[ADVERTENCIA: Un poco de contenido +18, si no te gusta leer este tipo de escenas solo la salteas]

●Parte 4●

                  ~Narrador: Nick~

La fiesta marcha muy bien, todos la estamos pasando realmente muy cool. Incluso con Charlie dejamos de ser unos tímidos a la hora de bailar y nos animamos a hacerlo, por supuesto que las risas no faltaron. Porque seguimos siendo unos pésimos bailarines y eso nos causaba aún más gracia.

—Por ti amigo, porque eres un tipazo y te deseo lo mejor. Brindo por ti.
—Michael levanta su lata de cerveza hacia mí bebiendo un trago.

—¿Cualquier excusa es buena para beber verdad?
—digo bromeando— Igualmente gracias.

—Nick... Solo tomé una cerveza ¿En verdad creés que ya estaría ebrio?
—se acerca para besar mi mejilla—
¿En dónde está mi novia?
—pregunta curioso.

Isaac le hace una seña para que mire hacia un costado. Olivia está bailando arriba de un parlante mientras grita y canta las canciones de Harry Styles.

—¡Eso linda! —la alenta Michael en un grito.

Olivia escucha, lo observa y empieza a dedicarle la canción que suena llamándolo con la mano.

—Ve con ella, y cuida que no beba demasiado.—Charlie le sugiere, pero Michael no dice nada, solo la observa—¡Ey! —pasa su mano por delante de su rostro.

—¿Sí? —pregunta sin dejar de observarla.

—Que vayas con ella y la cuides.—esta vez hablo abrazando a Charlie por detrás.

Michael suspira.—No puede ser más hermosa.—sonríe yendo hacia ella.

Observamos como la toma de la mano y bailan juntos. Luego se besan.

—Realmente hacen una linda pareja.
—expresa Charlie.

—Ustedes también hacen una hermosa pareja.—acota Elle sonriendo— Si se vieran como los vemos los demás cada que están juntos, la manera en que se miran, se cuidan, se ríen... Es realmente hermoso lo que tienen.

—Y por esa misma razón hay tantas personas que tienen envidia de ustedes dos...
—Tao habla observando a nuestro costado. Todos volteamos a ver a Amber quién bailaba con Jason.
En realidad sólo baila ella sola, Jason solo fuma.

Charlie suelta una tos irónica cambiando de tema.—¿Y si vamos a tomar algo? Ya bailamos demasiado.

Todos asentimos mientras nos acercamos a la mesa donde se encuentran las bebidas. Comenzamos a servirnos algo para tomar cuando siento una mano en mi hombro.

—¿Bailas Nick?—es Amber.

Jason está a su lado, pero se acerca hasta la mesa para también servirse algo de beber. De inmediato miro a Charlie que solo está mirando las bebidas eligiendo que tomar, por supuesto que lo había escuchado.

—Ve Nick.—dice Jason— Yo odio bailar, y a Amber le encantan este tipo de canciones.—bebe de una lata de cerveza.

—Es que... Recién estábamos bailando con Charlie y los chicos, estoy algo cansado...
—miento— Por eso vinimos a buscar algo para beber.

Charlie sigue sin decir nada.

—Oh vamos, solo será una canción.
—vuelve a insistir Amber poniéndome realmente en un compromiso.

Tao, Elle y Isaac no dicen nada.

—Ve Nick.—suelta Charlie sin mirarnos—Es una forma de agradecer que gracias a ella estamos aquí, ¿no? —esta vez la observa a Amber, su tono es realmente irónico.

—Claro.—contesta ella— Si no fuera por mí ni siquiera hubieran conseguido lugar aquí.—suelta una risita observandonos pero nadie contesta. Jason está perdido en su teléfono— Ay chicos, estoy bromeando.

Si bailar con ella una bendita canción es la solución para que de alguna forma u otra crea que estoy agradecido por lo que había hecho, tengo que hacerlo.
No me queda de otra, debo ser justo.
Ya que ni siquiera aún le pude agradecer " El gesto " sinceramente no tengo muchas ganas de hablar con ella.

—Ve cariño.—vuelve a insistir Charlie observándome— Aquí te esperamos.

—¡Ayy tanto escándalo por una canción! Tienes que divertirte Nick, eres el cumpleañero.—sonríe Amber tomándome de la mano para llevarme hacia el centro de la pista. Observo a Charlie que solo mira hacia otro costado.

               ~Narrador: Charlie~

Maldita cínica.

Desde que llegamos no paró un segundo de observar a Nick.
Durante toda la fiesta no le quitaba los ojos de encima, aún con Jason a su lado.

¿Puede ser tan descarada? No sé cuánto más soportare esto, y ahora tener que ver como llevó a Nick a bailar con ella... No quiero mirarlos, pero no puedo evitar hacerlo. Nick parece realmente incómodo. Prácticamente ni siquiera bailaba, era ella quién bailaba y se movía de un lado a otro frente a él de una manera algo provocadora.

—¿Qué están viendo mis ojos?
—pregunta Olivia de repente detrás de mí— Me voy un segundo y la cucaracha ataca.—suelta totalmente ofendida.

—Solo están bailando amiga.
—respondo frustrado llevándome un trago de cerveza a la boca. No me gusta beber alcohol, pero ahora lo necesito.

—¿Están bailando? Disculpa pero solo veo a Nick totalmente incómodo mientras ella le revolotea alrededor como una gallina.—se cruza de brazos observandolos.

—Linda, después dices que soy yo el que no ayuda.
—acota Michael hacia ella dejando un beso en su cabello.

—Es que mirala, ¡no puede ser tan descarada!—vuelve a decir.

—¿Quién no puede ser más descarada?
—pregunta Jason acercándose a nosotros, ya que se había alejado un momento para hablar por teléfono.

Olivia se puso rígida, no sabe que decir.

—Está hablando de Sahar.
—responde Michael cubriéndola.

—¿Sahar? —Jason junta sus cejas en confusión.

—Sí, dijo que no bebía alcohol y acaba de beber una cerveza. Lo decimos de chiste, solo es eso amigo.—ríe Michael nervioso chocando su puño en el hombro de Jason.

Pobre Sahar, ni siquiera estaba aquí y ni había bebido cerveza, solo daba vueltas por ahí con Isaac tomándose algunas selfies. Al cabo de unos segundos Nick y Amber se acercan hasta nosotros, él viene directo hacia mí dejando un beso en mi mejilla.

—¿Me convidas algo para beber?
—pregunta abrazandome por detrás.

—Ten.—le paso mi lata de cerveza.

—¿Estás bebiendo?
—pregunta curioso.

—Solo un trago.—volteo a verlo.

—No quiero alcohol.—niega dejándola a un costado— Tú tampoco deberías beber bonito, nuestros padres nos advirtieron sobre eso.—dice sirviéndose un poco de limonada.

Observo como Amber no nos quita la mirada de encima. Incluso parece gozarme en la cara como que de alguna forma u otra ella siempre se sale con la suya, incluso con un simple baile...
Su mirada sigue fija en nosotros mientras rodea el brazo de Jason, él solo habla con Michael y Olivia.

¿Quería algo para ver?

Aquí lo tiene.

Sin dudarlo mucho tomo a Nick por la nuca hasta acercarlo a mi y poder besarlo. Eso lo tomó por una real sorpresa, así que llevo mis brazos alrededor de su cuello para poder acercarlo más y poder profundizar el beso.

No me importa la gente que tenemos alrededor, tampoco me importa en este momento estar actuando como un auténtico celoso. Pero sí, lo estoy...
Estoy celoso.

¿Quiero hacerle saber a Amber que Nick es solamente mi novio y que no permitiré ningún tipo de interés en ella hacia él? Sí.

Estaba dejándome llevar totalmente por mis impulsos, y aunque Nick parece sorprendido por como lo había tomado y la forma desesperada en que lo estoy besando, de igual manera coloca sus manos en mi cintura para seguir el ritmo del beso.

Se separa para observarme.—¿Y eso?
—sonríe de lado aún cerca de mis labios.

—¿Acaso no puedo besar a mi novio?
—también sonrío.

Deja un rápido beso en mis labios.
—Claro que puedes.

Vuelve a besarme, esta vez se aleja un segundo para volver a tomar de su limonada. Aprovecho eso para mirar a Amber, solo me sonríe un segundo de una manera algo sarcástica.

Realmente parece la villana de alguna película, que cliché.

                ~Narrador: Nick~

No debíamos volver tarde a la cabaña ya que nuestros padres se preocuparan, por ese mismo motivo decidimos quedarnos solo unos momentos más para ya volvernos. Así que antes de dirigirnos todos juntos al bosque para llegar a la cabaña, Charlie toma mi mano deteniendo mis pasos.

—¿Qué sucede?—lo observo.

—Nosotros nos desviamos un momento.

Junto mis cejas algo confundido, cuando vuelve a hablar:

—Mike... ¿Ya sabes que hacer verdad?

Michael se acerca hasta nosotros.—No se preocupen, lo tengo todo controlado. Ustedes solo diviertanse, pero no demasiado.—levanta sus cejas rápidamente con picardía.

Aún sigo sin entender.
Luego de eso Michael se fue con los demas adentrándose en el bosque para irse a la cabaña.

—¿Adónde me llevarás?
—le pregunto, Charlie toma mi mano.

—Ya verás.

Comenzamos a caminar por la orilla del lago tomados de la mano, no entiendo hacia dónde vamos pero yo solo lo sigo.

—¿Intentarás secuestrarme o algo así?—pregunto bromeando.

—Quizás, ¿te parece un mal plan?
—responde irónico haciéndome sonreír.

Seguimos caminando unos minutos más y noto que nos encontrábamos realmente lejos de toda la gente que estaba en la fiesta del lago, estábamos algo apartados, incluso esta parte parece estar algo desolada.

—Cierra los ojos un momento.—pide, así que sigo su orden.—Ahora toma mi mano y sigue mis pasos.

Vuelve a pedir y asiento. Caminamos a pasos lentos mientras me guia.

—Abrelos.

Los abro encontrándome con una especie de carpa/tienda armada a un costado.

—¿Y esto? —pregunto sorprendido observando todo.

—Entra y mira.

Sonriendo tomo su mano acercandome, tomo el cierre de esta para abrirla completamente. Me agacho para ver que en el interior hay cosas para comer y beber, rosas dispersas por todos lados, con algunas velas encendidas.

—Charlie... Esto es... —estoy sin palabras.

—¿Demasiado cursi? Lo siento.
—interrumpe con timidez a mi lado— Lo vi en Pinterest y me pareció muy tierno.

Me levanto para quedar de frente a él.
—Esto es muy lindo de tu parte.—tomo su rostro en mis manos para dejar un beso en sus labios— Gracias en serio.

—Me alegra que te guste.
—sonríe— Aunque por supuesto que no pude hacer esto todo yo solo, traer todo esto aquí...

—¿Quién te ayudó?
—vuelvo a observar hacia el interior, todo está tan lindo.

—Jason, aunque suene difícil de creer. —suelta una risita— Incluso fue él quien me sugirió este lugar. Estaremos tranquilos sin que nadie nos moleste. Ya que por aquí no viene nadie.

—Y por lo que veo...
—observo nuevamente una vez más notando que hay algunas mantas—
¿Pasaremos lo que queda de la noche aquí?

—Si no tienes problema con eso sí.
Y si no, solo estamos un momento y nos volvemos a la cabaña con los demás, como tú quieras...—ubica sus brazos alrededor de mi cintura.

Río ante eso.—¿Realmente crees que rechazaría la oportunidad de pasar la noche aquí contigo en este lugar, con la vista de un lago de fondo?

—Entonces... ¿eso es un sí? —se pone de puntilla para acercarse a mis labios sonriendo ampliamente.

—Claro que es un sí.—dejo un corto beso en sus labios— ¿Y tu mamá y la mía? Podrían enojarse mucho si notan que no pasamos la noche en la cabaña...

—No te preocupes por eso, fue lo que le encargué a Mike.—deja un beso en mi mejilla.

Río levemente—¿A Michael? ¿Estás seguro que controlará la situación?

—Alguna vez tenemos que confiar en él.—echa a reír.

Charlie toma mi mano para ingresar a la pequeña tienda, una vez que nos sentamos dentro vuelvo a hablar:

—Me intriga mucho saber en que momento hicieron esto si estuvimos todo el día juntos. Además, ¿de dónde sacaste todas estas cosas?—pregunto curioso.

—Menos preguntas Nick Nelson, y ahora abre esto.
—sonríe entregandome un regalo.

—¿Incluso me compraste un regalo?

—Cariño, en los cumpleaños generalmente la gente suele dar regalos.

—Pero con esto ya era demasiado...
—me acerco besando su mejilla.

—Abrelo.—sonríe.

Le hago caso abriendo su regalo encontrándome con un álbum de fotos, y una notebook.

—Tú realmente estás loco.
—expreso sorprendido.

Charlie suelta una risita.—La tuya se descompuso, y sé que necesitas una.

—Pero estás son muy caras.
—digo aún sorprendido observando.

—No te preocupes por eso, mi mamá me ayudó a pagarla.—sonríe de forma inocente.

—Ahora siento más vergüenza.
—niego con la cabeza— Gracias en serio, realmente esto es demasiado.

—Ey, que también hay un álbum de fotos.—avisa de forma irónica haciéndome sonreír.

Tomo el álbum para encontrarme con fotos nuestras, incluso algunas de Nellie. También algunas fotografías mías que me tomó de imprevisto.

—Es hermoso todo. No sé que decir, en verdad gracias.
—sonrío de forma nostálgica observando las fotos. Incluso está impresa la primera selfie que nos tomamos, llevándome a ese día en mi casa, la nieve cayendo...

Realmente habíamos pasado muchos momentos juntos, y me acuerdo de cada uno de ellos perfectamente.

—¿En qué piensas?
—pregunta acariciando mi cabello.

Suspiro.—En ti, en mí, en nosotros.
Ver estas fotos me hace pensar en todos los momentos que pasamos, aunque no niego que a veces siento miedo...

—¿Miedo de qué? —pregunta intrigado.

—De que alguna vez esto se termine, porque realmente no quiero que eso suceda.
—hablo con seriedad.

Ese punto en el que eres tan feliz con lo que tienes, o con lo que tanto te costó conseguir que temes que de un momento a otro todo se esfume.

—No hay que pensar en eso, estamos aquí y ahora. Esto es lo que tenemos.
Te quiero como no tienes idea, y supongo que tú también me quieres a mí.—sonríe y hago lo mismo— Así que mientras eso pase, no tenemos que preocuparnos por lo demás.

—¿Me lo prometes?
—pregunto sincero.

Suelta una leve risita.
—Generalmente eres tú quien me sostiene a mi con mis inseguridades y miedos, ahora no sé que hacer.
—bromea.

—También tengo miedo, y muchísimas veces. Solo que por algún motivo a veces trato de no mostrarlo tanto...

Charlie se acerca un poco más a mí.
—Entonces déjame decirte que no debes tener miedo, que te prometo que estará todo bien, y que te quiero Nick, te quiero mucho.

—También te quiero bonito.

Tomo su rostro para besar sus labios, me corresponde enseguida.
Nos separamos un segundo para poder abrazarnos.

—¿Por qué en nuestros cumpleaños siempre nos ponemos sentimentales?
—pregunta aún abrazandome.

Suelto una risa.—Me pregunto lo mismo.

Luego de eso, me dijo que ya había instalado Netflix en la notebook para que podamos ver una película juntos. Como no teníamos acceso a internet por la lejanía a las cabañas, dijo que habia descargado una rápidamente para ver sin conexión, y esa había sido Crepúsculo.

—¿Crepúsculo? ¿En serio?
—pregunto llevándome un dulce a la boca. Charlie pone play a la película.

—Edward es muy sexi.
—contesta ubicándose a mi lado.

—Ya la hemos visto un millón de veces.

—No importa, no es lo mismo verla encerrados en tu casa o en la mía, a verla aquí en este contexto, y con un lago precioso de vista.

Asiento. Es un buen punto.

—Tienes razón, solo bromeo.—beso su cabello.

Nos ubicamos mejor para poder ver la película.

—¿Y si mejor apagamos las velas?
—susurro cuando la película está comenzando.

—¿Por?

—Porque literalmente se puede caer alguna y nos quedamos incendiados en un segundo.—suelto reprimiendo una risa.

—Es verdad... Ni siquiera pensé en eso, definitivamente no me sale ser romántico.

Comienzo a reírme cuando Charlie busca las velas para apagarlas.

—De igual forma si lo eres.
—sonríe cuando vuelve a colocarse a mi lado.

—¡Casi te prendo fuego!

—Eso no pasó.—río besando su cabello.

La película sigue reproduciéndose. Bromeabamos con algunas escenas repetiendo los diálogos, incluso hacíamos gestos de sorpresa cuando Bella descubre la verdad de Edward. Cuando hemos visto esa secuencia infinidad de veces, es gracioso.

La película estaba llegando casi a su fin. Charlie tiene apoyada su cabeza en mi hombro. Está en silencio.

—¿Estás durmiendo?

Niega.—Solo pensaba.

—¿En qué?

—En lo que hablamos hoy mientras estábamos en el agua.

—Hablamos de tantas cosas, ¿en cuál de todas?

Se queda en silencio un momento, hasta que habla:
—Cuando decías las cosas que tenías ganas de hacer pero que en ese momento no podíamos.

Sonrío ante eso recordando.—¿Y eso qué significa?

Se sienta para observarme mejor, ya que los dos estamos acostados.—Que ahora si las podemos hacer.
—sonríe acercándose a mis labios para dejar un beso y luego alejarse.

—Ven aquí.—lo tomo de la mano para que se siente a horcajadas encima de mí. Suelta una risita ubicando sus brazos rodeando mi cuello para seguir besandonos.

Aunque no era un beso cálido, cariñoso, y amoroso. Si no más bien uno provocativo y con ganas, con movimientos lentos y húmedos, su lengua invade mi boca, explorando.
Quise tener el control del beso pero Charlie no me lo permitía, ya que quien lleva el ritmo es él. Llevo mi mano a su cuello rodeandolo, mordiendo su labio inferior.

—Amo cuando haces eso.
—suelta en mis labios.

Sigo besandolo de una manera efusiva, nuestras respiraciones empiezan a mezclarse de una forma agitada.
Llevo mis manos a su cintura para acomodarlo mejor sobre mí, suelta un jadeo en cuanto me siente.

—No tenemos que reprimirnos en nada.—dice bajando para besar mi cuello.

—Si supieras todo lo que estoy pensando.—suelto un leve gemido en cuanto Charlie lame con fuerza una parte de mi cuello, probablemente dejando una marca.

Vuelve a mis labios.—En este momento solo quiero que seamos tú y yo.

Vuelve acercarse para besarme, sus manos viajan por mi cuello, mi espalda, incluso mis bíceps.
Mis manos aún siguen firmes en su cintura, haciendo que se mueva con pequeños balanceos sobre mi excitación provocando algunos gemidos de su parte, tampoco pude evitar soltar varios jadeos.

Llevo mis manos por el interior de su camiseta para acariciar su espalda, tomo el borde de esta para sacarla completamente. Charlie se ruboriza de inmediato, así que lo tomo por el cuello nuevamente para besarlo, y hacerle saber que cada centímetro de su piel me vuelve completamente loco.

Dejo varios besos por su pecho, sus brazos, sus hombros...

Tomo su mano para llevarla a mi entrepierna. Provocando una sonrisa de su parte mientras me besa y muerde mi labio inferior.

—¿Entiendes cuanto me vuelves loco?—suelto sin pudor.

Charlie toma eso para seguir besandome de una manera desesperada. Su mano, que aún sigue sobre mi entrepierna, se mueve un segundo hacia el cierre de mi pantalón. Comienza a bajarlo para acariciarme por encima de mi ropa interior.

Lleva sus labios a mi cuello para seguir besandome en esa zona, esta vez toma la iniciativa liberando mi miembro para tomarlo en su mano y seguir haciendo movimientos rápidos, y a veces lentos. Haciéndome perder la cordura.

—Bonito... —empiezo a gemir en sus labios.

—¿Qué? —contesta agitado.

—Es demasiado... Demasiado...

No sé ni que decir. Ya que todo lo que venga de él me encanta, acelera el ritmo de su mano.

—Mierda, Charlie.—suelto un gemido sonoro.

Para este momento nuestras respiraciones son un completo desastre, lo tomé por el cuello nuevamente para besarlo mientras su mano no deja de moverse.

—¿Recuerdas lo que dije hace un momento? —pregunta sobre mis labios.

—¿Qué?—respondo en un jadeo. Jadeo que fue atrapado por su boca.

—No tenemos que reprimirnos en nada.
—repite mientras su mano no deja de moverse.

Así que sin ningún tipo de pudor y dejándome llevar completamente por él y lo que estábamos sintiendo, llevo mi mano al cierre de su pantalón. Bajo el mismo de manera rápida mientras mi mano comienza a acariciar su entrepierna.

—Me gustas tanto.—suelta agitado mientras mi mano se mueve al mismo ritmo que él está llevando sobre mí.

—Y tú a mí, muchísimo.
—expreso de la misma forma.

Y esa noche, una vez más volvimos a hacerlo. En un contexto totalmente distinto, bajo la luna, con una vista preciosa a nuestro alrededor.

Nos quedamos dormidos abrazados, pero en un momento de la noche Charlie se despierta asustado, haciendo que me despierte.

—¿Escuchaste eso? —se cubre con la manta mientras se sienta.

Hago lo mismo frotando mis ojos.
—¿Qué cosa?

—El crujido de una rama, como una pisada.

—Bonito, estamos alejados de todos. Ven a dormir.—vuelvo acomodarme tomándolo para poder ubicarme en su pecho.

—Cariño, en verdad escuché algo.—vuelve a decir acomodándose.

—Quizás solo es un animal. ¿Duerme si? Ya dentro de un rato debemos volver a la cabaña antes que todos despierten.—dejo un beso en su hombro.

Charlie suspira acomodándose mejor. También había escuchado ese crujido, pero creí que me había equivocado.
Así que en cuanto mencionó que también lo había escuchado, preferí mentirle para que no se asuste.

Porque creo que alguien nos espiaba.

                  ~Narrador:Charlie~ 

Pasó alrededor de una hora cuando me despierto de golpe por el sonido de la alarma que habíamos colocado desde el teléfono de Nick.

—Nick.—lo muevo un poco—Cariño...

No despierta, hace un sonido extraño mientras se mueve un poco rodeando su brazo sobre mi cintura.

—Nick...—vuelvoca moverlo— La alarma.

Otra vez nada, sigue " Dormido "
Me levanto rápidamente mientras me siento para observarlo.

Uno de sus ojos se abre con pereza, cuando ve mi expresión seria intenta reprimir una risa.—Lo siento, ya la apago.—se sienta mientras estira el brazo para tomar su teléfono y apagar el bendito sonido que no deja de sonar.

Vuelve acomodarse en su lugar, así que hablo:—Siempre me haces lo mismo.

—¿El qué? —comienza a reírse mientras se frota los ojos con pereza.

—Esto que acabas de hacer. Escuchas la alarma y te haces el tonto pretendiendo que otro la apague por ti.

Vuelvo a reír.—Es muy temprano para que ya me regañes.

—Eres un flojo.—dictamino tratando de sonar serio.

Se acomoda para sentarse.
—Y tú eres hermoso cuando recién te levantas.

Trato de reprimir una sonrisa observando hacia otro lado, buscando mi ropa.

—¿En dónde está?

—¿El qué? —pregunta mientras bosteza y se estira.

—Mi ropa.

—Mmm, no lo sé. Tampoco veo la mía. —responde frotándose los ojos una vez más.

Lo observo rápidamente.
—¡Nick! Reacciona, tenemos que irnos ya a la cabaña antes de que todos despierten.

Vuelve a tirarse de espaldas para seguir acostado, en ese mismo momento muevo un poco más la manta encontrando por debajo toda mi ropa. Comienzo a vestirme con rapidez bajo la mirada de Nick.

—¿No podemos quedarnos un rato más? —pide como un cachorro indefenso.

—Claramente no.—termino de colocarme la camiseta, solo me faltan los tenis.

—Podemos seguir aquí solos pasándolo bien.—siento como deja un beso sobre mi espalda.

—Creo que anoche ya lo pasamos lo suficientemente bien.—lo observo por encima de mi hombro.

—Sí lo sé, muy bien.—deja ahora un beso en mi cuello— Es solo que... Creo que nunca lo hemos hecho en la mañana.

Intento reprimir otra risa.
—Definitivamente despertaste hormonal.
—volteo para poder verlo más de frente—Lo haremos en la mañana...—dejo  un rápido beso en sus labios— Pero esa mañana no será hoy, así que ahora vístete que debemos irnos ya.
—sonrío volviendo a dejar otro beso en sus labios levantándome rápidamente.

—Eres cruel.—sonríe descubriendo la manta de su cuerpo.

—Vístete Nick.—comienzo a guardar las cosas.

Luego de unos cuantos minutos ya estábamos dentro del bosque yendo hacia la cabaña, íbamos de la mano bromeando entre nosotros de cualquier tontería. Cuando de repente escuchamos un ruido que venía a un costado de nosotros, sonó como una pisada. De forma automática detuve el paso, Nick hace lo mismo.
Nos quedamos en silencio.

—¿Oíste eso? —susurro hacia Nick.

Asienterápido.—¿Será un oso?

Niego con la cabeza observándolo.
—No creo que aquí hayan osos cariño.

—Bueno vamos, no quiero y ni pienso saber que es.—Nick apreta mi mano con algo de nerviosismo mientras intenta seguir caminando, pero lo detengo de inmediato.—¿Qué pasa?

—Espera, creo que escuché algo.
—suelto su mano moviendo un poco mis pies acercandome a un árbol.

—¿Charlie que haces?
—susurra Nick alarmado.

Juro que escuché como una risita, no sé trataba de ningún animal ni nada de eso.

Volteo a verlo.—Cariño, acabo de escuchar como una risa.

Nick se pone blanco como un papel.

—Carajo. Charlie hay que irnos ya, recuerda lo que dijo Jason de este bosque... Que aquí hay muchas leyendas y muchas cosas... —empieza a hablar rápido.

Y por algún motivo sentí que esto no se trataba de nada paranormal, y no me equivoqué.

—Ya basta, ya nos escucharon.—una voz masculina habla hacia otra persona desde atrás de ese árbol.

Automáticamente observo a Nick, con una mirada de " Te lo dije " Él rápidamente se acerca hasta mi lado.

—Lo siento chicos, solo somos nosotros tranquilos.
—Jason sale desde atrás del árbol mientras se termina de subir el cierre de su pantalón y se coloca mejor su chaqueta.

Al mismo momento Amber aparece detrás de él riendo como una hiena... Perdón. Mientras se acomoda el vestido que lleva puesto.

Suspiro.—Solo son ustedes.
—me cruzo de brazos.

A pesar de que Jason solía mostrarse muy indiferente y despreocupado, se lo nota con algo de timidez, creo que más que nada por Amber y por que era lógico lo que estaban haciendo.
De forma rápida se quita su chaqueta rodeandola sobre ella para que pueda cubrirse un poco, ya que está algo fresco.

Amber suelta una risita.
—Bueno, en la cabaña no podíamos tener privacidad así que...

—Amber.—Jason le dedica una mirada como para que no siga hablando, nos observa.— Lamento esto chicos, no tenían porque presenciar esta situación.

—Tranquilo.—dice Nick.

—¡Ay vamos lindo! Tampoco estábamos haciendo nada fuera de lo normal.
—Amber suelta una risita, su atención va hacia mí y a Nick— Ya que creo que ustedes dos también lo pasaron muy bien, ¿no?

Ni Nick y yo dijimos nada. Jason niega con la cabeza.
—Hay que volver a la cabaña antes de que los demás noten que no estamos ahí.

Comienza a caminar, Amber rodea su brazo caminando a su lado, no sin antes echarle una mirada a Nick.

—¿Vamos? —Nick vuelve a entrelazar su mano con la mía.

Asiento sin decir nada mientras comenzamos a caminar detrás de ellos, cuando las fichas comienzan a caer...

Si Jason y Amber estaban aquí haciendo sus cosas, y hace más de una hora sentí un ruido cerca de la carpa como si alguien nos estaba espiando... Más lo que acaba de decir Amber recién...

¿Había sido ella la que nos espiaba?

                               ~~~

Lo que sigue a continuación estará disponible en las próximas partes.

NOTA DE AUTOR/A: Perdón la demora! Dije que la iba a subir ayer pero es que Kit está en Buenos Aires, básicamente de donde soy, y eso me descolocó un poco y estaba en eso jajaja. Ahoraaaaa, se viene lo picante. Estoy pensando si hacer una parte más sobre esto, o ya seguir en otros contextos. Veremos. Gracias por leer, besosssssssss