Aquel extraterrestre pelirrojo llegó al lugar donde había mencionado por la llamada con su traje ya puesto, una vez Taehyung lo miró, corrió hacia él con los otros dos chicos detrás suyo.

—¿Están todos bien?—les preguntó algo angustiado.

—Estamos bien—respondió el castaño—Pero dime Hobi, ¡¿Qué es esa cosa!?—exclamó señalando el arma que llevaba en manos.

—Es mi maravilloso Sphydip galax—respondió ajustándolo a su brazo—Es como un escudo, y esto—soltó sacando otra de sus armas—Es una AZ-003, dispara una gran fuente de energía.

—¡Maldición! ¡Los alienígenas están locos!—exclamó el castaño—Ruego porque Jimin se encuentre a salvo.

Hobi, pedía al cielo lo mismo. Pero solo había una manera de comprobarlo. Así qué, sintiendo un estallido de distintas emociones, camino hasta llegar frente a la nave.

—¡Rugan!—gritó con todas sus fuerzas para que su tío lo escuchase—¡Devuélveme a Jimin, ahora!

Unos segundos pasaron en completo silencio.
De pronto, las compuertas de la nave se abrieron lentamente haciendo que una brisa les obligara a cubrirse los ojos y de ellas una rampa se deslizó hasta tocar el piso, de ella, se pudo dejar ver a un musculoso extraterrestre color azul.

—Hobi, Hobi, Hobi, Hobi, Hobi—mencionó el alíen bajando cada vez más el tono de su voz.

—Ese fue un profundo Hobi—mencionó Taehyung admirando por fin al poderoso Rugan frente a él.

—Lo imaginaba distinto en realidad—dijo esta vez Yoongi—Tal vez más viejo y con barba hasta la cintura, no me esperaba a un hombre de más de dos metros y con cuerpo de un súper saiyajin.

—Nos volvemos a encontrar—continuó el ente color azul—Mírate, tan distinto, incluso pareces ya uno de ellos.

—¿Dónde está Jimin?—cuestionó el pelirrojo mirándolo seriamente—Devuélvemelo.

—¡Hablas cómo si aquel joven parlanchín te perteneciera!—exclamó divertido.

Él tenía muy en claro que no estaba ahí para charlar o caer en su juego.

—Pero, tranquilo, Connor está encargándose de regalarle la hospitalidad que se merece—respondió descaradamente—Primero entrégame a Eva y yo te devolveré al humano.

—No, primero dejame ver si está bien—contestó el alíen preocupado—¡Mas te vale que no le hayas hecho nada!

—Ya que insistes...

Otra compuerta de la nave en la parte inferior se abrió dejando a la vista aquel cristal transparente que mantenía encerrado a un pequeño joven y rubio despeinado.

—¡Hobi!—exclamó el chico desde el interior golpeando el vidrio—¡No le des nada! ¡Va a matarlos a todos!

—Jimin—susurró el alíen caminando hacía el.

—Me temo que si das un paso más, mataré a tu amigo—le interrumpió Rugan haciendo que el pelirrojo frenará automáticamente—¡Eva!—espetó serio—Entrégamela.

Hobi soltó un fuerte suspiró y bajó la mirada.

—¿Prometes no hacerle daño?—le mencionó mostrando la pequeña caja denominada Eva, quién resplandecía con furor y se le veía inquieta al detectar cerca las otras dos cajas.

—Te doy mi palabra—respondió Rugan sonriendo.

—¡No! ¡Hobi!—volvió a gritar el rubio golpeando el cristal.

«¿Acaso no sabía que no se puede confiar en la palabra de un supervillano? »pensó el rubio.

No había otra alternativa.
No había más tiempo.
No habría otra oportunidad.
Tenía que hacerlo, tenía que entregarle la caja o su amigo moriría.

Así que sin pensar más, se acercó hasta subir por la rampa hasta llegar a su malvado tío y deposito la cajita en la palma de su mano.

—Qué obediente, me agrada.

—Ahora suéltalo—contestó y en su mirada se podía ya apreciar lo derrotado que se sentía.

—Cómo ordenes—respondió Rugan haciéndole una señal a su subordinado.

Aquel extraterrestre morado presionó el botón haciendo que el piso del cubículo donde el rubio se encontraba se abriera, como resultado, dejó caer al chico desde una gran altura.

—¡Ahhhh!—gritó asustado mientras descendía a una velocidad increíble.

—¡Jimin!—exclamó el pelirrojo tomando impulso y se dejó caer de la nave.

Antes de que Park tocará el piso, logró atraparlo, y aterrizaron sin evitar causar un fuerte estruendo.

—¡¿Estás bien?! ¿Te hicieron daño?—cuestionó mirándolo con angustia y al mismo tiempo sintiendo tranquilidad por tenerlo ya entre sus brazos.

Sus amigos se no tardaron en acercarse preocupados.
Aquel rubio negó repetidas veces apretando los ojos.

—Creo que voy a vomitar—le respondió regresándole el alma al cuerpo—¡Creí que moriría!

—¿Qué pasa ahora que tiene las tres supuestas cajas?—se atrevió a preguntar Yoongi.

—Él y su estúpido subordinado armaron a Maxim y Hayato, planean juntarlas con Eva—le respondió Jimin una vez que Hobi lo bajó—¡Planea armar una civilización completa liderada por el!

—¡Oigan!—interrumpió—¿Alguien está viendo lo mismo que yo?—cuestionó Jeon con la vista fija en el cielo.

—¡¿Que demonios son esas cosas?!—cuestiono Tae acomodándose las gafas y tomando asustado a Jimin del brazo.

Un fuerte suspiró se escuchó por parte del pelirrojo.

—Son los kaliz 2.0—les respondió frunciendo el entrecejo—Son robots programados para matar, y sólo escuchan órdenes de Rugan, pueden destruir ciudades enteras. ¡Así que tienen que irse de aquí y esconderse ahora!

—¡Dijiste que mientras estuvieras cerca, podrías protegernos!—le echo en cara Min YoonGi.

¡Ese tipo tenía una increíble memoria!

—Temo no poder hacerlo—susurro con la mirada gacha—Es mejor que se vayan.

—No, no voy a dejarte pelear solo —le interrumpió Park sonando realmente seguro.

—Jimin, ¿No entiendes lo que estoy diciendo?—le reclamó el extraterrestre—¡Si se quedan aquí morirán!

—Y si nos vamos, el que morirá serás tú, no escuchaste lo que dije—le reclamó posicionándose frente a él con firmeza—¡Dije que no me voy a ir!

—¡Yo tampoco!—soltó Taehyung de la misma manera.

—Ni yo—le continuó Seul Gi.

—Pelearemos—mencionó JungKook sonriendo—No dejare que pedazos de chatarra se salgan con la suya.

—Yo...trataré—dijo Yoongi indeciso.

—¡Agh!— exclamó el pelirrojo tomando su cabello frustrado—¿Por qué justo ahora tienen que actuar así?—cerro los ojos derrotado—¡Bien!, déjenme pensar...

—Piensa todo lo que quieras, pero te aviso querido amigo...que no tenemos mucho tiempo—le respondió el rubio mirando como los supuestos Kaliz comenzaban a acercarse.

—Lo tengo—exclamó al recordar sus días de entrenamiento en Alkaa'Z 33–Todo robot tiene un punto débil y está en la nuca, si golpean ahí entonces se desconecta—les dijo

—Y si terminamos con Rugan, automáticamente los Kaliz dejaran de funcionar—continuó Jungkook.

—Así es—respondió el alíen.

—Perfecto, eso es fácil—dijo Seul Gi levantando un tubo de metal

¡¿De dónde demonios lo había sacado?!

—¡¿Qué esperamos entonces!?—continuo la chica—Tú ve y evita que Rugan junte las cajas o enserio estaremos perdidos.

—¡Qué chica!—exclamó Jimin sonriendo como todo un tonto que se respeta—Espera...¿Ella como sabe de...?

—Yo les platiqué todo camino aquí—respondió Taehyung 

—Bien, por favor, no mueran—dijo el alíen dándose la vuelta para dirigirse a su tío.

—Espera, Hobi—mencionó Jimin tomándolo de la muñeca.

—¿Qué pasa?

—Sobre lo de la carta, lamentó haber actuado como un tonto, me dejé llevar por mis emociones como un estúpido y desconfié ciegamente de ti.

—Está bien amigo Jimin, ya lo he olvidado—le respondió mostrando su linda sonrisa que podría calmar a cualquier persona en tiempos de incertidumbre.

De pronto, la piel del alienígena pelirrojo fue tornándose de un color amarillo limón, causando una fuerte impresión en todos. Entonces Jimin lo comprendió, ese era su color natural, el color carne sólo era un camuflaje.

—Creí que tu memoria era como la de un robot—le reclamó divertido.

—También es selectiva.

Dijo por último antes de correr para detener a Rugan.

—Por favor, ten mucho cuidado Hobi—susurró.

Pero el pelirrojo no alcanzó a escucharlo.