"Hermano ahora hacia a dónde vamos", pregunto Macki mientras analizaba unos documentos.

"Es una parada especial, no la encontrarás en la lista, puesto que yo mismo me encargue de hacer los últimos arreglos", respondió Elec mientras observaba el mapa de navegación.

La chica sentía que algo no estaba llendo bien, pero optó por ser paciente, dado que ya había infortunado a su hermano en varias ocasiones y era mejor llevar las cosas en calma.

Los días pasaron y la nave había aterrizado, Macki se encontraba impaciente en su corazón sentía que algo no andaba bien y cuando la compuerta se abrió, confirmo sus sospechas.

Ciudades arrasadas, pilas de cadáveres y naves despegando de regreso a casa, podía escuchar como la carne ardía en el fuego, pero lo que más le impacto fue reconocer el planeta donde estaba, el planeta cereal.

"Genial, parece que ya mataron a todos los cerealianos y namekusei", dijo Elec mientras observaba el caos y la destrucción dejada por los soldados de frezzer.

"Contacta a los shuga y comienza la venta del planeta", ordenó Elec a su hermano, que rápidamente siguió sus indicaciones.

"De seguro podremos venderlo por 100 mil millones, ah y porfavor solo separa el 10% para frezzer para que no nos moleste", agrego Elec, mientras tanto Macki se encontraba preocupada, un sentimiento de remordimiento la invadía.

"Y no crees que halla sobrevivido alguno hermano", pregunto Macki, ella sabía que incluso si se salvaban los iban a matar tarde o temprano, pero solo era el efecto secundario de la culpa, el querer escuchar una buena noticia.

"Ja no lo creo, esas bestias pueden ser barbaricas y sin inteligencia, pero siempre cumplen su trabajo como los perros falderos que son", al oír eso Macki perdió la esperanza de que halla sobrevivientes y pidió en su corazón que al menos Yix halla salvado a algunos.

Mientras tanto su hermano Elec comenzó una perorata de cómo tarde o temprano superarían a frezzer con inteligencia y riqueza, mientras que sus hermanos le seguían, por el contrario Macki que todo esté tiempo intento a hacer recapacitar a sus hermanos, se dió cuenta en ese preciso momento de que nunca podrá salvarlos.

Fue entonces que un grito se escuchó en la lejanía, era la voz de un niño y Macki sabía muy bien de quién se trataba, intento distraer a su hermano, pero este paso de ella y comenzó a dirigirse al lugar de donde había salido el ruido, ahí se encontraron con una curiosa escena, un encapuchado apuntando a cerealianos y a un namekusei.

"¿Quien eres tu?", Pregunto Elec intentando ver detrás de la capucha del sujeto misterioso.

"Acabo de encontrar a estos sobrevivientes, estaba a punto de asesinarlos", dijo el encapuchado, fue en ese momento que Elec entendió que era uno de los hombres de frezzer, pero su instinto le decía que había algo extraño en esta situación, puesto que si hubiera querido ya los hubiera acabado.

"Entonces puedes seguir, acabalos", sus palabras hicieron que la mujer y el namekusei se asustarán, pero los segundo corrían y nadie se movia, hasta que el encapuchado decidió hablar.

"Ahora que recuerdo este namekusei uso un extraño poder hace un rato, deberíamos investigarlo", en ese momento Macki vio que su hermano estaba sacando su arma por lo que decidió intervenir.

"Hermano puede que esa mujer también tenga habilidades especiales, podría ser de utilidad para nuestro clan", las palabras de Macki hicieron que su hermano se irritara y sacará su arma apuntando la al niño inconsciente en los brazos de los namekusei.

"Cuántos más piensan interferir ¡Macki Callate!, Entonces si ambos son útiles, el único inútil es ese niño", entonces Elec disparo escuchando como su hermana y la mujer gritaban, pero el disparo no llego al niño porque su madre se interpuso, recibiendo un disparo en el corazón y cayendo al suelo, fue en ese momento que sin esperar un segundo más el encapuchado cargo un gran poder para disparar en su dirección.

Tanto Macki cómo Gas se habian percatado de ello, pero ella prefirió no actuar no se sentía bien, así que dejó todo el trabajo a su hermano que creo una barrera para defenderlos.

"Tch, acaso no era un hombre de frezzer", pregunto Elec pero al ver que ninguno de sus hermanos respondía, decio dar una orden distinta.

"Problema tas problema, estoy perdiendo la paciencia, hay que eliminar a ese hombre, Gas tu te harás cargo, Ustedes dos vendrán conmigo a recibir a frezzer. Y Macki tendremos una conversación muy seria en la nave cuando esto termine, así que no me causes más problemas", a lo cual Macki solo pudo asentir mientras se alejaban de la batalla que estaba a punto de comenzar, Macki solo podía mirar de reojo y pedir perdón en su corazón.

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"Maldición, maldición, no siento ningún ki cerca, cuántos días estuve dormido, espero que no sea demasiado tarde", mientras tanto Yix se encontraba en su nave viajando a toda velocidad de regreso al planeta cereal, ya no le importaba las consecuencias, quería salvar a esa gente a como de lugar, pero el solo pensar que ya era tarde le causaba un enorme pesar.

Fue entonces que sintió dos presencias fuerte, a una la reconocío de inmediato y eras Gas y la otra era completamente desconocida pero no había que ser adivino para saber de quién se trataba, por lo que rápidamente se teletransporto arriba de ellos para no enterferir, por suerte para el nadie se dió cuenta de su presencia, aunque ya sabía la verdad, solo quería ver si talvez sus acciones habían torcido el destino aunque sea un poco, pero como el ya sabía, no era más fuerte que el destino.

En una zona alejada de la batalla encontró el cuerpo sin vida de Müesli, se acerco a ella lentamente, tenía una expresión serena en el rostro como si se hubiera quedado dormida, Yix se arrodilló frente a ella y sujeto su mano carente de todo calor corporal.

"Lo siento tanto, no debí dejar que esto pasara, perdóname", con lágrimas en sus ojos comprensión su error, ella no se encontraba en este mundo.

Fue entonces que entre lágrimas vio al cielo nocturno, dos esferas salieron disparadas a dos lugares distintos, eran las esferas del dragón, y por la mente de Yix paso una idea, sabía que no podía perder nada más este día, así que llenonsu corazón de valor y voló en la dirección a la que se fue la esfera.

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"Voy a ver qué es lo que está ocurriendo, ustedes dos encargense de los preparativos para recibir a frezzer", ordenó Elec mientras regresaba a la batalla, por otro lado Macki que observó las esferas dispersarse sabía que tenía una oportunidad, así que con una elaborada excusa fue volando en búsqueda de la esfera.

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Yix se encontraba persiguiendo la esfera a toda velocidad, pero mientras más se acercaba, está más aceleraba como si no quisiera que la agarraran, los minutos pasaban y la esfera no parecía detenerse.

"En serio te necesito", dijo Yix en un intento desesperado, pensando en que tal vez la esfera podría entenderlo.

Y como si respondiera a su petición la esfera comenzó a caer cayendo en una cueva, dónde Yix la recogió.

"Ahora debo volver", dijo Yix mientras localizaba el ki conocido más cercano, logrando encontrar a Monite.

En lo profundo del bosque se encontraba un namekusei entrando las heridas de un saiyajin, cuando una figura apareció de repente en el medio, el namekusei en un principio se asustó de que lo hubieran encontrado pero cuando vio de quién se trataba solo pudo gritar sorprendido.

"Yix, que haces aquí, tu te habías ido, porque regresaste, estás en peligro", dijo Monite mientras observaba atentamente a Yix que no mostraba ninguna reacción, hasta que de pronto comenzó a enfurecerse mientras balbuceaba: "Dónde diablos esta" "En que dirrección se fue".

En ese momento Monite miro la mano de Yix encontrando la esfera del dragón, cubierta por la sangre de el chico que seguía cerrando su puño con fuerza.

"Tu... Que piensas hacer", pregunto Monite mientras veía a Yix que no le respondia, fue entonces que decidió tomarlo del brazo y solo así este reaccionó, volteandolo a ver y cambiando su expresión a una sonrisa.

"Monite sigues vivo, me alegra, pero estoy buscando algo, me tengo que ir", Yix comenzó a prepararse para volar pero fue detenido por la voz de Monite.

"Quieres revivirlos ¿verdad?", En ese momento Yix se quedó paralizado, no le importaba si Monite descubría sus intenciones, lo que lo paralizaba era no querer escuchar la verdad.

"Estás esferas no pueden revivir personas al menos no esta gran cantidad de perdidas, agradezco tus intenciones muchacho, pero debes irte a casa, corres peligro aquí", esas eran las palabras que Yix no quería escuchar, cayendo de rodillas al suelo.

"No puede ser", sus esperanzas fueron destrozadas de nuevo, entonces nada de lo que había hecho tenía sentido.

Monite se acerco a Yix dándole un abrazo, este último gesto rompió el corazón de Yix que dejó salir sus verdaderos sentimientos.

"Yo quería salvarlos... Quería salvarla, soy un inútil", grito Yix mientras arrojaba la esfera al bosque donde otra figura que había escuchado todo salió a hablar.

"No eres inútil, eres una persona increíble, estoy segura que si usas esa mente brillante, algo se te ocurrirá", dijo la voz sorprendiendo a todos los presentes que giraron para ver cómo una señorita con el vestido desgarrado y con el cabello lleno de hojas, se acercaba lentamente con ambas esferas en sus manos.

"Tu que haces aqui", grito Monite asustado, pensando en que ya lo había encontrado y si tenían las esferas, significaba que todo estaba perdido.

Pero contrario a sus espectativas, Macki se acerco y se arrodilló frente a Yix, poniendo las esferas en sus manos y con una sonrisa le dijo: "salva a todos los que puedas", esas palabras hicieron que Yix reaccionará comprendiendo lo que estaba pasando.

"Macki, tu, porque, ah es verdad, al final si te trajeron aquí, lo siento pero ya no puedo pensar en nada, no tengo radar del dragón para ir a la tierra por las esferas, y no sé cuánto tiempo tardaría en encontrar el planeta namek, y solo tengo un año hasta que sus almas se-", en ese momento Yix pensó en algo que talvez si podía funcionar, dejando las esferas en el suelo, comenzó a pronunciar las palabras de invocación que había memorizado.

"Takkarapto tottorombo pupiritto Paro", dejando sorprendido a Monite, que no esperaba que Yix se memorizara las palabras con solo escucharlas una vez.

El dragón volvía a hacer acto de presencia, pero está vez debía ser rápido o serían encontrados por Elec.

Macki quien se encontraba viendo toda la escena se había quedado maravillada por la presencia del enorme dragón brillante, pero sabía que no tenían tiempo por lo que apresuró a Yix para que pudiera su deseo.

"Salva a todos lo que puedas", murmuró Yix mientras veía al dragón.

- Tu que me has vuelto a invocar, te concederé un deseo si está dentro de mis posibilidades -

"Puedes revivir a todos los asesinados por las fuerzas de frezzer en este planeta", hablo Yix, no perdía nada intentandolo, pero la respuesta fue la misma que la de Monite.

- No tengo el poder para revivir a la gran cantidad de personas que perdieron su vida el día de hoy, podría revivir solamente a una, si así lo deseas -

Estás palabras hicieron pensar a Yix en que talvez podría revivir a Müesli, pero sabía que eso no significaba salvar a todos los que pueda.

"Almas", murmuró Yix nuevamente.

"Sus almas, guarda sus almas en este medallón y yo me encargaré de revivirlas algún día", grito Yix mientras le enseñaba su medallón de plata al dragón.

- Eso no será posible, al ser almas pertenecen al mundo de los muertos, pero si deseas cumplir tu deseos una condición has de cumplir -

"Que clase de condición",. pregunto Yix mientras sentía como el ki de Elec se estaba acercando, pero no sé preocupo porque aún estaba lejos.

- para mantener sus almas en este mundo necesito de un ancla para lograr este objetivo, tu alma sería el ancla, mientras tú vivas el colgante tendrá las almas de los cerealianos y los namekusei, pero si tú mueres las almas serán liberadas, así mismo si el colgante de rompe tu vida también se irá con ellos -

Sin pensarlo dos veces, Yix acepto la condición del dragón dejando sorprendidos tanto a Monite y a Macki, pero no había tiempo para ellos, el dragón comenzó a recolectar las almas y poco comenzó a guardarlas en el medallón, pero cuando estaba a punto de terminar.

- he de informar que un alma se resiste, y solicita hablar contigo, no suelo hacer este tipo de cosas, pero su fuerte convicción me ha atraído, tiene 5 minutos -

"¿Eh? A qué te refieres", antes de Yix pudiera terminar de hablar fue enviado a una habitación blanca, quedando desconcertado, hasta que una voz conocida lo sorprendio.

"Hola Yix", dijo Müesli mientras se acercaba a Yix.

"Müesli eres tú, pero porque deberías deberías estar en el medallón junt-", un dedo fue puesto sobre su boca, callandolo.

"No me he negado, solo quería hablar contigo antes de irme a dormir", la última palabra confundió a Yix por lo que al notar su confusión Müesli agrego: "el dragón dijo que estaríamos dormidos, el tiempo no pasará para nosotros mientras estemos ahi, todos están muy agradecidos contigo por haberlos salvado", al oír estás palabras Yix comenzó a sentirse mal.

"Te equivocas, esto es mi culpa, yo sabía que esto pasaría, y no moví ni un dedo para evitarlo, este será mi pecado por haberlo dejado", hablo Yix solo para recibido por una cachetada de Müesli.

"No digas esas tonterías, nadie te está culpando, ya sabía que algo me ocultabas cuando me hiciste esa pregunta en el bosque. No sé por cuántas cosas has tenido que pasar, pero tú no deberías cargar con esa responsabilidad, no eres un héroe, y las cosas pasan por algo, pero está vez decidiste hacer lo que querías y aquí estamos, no has salvado, este no es un pecado, es una esperanza y por eso debes sonreír, pronto nos volveremos a ver, cuida de mi hijo si, de seguro va a querer hacer una locura cuando crezca, debes evitarlo", dijo Müesli mientras levantaba la cara de Yix para verlo a los ojos.

"Si, me haré responsable de el, y de todos ustedes, prometo que se reunirán muy pronto", dijo Yix con una sonrisa, mientras miraba a la chica que le había dado una nueva esperanza rompiendo la cadenas de su corazón.

"Bueno, parece que se nos acaba el tiempo, una cosa más", dijo Müesli mientras sonreía de forma pícara.

"Si claro, di-",  fue entonces que los labios de Müesli bloquearon las palabras de Yix , dejandolo sorprendido. Era un beso simple, pero en un acto reflectivo Yix devolvió el beso cargandolo con muchos sentimientos sinceros, llegando incluso a entrelazar su manos, formando un momento mágico que parecía eterno.

Luego de eso Müesli retrocedió lentamente mientras decía: "Debes seguir viviendo Yix, vive tu vida al maximo", guiñándole un ojo.

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De pronto una sensación incomoda lo trajo a la realidad, sentía como estaba siendo arrastrado por el suelo, sintiendo como su cuerpo chocaban con piedras y palos comenzó a quejarse llamando la atención de todos.

"Porfin despiertas, cuánto tiempo pensabas estar así", dijo Macki mientras reprendía a Yix, que estaba tratando de entender lo que había pasado.

"¿Que sucedió, no estaba con el dragón?", Pregunto Yix mientras se ponía de pie y se quitaba el polvo de su traje.

"Eso fue hace rato, el dragón se fue y escuchamos disparos a la distancia, seguramente de Elec, teníamos que movernos, así que comenzamos a jalarlos, pero ahora que estás despierto, puedes ayudar al anciano a llevar a ese tipo", dijo Macki mientras señalaba a Bardock que estaba siendo jalado por un Monite visiblemente cansado.

"Monite, déjamelo a mí", estirando su brazo hacia Monite que le agradeció soltando al saiyajin para que Yix lo cargue en su espalda.

"Listo, ahora déjame ayudarte a ti anciano", hablo Macki mientras se acercaba a Monite para cargarlo.

"Porque nos ayudas, no eres familia de ese demonio", dijo Monite mientras se subía a la espalda de Macki, Yix trato de hablar pero fue interrumpido por la misma.

"Que sean mi familia no significa que yo se igual a ellos, además eso se acabó, no volveré con ellos", dijo Macki quitándose un collar con la letra H y lanzandolo al suelo para seguidamente pisarlo con fuerza destruyéndolo.

"Y-ya veo", dijo Monite sorprendido por sus acciones, "muchas gracias, no debí dudar de una persona cercana a Yix".

"Ah, que, cercana, bueno si, podría decirse que somos cercanos", avergonzada Macki trato de recuperar el equilibrio que había perdido al escuchar las palabras de Monite.

Yix solo podía ver este intercambio con una sonrisa, dado que nunca había pensado que iba a ver una escena así en su vida.

Luego de caminar un rato, llegaron a una cueva en la cual gracias a la fuerza de Yix lograron cubrir con una enorme piedra y armando una fogata, comenzaron a relajarse.

Monite comenzó a curar sus heridas, solo para ser interrumpido por Macki que saco un frasco de su bolsillo, ofreciéndose lo al namekusei mientras explicaba que era una medicina especial, recibiendo las gracias del namekusei, comenzó a hecharse el líquido en la herida que tenía, sorprendiendose por la velocidad a la que se estaba recuperando, para seguidamente hecharle la misma medicina a las heridas de bardock, quien seguía inconsciente.

Luego de un rato Monite comento que Granolah se había quedado en una habitación segura, pero que en cualquier momento podría levantarse, por lo que con ayuda de la teletransportación Yix lo trajo a la cueva dejandolo junto a Monite, dejandolo dormir a ambos.

"No piensas dormir, no eres el único que puede sentir el ki ¿Sabes?", Sugirió Macki mientras miraba el rostro pensativo de Yix.

"No tengo sueño, creeme e dormido varios días, lo que menos tengo es cansancio", respondió Yix mientras sujetaba su colgante con una mano acariciándolo.

"Al menos deberías quitarte ese rostro de encima, me pones incomoda", señaló Macki mientras se acercaba a Yix, sentandose a su lado.

"No puedo evitarlo sabes, estoy pensando en como traerlos a la vida, pero mis opciones son reducidas, pensé que eran tan fácil como pensar /Hey vamos a la tierra ahí has esferas del dragón/, pero el radar aún no fue inventado, namek no es una opción porque no sabemos dónde está el planeta, y las esferas de aquí ya se han perdido", respondió Yix decepcionado.

"Bueno, nadie dijo que debes revivirlos pronto, siempre y cuando lo hagas, a menos que halla algo que quieras ahí adentro", dijo Macki mientras le lanzaba una mirada aguda a Yix, dejando a este último avergonzado, por lo que Macki decidió no volver a tocar el tema por su propio bien.

"Al menos has decidido que hacer ahora",  dijo Macki, a lo que Yix respondió: "ah sí, eso ya lo había decidido, seguiré a este tipo a su planeta, necesito algo de ahí", señalando al saiyajin inconsciente.

"Mas te vale no querer salvar al planeta Vegeta, mira el estado en el que quedaste luego de involucrarte sentimentalmente en este planeta, además no es como ese planeta merezca sobrevivir", respondió Macki mientras imágenes de los saiyajins matando a gente pasaban por su mente.

"Descuida, si quisiera salvar a los saiyajin buenos tendría que buscar debajo de las piedras, he decidido que cambiaré algunas cosas del futuro, pero los cambios se hacen de a poco así que comenzaré desde el inicio, luego te lo explicaré a detalle, ahora debes descansar", dijo Yix mientras levantaba su brazo para acariciar el pelo de Macki, un gesto que la avergonzó mucho asi que para evitar mirar a Yix, decidió fingir quedarse dormida hasta que lentamente se fue durmiendo de verdad.

Yix se quedó despierto toda la noche, pero aunque decía que no tenía sueño, su fatiga mental lo comenzó a orillar al mismo, quedándose dormido poco a poco, solo para ser levantado por el grito de Macki, abriendo los ojos sorprendido y encontrándose con una escena peligrosa.

Bardock intentando ser frenado por Monite mientras este apuntaba con su mano a Macki para matarla, haciendo que el sueño de Yix se esfumará entrando en escena.

"Hey detente, ella no es nuestro enemigo, renuncio al clan heata", hablo Yix mientras sujetaba el brazo de bardock, pero no contaba que esté con esa misma mano lo mandara a volar de un manaso, chocando contra la piedra que usaban como puerta, rompiéndola en varios pedazos.

"No vuelvas a tocarme, y tu... Crees que me tragarse esa mentira de que renunciaste al clan", grito bardock mientras comenzaba a cargar ki en su mano.

"No me importa si no me crees, si sigues haciendo escándalo vas a llamar la atención de mis hermanos", respondió Macki mientras observaba atentamente los movimientos del saiyajin.

Pero cuando Yix intento volver a la escena, todos fueron detenidos por la voz de un niño.

"Tu... Saiyajin, que le hiciste a mi mamá", grito Granolah mientras cargaban un gran rayo de ki apuntando hacia bardock con una mirada llena de rencor.

Bardock quien volteo a ver al chico, recibió el ataque de este, generando una gran nube de polvo en la cueva, para seguidamente disiparse dejando ver la figura de bardock intacta.

"Veo que eres un niño muy fuerte, jaja", hablo bardock mientras miraba al niño con admiración.

"Granolah detente porfavor", la voz de Yix resonó en la cueva, llamando la atención del niño, que al verlo solo pudo correr hacia el y abrazarlo.

"Yix estás aquí, ese saiyajin malvado quieres matarnos tienes que detenerlo", suplico Granolah mientras señalaba a un atónito bardock, Yix que de inmediato entendió lo que sucedió se agachó al mismo nivel que Granolah y le hablo con calma.

"Ese tipo que está ahí, fue el que los salvó a tu mamá y a ti, es un saiyajin diferente, no le tengas miedo", las palabras de Yix calmaron al niño, pero cuando busco a su madre con la mirada y no la encontraba, pregunto por ella, a lo que Yix decidió contarle la verdad, pero cuando estaba a punto de explicarle lo del colgante, Granolah explotó y se lanzó hacia barcock golpeándolo débilmente en las piernas mientras le recriminaba por no haber salvado a su madre, haciendo que este último no supiera como responderle, dejando que este desquite.

"Granolah, tu mamá aún no se ha ido", grito Yix mientras se acercaba a Granolah para cargarlo.

"A qué te refieres", murmuró Granolah mientras se ahogaba con sus palabras.

"Ella está aquí, le pedí al dragón que los salvará a todos y los guardara aquí, puede que tome un tiempo pero te primera que la traeré devuelta, así que no llores y no dejes llevar por la venganza por qué ella no querría eso para ti", explico Yix mientras le enseñaba el colgante a Granolah que al tocarlo pudo sentir como una sensación calida recorría su cuerpo, nutriendo su alma y calmando su corazón.

"Si prometo que sere fuerte, por ti mamá", exclamó Granolah con una gran sonrisa, al verlo tranquilo Yix decidió dejar al pequeño en el suelo y se dirigió a bardock.

"Espero que no halla conflicto en nosotros, como puedes ver ninguno tiene malas intenciones, así que porque no te relajas, además debes volver a tu casa, tu familia te espera", dijo Yix mientras extendía su brazo hacia barcock que luego de pensarlo solo se giró ignorando a Yix y se alejo de la escena caminando hacia el bosque.

"A dónde vas bardock", pregunto Monite mientras intentaba detener al saiyajin.

"A buscar mi nave, me tengo que ir, además ese chico puede cuidar de ustedes de aquí en adelante", respondió bardock sin mirar atras, sacando un control de su armadura y presionando unos botones, para seguidamente esperar a su nave que no tardó en aparecer.

"Hey bardock, hasta luego", grito Yix despidiéndose de bardock que solo lo ignoro subiendo a su nave y marcha se del planeta.

"Tienes su ki", pregunto Macki mientras se acercaba a Yix que veía como la nave se alejaba.

"Si, ahora podré saber dónde está aunque necesitaremos seguirlo de cerco o no podré teletransportarme a el", respondió Yix mientras regresaba con Granolah hacia donde estaba Monite.

"Monite debo pedirte un favor", hablo Yix.

"Si claro, si está en mis posibilidades te ayudaré", respondió Monite.

"Necesito que cuides de Granolah, a dónde yo voy hay muchos peligros y no puedo llevarlo conmigo, estoy seguro que Müesli se enojaría conmigo", dijo Yix con un risa nerviosa.

"Pero no podemos quedarnos en este planeta, ese sujeto podría venir por nosotros y matarnos", hablo Monite con miedo en su voz, pero fue tranquilizado por Yix que le explico cómo Elec no los iba a a lastimar y como la raza que se mudará a este planeta eran amigables y se sentirían mal por haberles quitado su planeta, contándole cómo no habría peligro siempre y cuando escuchará a Elec por un tiempo.

Luego de la explicación de Yix, Monite termino aceptando aunque aún tenía dudas, pero confiaba en las palabras de Yix así que decidió creer en el.

"Ahora Granolah tengo una misión para ti, ese hombre malvado que mató a tu madre, te pedirá que cumplas misiones para el, necesito que cumplas con esas misiones mientras recolectas información de ellos para que cuando vuelva, los hagamos pagar por sus actos, no te pediría este favor si no confiara en ti y en tu fuerza, asi que, ¿aceptas?", Con una mirada sincera Yix pidió la opinión de Granolah. Habían más maneras pero está le aseguraba que Granolah estuviera vivo junto a Monite al menos por los siguientes años.

"No debo vengarme, pero sí quiero que ese hombre reciba su merecido, acepto Yix, y  prometo que me haré mucho más fuerte para defender a mi madre cuando regrese", afirmó Granolah con una expresión decidida, dándole a Yix la confianza de que todo estaría bien.

"Bueno ahora me tengo que ir, Monite necesito una nave, sus casas aún se pueden usar de esa manera", pregunto Yix mientras esperaba una respuesta positiva del namekusei.

"Ha pasado mucho tiempo, pero creo que puedo hacer funcionar una", respondió Monite mientras los guiaba a al aldea de los namekusei, por alguna razón los cuerpos no se encontraban en el lugar lo cual fue un alivio para todos, porque no querían ver una escena tan macabra.

"Voy a entrar, espero funcione", hablo Monite mientras ingresaba a una de las casas, acercándose a un aparador comenzó a girar una repisa para enseñar un tablero, en el cuál comenzó a presionar unos botones, haciendo que la casa comenzara a temblar, elevándose levemente para dejar ver una nave con ovalada con picos.

"Es increíble, nunca habría pensado que las casas de los namekusei eran en realidad naves", menciono Macki observando la nave asombrada

"Wow, es grande", exclamó Granolah asombrado.

"Yep, es y aquí es donde nos iremos Macki, estás lista", dijo Yix con un sonrisa.

"A dónde tú vayas, yo te seguiré", respondió Macki con una sonrisa igual de alegre.

Luego de una breve explicación de parte de Monite, Yix le pidió un encargo a este mismo que no tuvo ningún problema en cumplirlo, para seguidamente despedirse de él y de Granolah.

Yix y Macki se subieron a la nave y partieron rumbo al planeta Vegeta.

"Acaso estamos en Minecraft", murmuró Yix.

"Dijiste algo", pregunto Macki, haciendo que Yix se avergonzara.

"No nada".

Y así comienza una aventura más...

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[Saga del Superviviente Granolah]
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