𝟬𝟴: el día del esplendoroso Chuseok.
🌷
capítulo ocho
Le conté a Jin todo al respecto, y estuvo totalmente de acuerdo. Pero la pequeña mierda se rio de mí como loco cuando me quedé sin palabras tratando de ensayar.
Cayó de espaldas en la cama, riéndose, y amenacé con ahogarlo con su almohada.
─ Solo por eso, tienes que venir conmigo. ─Le fruncí el ceño.
─ Me gustaría, Gi ─entonces Jin se puso serio─. Aunque, no tengo nada que ponerme para el servicio de la iglesia.
─ Oh, mierda. ─De repente me di cuenta de algo─. Yo tampoco.
SeokJin se rio de nuevo.
─ Tal vez JungKook tenga algo que te preste. Más o menos son del mismo tamaño, ¿verdad?
Lo éramos, más o menos. JungKook tenía un poco más de músculos que yo y probablemente tenía unos buenos centímetros más. Era irritante teniendo en cuenta que yo era el mayor pero actuaba como si no fuera importante, después de todo debía mantener mi orgullo. Por otro lado, estaba seguro de accedería a prestarme algo.
Entonces, con ese problema resuelto, volví a Jin.
─ ¿Vendrás?
─ Tengo mi último tratamiento de esta ronda el día anterior, y esta vez han chocado fuerte por alguna razón. ─Se puso serio otra vez─. Pero realmente me gustaría.
─ Veamos cómo te sientes entonces ─sugerí.
─ Suena bien. —Sonrió con esa hermosa sonrisa suya y sus ojos avellana brillaron─. Aunque todavía no tengo nada que ponerme.
Prometí que encontraría algo, no importaba qué, para que pudiera venir conmigo si se sentía con ganas.
(...)
El domingo llegó demasiado pronto para mi gusto. JungKook sí me prestó algo de ropa elegante. No se vestían con traje ni nada en esta iglesia ─bueno, los jóvenes no─. Pero aun así no poseía nada que fuera lo suficientemente bueno para usar allí. La mayoría de mi ropa eran camisetas y jeans.
JungKook incluso tenía alguna ropa aceptable que era muy pequeña para él y que le quedaría perfectamente a Jin... o al menos bastante bien.
Llamé a Jin, si todavía iba a intentar venir, pero su enfermera llamó por teléfono y dijo que no. Había vomitado toda la mañana y su médico insistió en que quería que se quedara en la cama por un día.
Así que, estaba vestido, con el pelo peinado ─en lugar del estilo desordenado que solía tener─ y estaba sentado en la iglesia. Si eso no estaba fuera de lugar a lo grande, entonces no sabía qué. Al poco tiempo, me presentaron... como "el hermano de JungKook"... y no lo odié.
Entonces me paré en el podio. Mi boca se secó por completo. Intenté hablar y no salió nada.
─ Ah... ─chillé y comencé de nuevo─. Creo que soy alérgico a hablar en público.
Todos se rieron... lo que estoy seguro que se suponía que me tranquilizaría, pero realmente no fue así.
─ Quería contarles acerca de un... no sé cómo llamarlo... un programa que estamos tratando de armar para los chicos del Hospital de Niños. ─Empecé de nuevo, y todos parecieron estar prestando atención. Les conté sobre la idea de alimentar a los niños y sus familias y la necesidad de una cantidad mayor de carne de cerdo y voluntarios. ─No es que los voluntarios vayan a ser la carne de cerdo... quiero decir... supongo que las personas que no quieran ayudar serán la carne... ─Tragué saliva ─. Oh, mier... es decir... es solo que realmente soy malo en esto. Y si me conocieran, sabrían que no hago nada en lo que creo que soy malo. Prefiero no intentarlo a tener que intentarlo y admitir que fallé. ─No estaba seguro de por qué les estaba contando eso a todos estos desconocidos. No era algo que habría admitido en voz alta antes. Pero, en este punto, las palabras salían de mi boca sin consultar primero a mi cerebro.─ Pero esto es lo bastante importante como para intentarlo de todos modos. Y nada es importante para mí... por lo general... pero esto. ─De alguna manera, de hecho, me estaba entusiasmando con todo esto.
─ Deberían ver a estos niños. Algunos de ellos están tan quemados que ni siquiera se puede decir que son niños. Algunos están luchando contra el cáncer y lo han estado haciendo durante toda su vida. Algunos están en sillas de ruedas con trastornos neurológicos severos, algunos están imposibilitados de hablar... tienen que decir "sí" o "no" con los ojos y tienes que hacer veinte preguntas solo para saber qué libro quieren que leas. Si alguien, alguna vez tuvo el derecho de hacer callar a todos y decirle al mundo que se vaya al infierno y se jod... uh... y decirles lo que pueden hacer con sus vidas... son estos niños. Pero no lo hacen. Aman la vida. Algunos de ellos tienen cicatrices... tanto por dentro como por fuera... y ha sido una batalla dura, pero siguen luchando. Ninguno de ellos se ha dado por vencido. Yo estaría aterrorizado debajo de mis sabanas en la oscuridad, pero estos niños no.
Estaba descubriendo que no era difícil hablar de "mis" niños.
─ Y Jin... mi mejor amigo... se está muriendo de cáncer. Algunos días ni siquiera puede salir de la cama. Pero la mayoría de los días... días en que la mayor parte de nosotros aún estaría en la cama... se levanta y se pone este ridículo atuendo de payaso y va a animar a los otros niños enfermos.
─ Todo este asunto fue su idea, realmente. Bueno, yo lo mencioné, pero él la hizo correr. Solo quería Songpyeon y carne de cerdo para los niños y sus familias en un día en que todos los demás tenían eso. ¿Quién querría el Songpyeon de una cafetería de hospital para el Chuseok? Pero Jin dijo "no, Gi, podemos hacerlo mejor que eso". ─No pude evitar reírme, recordando su entusiasmo─. Quiere hacer un pequeño carnaval o algo por el estilo antes del almuerzo. Pintar caras, juegos de interior... realmente cualquier cosa en la que podamos poner nuestras manos. Pero entre todo eso, y el hecho de que vamos a tratar de sacar a todos los niños y sus familias de tres pabellones distintos, a una cafetería mal equipada para tanta gente... y luego servir el almuerzo mientras ponemos a tanta gente en línea, al estilo cafetería, que es como el lugar funciona generalmente... sin mencionar la instalación de los juegos y algunas mesas que sin duda tendrán que esparcirse en el vestíbulo. Bueno, como pueden ver, realmente vamos a necesitar voluntarios. Entiendo que es un día para la familia, y no espero que muchos de ustedes puedan presentarse. Pero, si pueden... si no están ocupados ese día con su propia familia... por favor vengan a pasar el Chuseok con mi familia adoptiva. En eso se han convertido estos niños para mí.
De hecho, me estaba ahogando un poco, así que decidí que casi había terminado.
─ De todos modos, si descubren que pueden, nos reuniremos en el vestíbulo del Hospital de Niños a las 11:30 para tratar de preparar todo y esperamos tener las cosas listas a la 1:30. Por cierto, vamos a necesitar ayuda para que todos los niños estén abajo. Planeamos entretenerlos... de alguna manera... hasta la comida a las dos. —No pude pensar en nada más que decir sin repetirme—. Sí... bueno. Gracias por permitirme hablar hoy. Incluso si nadie puede hacerlo, agradezco al pastor que me diera la oportunidad de intentarlo.
Me alejé del micrófono y volví a los asientos en donde estaban sentados JungKook y el grupo de jóvenes... donde había estado sentado. Todos estaban aplaudiendo, como si realmente me hubieran escuchado, por lo menos... o tan solo estuvieran de acuerdo con los tres o cuatro que sí lo habían hecho. No estoy seguro. Pero estaban aplaudiendo de todos modos.
─ Que alguien consiga un desfibrilador. —Principalmente estaba hablando con JungKook—. Creo que voy a tener un paro cardíaco por mi alergia a hablar en público.
Toda la sección del grupo juvenil estalló en carcajadas, y el resto de la congregación pareció perplejo. El Pastor Joshua me había pasado de camino al podio mientras decía eso, así que lo compartió con el resto de la congregación. Por supuesto que sí. Fue vergonzoso, así que tenía que ser compartido.
Sin embargo, de hecho, la congregación pareció pensar que fue gracioso. Él esperó hasta que la risa se calmó y repitió el momento y el lugar para reunirse y qué tipo de ayuda necesitábamos, y les dijo a los padres del grupo de jóvenes que esta era una experiencia de misión oficial para ellos, y que se reunirían en la iglesia y los conduciría juntos.
El resto del día fue borroso. Todos quisieron hablar conmigo después del servicio. No dije mucho... solo gracias, etc. Y repetí lo que ya había dicho.
Luego, volví a casa con JungKook y me quité el traje lo antes posible. Yunho gruñó. Juro que en realidad gruñó cuando pasamos junto a él de camino a nuestras habitaciones.
JungKook entró a mi habitación y hablamos de todo por un rato. No recordaba la última vez que había hablado con él. Pensé que era muy posible que nunca hubiera pasado antes... o al menos no en mucho, mucho tiempo.
(...)
Tuvimos un par de semanas para planear el gran "asunto" del esplendoroso Chuseok como lo llamó SeokJin.
La iglesia de JungKook donó todos la carne de cerdo posible, y supimos que recibiríamos ayuda de los parroquianos, pero no estábamos seguros del número.
Mientras tanto, la cosa pareció estar fuera de control. Entregamos volantes a todos los niños y se los enviamos por correo a los padres. Olvidé pedir la ayuda de voluntarios para esa parte. ¿Rellenar todos esos sobres? No fue divertido. Pero, Jin y yo nos hicimos cargo de eso, y conseguimos ayuda de algunos de los niños mayores. A ellos les encantó. Así que funcionó bien.
Muy pronto, el verdadero día del Chuseok llegó.
Yunho gruñó de nuevo cuando nos fuimos. Hablo en serio, si el tipo no dejaba de hacer eso, alguien iría a buscarlo y lo llevaría a una jaula en el zoológico. Pero no me importó lo enojado que estaba. Incluso a JungKook no pareció importarle. Yunho había amenazado con quitarle las llaves del coche a JungKook para ese día y no dejarnos ir, pero JungKook simplemente le recordó que todo el grupo juvenil iba a ir, y que podían llevarnos.
Pensé que le iba a dar un derrame cerebral a Yunho, pero de hecho no pudo hacer nada para detenernos sin parecer un imbécil aún más grande de lo que realmente era.
JungKook y yo fuimos temprano para pasar el rato con Jin y bajamos al lobby a las 11:15. Lo que vi fue increíble. Juro que todo el vestíbulo estaba lleno de gente y que se estaba escurriendo más todo el tiempo. Muchos habían traído juegos de interior para los niños... había un juego de Yutnori* puesto en una mesa de uno de los pasillos. Y me sentí como un estúpido al preguntarle a SeokJin qué diablos era el Yutnori.
─ Oh, Gi, es un juego tradicional, ¿cómo que nunca lo has jugado? ─preguntó con voz burlona. Fruncí el ceño mientras hacía un mohín. No era mi culpa que los días festivos pasados me encerrara en mi habitación o solo huyera de los eventos familiares. ─Bueno, solo tiras los cuatro dados que ves ahí y nueves tu ficha de acuerdo al número que salió ─fue su simple respuesta mientras aguantaba la risa.
Definitivamente hoy se había comido otro payaso.
Había una pequeña piscina de plástico sobre una mesa y la gente estaba preguntando dónde podían conseguir agua. Mi cara estaba sin duda llena de confusión, y JungKook se rio entre dientes.
Se acercó a mí y me explicó: —Necesitan llenarla, pusieron patos de juguete adentro y tienen números en la parte de abajo, los niños recogen un pato y obtienen cualquier premio asociado con ese número.
Y eso atrajo mi atención a los premios. Habían traído premios para cada una de las actividades. Jin y yo habíamos pensando en pintura de cara y páginas para colorear... y sin premios. Ellos también habían organizado eso, pero las páginas para pintar iban a entrar en un concurso de colorear y habría premios para el primero, segundo y tercero de cada grupo por edad.
Había juguetes que iban a regalar como premios en la rifa de los boletos de entrada. Juguetes bonitos... y para nada baratos. No tenía ni idea de dónde venía el dinero para todo esto. JungKook dijo que la iglesia ya tenía todos los juegos y demás porque ellos organizaban ferias para los niños todo el tiempo, pero que no estaba seguro de dónde en verdad salieron los premios y los juguetes.
Habían traído cerdos de peluche para repartir a cada niño. Había cajas y cajas de esas cosas. Esos pequeños cerdos gorditos y con mucho relleno que podías apretar fuertemente... que los niños adorarían totalmente, estaba seguro de eso. También habían dejado espacio para mi mesa y caballete, así que todavía iba a dibujar a los niños, pero SeokJin parecía decepcionado. Él había querido pintar caras, pero ya habían instalado un puesto. De ninguna maldita manera iba a permitir que estuviera ni un poquito triste cuando su entusiasmo había alentado una participación tan exitosa.
Marché a la mesa donde estaban todas las pinturas de cara y dos adolescentes sentadas charlando.
─ Hola, disculpen ─dije, y se rieron─, Jin es nuestro pintor de cara principal. ¿Hay espacio para él en esta mesa, o querrían que instalara su mesa en una sala diferente? Una especie de dividir y ver quién es el mejor. ─¿Y cuándo diablos yo me había vuelto tan diplomático?
Una chica se rio de nuevo, pero la otra preguntó:
─ ¿Él es el amigo del que hablabas ese domingo? ─Cuando dije "sí", ella sacó una silla y le dijo a Jin que se sentara—. He oído que haces shows de payasos todo el tiempo. —Era una pregunta estúpida porque SeokJin ya estaba disfrazado de payaso. Pero continuó—. Me encantan los payasos.
Empecé a irme ya que las chicas estaban volviendo loco a Jin con su charla. Sus ojos suplicaban: "Ayuda", pero pensé que me las debía de todas las veces que me llamó "carne fresca".
Venganza, dulce venganza, lindo Jin.
*Yutnori: es un juego tradicional coreano que consiste en lanzar los "dados", que son cuatro palos de madera con forma de media luna, y mover las piezas de acuerdo al número indicado. En general se juega entre familia durante las festividades tradicionales.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top