lo hacía en persona era muy problable que Mariangel me ignorara o se riera por mis antecedentes.

—¡Hola Mariangel!, ¿Qué tal estás hoy?, ¡Ough!, mira, ¡Se te cayó tu arete de oro! —dijo Alina sutilmente mientras que se acercaba a ella con una extraña risilla, pues ahora era el momento idóneo para iniciar con nuestro estupendo plan.

—¿Eh?, ¿Disculpa?, ¿Te conozco?, ¡Ay no!, ¡Dame mi arete AHORA!, ¡Seguridad!, ¡Ayuda! —Respondió mi hermana Mariangel con una mueca de desagrado y desinterés, pues aún no conocía a Alina.

—¡NO!, ¡Si nos conocemos!, mira, yo soy del sector B, me llamo Alina Druvalet y solo quería ayudarte porque se te cayó el arete y quise recogerlo por ti al verlo tan elegante, ¡Uff!, ¡Pudo perderse y debe ser muy valioso!, fue un simple favor, ¡No seas tan drámatica! —dijo Alina encontrándose un tanto molesta y decepcionada, pues le dio el dichoso arete con algo de desprecio.

—¡No, no lo necesito!, ¡Iuu!, ¡Qué asco!, ¡Ashh!, mira, ¡Tengo más de 150 pares de los mismos, por lo que si se pierde uno no habrá problema!, ¡Ah!, si, ¡Y ya se quién eres tú!, ¡Ja, ja, ja!, ¡Miren todos!, ¡Ella es la hermana de la loca del psiquiátrico y seguramente nos divertirá con sus payasadas!

—¡Ohhhh!, ¿Pero cómo te atreves a hacerme esto?, ¡Yo solo quería ser amable contigo o quizá amigas más adelante y ya!

—¡Uy!, ¡Discúlpame pero tú eres la hermana de Alejandra Druvalet y si me ven contigo creerán que yo también estoy loca!, ¡Ishh!, no, definitivamente no puedo ser tu amiga, ¡Solo me das lástima como tu demente familia! —aseguró Mariangel cruelmente mientras los demás se reían de la pobre de Alina, pues ella tenía una imagen que cuidar y seguidores a quienes obligar.

—¿Es enserio?, ¿Crees que quiero ser "tu amiga"?, ¡Uff!, mira, ¡Permíteme decirte que tienes tu autoestima muy baja porque literal eres una princesita mimada que necesita de la aprobación de los demás o si no no podrá ser como papi!

—¡Ohhhh!, ¡Oye!, ¡Me estás ofendiendo!, ¡SEGURIDAD!

—¡Basta!, ¡Escúchame!, ¡Entérate ya que nadie aquí te quiere de verdad!, ¡Solo te siguen por el dinero de tu familia!, en cambio yo si soy fuerte, sociable, hermosa & real y no me vas a herir con tus cursilerías porque no soy como mi pobre hermana la cual es débil debido a su corazón enfermo
cosa que todos aquí desconocen y solo se aprovecharon de ella sin saber la verdad, ¡Ah!, ¡Me caíste pésimo!, ¡Estúpida mimada!, ¡Ushh!, ¡Tú tienes algo que se llama complejo de superioridad y yo con eso no voy!, perdón. —aseguró Alina con una mirada fulminante y un tono de voz severo, pues me iba a defender a capa y espada de quien fuera.

—¿QUÉ dijiste?, ¿De verdad Alejandra la loca está enferma del corazón?, ¡Ohhhh!, oye Alina, ¡Espera!, ¡Tienes razón!, ¡A ti no te afectan las risas o burlas de los demás porque estás protegiendo a tu hermana!, ¡Dios!, ¿Quieres ser mi amiga?, ¡Tú eres de las mías, o sea fuerte, preciosa & valiente y te necesito junto a mi!, ¡POR FAVOR ACEPTA!, al final somos de la misma edad y estudiamos juntas. —dijo Mariangel hallándose muy arrepentida por haber sido tan cruel con mi hermanastra Alina, pues lloró un poco al sentirse rodeada de alguien tal como ella.

—¡Ashh!, ¡Bien Mariangel!, ¡Acepto tu oferta!, ¡Creo que al final si seremos grandes amigas! —afirmó mi pobre hermanastra Alina mientras que se reía hipócritamente, ya que no deseaba ser tan cercana a mi hermana real gracias a su egoísmo pero lo hizo solo por mi bien.

En verdad Alina se había enfadado muchísimo con mi hermana Mariangel pues ella era prepotente, egocéntrica y presumida en todos los sentidos al haber sido criada casi como una princesa inglesa, y si, a mi hermanastra le dolía en el alma el ver como a ella sí la habían llenado de lujos en un lugar que siempre debió ser mío por derecho, sin embargo, apesar de todo ambas lograron encajar porque eran súper populares y su amistad triunfó sobre cualquier prejuicio tal como si ya se hubieran conocido desde antes, pues ambas tenían muchísimo en común y Alina decidió acercarse solo por mi.

1 semana después.
Secundaria Golden Waterfull.
10:32 AM.

—Mariangel, ¿Por qué eres fuerte y algo cerrada al diálogo?, digo, ahora somos mejores amigas y creo que será de mucha ayuda el conocernos mejor, además yo te diré el porqué de mi valentía y vanidad... —aseguró mi hermana Alina tristemente tras al fin poder insertarse en el plano personal de la vida de Mariangel.

—Ahm... ¿Qué te parece si vamos a mi casa después del almuerzo y ahí te cuento toda mi historia?, es que aquí hay demasiados moros en la costa y esas cosas no se dicen así de fácil o si no le venderán la información a la prensa y ahí si que perderé mis privilegios. —afirmó mi hermana Mariangel con una voz baja y discreta, pues estaba segura de si misma aunque dudó un poco.

—¡Claro que si Mariangel!, ¡Uff!, ¡Somos tan preciosas y únicas que el mundo nos tiene envidia!, muy bien, ¡Vayámos!, ¡No sabes cuánto anhelo poder conocer tu lujosa casa al fin después de tanto tiempo! —dijo Alina hallándose completamente feliz por su gran suerte y por mi, su hermana del alma, pues haría hasta lo imposible por conseguir la verdad de mi crudo pasado junto a ellos.

...