CAPITULO 4
Han pasado dos semanas desde el desafortunado encuentro, dos semanas en los que Sky ha evitado salir, aun cuando se trate de su propio pub. Por su lado Phai, ha continuado su ritmo de vida habitual.
El sonido del teléfono que se encontraba sobre el escritorio, hace que Phayoo se espante y, aunque no tiene registrado el número que le está marcando, contesta.
—Sí —respondió Phayoo.
—¿P'Phayoo? —preguntó la otra línea.
—Soy, ¿Quién es? —aunque reconoció la voz que le hablaba, fingió preguntar.
—Es nong Rain, P'Phayoo —respondió—. Rain encontró una nota de P'Phayoo.
—¡Oh! Sí —dijo Phayoo, tratando de disimular su vergüenza al hablar.
—Si phi está ocupado, Rain puede llamar después —se apresuró a decir Rain. Phayoo solo negó con la cabeza antes de responder con una sonrisa.
—¿Puede nong Rain, almorzar conmigo más tarde? —solicitó Phayoo.
—¡Claro! Nong Rain no tiene clases hoy —explicó de inmediato—. Phi me envía un texto con la ubicación y la hora.
—Está bien —dijo Phayoo—. Entonces, colgaré primero.
—Hmm —asintió Rain—. ¡Hasta luego!
Los ojos de Phayoo se iluminaron, sus manos temblaban, el sudor comenzó a correr por su cuerpo. Phayoo, había tenido muchas parejas ocasionales antes, pero nunca se había enamora de ninguna. Por lo que todo este sentimiento que experimenta con Rain, es totalmente nuevo para él.
Hurgando en la red, luego de haberle enviado la dirección a Rain, encontró un clip de una habitación de un pub. En ella se ven dos hombres sosteniendo relaciones. Todos los comentarios de la publicación solo mencionan un nombre, Phraphai Therapanyakul.
Phayoo, identificó la habitación como a la otra persona. Él había estado allí antes, no porque se haya acostado con Sky, pero ha entrado a su oficina.
De inmediato, tomó su teléfono para comunicarse con Sky. Definitivamente, para él, piensa que no ha sido él y se trata de un error, alguien que haya compartido ese clip.
—¿Sky? —dijo Phayoo, cuando la otra línea respondió.
—¿Qué quieres? —preguntó directamente.
—¿Qué rayos? —gritó Phayoo—. ¿Acaso has visto lo que hay en internet?
—Lo vi —respondió. Ambas partes se quedaron en silencio. Ninguno se atrevió a continuar—. Si no hay nada más, colgaré primero.
—Espera, Sky —dijo Phayoo—. ¿Qué pasó?
—Nos vemos en el restaurante de siempre a las 2 —respondió y colgó.
Hoy todos están fuera de la residencia, excepto Phayoo, lo que le hace que tenga la libertad de poder salir a almorzar cuando quiera.
No obstante, fuera de Bangkok, las cosas no van tan fáciles. Han tenido reuniones con clientes difíciles y peligrosos. Están por llegar toneladas de cargamentos para el negocio y deben prepararse para que no haya contratiempos.
Kinn y Vegas, se reúnen con todos sus socios, mientras Porche y Pete, se encargan del personal de seguridad. Aunque ahora son sus esposos, siguen encargándose en ser la persona número uno en protegerlos.
Al llegar la hora acordada, en Bangkok, dos jóvenes se reúnen en un restaurante. Phayoo, vestía un típico traje de corte americano, color gris. En cambio, Sky, vestía un jogger típico de color gris, un polo blanco. Además de que traía una gorra y anteojos de sol.
—¿En serio? —preguntó Phayoo, cuando Sky se unió a la mesa.
—¿Qué? —respondió de mala manera Sky—. ¿Tan mal me veo?
—Terriblemente mal —dijo Phayoo.
Ambos hablaron por un rato, hasta que Sky le contó todo lo que pasó en su habitación. Phayoo, tomó la mano de su amigo mientras escuchaba todo aquello que había hecho su primo, sin notar que un par de ojos estaban observando la escena.
—¡Ow! ¡Rain! —dijo Sky. Phayoo, de un solo golpe suelta la mano de Sky. Rain, estaba parado a unas mesas de ellos, al escuchar que Sky le nombraba, fingió reír y acercarse.
—¿Qué haces por aquí, Rain? —preguntó Sky, levantándose para tomar a su amigo por el cuello y llevarlo a la mesa.
—Yo... eh, venía... —pero en el instante que Phayoo, respondería, pudo responder—. Vine por mi cuenta, vine a encontrarme con un amigo, pero canceló. Rain, llamó para que lo vengan a buscar.
—Raro, ¿Qué amigos tienes en Bangkok ya? —preguntó Sky, riéndose, no muy serio.
—Amigos de la facultad —dijo Rain—. ¡Hey! ¡Sky! ¡Estúpido! Responde mis llamadas, te he llamado hasta morir, ¡molesto!
Rain, intenta cambiar el tema para no tener que dar explicaciones del porqué está allí. Luego de unos minutos hablando con su amigo, mirando alternativamente a Phayoo, quien se ha quedado en silencio e inmóvil, se despide.
—¡Nos vemos! —dijo Rain—. ¡Nos vemos, P'Phayoo!
Sus manos fueron alzadas en señal de respeto para Phayoo. Su mano fue apretada en un puño bajo la mesa, sus ojos se tornaron rojos. Cuando vio salir a Rain del restaurante, se disculpó con Sky y salió hasta el estacionamiento.
—¡Rain! —gritó, mientras corría al coche de Rain. De repente, una fuerte mano detuvo las manos de Rain de desbloquear su coche.
—¡Suéltame! —gritó Rain. Algunos de los visitantes que recién entraban al parqueo miraba la escena con curiosidad.
—¿Puedes calmarte? —dijo Phayoo, peinando su cabello con frustración, tomando un hondo suspiro—. ¿Puedes escucharme primero?
—¿Qué debería escuchar? —dijo Rain, enojado—. ¡Qué diablos! ¿Por qué debería escucharte? ¡Maldición!
Phayoo, apoyo su cabeza en el pecho de Rain mientras respiraba profundamente.
—Prométeme que me escucharás hasta el final —dijo Phayoo, colocando ambas manos sobre el rostro de Rain.
—¡Qué diablos! —gritó Rain, retirando las manos de Phayoo de su rostro antes de girarse e intentar abrir la puerta de su carro.
—¡Rain! —gritó Phayoo, en un tono serio y oscuro. Sus ojos estaban llenos de enfado, sus manos apretadas en puños. Todo el cuerpo de Rain tembló al escuchar el tono de Phayoo, pero trató de girarse sin mostrar miedo a la otra parte.
—¿Ahora qué quieres, Phayoo? —dijo poniendo sus ojos en blanco, mientras aun sostenía sus llaves en la mano.
—Esta mañana, después de hablar contigo vi un video en internet donde Phai... —uno fino dedo de Rain fue colocado sobre los labios de Phayoo, provocando que se detuviera.
—No te he pedido explicación, Phayoo. Tú y yo, no tenemos nada, ¿para que dar explicaciones al hijo de tu socio? —susurró Rain, brindándole una sonrisa a Phayoo, antes de girarse a su propio auto.
Una fuerte lluvia comenzó a caer de repente, acompañada de fuertes truenos y relámpagos que iluminaban todo el lugar.
—¡Ahg! —un gemido se dejó escapar de la boca de Rain, antes de que Phayoo lo girara y besara sus labios.
El fuerte pecho de Phayoo fue empujado por Rain, aunque no muy fuerte. Un fuerte golpe en la cara de Phayoo provino de las manos de Rain, provocando que la boca de Phayoo sangrara.
—¡Estúpido! ¡Imbécil! —gritó Rain, antes de subir a su propio auto y salir del estacionamiento.
Dentro del restaurante, Sky, ya se impacientaba por la demora de Phayoo. Segundos más tarde, con un cuerpo todo empapado y con el labio inferior roto, regresó Phayoo.
—¡Qué rayos! ¿Qué pasó? —preguntó Sky, al ver la condición de su amigo.
—No es nada —dijo Phayoo—. Me iré primero, Sky. Sobre lo que hablamos, no le diré nada al imbécil de Phai.
—Hmm —asintió Sky, antes de que Phayoo se levantara de la mesa y se fuera. Sky suspiró aliviado, termino de tomar su café y se marchó.
La ira que aún se contenía dentro de Phayoo, fue liberada cuando llegó a casa de la primera familia y vio a su primo sonreírle como siempre.
—¡Bastardo! —gritó Phayoo, golpeado la cara de su primo. Todos allí quedaron sorprendidos—. ¡Eres una basura, Phai!
—¿Qué pasa contigo? ¡Maldición! —le gritó Phai como respuesta. A este punto, todos, incluido los guardaespaldas, han ayudado a evitar que sigan golpeándose.
—¿Qué es todo esto? —dijo Kinn, enojado de presenciar la pelea.
—¡Diles! Dile al tío lo que has hecho en la habitación del pub —gritó Phayoo, mientras era sostenido por Porsche.
—¿Qué ha pasado, Phayoo? —pregunto Porsche.
—Me he acostado con alguien que le gusta, de seguro —dijo Phai en un tono normal—. ¡Maldición! Me has dado duro, imbécil.
—¡Mentiras! —exclamó Phayoo.
—Phayoo, dime ahora, ¿Qué pasó? —Porsche, ha llegado a su límite y era evidente, volviendo a preguntar con un tono más fuerte que antes.
—Este bastardo, se acostó con el dueño de un pub y le dejó una nota en su escritorio luego, diciendo que había sido mejor que muchos de sus anteriores amantes. Lo peor de todo esto, es quien es la otra persona, es nong Sky. El hijo del señor Leo —explicó Phayoo. La cara de Porsche tenía una expresión que rara vez había mostrado. Todos quedaron en silencio.
<zas>
El sonido del golpe sobre la cara de Phai, resonó por toda la habitación. El propio Kinn, vio sorprendido la actitud de su esposo.
—¡Pa! —dijo Phai, llevando su mano al rostro después de haber sido golpeado por su padre.
—Te he dado todo, Phai. He cumplido todos tus caprichos, tus autos, tus motos, incluso estaba considerando comprar el maldito autódromo si era necesario, solo para ti. ¿eso es lo que merezco de ti? ¿Qué van a decir? ¿sabes lo que van a decir? —decía Porsche, mirando fijamente los ojos a su hijo. Ahora no había ira en su rostro, había temor, había culpa, remordimiento—. ¿Quieres saber lo que dirán? ¡Qué no he criado bien a mi hijo!
Los ojos de Porsche comenzaron a dejar unas lágrimas, Kinn sostenía a su esposo por la cintura, pero este no lo permitió. Se giró para mirar a Kinn y a su hijo y salió de la oficina.
—¡Porsche! ¡Pa! —se escucharon las voces de Kinn y Phraphai, respectivamente. Kinn, salió disparado detrás de Porsche.
En la oficina solo se encuentran Phayoo y Phraphai. Ambos sentados uno al lado de otro sobre el piso.
—Soy un imbécil —dijo Phai, apoyando su cabeza en el hombro de su primo.
—Un completo imbécil —respondió Phayoo, tomando la mano de su primo con sus propias manos.
Cualquiera que viera esta acción, pensaría que son más que primos. Pero para ellos, es normal. Su relación es como verdaderos hermanos, donde se cuidan y se apoyan el uno al otro. Peleas, muchas, pero siempre terminan así, sosteniendo sus manos, hablando y perdonándose.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top