꒦꒷ 🏕️  ' hello summer ！  🩰   ࣪  𓄹 🏆

La gran ceremonia de bienvenida fue todo un éxito, todos los jóvenes campistas rugían y hacían mucho ruido por la emoción de comenzar pronto, mientras se hacían los preparativos para desglozar a los jóvenes a sus cabañas, el guía de cabaña llamado Bang Yedam, uno de los nuevos junto a Kahei, tomó su guitarra acústica y empezó a tocar una melodía para entretenerlos, cantándoles su propia canción del campamento que se tomó el valor de presentarles mientras era acompañado por los aplausos al ritmo de la canción de los demás, hasta que la canción finaliza y es recibido por una ola de aplausos por la canción.

Minutos después, Kwon Eunbi, otra encargada más del lugar mencionaba a través de un megáfono que a partir de ese momento comenzaría a llamar algunos nombres de los campistas y en cuanto agrupara seis de ellos se convertirían automáticamente en una cabaña, asignándoles también al guía de cabaña inmediato.

Sooyoung estaba soportando una vez más a la fastidiosa de Chaewon buscando señal en su teléfono cuando de repente escuchó su nombre, miró hacia todos lados hasta que lo volvió a oír muy alto por lo que alzó su mano para indicar que era ella.

—Ha Sooyoung, colócate allá junto a Kahei, tu guía de cabaña.—indica, la pelicorta asiente y toma todo su equipaje, Chaewon la observa y sólo hace una mueca por aún no encontrar nada de señal. Sooyoung la ignora y se acerca a la amigable pelinaranja que se presenta rápidamente.—ahora tenemos... Choi Yerim.—Eunbi menciona otro nombre más, la susodicha levantó también su mano mientras corría en dirección a Kahei, poniéndose también a un lado de ella.

Luego de Yerim llamaron a la amargada Hyejoo, ésta ríe mirando a la pelinegra avanzar y saludar sólo con un gesto de manos a la pelinaranja, poniéndose trás ella. Después llamaron a una chica rubia, Kim Jungeun, quién también tenía cara de pocos amigos para ese momento pues su hermana seguía molestándola hasta antes de unirse a las demás chicas que formarían parte de su cabaña.

—Kim Jiwoo.—llamó a otro nombre, la mencionada soltó un gritito mencionando que era ella y corrió hasta el grupo formado de chicas, abrazando a Hyejoo que se quejó y volteó sus ojos, no podía ser enserio.

—¡Hola! soy Jiwoo, es un placer.—se presentó rápidamente a Kahei quien sonrió y estrechó su mano con ella, Jungeun también lo hizo y por último Sooyoung, quien rió por la energía que irradiaba aquella chica que se juntó con esa Yerim, entrelazando sus brazos.—y por último tenemos a... Jinsoul, Jung Jinsoul, únete a tu cabaña.—Eunbi finaliza con la cabaña de Kahei llamando a la última integrante, inmediatamente Jungeun agrandó sus ojitos, ésto era tener demasiada suerte.

La pelinegra alta se movió felizmente hasta llegar al grupo de chicas, poniéndose a un costado mientras se formaban otras cabañas más, Jungeun no podía ocultar toda su emoción, iba a compartir cabaña con Jinsoul y podrían volver a acercarse como antes incluso como amigas. Opuesto a Hyunjin, la chica seguía repitiéndose que tenía que haber un error y que Jinsoul no debía haber sido la última en formar parte de la misma cabaña que Jungeun, ahora todo se iba a ir por la borda, su hermana se enamoraría una vez más de Jung Jinsoul y eso, ya estaba claro para ella pero no significaba que no hiciera nada al respecto, intentaría mantener alejadas a esas dos.

Más grupos se formaron, chicos con chicos, chicas con chicas hasta que cada cabaña tenía sus respectivos seis campistas y su guía, a cada guía fue entregado un cronograma del día como sería en cada mañana para que estuvieran al tanto de las actividades del día y demás, Kahei pegó el cronograma en la pared cerca de la puerta de la cabaña mientras sus seis chicas desocupaban sus maletas y elegían sus camas, volteó a verlas, sonriendo al ver que habían dos de ellas casi inseparables.

—¿Ya se conocían ustedes dos?—se atreve a preguntar al dúo de castañas, ambas le sonríen asintiendo.

—Nos conocimos hoy recientemente, pero congeniamos demasiado bien.—menciona Yerim, mientras ella ha elegido la litera de arriba Jiwoo está en la de abajo, ambas concuerdan en que quizás Jiwoo se caería así que preferiblemente Yerim irá arriba.

Kahei observa nuevamente, encuentra a Hyejoo sacando sus prendas y puede encontrar casi todo de color negro, se acerca un poco a ella, se asusta cuando apenas da unos pasos a su dirección la menor se ha dado cuenta de que se acerca y la mira directamente, aún así sonríe un poco.

—¿Estás viendo que todo es negro, no?—preguntó divertida viendo el asentimiento de la mayor.—simple, me encanta el color negro pero, mira allí, también tengo otros colores, son pocos en comparación a la cantidad de ropa oscura pero sí, me gusta el negro.—explica la pelinaranja.

—Eso está bien Hyejoo, aquí todas pueden usar el color que ustedes quieran.—palmeó sus hombros levemente, mirando hacia arriba arriba donde Sooyoung observaba detenidamente hacia la ventana, desde la cama de arriba tenía una increíble vista a la misma.—¿Todo bien, Sooyoung?—pregunta igualmente, la mencionada baja su mirada hasta sonreírle a la mayor, asintiendo.

—Tengo una vista maravillosa de afuera, pero estoy pensando que deberíamos cerrar las cortinas en la noche o me espantaré.—ríe, causando gracia a la mayoría dentro de la cabaña.—me alegra estar la litera de Hyejoo, sé que si me llego a quedar dormida, ella parece el tipo de persona que patearía la cama de arriba para despertar.—ríe, mirando hasta abajo para fijarse en la expresión de su compañera, quien asiente dándole la razón.

—Solo unos minutos de habernos conocido y ya me conoces tan bien.—llevó una mano a su pecho.—es mejor tenerte a ti que a la chillona de allá.—señala a Jiwoo, que desempacaba aún sus cosas animadamente. Sooyoung dirige su mirada hasta ella y sin poder evitarlo una pequeña sonrisa surca en sus labios.

—Se ve agradable.—menciona, Yerim se asoma entre sus mantas en la cama de arriba frente a la de Sooyoung.

—Es agradable.—confirma, la pelicorta ríe y asiente, tirándose atrás para recostarse, soltando un suspiro pensando en Chaewon y qué tanto estaría fastidiando a sus compañeras de cabaña con su teléfono.

Kahei sonríe al ver como se llevan sus campistas asignadas, girando para encontrar a las dos últimas chicas en silencio, pero cada una dirigía una mirada curiosa a la otra cada cierto tiempo, hasta que parecía que la contraria la descubría y apartaba la mirada, ridículamente tierno.

Jungeun tenía el corazón acelerado, Jinsoul estaría durmiendo en la litera de arriba mientras ella se encuentra abajo, una parte de ella quería incluso pedirle que compartieran cama como antes pero sería una completa locura. Era una chica ansiosa después de encontrar a su ex novia, volverla a encontrar desató algo en ella que no había sentido desde hace meses, como si el hecho de enamorarse recobrara sentido ahora. Arriba, Jinsoul podía estar igual o peor que Jungeun. También la había extrañado muchísimo, no podía evitar mirar cada cierto tiempo abajo y sonreírle a la rubia cuando la descubría, recibiendo de regreso una sonrisa tímida y honesta de su parte que le llenaba el corazón de una sensación de calidez y amor que solamente Kim Jungeun podría provocarle.

Kahei notó esas miraditas entre ambas chocas y no pudo pasar de largo algo como eso, situándose entre ambas camas.

—Me parece que hay otro par aquí que se conocen muy bien.—menciona, peinando las puntas de sus naranjas cabellos. Jungeun reacciona algo tímida al ser descubierta mientras que Jinsoul se sienta en el borde de la cama, con sus piernas colgando.

—Sí, Jungeun y yo ya nos conocíamos también.—es lo que responde, atando su cabello a una coleta alta desarreglada.—soy su ex, de hecho.—murmura, suficiente para que todas hubieran escuchado, Kahei hizo una rápida mueca sintiendo que lo había echado a perder todo.

—Oh, lo siento, yo no debí preguntar.—gesticuló con sus manos, la pelinegra negó con su cabeza.—¿Saben qué? mejor me voy.

—No te preocupes, está bien.—resta importancia, viendo la expresión de Jungeun abajo que mantenía su cabeza ligeramente agachada.—hey, jungeun.

—¿Era necesario decirlo?—más que estar enojada, realmente estaba triste, escuchar a Jinsoul mencionar que es su ex lo hace ver todo muchísimo más real, el que ya Jinsoul no era suya ni ella de la mayor.

—oye, es mejor ser honestas.—explica, bajando de su cama de un salto, igualmente la altura no era mucha.—además, eso no significa que no podamos estar juntas, digo...—se apresura a corregir sus palabras nerviosa.—ya sabes, estamos en la misma cabaña e incluso dormiré sobre ti, tendremos que volver a... si bueno, estar juntas y esas cosas.—se encoge de hombros, desviando su mirada.

Jungeun se sintió nuevamente animada, pues Jinsoul solía ser atropellada con las palabras cuando estaba nerviosa y justo ahora estaba actuando así, soltó una risita divertida, haciendo sonreír a la más alta.

—Sí, tienes razón, era mejor decir la verdad.—comenta asintiendo con su cabeza, luego observa entre sus prendas y se sonroja un poco al notar que había traído una que no le pertenecía a ella realmente, así que la alcanzó y extendió rápidamente a la mayor.—supongo que... debería devolvertela, es tuya y... me la prestaste una noche que dormí contigo, dije que te la devolvería pero ya sabes...—siente sus mejillas calentarse.—éramos novias y yo quería conservar la camiseta como recuerdo de esa noche pero, creo que es hora de devolvertela.—menciona con seguridad, más Jinsoul la observa detenidamente y niega, empujando suavemente con su mano las de la menor junto a una sonrisa pequeña.

—No puedes devolver un obsequio Jungeun.—se acerca a ella una vez que su mano ha acabado de devolver la prenda.—es tuyo.

—¿mío?—pregunta, pestañeando un par de veces algo impresionada.—pero jamás me dijiste que era para mí.

—Eras mi novia, lo mío era tuyo, usabas mi ropa y usualmente semanas después la devolvías y lo que te gustaba lo tomabas para ti, sé que ésta camiseta tenía un gran significado para ti por lo que al final no me molesté en pedirla, ya te la había regalado.—se encoge de hombros, sonriendo tímidamente a la menor al igual que ella a Jinsoul, abrazó la prenda entre sus brazos llenando de aire sus mejillas intentando calmar sus revoltosos sentimientos.

Ésto no iba a ser muy fácil para ellas, sus corazones aún se pertenecen y ambas están con la guardia baja, en cualquier momento sucedería algo de nuevo ¿y alguna estaba en desacuerdo? Definitivamente no.

( . . . )

Mientras tanto, en una cabaña más, Jo Haseul sostenía su cabeza entre sus manos oyendo una vez más a esa tal Chaewon preguntar a las demás si tenían señal del teléfono.

—Chaewon, ¿podrías dejar tu teléfono por un momento y simplemente desempacar?

—¿Pero tienes señal o no?

Haseul respiró hondo, no podía ser, su cabaña era un desastre por varios motivos;

el primero ya era más que obvio, Park Chaewon y su manía con el bendito celular.

Luego estaba una hermana sobreprotectora que seguía insistiendo a Haseul hablar con la encargada y cambiar de cabañas.

Después una pequeña traviesa que se colgaba de la cama y se ponía de cabeza atemorizando a Haseul que corría a auxiliar a la más baja.

También había que contar a las tres chicas restantes que no hacían mucho pero igualmente, había que mencionar. Heejin seguía desempacando tranquilamente ignorando las quejas de Hyunjin, quien era la que dormiría arriba en la misma litera que ella, luego estaban Yuri, hermana menor Haseul y su amiga Hitomi, las más tranquilas de toda la cabaña; Hitomi leía un libro mientras que Yuri sólo estaba recostada con sus ojitos cerrados queriendo tomar una siesta a pesar de todo el ruido presente.

Haseul miró una vez más a su alrededor y cerró sus ojos contando hasta diez para calmarse y en cuanto fue así, acomodó una vez más a Yeojin devolviendo a la menor a su cama, le hizo gestos a Hyunjin para que hiciera silencio y oor último le arrebató a Chaewon el teléfono de sus manos.

—¡hey, eso es mío!—reclamó indignada.—¿porqué me quitas mi teléfono? nada decía que estaba prohibido traerlo.—cruzó sus brazos.

—No está prohibido su uso pero estás demasiado pendiente de tu teléfono y no puedo permitir que te pierdas de todo por.. ésta cosa.—señala el teléfono de último modelo que tenía en sus manos, oyendo un sonido de impresión venir de la misma peliazul.

—¿Cómo te atreves a decirle "cosa" a mi bebé? —se echa aire con sus manos al rostro ya enrojecido.—se llama Keisha y está muy actualizada, me dice a qué hora ir a dormir, comer, ¡mi hora de siesta de belleza! tienes que devolverme a mi Keisha bebé.—señala a la mayor, que negó con su cabeza y se guarda el teléfono en su bolsillo.

—Desde ahora nada de Keisha para ti, al menos no hasta que considere que ha sido suficiente pero al menos por hoy, no vas a tener tiempo de caridad con tu teléfono, jovencita.—niega una vez más, viendo como la peliazul cubre su boca con una mano angustiada, tirándose con drama a su cama tapándose con las mantas.—vaya, eso fue demasiado fácil.—murmura para sí misma, pensó que tendría que pelear con la peliazul por el teléfono pero la menor sólo se había tirado a su cama dramáticamente ¿a llorar? no lo sabe.

—¡No entiendo! ¿qué no pueden moverme hacia esa cabaña? y alejar a esa tonta de mi hermanita.—cruzó sus brazos nuevamente, refunfuñando.—¡oh vamos! ya debe tener sus manos encima de Jungeun, ¡no es justo!

—Oh por favor, ¿quieres hacer silencio? no vas a poder cambiarte de cabaña y no podrás detener a esas dos chicas de juntarse de nuevo, ¿comprendes?—Heejin ya harta de los reclamos de la chica que está en la cama de arriba interrumpe, iba a disculparse pero negó con su cabeza, frunciendo sus cejas.

—¿Disculpa?—arqueó sus cejas, dirigiendo su mirada hasta abajo.

—Exacto, deberías de pedir disculpas por no mantener la boca cerrada.—masculló, oyendo a la adversa inhalar aire indignada.

—Es mi boca y hago lo que quiera con ella.—la señaló, Haseul supo que debía intervenir rápidamente así que lo hizo, corriendo a dirección de esa cama.

—Ya, ambas, relájense.—las apunta a ambas, suspirando pesadamente.—Hyunjin, no puedes cambiarte de cabaña ahora así que tendrás que aceptar el hecho de que esa tal Jinsoul esté en la misma que tu hermana y Heejin, no puedes ser tan grosera con ella, sé que lleva parloteando como loro desde que llegó.

—¡Oye!—reclama la chica, siendo ignorada por ambas mujeres abajo.

—Pero no podemos reaccionar así ¿bien? prométeme que no faltarás el respeto a Hyunjin de nuevo así.

Heejin hizo una pequeña mueca, si se había salido de sus cabales al responderle así por lo que sonrió y asintió a la mayor.

—Lo prometo Haseul unnie, no lo haré de nuevo.—mantuvo su sonrisa, luego miró a hyunjin con una expresión muy diferente.—si ella promete dejar de quejarse.

—nunca.—guiñó su ojo hacia su dirección.—y menos te haré caso a ti.

—¡Uhg! ¡Ven aquí, pequeña basura!—Heejin trepó las escaleras de la cama de Hyunjin y ésta comenzó a moverse rápidamente hasta saltar a la cama de Yeojin cayendo encima de la más baja.

—¡Me asfixias! ¡me voy a morir! ¡díganle a Yerim unnie que la amo!~

Haseul corrió abajo hacia esa cama alterada.—¡Hyunjin, aplastas a Yeojin!

—¡Mi teléfono, ajá!—Chaewon aprovechó la situación y pudo escabullirse de su cama hasta quedar tras Haseul y sacar su teléfono de su bolsillo, corriendo para evitar que Haseul la atrape, besando el teléfono entre sus manos.—estamos juntas de nuevo Keisha, nada nos volverá a separar.

—¡Heejin, deja de perseguir a Hyunjin! ¡Hyunjin, ya deja de!- ¡Noo, Yeojin, no muerdas a Hyunjin!

En esa cabaña sólo se podían oír gritos y más ruido que en cualquier otro lugar del campamento.

Más tarde, esa noche después de que Haseul pudiera estabilizar a sus chicas y mantenerlas al margen, pudo salir junto a su cabaña para la hora de la cena en el comedor llevándolas, Yeojin tomaba la mano de Haseul y de la mano de Yeojin venían Hitomi y Yuri, detrás venía Chaewon con cara de pocos amigos porque nuevamente, Haseul le había quitado su celular y más atrás, Hyunjin y Heejin empujándose cómo cabras.

Luego estaba Kahei, detrás de ella venían Yerim y Jiwoo con sus brazos entrelazados charlando animadamente, luego Hyejoo y Sooyoung que también se habían hecho cercanas y compartían anécdotas sin parar, por último estaban la pareja de ex novias, caminando tímidas entre ellas pero de vez en cuando rozando sus manos haciéndose las que no sabían que pasaría eso, pero que ambas se esforzaban por crear tal roce. Vivi miró a Haseul y le saludó amigablemente, la contraria también le devuelve el saludo y por inercia se acerca a ella, las chicas detrás de ella lo hacen igualmente.

—Hey, ¿qué tal tú y tus chicas?—preguntó una vez que llegó cerca, la pelinaranja asiente.

—Muy bien, todo en orden, gracias por todos tus consejos estoy tranquila, son increíbles.—menciona, mirando tras Haseul puede ver a dos empujando a la otra sin parar y una de brazos cruzados.—¿y qué tal tu cabaña?

—Meh, sobreviviendo, mi hermana, su amiga y ésta pequeña son mi zona de paz, aunque ésta también le fallan sus cables aveces.—menciona señalando a Yeojin, que saludaba divertida y emocionada a su novia y a Jiwoo.—parece que tus chicas conocen a las mías.

—El mundo parece tan grande pero es pequeño, así parece.—sonríe, haciéndole señas a ambas para que se acerquen a Yeojin lo cuál fue así, justo después Hyunjin dejó de empujar a Heejin para caer en cuenta de que su hermana y otra pelinegra estaban muy cerca una de la otra.

—¡Hola! querida hermana y... compañía.—se metió entre ambos cuerpos, empujando ésta vez a Jinsoul lejos de Jungeun.

—¡Hyunjin! ¡uhg!—reclamó toda furiosa Jungeun apretando sus puños al aire para después simplemente darse la vuelta e irse dando pisadas fuertes, siendo seguida rápidamente por Jinsoul tanto como Hyunjin.

—Ouch, tú eres quien tiene a la hermana de Hyunjin y la chica ésta que es su ex.—hace un gesto, la más alta asiente dejando escapar una risa.

—Son muy adorables, es evidentemente que ahí todavía existe algo.—menciona, dejando a sus campistas adelantarse mientras Haseul y ella van detrás para supervisar.

—Tengo problemas, la hermana sobreprotectora no deja de quejarse por que esas dos chicas están juntas en la misma cabaña, la chica Otaku discute y pelea con ella ahora y la pitufo me quiere raptar por haberme quedado con su teléfono.—explica, palmeando su bolsillo para ver si seguía estando ahí.—es silenciosa cuando quiere sacarlo, debo estar pendiente, es como un ninja.

Kahei ríe levemente, entrando al comedor para encontrar a Sooyoung y a Hyejoo intentando sacar del cesto de basura a Jinsoul, a un lado Jungeun refunfuñando y reclamando a Hyunjin, la misma mantiene su ceño fruncido y Heejin se ríe de ella.

—Vivi unnie, Hyunjin metió a Jinsoul en el cesto de basura porque Jungeun y ella accidentalmente tocaron sus manos.

Kahei escuchó a Yerim y luego volteó a mirar a Haseul con una ceja arqueada.

—Controla a tus chicas.—le sonríe nada agradable, yendo a auxiliar a la pobre Jinsoul que pedía ayuda atascada.

Haseul dirigió una mirada nada amigable a Hyunjin, la misma desvío su mirada ignorándola.

—Éste no es el inolvidable verano que me prometieron.—Jinsoul chilló una vez que logró salir del cesto de basura.

—Ni el mío tampoco.—murmuró Haseul arrastrando a sus campistas.

Bueno, no más me gustaría decir que seguro no soy la única triste por la noticia de que Chuu ya no sea parte de loona, que todos sabemos que siempre será parte del grupo quieran o no esos estúpidos de la agencia 🔪 nomás está decir que sigan apoyando a Chuu en sus actividades y a las chicas, muchas personas he visto que decidieron dejar de stanear al grupo porque ya Chuu no será parte del mismo, no es tampoco la idea, es una noticia desafortunada que Jiwoo no siga en Loona pero tampoco abandones a las chicas, si necesitas un tiempo bien, pero si eres orbit se supone que estarás para ellas incluso en sus momentos más difíciles, no es como si a ellas no les afecte ésto);

bASTA estoy troste TT