- Kookie, Kookie, despierta- le dijo el omega moviendo a su mejor amigo. A su espalda la abuela y madre del alfa esperaban ansiosas para saltar sobre el alfa de la casa y felicitarlo.

- Dejame dormir...- le dijo el alfa y se cubrió aún mas con la manta.

- ¡Me comeré tu pastel!- amenazó y Kook entendió, ese día, durante las veinticuatro horas, sería su cumpleaños.

- ¡Es mi cumpleaños!- exclamó levantandose de una de la cama, y abrazó a todos a su alrededor, a JiMin, a su madre y a su abuela. Dandoles felicitaciones a todos, los omegas se miraron confundidos, sin embargo le abrazaron.
La casa ya se encontraba decorada y JungKook se preguntó cuando lo habían hecho.

- No mires todo como si fuera algo extraño- dijo su madre- ¿Qué horas crees que son, cachorro dormilón?- preguntó con gracia.
JungKook miró la hora en el reloj que adornaba la sala.

- ¡Mamá! ¡Son las diez de la mañana! ¿Por qué me dejaron dormir tanto?- exclamó y se miró en el espejo mas cercano, notó su cabello alborotado, su pijama desarreglada.

- Siempre te gusta andar despertando a los demas, así que hoy fue nuestro turno...- le dijo JiMin sentandose en el sofá, se encogió de hombros y sonrió. La madre y abuela de JungKook, rieron.

- Bueno sopla las velas de tu primer pastel...- dijo Eun Ji, quien se fue a traer el postre, cuando JiMin lo vió no puedo evitar comenzar a reír.

- ¡Mamá!- exclamó JungKook, avergonzado.- ¡Abuela dile algo!

- No pequeño Kookie...- dijo su abuela, abrazando a su nieto menor, besó la mejilla del mismo con cariño. La razón del sonrojo del alfa, es que el pastel tenía forma de galleta con el símbolo de Iron Man en el centro.

- Ya soy mayor de edad...- dijo avergonzado pero feliz de que su madre, abuela y mejor amigo se tomaran el tiempo de hacer un pastel para él.

- Seguiras siendo Kookie Man toda la vida- le dijo JiMin haciendolo sonrojar mas.

Sin embargo, a pesar de estar avergonzado, se sentía dichoso y feliz, era un sentimiento único que lo llenaba y embargaba de manera maravillosa. Luego de tantas batallas, de tantas caídas, de tantas lágrimas, de cada una de las heridas hechas en su pasado por sí mismo y la culpa que creyó tener, ahora se veía feliz. Hace tanto que dejó ir a su compañera de culpas, siente que el tiempo ha transcurrido rápido, pero al ver sus recuerdos sabe que ha aprovechado cada segundo al máximo, que cada cosa valió para llegar a ser alfa que ahora es.
Siente tan lejano esas noches en las que llamaba a JiMin llorando, esas veces donde su mejor amigo le consoló en silencio cuando su padre lo rechazó, esas noches donde su razón se tiró al abismo para perderse para siempre...
Miró a su alrededor y comfirmó que cada día había valido la pena. Ahora su mejor amigo era feliz, tenía un alfa que cuidaba de él, y aunque JungKook sabe que al principio Min no le agradaba para nada, agradece que se haya quedado con ellos. Porque su madre podía darle todo lo que necesitaba, sin embargo para un cachorro la aprobación de un alfa mayor también era importante. Recuerda y se avergüenza de las primeras preguntas que le hizo a YoonGi, espera que nadie mas se entere, porque le daría vergüenza si su mejor amigo y madre se enteran.

Su madre sonríe al verlo, y él le devuelve la sonrisa.

- Vamos, cachorro, sopla...- le dice sonriendo. Y aunque se sonroje, ama cuando su madre le dice "cachorro".

Tomó airé y sopló sobre las velas que conformaban el número dieciocho. Su único deseo fue...

"Que todos, en mi manada, seguimos siendo felices..."

JiMin aplaudió, su abuela también y él se aplaudió así mismo...
Un cumpleaños mas, cerca de quienes mas amaba...

.....

-¿Así que oficialmente seré tío?- le preguntó JungKook a JiMin, quien asintió.

- YoonGi esta emocionado, me lo hace saber atraves del lazo, y eso a veces me dan ganas de llorar...- dijo y unas lágrimas rebeldes escaparon de sus ojos- Son demasiadas emociones para mí...

- Eso es algo normal JiMinnie...- dijo la señora Jeon, con una sonrisa- Lo comprendo, ¿sabes? Cuando Kookie estaba en mi vientre, era como si supiera que me sentía triste y pateaba mucho, y creeme que fue una lucha sin fin cuando quería dormir...- la abuela Jeon asintió, recordando como su hija se quejaba de lo inquieto que era su nieto.

- ¡Mamá!- Kook vuelve a quejarse como niños pequeño.

- Sabes que te amo, cachorro...-dice y deja un beso en su frente, para dirigirse a la puerta, que esta siendo tocada, JiMin al olfatear el aroma de quien se trata, se emociona y sonríe.

- Que bueno que dijo eso cuando los Min no estaban presentes...- dijo Kook y suspiró de alivio.

Tal como Kook dijo, los Min habían sido invitados y estaban cruzando la puerta, aunque la sorpresa del cachorro la darían en la fiesta navideña, pero YoonGi se mordía la lengua ansioso. En cuando YoonGi apareció en la vista de los menores, JiMin -casi- saltó a sus brazos, siendo atrapado por el mayor.

- Minnie cuidado...- le dijo el alfa, acariciando disimuladamente el vientre del omega. Desde que se enteró del estado de su pareja, se le hace dificil separarse de él, es que su pareja ha adquirido un aroma tan delicioso, que no puede evitar abrazarlo todo el día, incluso estando dentro de la institución le gustaría quedarse junto a su omega, pero sabe que debe terminar su carrera, pues su cachorro viene en camino. Sin embargo la noticia sería dicha después, por ello el omega ocultaba parte de su aroma, y ahora podía solo distinguir el tranquilizante aroma de los arandanos.

Luego de que los señores Min saludaran a JiMin, los tres se dirigieron al cumpleañero.

- Felicidades JungKook...- dijo la mujer alfa con una sonrisa.

- Felicidades Kook- le dijo el señor Min. Entregandole un regalo, envuelto en papel con diseños de Iron Man. En cuanto Kook se dió cuenta, se sonrojó.

- ¿Tenías que hacer esto, Min?- preguntó dirigiendose a YoonGi quien se encogió de hombros, y abrazó a su omega, quien se encontraba en su regazo, se supone que era su cumpleaños, ¡no el día que lo harían pasar vergüenzas!

Todos rieron, JungKook parecía un alfa cachorro, era gracioso verlo.

Algunas historias y vídeos de Kook fueron expuestos, haciendo al alfa sonrojar y reír al mismo tiempo.
La primera hora pasó normal, pero el timbre volvió a sonar.

JungKook y su lobo prestaron toda su atención al reconocer el aroma.
Llegó hasta la puerta y abrió.
Y el gorjeo de un bebé le hizo sonreír.

- Hola JungKook...- saludó Hye, y el pequeño Joo parecía inquieto- Cada vez que te ve se emociona- dijo y el pequeño extendía sus bracitos en dirección del alfa, quien lo tomó en brazos.

- No te preocupes, pasa...- dijo sonriendo. Hye entró y se sorprendió al ver a varias personas dentro de la estancia.

- Mucho gusto, soy Ahn Koo Hye, cuiden de mi...- dijo tímida e hizo una pequeña reverencia, JungKook venía cargando a Joo, quien miró a todos con sus ojitos de bebé curioso. Los presentes sonrieron y asintieron.

- Saluda Joo...- dijo JungKook y movió la manita del bebé. YoonGi tuvo que calmar a JiMin, pues sus emociones estaban llegando al límite y debían ser muy cuidadosos con la sorpresa.
Rieron enternecidos por el bebé.

Hye no esperaba que la madre y abuela de JungKook la abrazaran o que mimaran a su hijo. Tampoco que se refirieran a ella como la pareja del alfa cumpleañero. Y a su bebé como su cachorro. Pudo conocer a JiMin mejor, notó la marca y la mirada que YoonGi le dirigía al omega, era una pareja linda de ver.

Joo, a diferencia de su madre, estaba complacido con la atención que recibía. Pasaba a los brazos de la abuela Eun Hee, a los de Eun Ji, pero los brazos que mas le gustaban eran los de JungKook, el cachorro se sentía muy bien.

La comida transcurrió tranquila, siguieron con las bromas y anecdotas divertidas, haciendo sonrojar a JungKook, y a los demás, reír.

- Entonces una omega se le acercó, y salió corriendo...- rió JiMin mientras contaba una de las historias mas graciosas que le pasaron junto a JungKook- Gritó algo así...- carraspeó y trató de hacer la voz mas grave- ¡Auxilio!¡JiMin! ¡Un omega me quiere violar!

Todos en la mesa rieron, y Kook le miró ofendido. Y más porque Hye también se rió. Todos estaban en su contra.

- En verdad... planeaba hacerme algo malo...- susurró y le sacó la lengua a su mejor amigo.- Y de todas formas no me interesaba...

- Vaya Kook, todo un rompe corazones...- dijo YoonGi, los demas volvieron a reír.

Y apesar de que tenía el ceño fruncido, no podría negar que amaba ese lugar lleno de bromas, junto a su madre, a su abuela, a JiMin, a YoonGi, a los señores Min, y ahora junto a Hye, y al pequeño Joo, que consideraba su cachorro...

JiMin notó su mirada ida, pero feliz y sonrió.

"Somos felices, Kookie..."

"Lo somos, Chim..."