Narra Brooklyn:

Han pasado varios días desde la muerte de mi madre. Creo que Loucela ya dejó este asunto por la paz, o al menos con nosotros, en muchos de los noticieros se reportan mujeres misteriosas que dejan el mismo tipo de rasguños en los hombres, ellos aún no saben que se trata de algo de otro mundo.
Luna ya está integrándose al grupo, últimamente Trinna ha estado mucho con ella por lo que casi no la veo. Aunque lo que realmente me preocupa es Maggie, nadie la ha visto desde aquel día que huyó del velorio, tanto mi padre como yo la hemos buscado pero no sabemos nada de ella, supongo que debe de estar bien, si algo malo hubiera ocurrido ya nos hubiéramos enterado.
Lo único que puede hacer que Maggie vuelva es Jason, pero no creo que él acepte fingir que la quiere.
Debo de hablar con Stark Jr, así que lo espero en nuestra habitación.

-Hola Rogers- dice Jason entrando al cuarto.
-Stark, quería hablar contigo.
-¿De?
-Maggie. Tengo mucho sin saber de ella y creo qué tal vez pudo haberse puesto en contacto contigo.
-¿Y qué te hace pensar eso?
-Pues ella está enamorada de ti y...
-Pero yo no de ella. No te ofendas, pero tu hermana no me gusta para nada.
-Pero, llegaste a salir con ella ¿o me equivoco?
-¿Tienes idea de con cuantas chicas he salido? Maggie no es lo que estoy buscando, es... no sé, demasiado fácil, quiero algo que sea un reto, que mientras más me cueste conseguirlo más valga la pena, como Serena.
-Eres el único que puede hacer que vuelva, Jason, por favor.
-Brook, déjala ser. Maggie no quiere volver, está mejor sin nosotros, y nosotros... ya encontramos alguien que ocupara su lugar, y a decir verdad, creo que Luna puede ser de más ayuda que tu hermana.
-Luna... Luna Maximoff... Pietro ¡Es lo único en lo que piensan todos!- grito furioso.
-Mira Brook, sé que estás molesto de que tu novia te haya cambiado por su prima pero yo no tengo la culpa.
-No es eso Stark. Luna y Pietro llegaron después de que Maggie se fuera y mi madre muriera, de hecho creo que a ninguno de ustedes le interesó guardarle luto.
-Vamos, Rogers, bien sabes que Sharon no era precisamente muy del agrado de todos.
-¡Pero era mi madre!- grito conteniendo las lágrimas.

Salgo furiosamente de nuestra habitación y él va tras de mí. En el pasillo me encuentro a Trinna.

-¿Qué pasa Brook?- dice Trinna intentando abrazarme.
-No es momento, Maximoff.
-Pero...
-¡Quiero estar solo! ¿No entiendes?

Me siento un poco mal por gritarle, pero no es momento de remordimientos. Me alejo de ellos corriendo.

Narra Trinna:

Brooklyn acaba de partirme el corazón, debió de estar muy mal para haberme gritado de tal modo.
Me acerco a Jason para preguntarle, o mejor dicho: reclamarle.

-¿Ahora que demonios le dijiste, Stark?
-¿Yo?... nada, no ¿por qué crees que debí de haberle dicho algo?
-No sé, tal vez porque eres un cínico que a veces, la mayoría del tiempo, le dice cosas a la gente sin pensar lo que ellos puedan sentir.
-No soy tan cruel... Sólo hablamos de lo que ha pasado últimamente.
-Ya entendí por qué tan mal. Debo hablar con él...

Intento alejarme pero Jason me toma del brazo.

-Brujita, no te conviene. No vayas tras él, entiende que quiere estar solo. 
-Cierto.
-Espera... espera... ¿Acabas de darme la razón?
-No hagas que me arrepienta...

Intento irme pero Jason me detiene tomándome del brazo de nuevo.

-Hay algo más que quiero decirte.
-Rápido Stark.
-¿Cómo se te declaró Brooklyn?
-Espera... ¿Cómo sabes de lo nuestro?
-Todo el mundo lo sabe, pero eso da igual... responde.
-Pues, nos besamos en la boda de Pia y Nathaniel, creo que ahí comenzó todo ¿Por qué la pregunta?No me digas... ¿Le vas a declarar tu amor a Maggie cuando regrese?
-¡No! ¿No les queda claro que yo con esa estúpida niña jamás?
-Ahora entiendo por qué la ira de Brooklyn.
-Tanto ella como nosotros estamos mejor desde que se fue. Bruja, tú no me vas a dejar mentir, sinceramente Luna es de más ayuda que Margaret.
-De nuevo tienes razón.
-Brooklyn cree que les importa más la llegada de Luna que guardarle luto a su madre.
-No es que la muerte de Sharon no me importe, pero no puedo pasar por desapercibido el hecho de que una prima que ni siquiera conocía y el tío que creía muerto estén con nosotros.
-Hazle entender al terco de tu novio...
-Por cierto, no me dijiste a quien querías conquistar.
-Es una larga histor... Serena.

Estuve dandole consejos a Stark para que la conquistara ¿Quién lo diría? Estoy estableciendo una plática armoniosa con él y no hemos discutido, creo que Jason no es tan malo como lo pintan.

-Herederos, se les solicita en el auditorio para las pruebas de sus vestuarios- dice Quentin en el altavoz.

Jason y yo caminamos a donde nos indican.
Al llegar al auditorio me separo de él y me siento junto a Venus, Aaron y Luna.
Fury y Quentin montaron toda una especie de pasarela para la exhibición de nuestros nuevos trajes.
Todos los lugares están ocupados, excepto el de Avalon y Serena, temo que haya sucedido algo malo, siempre se ausentan cuando algo malo ocurre.
Ahora nos formamos para recibir los trajes.

-Maximoff- dice Quentin entregándome mi traje- Muero por verte con esto.
-¿Gracias?- respondo confundida.
-No le digas a nadie, pero eres mi favorita- susurra acercándose a mi oído.

Me alejo de él confundida y entro a los probadores un poco nerviosa.

-Trinna ¿Estás bien?- pregunta Megan.
-Si, bueno no... es Quentin, a veces me hace sentir incómoda- confieso.
-Ahorita mismo voy y le parto su...- dice Luna.
-¡Ya!- grita Jenny- Hay mejores cosas que hacer ¿si?

Luna pasa sus manos por la frente de Jennifer y esta empieza a llorar desconsoladamente de inmediato.

-A eso me refiero cuando les digo que puedo alterar los sentimientos- dice Luna riéndose.

Luna es como la hermana mayor que nunca tuve, con ella aquí, nadie se atreverá a molestarme de nuevo.
Entro al probador con mi nuevo traje, ahora sí QUENTIN SE PASÓ, está muy reducido y apretado, la capa es bonita, también me gusta la tiara, pero definitivamente no me voy a poner ese traje de baño al que le llama uniforme, así que me quedo con mi ropa de entrenamiento.
Ahora nos hacen mostrarles a todos nuestros trajes: Patrick lleva un traje como el de Spiderman pero en tonos grises; Chad usa un traje negro con líneas verdes, en honor a la viuda negra y Hulk, la versión masculina del traje de Megan; el de Venus es plateado con tonos aqua; el traje de Dylan es parecido al de su padre pero en morado, su madre lo diseñó personalmente; las armaduras de Ray y Jason fueron rediseñadas por Industrias Stark, verde y azul marino respectivamente; el traje de Jennifer parece hecho de metal, en tonos blanco y negro con contrastes rojos por lo de "Red Lips"; Nathaniel y Pia parecen uniformados, ambos similares al de Ojo de Halcón pero en tinto; Aaron lleva un traje verde oscuro con un rato plateado en su pecho, en honor a nuestro tío; Luna luce espectacular con su atuendo rosa y ajustado, parece de terciopelo, ella también lleva un rayo pero dorado y en la espalda; Brooklyn se ve muy parecido a su padre, pero en color verde militar y con estampado de camuflaje, aún así se mira triste y finalmente yo, creo que me veo bien, mi traje de entrenamiento es del mismo color de la capa y la tiara, creo que combinan bien.

-Sabía qué harías eso- dice Quentin mirando mi atuendo.
-¿Entonces para qué me entregaste ese traje?- respondo molesta.
-Era sólo una prueba, y creo la pasaste.
-Pues gracias.

Miro hacia el otro lado y ahí está Brooklyn aún molesto, tiene una mirada triste. Me acerco a él para ver si puedo ayudarlo.

-Hola- le digo sentándome a su lado.
-Trinna, lo siento por lo que te dije hace rato, pero necesito estar solo.

No le respondo nada pero me alejo de inmediato de él. Jason me lanza una mirada de "Te lo dije"
Ahora Fury pasa a entregarnos las armas que podemos usar, aunque la verdad no creo que en mi caso sean de mucha ayuda porque no sé utilizarlas.
De inmediato entra Avalon corriendo con sangre en las manos.

-¡Se la llevó Loucela!- grita desesperada.
-¿A quién?- dice Chad abrazándola.
-Serena, yo vi cuando se la llevó.

De inmediato miro a Jason y él parece quedar en shock.

-¿A dónde se la llevó?- pregunta Brooklyn integrándose a la plática.
-Atravesaron el espejo de nuestro baño, fue lo único que pude ver. Estoy segura de que Loucela le hizo daño porque dejó un rastro de sangre.

En ese momento comienzan a encender y apagar las luces en en auditorio. Se puede sentir un temblor en todo el lugar.
De repente una voz comienza a hablar.

-Midgardianos- se escucha la voz de Loucela, pero no se sabe de donde proviene- Tengo a la hija de Thor en mis manos, si no se entregan mis tres marcados, ahora ella y Asgard pagarán las consecuencias.
-Ella no es hija de Thor, yo soy hija de Thor- grita Avalon y yo recuerdo que Serena le mintió cuando se presentó.
-Y no pienso devolverla hasta tener a mis tres hombres- se escucha con eco la voz de Loucela.
-Ahora quieres tres, después serán cinco, diez, así hasta llegar con todos los que queden bajo el dominio de tu poder- reta Nathaniel- Pero ten por seguro que no lo vamos a permitir.
-¿Quién? ¿Tú y tu esposa?- grita Loucela.

De inmediato se enciende un reflector hacia Pia y podemos ver una lanza atravesando su pecho, cae al suelo y Nathaniel corre hacia ella.

-Noooo- grita Nath sosteniendo el cadáver de su esposa.
-¡Es una trampa!- grita Venus.

El cuerpo de Pia explota pero Venus puede contenerlo con sus poderes. Quentin enciende el sistema de extintores y logran apagar el fuego contenido en el campo de fuerza de Venus.
Nathaniel sufrió de unas quemaduras, pero eso no le afecta tanto como el hecho de que su esposa muriera, así que abraza a Venus llorando, Aaron se pone un poco celoso, pero en el fondo creo que entiende.
Abandonamos de inmediato el auditorio maldito y nos reunimos en la entrada principal aún con nuestros trajes y se vuelve a escuchar la voz de Loucela.

-Dos de tres- grita la voz que no sabemos de dónde proviene.
-Primero Sharon, ahora Pia, sigo yo- asegura Avalon llorando.
-No lo voy a permitir- dice Chad abrazándola.

Nathaniel está llorando desconsoladamente, Luna se acerca a su lado.

-Puedo ayudarte...- asegura mi prima.
-No, déjame llorar- dice Nathaniel.
-¡Maldita sea! Nos persigue la desgracia- asegura Jason.

Fury les avisó a nuestros padres de lo sucedido, por eso es que ellos están aquí.
Los únicos son mi madre y el Capitán que llegan juntos, yo los abrazo y comienzo a llorar.

-Tranquila Trinna, no permitiremos que te pase nada- asegura Steve.
-Mamá ¿Y Bucky?- pregunto extrañada.
-Terminamos hace unos días, creí que ya te había dicho- añade Wanda.

Mi madre se acerca a abrazar a Nathaniel, está destrozado pero creo que le tiene mucha confianza a Wanda.
Para colmo Aaron está celoso de que Venus lo haya consolado, sé que es mi hermano pero a veces exagera.

-Sólo quisiera ponerle fin a esta maldición- grita Avalon.
-Así será- se escucha de nuevo la voz de Loucela- Si quieren jugar, vamos a jugar.

Se apagan las luces y se siente un temblor de nuevo, parece que algo explota frente a mí, cierro los ojos y al parecer quedo inconsciente un rato.
Cuando abro los ojos de nuevo me encuentro sola en un lugar de muchas paredes altas, parece un laberinto...