CAPÍTULO CINCUENTA Y DOS
pov's baek narae

Domingo por la tarde, el aire acondicionado de la cafetería no puede evitar que siga acalorada, me suele suceder cuando estoy ansiosa, es como si transpirara el doble de lo normal. Los días después a mi pelea con Lima fui a la escuela, extrañamente mi novio no me buscaba, ni yo a él, tampoco recibimos mensajes del otro, escuché por parte de JungYeon que se encuentra ocupado en estudiar un libro que le recomendó su padre, a su vez, trata de contactarse con su mamá. Se siente extraño porque desde que somos pareja no hemos pasado mucho tiempo separados.

Así inició con JungKook.

—Creo que quiere volver a acercarse a TaeHyung. —dijo Yui.

Nos encontramos en la cafetería donde su novio trabaja como mesero, él es muy amable, nos invitó la comida. En fin, las chicas me volvieron a mostrar esa foto donde mi novio y hermana salen del salón juntos, dicen que se sorprendieron porque Lima parecía no querer hablarle, hasta ese día. ¿Qué cambió? ¿Tanta es su necesidad por verme mal?

—¡No lo permitas, date a respetar! —MiYoon frunció su ceño masticando la cereza del batido, yo suspiré.

—¿Qué debo hacer?

—Terminarle.

—Jian, no. —negó la castaña— Lo que debe hacer es tener a TaeHyung comiendo de su mano, tan pero tan loco por tí —me señaló con sus uñas esculpidas en un largo irreal— que no se le pase ni de cerca estar con otra mujer.

Yui es sabía en cuanto a los romances, yo asentí atenta.

—Un té de manzana para la chica más linda del lugar.

La charla fue interrumpida por JiMin, quien apareció con una segunda taza caliente de té para su amada, la colocó en la mesa y besó su frente. Es dulce desde el primer día que llevan saliendo, se conocieron cuando era pareja de la amiga de Lima, y la relación floreció meses después de aquel encuentro. Entre risillas nerviosas se ven, y él apenas se concentra en el trabajo por querer observarla más. Ah, quisiera… ¡No, no debo pensar así! TaeHyung es tierno a su manera, es un increíble novio y lo amo. Mucho, demasiado.

—No sé cómo hacer todo eso que dices. —me da miedo generar el efecto contrario a lo que busco y perderlo 

—¡Es fácil! —exclamó— Teniendo sexo los chicos no pueden borrarte de la cabeza, debes ser una chica sucia.

Eso que dijo '... una chica sucia' me quedó palpitante en la cabeza hasta que nos despedimos para tomar caminos contrarios, cada una a su casa. Excepto que, cuando estuve en la estación de tren, no me subí. Le envíe un mensaje al rubio tratando de ganar su atención después de largos días necesitada de su voz: 'Quiero verte' escribí, pensé que tardaría en responder pero no fue así. 'Ven a casa' pidió. Si a Yui le va bien en su relación es porque es buena en ello, y yo debería esforzarme para ser igual.

Nerviosa salí de la estación y caminé en busca de un taxi, subiendo a uno di la dirección.

TaeHyung dijo que iba a respetar mis tiempos en nuestra vida sexual, creo que ya es ese tiempo, creo que quiero hacerlo. Toqué el timbre, y esperé cinco minutos. Apareció usando pijama, y me cedió el pasó al jardín delantero, no hubo más que un tenso e incómodo beso en la mejilla.

Lo haré.

— Chicas y chicos, no se sientan forzados a dar ese paso por presión social, o porque piensan que sino su pareja podría aburrirse de ustedes. Todo a su tiempo, y si no los respetan al esperar, ahí no es. Besos ^3^