──── 007.
Golpe tras golpe le daba a Mikey, pero este simplemente los detenía o esquivaba mientras veía como Kazutora estaba detrás de mí mirando nuestra pelea.
—¿Qué sucede, Kazutora? —preguntó cuando detuvo otro de mis golpes—. ¿No eras tú quien quería vencerme?
Kazutora no respondió, entonces, aproveché ese momento para darle mi patada con giro a Mikey, pero lamentablemente este logró esquivarla y debido a que nos encontrábamos sobre una montaña de autos chatarra mi pie quedó atascado en uno de ellos.
Mikey me quedó mirando fijamente mientras levantaba su mano y por un momento creí que me golpearía; sin embargo, Kazutora apareció detrás de él y lo golpeó fuertemente con un fierro en su cabeza por lo que Mikey cayó frente a mí tal vez ya derrotado.
—Se acabó —mencionó Kazutora al momento en que miraba como todos los demás detenían sus golpes—. Valhalla ha ganado.
—Dime una cosa —oí mencionar a Mikey y al verlo levantarse con dificultad me ha sorprendido—. ¿Realmente soy tu enemigo, Kazutora?
—Yo sufrí por tu culpa —mencionaba Kazutora—. Por tu culpa fui al reformatorio.
—¿Ah? ¿De qué mierda estás hablando?
—Eliminaré a lo que sea que se meta en mi camino —decía mientras subía a lo más alto de las montañas de autos amontonados en el lugar—. Aquel que mata gente es llamado "villano", pero, aquel que mata los enemigos es llamado "héroe".
—¿Kazutora? —le llamé confusa por todo lo que estaba mencionando.
—Sostenlo fuerte —me exigió.
La expresión con la cual se encontraba Kazutora mirándonos me perturbaba demasiado por lo que decidí que era lo mejor alejarme, ya que no quería involucrarme en estas cosas.
—No participaré en esto —mencioné mientras intentaba sacar mi pie atascado entre los autos—. Yo no quiero matar a nadie.
—¿Acaso también piensas volverte mi enemigo? —preguntó con una expresión que me hizo helar la sangre—. Bien. Con el fin de convertirme en un héroe, mataré a todos mis enemigos.
Kazutora se me acercó de manera peligrosa mientras alzaba aquel fierro en sus manos, pero antes de que este diera contra mi cabeza fui repentinamente atraída por los brazos de Mikey y debido a ello fue él quien recibió aquel impacto.
—¿Matar a tus enemigos? —preguntaba Mikey sin soltarme—. ¿Es por eso por lo que mataste a mi hermano?
Mikey abrazó con fuerza mi cuerpo, y entonces de un solo movimiento hizo que Kazutora se derrumbara en el suelo ya derrotado.
—¿Por qué? —susurré confundida—. ¿Por qué me has ayudado?
—¿Por qué no hacerlo? —mencionó y al mirarlo pude verle formar una sonrisa que hizo que mi pecho se agitara. No obstante, la sonrisa que mantenía su rostro comenzó poco a poco a desaparecer y se debía a que comenzó a perder la conciencia debido a los golpes que recibió por Kazutora.
Debido a que anteriormente él me había abrazado para protegerme me encontraba demasiado cerca de él y debido a ello su cuerpo ahora mismo reposaba en el mío. Normalmente cuando alguien del sexo opuesto que no fuera Hanma me tocaba de improvisto reaccionaba de una manera brusca y me sentía asqueada, pero por alguna razón cuando Mikey o incluso Baji lo hacían no sentía aquella repulsión.
—¡Acabemos con Mikey!
Las palabras de Chouji, quien también era un capitán de Valhalla, captaron por completo mi atención, y entonces al mirar en su dirección he podido ver como los demás miembros de Valhalla se acercaban con rapidez hasta donde Mikey se encontraba.
—¡Espera, Chouji! —exclamé cuando lo vi saltar entre los autos—. ¡Yo sigo aquí!
Pero eso a él no le importó y se acercó peligrosamente a nosotros por lo que me preparé para al menos intentar detener su golpe, pero afortunadamente no he tenido que hacer nada, ya que otra persona se había encargado de alejarlo y al mirar bien de quien se trataba mi cuerpo se paralizó por completo.
—Tokyo Manji Gang, líder del tercer escuadrón. Kisaki Tetta —mencionó él mientras se colocaba frente a nosotros—. ¡Mi escuadrón protegerá al líder de nuestra pandilla y retendrá al otro capitán de Valhalla!
Mi nuevo hermano me miró con una sonrisa satisfactoria que me hizo perturbar e incluso todo mi cuerpo comenzó a temblar, ya que en la situación en la que me encontraba era muy mala porque si él le contaba algo a mi padre sobre esto estaba segura de que no saldría con unas pocas golpizas en mi cuerpo o rostro, y aunque yo le mencionara que su nuevo hijo también era parte de una pandilla era muy poco probable que me creyera e incluso llegaría a golpearme por supuestamente estar diciendo mentiras, así que estaba completamente perdida.
—La mirada que tienes en este momento demuestra que sabes muy bien que estás jodido, ¿no? —dijo mirándome fijamente sin quitar esa satisfacción en su rostro—. Tranquilo. No te sucederá nada mientras sigas todo lo que yo diga.
Mi nuevo hermano comenzó a acercar su mano a mi rostro, pero antes de que lo tocara fue fuertemente apartado por un golpe de Baji.
—No te dejaré tocarlo —dijo Baji seriamente.
—Baji...
—Te dije que contaras conmigo para golpear a quienes te molestan —mencionó mientras me miraba brevemente con una pequeña sonrisa para luego dirigir su mirada hacia donde fue lanzado mi nuevo hermano—. Aplastaré tu puta cara, Kisaki.
En el momento en que Baji me dio la espalda tuve un pequeño recuerdo de alguien más pequeño protegiéndome de la misma forma en la que él lo hacía y eso me hizo doler brevemente la cabeza.
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