£ Un camino hacia la verdad £
Narra Shadow
Luego de haberme teletransportado, aparecí en el Puente de la Unión.
En donde hace 200 años, Athens y Antorchas eran una sola nación, en donde no habían diferencias entre el color de la piel, por su carácter, por su vestimenta... Por su sangre. Habían declarado que este Puente debía de ser destruido, pero Antorchas peleó por el, quería conservar lo que un día habían llegado a ser para luego saber que vivimos en destierro. Buscando municiones para nosotros y para nuestros hijos mientras que ellos vivían en el tope de las riquezas, tirandonos solo migajas de lo que comen. Aún no puedo creer que Rose provenga de ese mundo, todo lo contrario a mí, sabiendo que la pueden asesinar por estar enamorada de un antorniano.
Salí de mis pensamientos al llegar a la emblema del Puente de la Unión:
-- Athens:
Es un honor tener a semejante nación de nuestro lado, por primera vez somos un planeta, sin criticas sin señalamientos. Les damos las gracias por haber aceptado nuestros negocios. Con el paso de los años se darán de cuenta que podemos ser una nación llena de paz, de amor.
Estamos felices de que podamos vivir sin guerra y sin derramamiento de sangre. Aqui les traemos un presente por nuestros avance.
Att.
Los reyes de Athens --
¿Qué fue lo que paso para que esa unión se fuera a la mierda? ¿Fuimos nosotros o solamente fueron ellos que nos quisieron culpar de algo que nosotros eramos inocentes?
Pero lo mas que me llamo la atención fue el dibujo de mi marca unido con la rosa de los Rose. ¿Qué tengo que ver yo con eso? Sentí un quemazón en mi cadera al pasar mis dedos por esa zona del emblema. Era idéntica, del mismo color, forma...
-Desde antes estaba predicho.-
Me voltee para ver algo, pero solamente se escuchaba el ruido de la brisa fría de la tormenta de nieve que siempre habia es este lugar. Nadie lo visitaba por ello, por ello este Puente estaba demacrado, siendo el olvido de lo que una vez llego a ser. Un lugar que identifica a Rose. El viento se llevaba consigo la nieve haciéndolo hacer piruetas en el aire, impactándola contra las flores blancas y sus hojas verdes. El sonido del agua del río chocar contras las rocas y las estructuras del puente.
-Creo que he hecho suficiente aqui.- susurre mirando a mi alrededor, pero en eso unos rayos de luz potentes me dieron en los ojos. Provenían del río.
Saque la pistola que tenia en mi muslo mientras me acercaba al río. Me arodille y los rayos volvieron a impactar mis ojos. Me los tape con la mano y logré persevir un collar con una rosa de cristal junto a un copo de nieve.
-Creo que la historia tiene otra verdad.- dije con una sonrisa de lado mientras sacaba el collar del río.
£...La rosa de los Rose...£
Narra Amy
Todos se me quedaron mirando: algunos sin expresión otros sonrientes y otros con decepción.
-¿Qué acabas de decir?- preguntó Sonic mientras se paraba del sofá y camianaba amenazantemente hacia mí.
-Lo que escuchaste porque no lo volvere a repetir.- dije molesta.
En eso Mephiles se cruzo en su camino cubriendome con su cuerpo similar al de Shadow.
-Apartate.- le gruñó a Sonic.
-O si no, ¿qué?- pregunto burlón.
-Mephiles, calmate.- le dijo Cream llegando a su lado para entrelazar su mano con la de él.
Siempre los admire. No tenían miedo de demostrar al mundo cuanto amor se sentian en uno por el otro. Todos miraron atónitos sus manos entrelazadas.
-¿C-Cream?- tartamudeo el zorrito de dos colas pálido. -¿Ustedes están saliendo?-
-Si, ¿no es obvio?- preguntó mientras pasaba su otra mano por el brazo de Meph. -Como tu lo haces con Cosmo y yo no te he reprochado nada.-
Sonreí a la misma vez que todas las miradas se dirigían hacia mí.
-Tu sabías de esto, ¿no?- me encaró Knuckles.
Cuando estaba a punto de contestar, una voz se me adelanto.
-Y no simplemente ella.-
Me voltee y vi a Vainilla que miraba con una sonrisa a la pareja.
-Sabia que terminarías con él, mi niña.- dijo para luego fijar su mirada en mí. -Y tu...- me señaló. -No creas que no me enteré de lo que paso anoche en su casa.-
Mis mejillas se tiñeron de un color carmesí mientras bajaba mi mirada hacia el suelo.
Sonic apreto su mandíbula y sus puños para luego salir dando un portazo. Silver y Blaze sonrieron para luego desaparecer, Edward comenzo a llorar llamando la atención de sus padres y Sally me miraba fijamente.
Narra Shadow
Me teletransporte con el collar colgando de mi cuello. Por nada puedo perderlo. En eso me tope con Noiz quien relincho al verme.
-Hola, amigo.- le dijo cuando llego a donde mí. Bajo y subio la cabeza en forma de saludo.
Me coloque la capucha negra.
-Necesito que disimules que no estoy aqui.- dije mientras lo agarraba por el hocico. -Vete con Drink y Lorenz.-
Se dio la vuelta para luego perderse entre la multitud.
Tengo cosas que descubrir de ambas familias, pero pirncipalmente de la de Rose.
----****----
Llegue a una casa abandonada en el bosque. No se, pero se me hacia lo bastante familiar como si me hubiera visto nacer. Derive la puerta ya que estaba cerrada con llave, el polvo me saludo en toda aquella soledad.
La cabeza me comenzo a doler por lo que me la agarre y cai de rodilla en el suelo.
* Flaschback *
Estaba corriendo de la mano de una chica, de Rose, por el bosque. Eramos niños y estábamos huyendo de unos caballeros de Antorchas. Apenas teníamos unos 4 y 5 años.
-¡No lo lograremos, Lance!- gritó con su voz quebrada.
Se escuchaba el galopar de los caballos junto con nuestras pisadas en la nieve. Nuestras manos estaban entrelazadas, esquivabamos árboles. Rose tropezó con una roca, cayendo al piso y yo junto a ella.
-¡Rose!- grité a la misma vez que llegaba a donde ella y la rodeaba con mis brazos.
Apricionandola entre mis piernas mientras yo estaba arodillado al lado de ella. Ella estaba sentada sobre sus piernas llorando, estaba asustada. Los caballeros no tardaron en rodearnos con sus caballos y risas maniaticas nos embriagaron.
-Vaya, vaya... La princesa y un antorniano. Que linda traición, princesa.- dijo uno detuviendose frente a nosotros.
Gruñi apretándola contra mí. Se escondió entre mi vello del pecho a la misma vez que un filo de espada acariciaba mi espalda hasta mi cadera.
-Fred, él es uno de ellos.- susurró el que estaba detrás de mí.
-¿Qué? Pero si supone que están exterminados.- gruñó fulminandome con la mirada.
-Parece que uno se te escapó.- se burlo el otro.
-Matalo.-
-¡No!- gritó Rose reguindandose de mis brazos y yo de su cintura.
Una brisa helada comenzo a aropar el lugar calando los huesos de los caballeros hasta volver su piel azul. Extrañamente a mi no afectaba ni a Rose quien ya no sollozaba sino tenia su mirada perdida en el suelo. Acaricie su cabello rosado para que ella mirara mis ojos rubíes fijamente. Mi pecho se hincho de aire profundamente mientras posaba una mano en su mejilla y acariciaba levemente su mejilla con mi pulgar.
-Regresemos a casa, preciosa.- susurré.
Ella asintió para levantarse. Comencé a caminar sin voltearme a ver si me seguía o no cuando senti un braoz en mi cintura y un cuerpo que se habia colado debajo de mi brazo, junto a mi costado. Baje la mirada y vi el rostro de Rose enterrado en mi pecho. Pase un brazo por encima de sus hombros.
* Fin del Flashback *
¿Desde antes ella tenia esos poderes?
Me levante del suelo y mire a mi alrededor. Habían telerañas en las esquinas de la casa, polvo sobre los sofás, mesas, estanterías, etc. Caminé hacia las escaleras para ir al segundo piso. Varias puertas me saludaron, pero una me llamo la atenció. Todas las demas eran blancas, pero esta era roja.
La abri y frente a mi aparecio un armario, un escritorio y varios cajones en las paredes, ¿qué rayos era este lugar?
Comencé a abrir los cajones primero y me tope con varios documentos de cuentas bancarias, trasacciones de dinero, compras, ventas y propiedades. Nada que me fuera de utilidad en estos momentos. Me encamine hacia el escritorio y habia más de lo mismo. Tire mi cabeza hacia atrás para suspirar profundamente y que un humo blanco lo contara cuando mi mirada se dirigió hacia las estanterías, ¿porqué no?
Comencé a buscar libro por libro hasta que me tope con una que tenia la rosa de los Rose, pero a la misma vez esta estaba dividida en dos. Una roja pasión y una blanca bajo el titulo de:
£ La rosa de los Rose £
Narra Amy
Estaba en el techo de mi casa admirando el atardecer cuando una presencia se poso junto a mí. Me voltee y logre ver los ojos verdes de Sonic quien me dio una leve sonrisa.
-¿Sola?- preguntó.
-¿No lo notas?- gruñi mientras volcaba mis ojos.
-Solo preguntaba, Ammes...- susurró un poco molesto.
En verdad eso no me importo, que se enojara, lo único que queria era que se fuera y me dejará con mi soledad. Extrañaba la mirada indiferente de Shadow, sus ojos rubíes gélidos... ¿Es tanto pedir que este en este instante junto a mí? Solo quiero aspirar su perfume masculino, estar entre sus brazos, sus mimos, sus leves caricias con su pulgar en mi mejilla que me mandaban escalofríos a todo mi cuerpo.
-¿Rose?-
No me habia dado de cuenta que Sonic llevaba minutos hablando conmigo y yo pérdida en mis pensamientos.
-¿Hu? ¿Qué decías?- le pregunté avergonzada por que me habia dado de cuenta que también habia pasado su mano enfrente de mis ojos.
Suspiro.
-Mañana es el cumpleaños de Cream...- comenzó. -Estamos pensando hacerle una fiesta sorpresa, pero no sabemos quien podría estar distrayendola mientras tanto ... ¿Te apuntas?-
Mire hacia al frente, es mi amiga, ¿porqué no hacerlo?
-Me apunto.-
-¡Oh right!- gritó Sonic emocionado.
Volque los ojos y seguí contemplando el paisaje cuando...
-¡Amelia!- gritó la voz de Sonia.
Me incline y la vi abajo mirándome con una ceja enarcada. Baje del techo para pararme al lado de ella.
-No es lo que crees.- me apresure a decir.
-¿No?- inquirió mientras se cruzaba de brazos. -En estos momentos tienes a dos erizo completamente enemigos que se están peleando por ti y ... ¿Tu decides irte con el imbécil que te rompió el corazón? ¿Quieres que te lo vuelva a romper por segunda vez?-
-No...- dije un poco molesta. -Estas viendo las cosas como no son, Sonia. ¿Tu crees que yo me iria detrás de tu hermano luego de haberme acostado con Shad anoche?-
-¿Te acostaste con él?- preguntó emocionada mientras aplaudía varias veces.
Mis mejillas se tiñeron de un color carmesí al ver que habia soltado la lengua mas de lo que debia de haber hecho.
-Hable de más.- susurre.
-O sea que, ¿no se lo ibas a decir a tu hermana?- preguntó un poco dolida.
-Aún no era el momento para contarlo, Sonia.- le dije alzando la vista. -¿Imagínate que esa información se te escape a tu hermano? ¿Sabes como se pondrá?-
-¿De qué información están hablando?- preguntó una voz detrás de mí.
Uh oh...
Narra Shadow
Al sacar el libro otro se cayó, justamente el que estaba a su mano derecha.
Era un libro completamente blanco con diseños de flores, una tira junto a un candado aseguraba lo que sea que estaba escrito en su interior.
Lo cogí para darle la vuelta creyendo que habria algo detrás, pero estaban los mismos estanpados de flores. La cerradura del libro tenia la forma de una rosa y copo de nieve.
-Todo cuadrara ahora.- susurre para mi mismo.
£ La llave era el collar de la rosa £
Podría ser la parte de esa historia que todos ignoramos, creyendo que los Rose eran una simple familia, pero toda familia tiene sus secretos.
Estaba a punto de poner la rosa en la cerradura cuando se escucharon unos pasos en la casa. Los guarde en un bolso de lado que habia alli, lo cogí para luego sacar mi pistola y acercarme sigilosamente a la puerta entreabierta. Logre captar a un erizo negro con las puntas azules al igual que sus ojos. Tambien portaba un arma.
-Date prisa, Blinks, hay que borrar todo rastro de los Rose.- hablaron a través de su Walkie-Talkie.
-¿No entiendes? Aquí resientemente hubo una persona.-
Al juzgar por la manera en la que hablo, no le agradaba la misión. Dejo de presionar el botón y miro un punto fijo en la pared. Seguí su mirada y me tope con sangre en la pared.
-¿Aquí hubo una muerte, no?- preguntó sin apartar la mirada del lugar.
-Si.- fue lo único que dijo. -Ahora solo date prisa que no tenemos mucho tiempo, Loweyn no quiere que ella se entere de su pasado.-
¿Loweyn no es la reina de Antorchas?
En eso el erizo se volteo hacia el lugar en donde estaba escondido y no tarde en golpearlo con el mango del arma.
Cayo inconcsiente en el suelo.
----****----
Estaba sentado en una silla jugando con el arma mirando al erizo con la cabeza gacha amarrado en una silla.
Gruñio a lo cual deje de jugar con el arma.
-¿Qué quieres?- susurró.
-¿Porqué quieren borrar todo rastro de los Rose?- pregunté cortante.
-Esa información no pue...- cortó la oración al alzar su mirada y que se topara con la mia. -¿Lancelot? No estas muerto.- susurró.
-Aun no contestas a mi pregunta, niño.- dije.
-No soy un niño, tengo 17 años y ...- comenzó, pero lo corte.
-¿17? ¿No crees que eres muy joven para estar en este mundo de guerra y matanza?- me burle. -De seguro que no sabes ni manejar un arma.-
-¡Claro que se!- rugió.
-Eso no lo demostraste orita.- sonreí.
-¡Te estaba dando la espalda!- suspiró. -¿Qué necesitas? ¿En que puedo servirte?-
-Necesito saber porque están borrando todo rastro de los Rose.-
-¿En serio no sabes?- preguntó con los ojos como platos. -El trono de los antornianos corre peligro si ella va a Antorchas.-
-¿Y para que querrá una atheneana ir a Antorchas?-
-Por una promesa.- dijo mientras fruncia su ceño. -Una promesa a la misma reina. Por favor, no me mates.- suplico. -Puedo ayudarte, pero no me mates.-
-Vendrás conmigo.- sentencie mientras le quitaba las sogas. -Pero un movimiento en falso y despidete de este mundo.-
-Ok, ok...- dijo en un susurró.
Un nuevo aliado. Rose, aqui vamos a conocer tu verdadera historia.
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