—Disculpe, me puede dar un 1 kilo de manzanas, por favor.— Pidió amable y formalmente aquel peli-rosa.

—¿Huh?— Don Toño alzó la vista topándose con los ojos (cerrados) de aquel señor, se veía alto, bien peinado, con un traje y se veía de buen vivir... Todo lo contrario a él, él era algo pobre y nunca podría vestirse de esa manera.

«Bum, bum»

De repente, el frutero sintió como su corazón bombeaba rápidamente ¿Por qué? ¿Por qué se aceleró en ese preciso momento?

—¿Disculpe?— Jeffrey empezó a mover una mano en frente de aquel bigotudo, de la nada se había perdido en las nubes.

«Bum bum»

—¿A-Ah?— El castaño por fin recuperó algo de consciencia y se volvió a topar con la mirada de su cliente. —¡A-Ah! ¡D-Disculpe! En seguida están esas manzanas frescas— Se notaba el nerviosismo de él de orbes azules y en un par de movimientos rápidos y torpes, empezó a empaquetar las manzanas. —A-Aquí tiene— Temeroso le entrego la bolsa y tomó el billete a cambio.

—Gracias— Y sin más ese hombre algo formal, se alejo de ese puesto, mientras que el castaño observaba como se iba.

«Bum bum»

¿Qué demonios le pasó? ¿Por qué actuó de esa manera? ¿Por qué un hombre tan guapo y rico compraría en un puesto sucio como el de él?

¿Por qué solo escuchó el sonido de su corazón?

-ImJeffrey-