CAPÍTULO TREINTA Y UNO
pov's baek narae

MiYoon sostiene mi mano con miedo a que, en un descuido, sea capaz de quebrarla. Reí por sus muecas.

—No me harás daño.

—Aún así… —ladea la cabeza— ¿Cómo pasó?

Podría decirles que fue culpa de mi hermana, la persona que más detestan, y hacerle una mala fama, peor a la actual. ¿Qué ganaría con eso? Me resigne luego de verla afligida anoche, con una enorme desesperación en sus ojos. Ella está sufriendo por dentro, Lima sigue siendo parte de mi familia, quiera o no, no puedo sacarla de un día a otro, debo convivir con ella, y la convivencia también se trata de cuidarla. Es cierto, se metió en mi relación, ¿Perdí algo? Nah, puede quedárselo, no lo necesito. Al final, su condena será verme feliz.

—Ah, me caí mientras dormía. Saben que soy torpe.

Jian carcajeo al lado de MiYoon, pero Yui no se tragaba lo dicho.

—Lima tiene una herida en su tobillo. —dijo— ¿También se cayó de la cama?

Baje la cabeza rendida, es imposible engañarlas. Hasta el momento no les he contado sobre JungKook y Lima, no les dije de sus engaños ni de todo el asunto con TaeHyung, creo que es hora de confesar.

—Peleamos, o más bien, hablamos en un tono fuerte.

—¿En serio? ¿Y se golpearon? —negué— Entonces cómo…

—Me empujó y el vaso cayó, el vidrio nos lastimó a ambas. Sé que no era su intención, ella no quería herirme. Estaba ebria.

—Narae —Yui suspiró—, debes frenarla, dile a tus padres.

—No, no quiero. Son lo único que tiene Lima, hacerla quedar mal frente a ellos sólo le causaría otro dolor, ¿Qué importa si me odia? Tengo mucha suerte en mi vida, estoy al lado de personas como ustedes, y puedo ser feliz sin verla caer.

El tiempo me lo enseñó, no necesito ver infeliz a Lima para yo ser feliz, las razones están a mi lado. Hay muchas personas que me quieren honestamente. Las chicas sonrieron, estaban aprendiendo a que soy imposible de comprender, no pueden cambiarme.

—Oh, y estuvo con JungKook. —large tal información sin medirlo.

—¡¿Qué?!

( … )

Las chicas tomaron esa información de una manera… un poco abrupta, pero fue suficiente para aclarar sus dudas de todo lo que había estado sucediendo en mi vida. Tras salir de la escuela, con el cielo oscureciendo, Yui dijo que su novio JiMin estaría en el karaoke con otros amigos suyos, y si queríamos acompañarlos. Al principio dudé, pues veamos, creo merecer descansar luego de estos meses locos, y me convencí de una cosa, divertirme con personas como Jian, MiYoon y Yui es mi descanso, un relajo a la mente.

En aquel lugar, me encuentro sentada entre un chico pelirrojo y otro menta, los dos ríen a carcajadas por como canta un moreno. Hay mucho alcohol, no me dejaron probar las cervezas por ser aún menor, Yui si bebió un poco a escondidas, su novio la tiene en los brazos.

Son muy lindos juntos. Ah… yo también hubiera deseado algo así.

Las horas pasan, MiYoon besó al moreno, Jian a un tal Hoseok, y JiMin a su amigo de cabello color menta, pero fue una apuesta de Yui. Cerca de las diez junto con las chicas nos despedimos para ir a casa.

—Adiós. —agite mi mano en su dirección, se iban por otro camino— ¡Las amo!

—¡Nosotras a tí! —rieron con emoción.