●Parte 2●

                ~Narrador: Charlie~

Pasó una semana desde que Harry fue llevado a ese instituto.
Nick y yo no sabíamos exactamente que hacer en toda esta situación, hasta que llegamos al acuerdo mutuo de hablar con alguno de nuestros padres.
Queríamos ir a ver a Harry, y por lógica necesitamos de un adulto.

Pero... ¿Cómo explicar que necesitábamos ir a un lugar como ese para ver a alguien? Debíamos empezar desde el principio, que nos entiendan y nos acompañen. Decidimos que esa persona sería Sarah, su madre.

Ella comprendió todo, e incluso se sintió bastante preocupada por Harry, así que no dudó un segundo en acceder a acompañarnos.

Ahora nos encontrábamos en camino, con Nick habiamos estado averiguando por nuestros propios medios donde se encontraba el lugar.

—¿Estás bien? —pregunta Nick a mi lado dejando un beso al costado de mi frente.

Suspiro.—Estoy un poco nervioso.

—También yo.—entrelaza su mano con la mía.

Estábamos esperando la autorización y que accedan a darnos el turno desde ya hace una semana, no era como ir a visitar a alguien en cualquier otro lugar.
Así que fue más complicado conseguirlo.

Luego de unos breves minutos, el auto se estacionó.

—Chicos... déjenme hablar a mí, ¿si? —pide Sarah.

Los dos asentimos.
Ingresamos al establecimiento, de forma inmediata sentí un escalofrío. El lugar era frío, triste, literalmente parece una cárcel.
Con Nick nos quedamos a un lado, Sarah se acercó hasta la administración.

—Aún no me puedo creer que Harry esté aquí pagando por algo que no hizo.
—miro a mi alrededor—Cariño, este lugar es horrible.

—También me genera mucha rabia, es... Es completamente injusto.—responde también mirando a su alrededor— ¿Ben intentó comunicarse contigo o algo?

Niego.—No, ¿por qué?

—El imbecil ya sabe que sabemos todo, ni siquiera es capaz de hacerse el idiota o intentar negar algo.—suelta con enfado.

—¿Y con eso a qué vas? No entiendo.

—A que no le importa nada, ni nadie. Ni siquiera se molestó en intentar explicar las cosas, ni siquiera a ti que se supone te tiene algo de afecto...
Él es consciente de lo que hizo.
—remarca— De que Harry es inocente, de que nosotros sabemos toda la verdad.
¡Y no le importa! Porque sabe que todo está a su favor, y eso es lo que más enfado me genera.

No lo había visto así.
Nick tiene toda la razón.
Ben era un desalmado.

—No puedo creer que en algún momento creí en su cambio.

—No es tu culpa, tú eres una persona demasiado buena Charlie. Que cree que las personas merecen segundas oportunidades, simplemente ese idiota te engañó.

—Así y todo debía escucharte. Incluso cuando nosotros estábamos distanciados.
Tú me advertiste sobre él una y otra vez, que no confiabas, que seguía pareciendote un mal tipo... Nunca te escuché, estaba cegado por mi orgullo.

Nick se acerca dejando un beso en mi frente.—Deja de echarte la culpa. Entiendo que te genere enfado recordar que en algún momento creíste en él, pero ya está, eso ya pasó ¿Si bonito? No me gusta que te sientas así.
—acaricia mi mejilla intentando consolarme.

—Chicos...—Sarah se acerca hasta nosotros.

—¿Qué pasó mamá? —pregunta Nick.

Resopla.—Solo uno de ustedes puede pasar a verlo, no pueden los dos. Es eso o nada.

Observo de inmediato a Nick.

—¿Por qué no podemos los dos?
—pregunto.

—No lo sé, reglas de ellos.
Y solo me otorgaron cinco minutos. Intenté exigir más tiempo o que ingresen los dos, pero no pude. Son personas demasiado estrictas.

—No te preocupes mamá, ya estás haciendo demasiado. Gracias en serio.—respondie Nick, luego me observa—
¿Quieres ir tú?

Niego de inmediato.—No, no sé si podré, este lugar me pone demasiado nervioso Nick.
No sé que decir tampoco, si entrábamos los dos juntos claramente era otra cosa.

—¿Entonces quieres que vaya yo?

Asenti. Nick y yo solíamos ser igual de nerviosos y revoltosos en algunas situaciones, pero ahora él parecía estar con la cabeza más fría, en cambio yo era un manojo de nervios. No quería transmitirle todo eso a Harry, no sería justo.

—Tranquilo, iré.—besa delicadamente mi frente— ¿Qué quieres que le diga?

—Tú sabes que decirle, pero por sobre todas las cosas, que haremos lo que sea para sacarlo de aquí.

Asintió, su mamá dejó una leve caricia en su hombro.

—Nick... —lo llamo antes que se vaya, le hice una seña para que se acerque más— No olvides darle eso.—susurro.

—Tranquilo, lo haré.—susurra de la misma forma.

—Suerte hijo.—habla Sarah cuando Nick pasó por su lado.

Un guardia del lugar se llevó a Nick con él, luego desaparecieron ambos por un pasillo adentrándose más al instituto.

—Tranquilo, confío en que las cosas mejorarán.—dice Sarah a mi lado.

Sonrío levemente hacia ella.
Ojalá así sea.

                  ~Narrador: Nick~

Caminaba detrás del guardia. Luego de atravesar algunos pasillos donde habían cantidades de habitaciones donde se podían escuchar insultos, llantos, hasta incluso peleas desde adentro. Llegamos hasta otro pasillo más, que parecía estar alejado del resto, caminamos un poco más hasta dar con una habitación.

El guardia se ubicó al lado de la puerta, antes de abrir soltó de manera seria:

—Cinco minutos, no más.—asenti, luego de eso tocó la puerta con tres golpes secos.—Greene, tienes visitas.

Sin esperar una respuesta abrió la puerta grotescamente.
Dándome así la vista de una habitación completamente fría, sucia, y muy pequeña.
Harry se encontraba sentado en una silla mirando por la ventana, ni siquiera volteó a ver.
La puerta se cerró con un golpe seco, el guardia se quedó adentro mirando un punto fijo.

—Disculpe. —me dirijo hacia él— ¿No podría dejarnos solos un momento? Solo serán cinco minutos, lo tengo muy entendido.

Niega rápidamente.—Tengo órdenes estrictas de permanecer aquí.

Suspire sin decir nada. Volteo nuevamente a ver a Harry.
Sigue mirando por la ventana.

—¿Harry? —lo llamo— Hola.

Me costó demasiado llamar su atención, Harry en ningún momento volteó a verme... Insisti bastante hasta que finalmente habló:

—¿Qué mierda haces aquí Nelson? —contesta al fin, pero aún sin voltearse.

Suspire.—Quería verte, hablar contigo.

—Pues como verás, no estoy de muchos ánimos como para hablar.

—Lo entiendo, juro que lo entiendo.

Me acerqué hasta él pero sin invadir tanto su espacio personal, diciéndole que Charlie también estaba aqui. Que estábamos preocupados y que lo sacaremos de aquí de alguna forma u otra.

Para ese momento Harry me observó. Su rostro tenía varios moretones, golpes, incluso parecían completamente recientes. Más de las que tenía anteriormente.

—¿Quién te hizo eso?
—pregunto completamente preocupado.

Sonríe ligeramente de forma irónica.—Estoy acostumbrado Nelson, no te preocupes.

No dije nada, no sabía que decir.
Aunque supuse enseguida que habrán sido las personas que también conviven con él aquí.

—En verdad debes irte, no tienes nada que hacer aquí, solo pierdes tu maldito tiempo. —soltó volviendo a sentarse.

—No me iré de aquí, te he dicho que si vinimos hacia aquí con Charlie fue porque ambos estamos preocupados por ti.
—me agache quedando a su altura— Es completamente injusto que estés aquí pagando por algo que no hiciste.

Vuelve a sonreír irónicamente.
—Es lo que me toca. Así que vuelvo a decir que tú, como Spring, lo único que hacen es perder el tiempo. No me interesa sus visitas, no me interesa su lástima, no quiero verlos, así que por favor váyanse y no vuelvan otra vez.

—Entiendo tu enojo y todo lo que debes de estar sintiendo, pero lo único que queremos hacer con Charlie es ayudarte y...

Me interrumpe.—¡Basta Nelson! ¡Te he dicho que no quiero seguir escuchando tu lastima y la de Spring! Basta, en serio.
—observa al guardia— Acompañe a este chico a la salida, no quiero ver a nadie.

El guardia asintió acercándose hasta mi, observo a Harry confuso mientras me levanto y me ubico de frente al tipo, antes que se me acerque.

—¡Espere espere! Aún me quedan algunos minutos.—aclaro—
No puede sacarme así como así sin mi autorización, estaría actuando en contra de mi voluntad. Mi mamá y mi novio se encuentran afuera, no estoy solo. No querrá tener problemas.
—advertí de forma nerviosa.

El guardia se detuvo observandome.
—¿Me acabas de amenazar maricon? —soltó de forma desagradable mientras intenta acercarse a mi otra vez de forma agresiva.

¿Qué mierda?

¿Que carajo era este lugar tan horrible?

Antes de que se me acerque más Harry lo detiene por el brazo.
—Ey, ey, déjalo.—pide—
Es verdad... aún quedan algunos minutos, hablaré con él y después se irá.

El tipo me observa de mala forma, asintió y volvió a colocarse en su lugar sin decir nada.

Suspiro mirando a Harry y acercandome a él. —No puedes estar aquí un minuto más.
—suelto en un susurro—
En verdad tiene que haber alguna forma de sacarte de aquí ya.

Harry parece pensativo mientras esquiva mi mirada.

—No sé, pero algo me dice que tú sabes que hay algo que podemos hacer para culpar a Ben.

Otra vez no dice nada, y automáticamente James vino a mi mente.

—¿Es James verdad? —todo lo hablaba en susurros.

Se queda en silencio.

—Probablemente tú sabes la
manera de mostrar que Ben es el culpable, pero no lo quieres hacer porque tienes miedo a la reacción de él ante eso, y que se la agarre con James.

Nuevamente no dice nada.

—¿Es eso verdad? —vuelvo a preguntar—¿Estás pagando por algo que no hiciste para intentar proteger a James?

Su silencio me lo había dicho todo. Un nudo se formó en mi garganta, pero traté reprimirlo de inmediato. Literalmente... ¿Harry estaba pagando todo esto para intentar proteger a James? Eso era demasiado.

—James estará bien. Charlie y yo cuidaremos de él, no le sucederá nada. Además, no creo que a él le agrede la idea de saber que estás aquí pagando por algo que no hiciste.

Sonríe irónicamente.—No creo que le importe, ni siquiera debe saber que estoy aquí, se ve que no le importo demasiado.

—¡Y justamente por eso! ¡James ni siquiera debe estar al tanto de todo lo que está ocurriendo! —lo observo con más atención— ¿Quieres que con Charlie hablemos con él? Probablemente querrá venir a verte en cuanto se entere.

Niega de inmediato.—No, no quiero verlo aquí. No lo metas en toda esta mierda, lo quiero lejos.

Estaba por contestar cuando el guardia habla:—Se terminaron los cinco minutos.—dice de forma seria y autoritaria.

—Anda vete, y no hagan nada, ya está.—vuelve a pedir.

Sin decir nada y problamente con miedo a su reacción, me acerco a él para abrazarlo, debía hacerlo sí o sí.
Entregarle lo que con Charlie habíamos acordado.

—¿Qué... qué haces? —pregunta confundido.

—¡No está permitido el contacto físico! —ordena el guardia elevando la voz.

Me alejo de Harry observandolo e indicandole con la mirada que no dijera nada, él asintió confundido y atónito.

—¡Vamos, muévete! —ordena el guardia abriendo la puerta, me acerco hasta ella.
No sin antes voltear para ver a Harry, indicandole con la mirada que todo estará bien.

Llegué hasta Charlie y mi mamá que me esperaban a un lado de recepción, en cuanto me acerco Charlie me abraza.

—Salgamos de aquí.—pido correspondiendo su abrazo.

Ambos asintieron. Luego de unos minutos llegamos a mi casa, nos dirigíamos hacia mi habitación.

—En unos minutos les llevo un poco de café.—dice mi mamá desde abajo.

—Gracias mamá.—subimos las escaleras. Llegamos a mi habitación cerrando la puerta. Solté un gran suspiro mientras me tiraba en mi cama.

—No hablaste en todo el camino.
—dice Charlie ubicándose a mi lado.

No dije nada, me senté observándolo.

—Cariño... ¿Te sientes bien?
—acaricia mi mejilla.

Niego. El nudo en mi garganta volvió hacer acto de presencia.

—Ey... ¿qué sucede? —pregunta preocupado.

Charlie parecía siempre notar cada vez que me siento mal e intentaba reprimirlo.

—¿Me abrazas por favor? —pedí en un hilo de voz.

Sin decir nada se sentó en mis piernas mientras me abraza fuertemente. Acepté su abrazo rodeandolo con mis brazos y escondiendo mi cabeza en su cuello, no pude evitar soltar algunas lágrimas.

—¿Qué fue lo que ocurrió ahí dentro para que salgas así?
—pregunta acariciando mi cabello.

No dije nada, limpié algunas de mis lágrimas.

Charlie se alejó breve centímetros tomándome por el mentón para que lo observe.—Estás llorando, no soy tonto. Ey... ¿Qué sucede? Por favor intenta no contener lo que sea que te esté pasando, tienes derecho a llorar y desahogarte por lo que sea. Estuviste toda esta semana conteniendome a mi, déjame ahora cuidar de ti. —pide preocupado volviendo acariciar mi mejilla.

Y fue suficiente para que con esas palabras termine de sacar todo lo que venía conteniendo.
Comencé a llorar liberando un llanto para poder desahogar todo lo que venía acumulando.

             ~Narrador: Charlie~

Nick lloró desahogandose un poco, así que me quedé ahí en silencio. Simplemente acompañando lo que estaba sintiendo en ese momento.
Él me abrazaba con más fuerza, sus lágrimas no dejaban de salir.

—Lo siento.—dice intentando calmarse.

—Jamás pidas disculpas por tus emociones, jamás.—beso su frente volviendo a abrazarlo con fuerza.

Nos quedamos así unos pocos minutos más, hasta que se fue calmando.

—¿Quieres contarme por qué estás así?
—pregunto sin dejar de abrazarlo y acariciando su cabello.

Soltó un gran suspiro.—Todo esto es... Es demasiado.

No dije nada, claro que era demasiado. Todo es muy injusto, Harry no merecía nada de lo que le estaba ocurriendo. Sumado a su historia tan triste, el hecho de que nosotros siempre quizás también lo señalamos con el dedo cuando el chico volvía a su casa y su vida era un completo infierno...

También el hecho de que nosotros como dos idiotas creímos en la palabra de Ben. Sobre todo yo. Poniéndolo en un pedestal mientras él supuestamente había defendido a Nick en esa pelea, cuando en realidad fue el creador de todo.

Y ahora Harry paga por algo que no había hecho, y directa o indirectamente es también por culpa nuestra.

Es demasiado, todo es mucho.

Y nosotros sólo somos dos adolescentes inexpertos teniendo que afrontar toda esta situación de mierda. Por lógica, a veces todo se nos iba de las manos.
Y terminábamos con las emociones a flor de piel, tal cuál como Nick se encuentra ahora.

—Sí que lo es cariño, claro que es demasiado. Pero si yo te tengo a ti, y tú me tienes a mi, y tenemos el apoyo de las personas que queremos, yo sé que sabremos cómo solucionar todo esto.
Y que toda esta mierda se arregle de una vez por todas.—intento consolarlo.

—¿Tú lo creés? —pregunta como un niño asustado mientras se acomodab mejor en mi cuello y me abraza con más firmeza.

—Claro que sí.—dejo un beso en su cabello.

Volvimos a quedarnos así un momento más hasta que volví a hablar:

—Tengo algo para ti.

Nick me observa confuso.

Me levanté de encima de él, tomo mi mochila sacando una gran tableta de chocolate, se lo pasé.

Sonríe ligeramente.—¿Y esto?

—Dicen que cuando uno anda un poquito triste o preocupado, no hay nada mejor que un buen chocolate para levantar un poco el animo.—vuelvo a sentarme encima de él.

—Que lindo detalle. —sonríe levemente— Gracias bonito.

Beso el costado de su frente, Nick comienza a abrir la envoltura.

—¿Qué fue lo que ocurrió?
—pregunto en referencia a la visita de Harry acariciando su cabello.

Suspira.—Ese lugar es una absoluta mierda. —se lleva un pedazo de chocolate a la boca— Me dio a entender que sus compañeros probablemente lo golpearon, como suele ocurrir en ese tipo de lugares...
—arruga su nariz— Incluso noté que la habitación en donde él se encuentra es peor que las otras, está alejado de los demás.
Como que se encargaron de ubicarlo también en un lugar horrible en donde ni siquiera tenga un buen lugar para aunque sea dormir.

La cara de Ben aparece en mi cabeza. Probablemente fue él con su maldito abogado.

—¿Pudiste hablar bien con él?
—pregunto comiendo un pedazo de chocolate que Nick me pasa.

Asintió.

—Y... ¿Pudiste darle eso?
—pregunto con miedo y nerviosismo.

Nick se aleja levemente mientras me observa.—Lo hice.
—responde seguro llevándome tranquilidad.

Nick le dejó un teléfono a Harry.

Sabíamos que era algo completamente arriesgado de hacer, lo sabíamos. Que era peligroso, que le podía traer muchos problemas, por eso lo hablamos toda la semana, hasta que nos decidimos a arriesgarnos.

—Cuando lo abracé se lo di, obviamente no se lo esperaba.
Lo tomó con absoluto miedo y sorpresa, pero lo tomó.
—aclara— Le indiqué con la mirada que cualquier cosa nos llame, y pude notar cuando salía de la habitación que lo guardó rápidamente, así que confío que lo sabrá guardar y nadie lo notará.

La idea era que ante cualquier cosa que ocurra Harry nos llame. Pero en realidad lo principal era que con ese teléfono lograra captar alguna prueba para culpar a Ben y demostrar su inocencia. Por ese mismo motivo, el plan B lo teníamos que poner en marcha ahora.

—¿Le enviamos el mensaje ahora o esperamos un poco?
—pregunto.

—Tiene que ser ahora, no creo que debamos perder tiempo.

Asenti bajandome de sus piernas, Nick tomó su teléfono comenzando a teclear rápidamente. Ese teléfono era uno que Nick tenía, era viejo.
Solo servía para enviar mensajes y llamadas, por lo tanto solo dejamos agendado en el mi número y el de Nick.

—Listo. —avisa— Ya se lo envié, espero y pueda verlo.

—Confío en que sí.

Luego de unos minutos en que estábamos tomando un café, Nick se tranquilizó un poco, él dijo:
—Te admiro por lo que haces, ¿sabes?

Lo observo confundido.—¿Por qué lo dices?

—Creo que con tanta cosa todavía no tuvimos el tiempo de hablar bien sobre como tú te tomaste todo esto. Me refiero a todo lo que pasó con Harry en el pasado, y como eres con él ahora.

Seguía sin entender, así que lo observo juntando mis cejas en confusión.

Bebió un sorbo más de su café.
—Lo que haces por Harry, como quieres ayudarlo a pesar de todo lo que ocurrió entre ustedes y lo hiriente que fue él en su momento, tu empatía con él es muy linda.—expresa de forma sincera.

Sonrío levemente.—Nada de lo que haya pasado lo tomo como algo que él haya querido hacer. Ahora entiendo muchas cosas y no puedo ponerme en una postura de juzgarlo o reprocharle cosas. A pesar de todo, siempre fue una víctima.

Nick deja una leve caricia en una de mis mejillas.—A eso iba, tienes un corazón hermoso Charlie.
Y la manera en la qué estás actuando en toda esta situación... Es admirable.

Vuelvo a sonreír, me acerco para dejar un pequeño beso en sus labios.—Tú eres hermoso.

La notificación de un mensaje entra en su teléfono, lo toma.

—¿Es harry? —pregunto entusiasmado dejando mi taza a un lado.

Nick lee su pantalla, luego me observa algo preocupado.

—¿Qué sucede?—pregunto nervioso.

Lo que sigue a continuación estará disponible en la parte 3.

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NOTA DE AUTOR/A: Perdón la demora! Aaaaaaa no quiero decir nada pero las cosas en las próximas partes se prenden 🙈💪👏 Gracias por leer besossssss