CAPÍTULO 10: hipnotizado

Me di la vuelta, llevaba un sujetador algo provocador, pero no tenia otra cosa que ponerme.
Vi como Alastor se tapo la cara para no verme sin mi consentimiento.

- Hey Alastor, puedes verme, ni que nunca hayas visto a una chica con sujetador

Se destapó la cara, me miraba algo sonrojado

- Lo hago por respeto, no quiero incomodarte

- Es la primera vez que alguien tiene respeto conmigo en este tema, se me hace raro

- Pues deberían respetar a una dama tan linda como tú

Me acerqué a él con una sonrisa.

- te ves tan tierno con ese sonrojo, siento que te conozco desde antes

- Bueno, acabemos, qué tengo que hacer?

- cierto!

Me di la espalda ante él y le di unas toallitas para que limpiase las plumas que estuviesen sucias, el entendió rápido y comenzó a limpiarlas cuidadosamente de no hacerme daño.

Aunque él no me mirase, yo también estaba algo sonrojado, pues era la primera vez que un chico me tocaba las alas, me sentía rara, con escalofríos en el cuerpo.
Tras un rato, termino de limpiarmelas dejando el trapo en un lado

- terminé, he intentado hacer lo que he podido, no quería hacerte daño

Guarde mis alas y me di la vuelta mirándole con una sonrisa, se podía notar el sonrojo que llevaba en mi rostro.

- Muchas gracias Alastor

- No hay de qué querida

Me acerqué a él lentamente se le veía nervioso, me acerqué y le di un beso en la mejilla, después me levanté, me estiré y me puse la chaqueta de Alastor encima

- Si no me pides tu chaqueta, al final me la voy a quedar, es cómoda

- quedate la chaqueta si quieres, tengo muchas más

- enserio?

Alastor asintió, yo me acerqué a él y le di un abrazo

- Gracias gracias!

Al separarme del abrazo pero no separarme del todo, Alastor me cogió de la cintura visualizando en la posición en la que estaba, pues sin saber cómo, acabé sentada encima suya por el abrazo dado.

- Siento que he vivido este momento antes junto a tí

- Yo también...

De repente llamaron a la puerta, Alastor molesto de que llamaron apretó mi cintura con sus manos.

- M-mh, suelta

Alastor en cuanto me escucho me soltó haciendo que yo me levantase y abriese la puerta encontrándome a Charlie con Dylan

- Ou, hola pequeñín, te lo has pasado bien?

Me agaché a la altura de Dylan con una sonrisa.

- Charlie es genial! Me ha enseñado muchas cosas! Y quiero redimirme!

- Me alegra, corazón

- Mami, y yo en donde dormiré?

- Mami?

Miré a Charlie, estaba intentando aguantarse la risa, pues, los chicos convencieron a Dylan de que Águeda era su madre y Alastor su padre, después miré de nuevo a Dylan.

- Yo no soy tu madre cariño

- E-entonces q-quien es mi madre

El chico estaba a punto de llorar, al darme cuenta me dio pena y no tuve otra que mentirle.

- Era broma mi amor, claro que soy tu mami, soy tu nueva madre

Dylan se acercó a mí y me abrazó, yo le abrace y después miré a Charlie quien se estaba yendo poco a poco por el pasillo.
Me separé del abrazo y le miré con una sonrisa sincera

- Papi está aquí en la habitación?

- Quién es papi?

Dylan miró por el lado viendo a un Alastor sentado en la cama mirando la situación.

- Papi!

Me gire y vi a Alastor que estaba totalmente con la misma reacción, y aun peor cuando nos dimos cuenta que nos intentaron emparejar haciendo que los dos nos pusiésemos más rojos de lo que estábamos.

- Hey, no soy tu pad-

Fui corriendo a Alastor y le tape la boca, me acerqué a él y le susurré al oído.

- No le quitemos las ilusiones al chico, es muy pequeño aún y ha sufrido mucho, porfavor

Alastor no tuvo otra que aceptar pues le estaba medio suplicando, me di la vuelta y agarre la manita de Dylan

- Ven cariño, te voy a enseñar tu nueva habitación de juegos y para dormir

Lo lleve a una habitación para niños, había de todo tipo de juegos, muchos patos y una cama con todo lo necesario, era una habitación que les dije que hiciesen para Dylan, y se veía quién lo había hecho de lejos, también le cree un nuevo amigo, un pequeño perrito para que juegue con él y muchas cosas más, le dije que no se acostase tarde, le di las buenas noches y me fui de la habitación.

Volví a la habitación de Alastor.

- Bueno, ahora somos padres

- Ese niño me trae mala espina, siento que trata de hacer algo

- Alastor, porfavor, si es un niño pequeño, y ya le has visto lo inocente que es, no le des vuelta a eso.

Alastor suspiro, se levantó y se acercó a mí cogiendo de mi mentón con un dedo

- Aunque no me creas, recuerda mis palabras

- a este ritmo podemos apostar, si acaba siendo verdad que el chico nos traiciona, harás lo que quieras durante una hora conmigo, y si yo acabo teniendo la razón, será alreves, podrás hacer lo que quiera contigo durante una hora, trato?

Agarre la mano en donde me estaba cogiendo el mentón y la puse en mi mejilla, no quería tratos en donde tengamos que apretar las manos

- Trato

- buenas noches Alastor

Me acerqué para darle un beso en la mejilla, pues en la frente no llegaba, pero él sin querer hizo un movimiento haciendo que le diese un beso, me separé del beso enseguida y me fui corriendo sin dar explicaciones, es lo que menos me esperaba en el día de hoy.

Alastor mientras se quedó en blanco, no fue un movimiento a posta pero le gustó, algo que le asustaba, pues llevaba tiempo sin enamorarse de nadie.

Los días pasaron desde que Dylan estaba en el Hazbin hotel, Charlie y yo hacíamos actividades para enseñarles como sería el cielo, o para intentar redimirles enseñándole valores que debían cumplir arriba.

Esos días no me junte mucho con Alastor desde ese accidental beso, me sentía mal porque pensaba que había sido culpa mía, y no quería incomodarle.

Mientras con Dylan, pues pasaba tardes con él, me hacía sentir como una madre, aunque no lo fuese aún.

Un día por la tarde, estábamos Dylan y yo paseando por el infierno, quería enseñarme una tienda que le encantaba que vio con Charlie el otro día.

Llegamos a la tienda, era una tienda de televisiones, desde las más antiguas hasta las más grandes y nuevas.

- Cariño, y porque te gusta esta tienda, solo son televisiones

- Me gusta porqué echan cosas muy divertidas en esa tele

Señaló una televisión grande que estaba al fondo de la tienda, fui junto a él y miré que es lo que echaban, al principio echaban dibujos para niños, cuando de repente se puso la pantalla con círculos rojos, negros y un rojo claro que giraban y giraban.

Y de un momento a otro ya no sabía en donde estaba, me habían hipnotizado?

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