En unas parte del inframundo las Moiras preparaban el hilo de la vida de Shura para cortarlo, Aioros corrió todo lo que pudo para llegar hasta él, pero cuando lo hizo ya era tarde, Shura había muerto.

Aioros: Shura... -Mü sin decir palabra le negó con la cabeza y se alejó cuando vio que Aioros fue hasta el cuerpo ya sin vida de Shura- Shura...no... -decía abrazando el cuerpo ya inmóvil del peliverde entre lágrimas, un poco después lo volvió a dejar en el sitió que antes estaba-.

Mü: Lo siento chico..hay cosas que no puedes cambiar... -dijo dejando ver las primeras lágrimas-.

Aioros: Claro que sí -dijo enfadado-.

*-*Inframundo*-*

Saga estaba muy enfadado ya que todo su plan se había venido abajo.

Saga: ¡Estábamos tan cerca! -dijo quemando el tablero de billar que tenía con su estrategia planeada- tropezamos en la línea de meta, ¿por qué?... porque nuestro niñito, Shura, se nos volvió noble -dijo sentándose en su trono y tras eso un gran ruido se escuchó acercándose a ellos-.

Aioros: ¿¡Dónde está Shura!? -dijo montado en la cabeza del centro de Cerbero con el cual había roto la entrada de la sala principal de Saga-.

Saga: Oh ¿quién está aquí? ¿Fortachón? -dijo a la vez que la cabeza de cerbero se agachaba para dejar a Aioros en el suelo, a la vez que las otras dos lo miraban asustado- ...eres demasiado.

Aioros: Deja que se vaya -dijo cogiendo al peliazul por el cuello de la camiseta-.

Saga: ¿Quieres calmarte? -dijo quitándose sus manos- ven aquí ven, quiero enseñarte esto... -lo llevó hasta el lugar donde estaban todas las almas de los muertos- vaya, vaya, vaya, el inframundo es un pañuelo ¿eh?

Aioros: ¡Shura! -fue a coger su alma pero no pudo y en vez de eso sus manos envejecieron pero al sacarlas volvieron a la normalidad-.

Saga: Ah, ah, ah, no debes tocarla, Shura sale con un grupo nuevo últimamente, y un grupo no muy vivaracho, la verdad.

Aioros: ¿Te gusta hacer tratos, no...? Cógeme y libera a Shura.

Saga: Mnh, el hijo de mi odiado rival atrapado para siempre en el río de la muerte...

Aioros: A la una...

Saga: Mnh, ¿habrá algún truco aquí?

Aioros: A las dos...

Saga: De acuerdo..., de acuerdo..., de acuerdo..., rescátala..., ella sale, tú te quedas -tras eso Aioros se tiro al río- ¡Oh, se me olvidabas!, morirás antes de alcanzarla, ¿no te importa? ¿verdad?

El cuerpo de Aioros iba envejeciendo cada vez que se adentraba un poco más en el río. En otra parte las Moiras preparaban el hilo de su vida. Poco le quedaba ya a su vida, pero en el momento que fueron a cortar el hilo de su vida, este se volvió dorado.

Shaina: ¿Qué le pasa a estás tijeras?

Hilda: Este hilo no se corta.

Aioros salió brillando de aquel río con el alma de Shura en los brazos.

Saga: ¡Eso es imposible!, no...no..., no puedes estar vivo, deberías ser un...

Camus y Milo: ...¿Un dios?

Saga: ¡AHHH! -grito muy enfadado- ¡¡Aioros para..., no puedes hacerme esto!! -en ese momento Aioros le pegó un puñetazo en la cara dejándolo con la palabra en la boca- ...¡Sí, pudiste...! De acuerdo, me lo he merecido, Aioros, ¿podemos hablar?...Tu...tu...padre es un tipo divertido, ¿no? Así que si dices alguna palabrita en mi favor...para que se olvide de toda esta tontería, ¿sabes...?, ¡Shura!, ¡Shura! -dijo cogiendo la cara del alma y acercándosela a Aioros- habla con él, dile... -no pudo continuar porque Aioros de un puñetazo lo empujo al río de las almas- ¡no! alejaros de mí, no me toquéis , quitadme vuestras asquerosas almas de encima -desde el lugar donde Aioros y Saga habían estado Milo y Camus se asomaron-.

Milo: No estará de buen humor cuando salga de allí -dijo asustado mirando la escena-.

Camus: Dirás, "si logra salir de allí".

Milo: Si, sí, eso es...

Saga: ¡Taxi! ¡Taxi! no me encuentro muy bien ¡quien ha tirado de la cadena!

***

Aioros llegaba al lugar donde yacía el cuerpo de Shura con su alma en brazos, se acerca y hace que su alma se fusione con su cuerpo, poco después la piel de Shura recupero su color, abrió sus ojos y volvió a respirar.

Shura: Fortachón, ¿por qué? ¿por qué has...?

Aioros: Por amor siempre se hace grandes locuras -dijo ayudándolo a levantarse-.

Justo en el momento que iban a besarse , desde el cielo cayó un rayo y convirtiéndose en una nube los llevó hasta el Olimpo, detrás iban Seiya con Mü encima. En la puerta del Olimpo todos los dioses aplaudían y vitoreaban a Aioros mientras que Kiki lanzaba flores por todos los lugares. Aioros subió las escaleras hasta llegar a sus padres dejando un poco atrás a Shura.

Sasha: ¡Aioros!, estamos muy orgullosos de ti -dijo abrazando a su hijo-.

Aioros: Madre...

Sísifo: ¡Ay, hijo mío buen trabajo! Lo has conseguido, eres un héroe verdadero.

Sasha: Estabas dispuesto a entregar tu vida, a cambio de la de ese joven.

Sísifo: Pues a un héroe verdadero no se le mide por la magnitud de su fuerza, sino por la fuerza de su corazón. Ahora, hijo mío, puedes entrar, puedes volver a casa -en ese momento la puerta del Olimpo se abrió y todos los dioses le abrazaron-.

Shura: Enhorabuena, Fortachón, vas a ser todo un dios... -dijo a la lejanía con un poco de tristeza en sus palabras, Aioros al girarse lo vio darse la vuelta-.

Aioros: Padre, este es el momento con el que siempre he soñado, pero... -se fue hacia Shura y le cogió de la mano- ...una vida lejos de Shura, incluso una vida inmortal, resultaría vacía, deseo seguir en la tierra con él -el peliverde con una sonrisa en la cara lo abrazó- por fin se cual es mi destino -dijo aceptando el abrazo, con la afirmación de su padre el brillo de Aioros de ser un Dios ya no estaba, volvía a ser humano-.

Ambos se unieron en un beso al principió tímido, pero al rato Shura le paso las manos por detrás del cuello y se lo acercó y justo entonces Aioros lo abrazó por la cintura.

Kiki: ¡Canten señoras!

Afrodita: Ha nacido una estrella más.

Musas: Desde hoy la ves.

Shun: En el cielo es donde debe estar.

Musas: Es Aioros.

Shunrei: Y cantémosle un aleluya.

Esmeralda: El chico se lució.

June: La estrella es.

Musas: Anúncialo.

Musas: Desde hoy la ves.

Sí, desde hoy la ves.

Afrodita: Es el héroe más popular.

Musas: Es Aioros.

Shunrei: Que es la estrella que tienes que gritar -llegan Dohko y Shion y se abrazan a Aioros-.

Esmeralda: Desde hoy la ves.

MEGARA: Mira -señala al cielo, dónde las estrellas se estaban uniendo para formar la constelación de Aioros-.

Musas: Y en la mala racha acuérdate

que en tu alma está el poder.

Tú puedes ser el héroe.

Ten esperanza donde estés.

Hombre 1: ¡Ahí va el chico de Mü! -todos abrazan a Mü-.

Musas: El cielo es lo que tú crees.

Y otra estrella desde...

Hoy que brilla desde...

Hoy la ves, tu estrella es.

FIN