Unos meses atrás

Ese día TN quería hacer algo divertido con alguien, quien sea

Y tenía a la persona indicada, según el

...

Tocaba la puerta de aquella casa tradicional con un tono musical, Fuyumi abrió la puerta al reconocer aquel tono

-Hola TN, pasa pasa-

El chico paso y le entrego una caja de dulces a la mayor pues para el era una costumbre llevar un regalo a las casas que visitaba

-Hola Fuyumi ¿Cómo ha estado?-

-Bien, los niños me están matando pero es divertido de alguna forma-

-Ya lo creo-

-Oh, cierto, Shōto está en su habitación ¿Quieres pasar?-

-Solo si usted me da permiso-

TN tenía muy inculcado eso de tratar a las personas mayores que el de usted y es algo que le fascinaba a muchos

-No hay problema, anda pasa, estás en tu casa-

-Gracias Fuyumi-

El chico camino por aquel largo pasillo hasta que llegó a la última puerta, aquella puerta era de la habitación de su novio

“Espero que quiera” pensó con ilusión

-Ne ne Shōto- llamo entrando de golpe

Al entrar a la habitación su mirada se paseo por ella, estaba algo desordenada lo cual era algo impropio de el bicolor

Ropa tirada por todo el cuarto, libros y papeles regados en su escritorio, su uniforme estaba esparcido por toda la habitación, unos pares de zapatos estaban por todo el lugar, su teléfono estaba en el suelo y el bicolor con solo una camisa grande tirado en su cama durmiendo

-¿Que mierda?- susurro confundido

El bicolor seguía dormido, se acercó hasta el y observó que el chico tenía ojeras y una cara de cansancio puro; supuso que de nuevo estuvo excediendo se con el entrenamiento y por eso su habitación estaba así

-Debes de dejar de exigirte mucho, honey- dijo y le beso la mejilla

Por obvias razones no iba a dejar que su novio durmiera en esas condiciones así que comenzó a recoger toda la habitación

Primero comenzó a recoger toda la ropa tirada y la deposito en el cesto, la ropa que estaba limpia la dobló y la guardo en sus respectivos cajones, los zapatos los ordenó todos en el zapatero y los papeles y libros los ordenó de modo que ninguno se perdiera, recogió su teléfono y lo puso en el mueble de noche

Se sentó en la silla del escritorio y de paso le hizo una que otra tarea de la Yuei para que no estuviera tan estresado

En todo ese tiempo se tardó como media hora

-Oh por dios, ya hasta me dio sueño- dijo el moreno y se estiró

Se levanto y estiró, varios huesos le tronaron dándole una satisfacción tremenda pero aún así el sueño le ganaba; caminó hasta la cama del bicolor y se sentó

“Solo serán unos minutos” pensó y soltó un bostezó acostándose dándole la espalda al bicolor

¿Quién diría que al cerrar sus ojos no serían unos minutos?

...

Ya era de noche y Shōto estaba muy cómodo en la posición que estaba, quería abrir los ojos pero a la vez no; hasta que estuvo casi en sus cinco sentidos pues sintió un peso en su cintura

Abrió un poco sus ojos tratando de enfocar su vista y lo primero que captó fue un pecho con una camisa roja, subió su mirada y aprecio la cara de su novio durmiendo

Tan pacifica y bella

Pero su pregunta principal era ¿Por qué estaba ahí? Que el recordara cayó noqueado después de haberse excedido con sus tareas, se dio la vuelta y su mirada paseo por su habitación

Todo estaba en orden y en su cabeza solo mostraba como TN limpiaba, se levantó y camino hasta su escritorio; observó sus tareas

Todo estaba resuelto, desde los problemas de geometría hasta la historia de Japón; volteo a ver a su pareja y este seguía durmiendo

-Aún tengo algo de sueño- susurro

Se tallo su ojo izquierdo y camino hasta la cama, se recostó y apoyo en el pecho de TN, este solo lo abrazo con fuerza y volvieron a dormir juntos