● Parte 2 ●

                 ~ Narrador: Nick ~

Envolvi con mis brazos a Charlie, queda de frente a mí.

—Nick... —advierte.

—¿Qué?—pregunto sonriendo.

—Tu mamá nos hizo una advertencia hace unos minutos antes de salir por esa puerta.—susurra con una sonrisa pintada en el rostro, y yo no podía dejar de verlo.

—¿Ves a mi mamá aquí?—acerco mi rostro al suyo.

—¿En qué momento te convertiste en todo un rebelde? Hablo en serio.
—suelta una risita.

—¿Querer dormir con mi novio es de rebelde? Eso no tiene ninguna lógica.
—envuelvo aún más mis brazos para acercar su cuerpo al mío.

Suelta un quejido y a la vez una pequeña risita.—¡Vas a partirme en dos! Ten cuidado brazos gigantes.

Por alguna razón eso sonó en doble sentido, así que solo nos miramos para luego soltar una carcajada al mismo tiempo.

De inmediato su mano viaja a mis labios mientras me hace callar.
—¡Silencio!

—Lo siento.—digo aún con su mano cubriendo mi boca, una vez que la retira vuelvo a hablar:—Entonces... ¿Duermes conmigo?

—No.—sonríe.

—¿Me dejas convencerte? —propongo.

—No hay manera de convencerme.

—Creo que sí hay una.—observo sus labios, él también hace lo mismo.

Decido cortar la pequeña distancia que aún nos separa, busco sus labios para besarlo, y no tarda demasiado en corresponderme. Mis brazos siguen alrededor de su cuerpo, lo sostengo de una forma como queriendo que no se escape de mi lado, él tiene los brazos en puño sobre mi pecho.
Nuestras lenguas comienzan un roce delicioso que me lleva a soltar un leve jadeo, noto que le gusta, ya que sus brazos pasaron de estar sobre mi pecho a elevarse hacia mi nuca, atrayendome más hacia él.

No me cansaré de pensar lo bien que nuestros labios se acoplan, lo mucho que disfruto besarlo, lo mucho que Charlie provoca en mí...

—Besas increíble, ¿lo sabes verdad?
—suelta de repente en medio de mis labios.

Me toma por sorpresa, pero me gusta lo que dice. Tanto que quedo encima suyo de un momento a otro, pero sin apoyar del todo mi peso, para no lastimarlo. Ahora está debajo de mi, y puedo tener una vista preciosa de él... Sigo besandolo cuando sus manos van hacia mi cabello dejando algunas caricias.

—Tú también besas muy bien. Me gustas mucho Charlie, y me encanta poder decirlo.—hablo entre besos, provocando una sonrisa en sus labios.

El beso iba aumentando, puedo sentir su calor, sumado al mío. No pensé mucho cuando dejé de besar sus labios para besar su cuello, huele tan bien... Suspiro dejando algunos besos. Lo escucho soltar un jadeo por lo bajo, algo tímido.

—Me gusta escucharte.—hablo para que se sienta seguro conmigo.

Sigo dejando besos en su cuello, cuando habla:—Nick...—su voz salió algo entrecortada— Deberíamos parar, tu mamá está al lado.

Yyyyy por más que esté disfrutando de este momento, entendí que tiene razón.
Dejo su cuello para mirarlo a los ojos, sonrío acariciando una de sus mejillas, él también me sonríe de una manera delicada. Subo a su frente dejando un beso, luego me muevo para acomodarme a su lado y quedar boca abajo. Tenía su rostro de perfil mientras él solo mira hacia el techo. Nos quedamos así en silencio algunos segundos más cuando noto como sonríe de la nada.

—Eres un maldito pervertido.—suelta de repente en un susurro.

—Acabas de cortar este romántico momento.

Los dos comenzamos a reír nuevamente, tratando de no hacer mucho ruido.

—Literalmente tu mamá está al lado, nunca dejas de sorprenderme.

—Tú tampoco a mí.—digo para provocarlo.

—¿Discúlpa?

—Solo bromeo.—me acerco dejando un beso en su mejilla—Entonces... ¿Te convencí o...

—Dormiré contigo.—responde interrumpiendome— ¿Como podría desaprovechar la oportunidad de dormir bajo los brazos del capitán de Rugby no? —esta vez me observa directo a los ojos.

—¿Eso es un sí?

—¿Tú que crees? —deja un rápido beso en mis labios.

Sonrío ante eso.—Sabia que te convencería.

—Cállate.

—¿Quieres algún suéter? Está algo fresco, no quiero que te enfermes.

—Tú eres una estufa humana, ya tengo suficiente.

Charlie vuelve acercarse a mis labios para besarme, luego de eso gira quedando de espaldas a mí, sin dudarlo mucho lo abrazo, no sin antes cubrirlo del todo con las cobijas, sé que suele tener bastante frío.

—Buenas noches.—digo.

—Buenas noches cariño.

Me acomodo más cerca a él,
y en el silencio de la noche, solo se podía escuchar la lluvia que golpeaba con fuerza, la calida respiración de Charlie... No podía estar más satisfecho de poder estar pasando un momento como este junto a él. 

                             ~~~

Nota De Autor/a: Perdonnn se que es un poco corto, aunque todavía hay una parte más de este especial, falta alguna que otra cosita que... 🙈🤫😬 Besosssssssss