O8.

Pequeño cachorrito...

 ¿Cómo alguien tan manipulador podía decir eso con tanta calma?

Aturdido y enojado, Jimin se separó abruptamente del cuerpo cálido de Jungkook. Los latidos de su corazón comenzaron a acelerarse, todo por la estúpida sonrisa que el alfa estaba dándole justo ahora. 

Pero Dios sabe que Park Jimin no se dejaba llevar por la sonrisa de un alfa bonito. El podía pensar perfectamente con la cabeza de arriba, si señor.

De repente, un rayo de luz iluminó sus pensamientos y lo devolvió a sus propios recuerdos, recuerdos que había prometido olvidar, cuando apenas era un puberto de catorce años.

El celo de Jeon, su celo.

Jungkook había sido el primero en presentarse como alfa, justo una semana después habría sido su presentación también. Era exactamente una semana de diferencia, Jeon y el no podían haber tenido su celo al mismo tiempo.

Era imposible.

Él sabia que su celo estaba cerca ¿Pero por qué demonios a Jeon también le llegó?  ¿Por qué terminaron encerrados ellos dos en ese salón? ¿Por qué sus pastillas para el celo mágicamente se habían perdido?

No, en realidad no necesitaba un por qué, necesita un por quién.

¡Por Dios, era tan malditamente obvio que quiso darse un golpe en la cabeza de lo ciego que había sido!

Todas sus interrogantes tenían una sola respuesta. El infumable de Jeon Jungkook.

Claro, el maldito había hecho todo eso propósito ¿Acaso estaba jugando con él desde el principio?

Una ola de ira recorrió sus venas que no pudo evitar gruñirle al alfa. Y su cólera solo aumentaba al ver que ni siquiera se inmutaba ante la clara muestra de amenaza, tan tranquilo y despreocupado.

Como si no pasara nada, como si Park no fuera un endemoniado alfa puro al igual que él, como si no hubiera estado hace rato de rodillas completamente a su merced.

Jungkook no debería demostrar esa actitud tan altanera y relajada, no debería siquiera mirarlo de esa manera ¡Carajo, es que el debería agachar su maldita cabeza y brindarle respeto! 

Su forma de ser tocaba detestablemente el orgullo de sus bolas.

─Tu, maldito...─El castaño estaba a punto de gruñir de nuevo cuando sintió un suave toque en la nuca que lo silenció por completo. Un escalofrío recorrió la columna de Jimin activando sus sentidos animales, su lobo se contrajo instintivamente ¿Qué mierda fue eso?

─No me toques─ se alejó con un gruñido.

Jungkook sonrió, el brillo escarlata apareció en sus ojos ─No necesito tocar─ sus palabras retumbaron en la silenciosa noche. Ladeó su cabeza escaneando el cuerpo de Jimin, desde su suave cuello a sus rojizos labios, aquellos que se encontraban entreabiertos por la inesperada falta de oxígeno. 

Como si le leyera sus pensamientos el alfa volvió hablarle ─¿Asfixiado?─ preguntó con voz ronca acercándose de nuevo pero sin tocar su cuerpo tal y como lo había ordenado. El embriagador aroma a whisky se expandía sofocando todo el aire. Tan pesado. ─Respira─ susurró sobre su oído mandando una corriente a su cuerpo. Jungkook no lo tocaba. Una exasperante necesidad se apoderaba de él, una necesidad que no sabia lo que era ─Hazlo─ ordenó con voz pesada. Jimin obedientemente abrió los labios en busca de aire para sus pulmones, respirando entrecortadamente, miró a Jeon quien lo observaba de manera dura y pupilas dilatadas, le había dado una orden. Y el la había obedecido, malditasea.

Detén el aroma─ Jimin usó su voz de mando mientras su cuerpo se aferraba a una pared en busca de apoyo, desafiando a Jeon con su potente aroma a menta y chocolate. Quería darle la misma lucha pero obtuvo lo contrario, Jungkook parecía satisfecho dándole una sonrisa ladina soltando a propósito más aroma ─¿Crees que es un juego? ¡Dije que te detuvieras maldito sordo!─ exclamó mientras veía al alfa acercarse acabando por fin con la lejanía de sus cuerpos.

─Sordo no, te escucho perfecto─  respondió mirando el pecho cubierto del castaño, podía escuchar con claridad los latidos de Jimin retumbar con brusquedad, sonrió mirando la mirada avergonzada del alfa ─Es imposible no hacerlo.

─Púdrete─  respondió jadeante mientras intentaba estabilizar sus pies, quienes no dejaban de debilitarse.

Un alfa fuerte como él no podía encontrar explicación de por qué su cuerpo se había convertido en una maldita gelatina, no supo en que momento dejaron de funcionar, pero antes de tocar el suelo frío sintió un par de brazos rodear su cintura, esas manos que estaban impregnándose cada vez más en él, fuego quemando su piel de manera abrasadora.

─Deja de luchar Jimin─ el alfa habló con voz ronca sin dejar de acariciar la cintura del castaño. Sus manos tocando la piel sobre su ropa, lo estaba enloqueciendo. Cerró los ojos al sentir su caliente aliento sobre su cuello ─Acéptame dentro de ti─ suplicó en un murmullo suave, el roce caliente de sus labios hizo ladear su cuello sensible ─Deja que mi olor sea lo único que puedas respirar─ su lengua pasó lento por su garganta trazando con delicadeza y tortura su tez. Jimin apretó los cabellos del azabache dejando salir un jadeo cuando sintió un beso húmedo sobre su piel ─Porque yo soy lo único que necesitas.

El ardiente deseo de morder se apoderó en el cuerpo del alfa. La retorcida idea de hundir sus filosos dientes ante apetecible piel canela era terriblemente tendedora. Lo quería, lo necesitaba. 

Jungkook rozó sus dientes en su garganta, quería demasiado morderlo. Tan simple como sucumbir a sus deseos más primitivos. Pero... no debía, podía hacerlo, pero no debía. Agitado unió sus frentes mezclando sus respiraciones, sus pulmones recibiendo con calidez sus aromas mezclados como consuelo ─Quiero que solo estés lleno de mi Jimin.

Sin tiempo de responder, Jimin fue apresado por los labios demandantes de Jungkook, su boca estaba siendo tomada sin piedad, el castaño solo podía responder ante ese alfa descontrolado con la misma llama que el había incendiado dentro de él.

Sus pulmones de llenaron únicamente del olor de Jungkook, Whisky, Whisky, maldito Whisky. Era como sentir el sabor de el en sus labios. Y él sabia jodidamente bien.

Jimin gimió sobre sus labios cuando sintió las manos del alfa pasear dentro de su camisa, sus dedos cálidos tocando su abdomen, impregnándolo aun más con su esencia, tomando descaradamente su cuerpo como su posesión, todo mientras sus labios eran torturados por el azabache.

Tomando aliento se separó de Jungkook con un hilo de saliva sobre sus labios resplandecientes e hinchados, agitado y con ojos cristalinos observó las pupilas rojas del alfa ─Hueles a mi─ habló satisfecho, la cálida y mortal sonrisa que hizo logró hacer que su cuerpo se hundiera en llamas. 

Se sentía totalmente dopado, como una marioneta, totalmente manipulable.

Manipulado por Jungkook.

[🔪]

Probablemente se merecía el titulo del mayor cabrón del mundo.

Jimin pudo escapar de los brazos de Jungkook y corrió lo más lejos de ahí, dejando al alfa en la azotea, de nuevo con un horrendo dolor en las bolas.

Dolor provocado por el, por supuesto. Pero no era su culpa, entró en pánico cuando escuchó un extraño movimiento en la azotea, movimiento que también fue captado por Jeon quien lo abrazó de manera protectora soltando un fuerte gruñido.

Era puro instinto de supervivencia, pero también de inteligencia, por eso reaccionó golpeándole en la entrepierna al alfa, podría morir si era el caso, pero jamás dejaría que lo vieran siendo abrazado como un maldito e indefenso omega ante una amenaza.

"Amenaza" que resultó siendo un inofensiva paloma.

Seguramente a estas alturas las bolas de Jeon deben de estar odiándolo por haberlas golpeado por segunda vez, estaba dejando sin herederos a la dinastía Jeon.

¿Bueno y qué importaba? No es como si quisiera ver mas Jeons por ahí en miniatura. Con el perro sarnoso de Jungkook tenia más que suficiente, estaba haciéndole un favor a la humanidad. 

Sin embargo los futuros bastardos de Jungkook no era lo que le preocupaba ahora, sus acciones pasadas si. Aún no tenia explicación de su comportamiento con el exasperante alfa, no sabia siquiera porqué fue tan dócil y recesivo, había estado a nada de ladear su cuello a Jungkook.

Él, Park Jimin, un alfa.

Ahora estaba en malditos problemas por Jeon. Es su maldita culpa que ahora su olor esté impregnado en el. Tenía que salir rápido de aquel edificio, no debía dejar que nadie huela ese olor tan peculiar en su cuerpo, está muerto si alguien lo descubre. Sería la ruina para un alfa como él.

¿Qué dirán los demás al dejar que otro alfa lo haya marcado con su olor como un maldito omega?

Por dios ¡Quiere comprar una caja grande de madera, encerrar al alfa y tirarlo al rio Han!

Enojado dio un grito de frustración para aliviar sus nervios.

─¿Jimin?─ escuchó una voz conocida tras su espalda. El alfa maldijo acomodándose los cabellos de manera acelerada soltando su propio olor para camuflar el de Jeon. Se volteó disimulando con una sonrisa ─Por poco no te reconozco, estas muy cambiado que yo-  ─ el contrario miró preocupado al alfa hasta que olfateo el aire alzando una ceja dudoso ─Mierda, hueles como si un perro en celo se hubiera cogido tu pierna─ se burló arrugando la nariz.

Jimin se burló también, claro que olía a perro, al perro de Jungkook. Urge castración.

El alfa siguió con una sonrisa burlona hasta que el contrario se acercó demás ─Espera, espera. Este olor yo me lo conozco pero no me acuerdo de quien─ habló curioso mientras que el alfa sentía todo sus pelos de punta─¡Pero si es el aroma de- ─sus palabras fueron calladas por una mano en su boca.

─No, no lo digas─ susurró alterado, el contrario lo miro confundido. Jimin miró a los lados con preocupación dando un largo suspiro cuando se dio cuenta que solo estaban ellos dos en el pasillo, pero aun así, a veces las paredes tenían oídos. No podía arriesgarse a nada ─Sígueme.─ ordenó.

El más alto puso los ojos en blanco, odiaban cuando les daban ordenes, sobre todo alfas. Si hubiera sido alguien normal ya estaría agachando su cabeza, lastima para Jimin que el era un omega puro.

─Si no te quisiera tanto ya te hubiera dado un puñetazo ¿Lo sabes no?─ habló detrás del alfa de manera cortante ─Los alfas con comportamientos demandantes me generan agresividad y ganas de cortarles las bolas con palillos chinos.

─Lo lamento, no quería sonar así ─ se disculpó el alfa. Él no era así con la gente, menos con los omegas. ─La verdad es que... hoy no he tenido un buen día.

─¿Y yo si?─ Habló solo mermando un poco su enfado anterior, no se podía enojar con el menor ─Jimin, no te veo en siglos y lo primero que haces es gritar a lo tonto y usar tu voz de mando conmigo. 

Jimin ya no sabia que más hacer, tratar a un omega puro era un tema complicado. Ellos tal como él tenían lobos dominantes que se cabreaban con la más mínima muestra de mando o irrespeto ─De verdad lo siento─ volvió a disculparse tomando su mano con calma, el olor de coco quemado comenzó a desaparecer poco a poco siendo reemplazados por un olor más suave ─Solo quería largarme de aquí rápido.

El omega soltó un suspiro ─ Estaba esperando que lo dijeras. No me aguanto más ver omegas hoy─ declaró siguiendo esta vez a Jimin que retomó sus pasos.

─No te veas al espejo que te espantas─ se rio el alfa. El omega rodó los ojos ─ Ya, está bien, cuéntame qué pasó, no, espera ya sé ¿Sucedió de nuevo?─ preguntó el alfa con burla presionando el botón del ascensor.

El omega dio una sonrisa ladina ─ Si, parece que un enano me confundió por un alfa y trató de seducirme─ rio por el pobre rubio que había quedado impactado al darse cuenta de su designación. ─Solo digamos que dejé una gran impresión en él─ soltó una carcajada.

Jimin se rió junto al omega.  ─Te he echado de menos─ soltó de golpe el alfa. El omega lo miró desconfiado ─Vamos dale un abrazo a tu alfa favorito─ se burló el menor estirando sus brazos.

El omega rio por la actitud del menor apresando al alfa en un cálido abrazo ─El único alfa al que soporto. Yo también te extrañé pequeño revoltoso.

Estuvieron un momento juntos hasta que el ascensor abrió las puertas, Jimin celebró internamente por haber logrado distraer a su hyung. Entraron los dos con un silencio cómodo.

─Dime─ maldijo internamente el alfa al saber lo que vendría─¿Por qué Jungkook estaba mirándote toda la noche como si quisiera arrancarte el cuello?─ preguntó.

Maldito Jungkook, ni para disimular era bueno.

Él también había sentido esa mirada toda la noche antes de escaparse a la azotea a fumar un poco. No sabía si agradecer o no que solo Namjoon haya notado eso.

Sin embargo eso no significaba buenas noticias.

─Le habrá mordido un perro y se le pegó la rabia─ Respondió calmado pero la mirada desconfiada del omega no cesó ─Que sé yo Namjoon. No me preguntes la vida de ese taradito, él y yo apenas nos conocemos de vista.

Namjoon dio una sonrisa de burla ─¿De vista cómo, entre tus piernas?

Sus orejas se volvieron rojas pero supo recomponerse rápido, frunció su seño haciéndose el indignado ─Hablas mierda Namjoon─ dijo con toda la cara dura que pudo disimular  ─Ya te he dicho que no consumas de tus hierbas raras. Si quieres te invito un porro hermano pero no te fumes la manzanilla del jardín─ regañó con burla. 

─Que no me la fumo─ respondió enojado, el alfa rio y enseguida volvió al tema principal ─ Para tu información, copia de Hannah Montana, esas plantas son para mis infusiones de té, pero por supuesto mi tema es menos interesante que saber que cosa rara hay entre tu y Jeon.

─Raro él, a mi no me metas en nada. 

─Pues no te creo.

─Por favor hyung, a ese no lo toco ni con un palo.─ recalcó con expresión calmada ─Para mi desgracia Seúl es una ciudad muy pequeña, solo nos topamos en el baño. No te montes una película.

El omega dio una mirada incrédula ─Por favor, solo faltaba que te orine encima. Tienes todo su olor en ti y no creo que eso haya sido solo de "toparse en el baño" A otro loco con ese cuento.

Jimin chasqueó su lengua irritado, tenia ganas de fumarse un cigarro o castigar con su polla la boca de Jeon por haberle metido en este lio. Basta Jimin, controlate y pensá con la cabeza de arriba, presionó su subconsciente.

 ─Bien, tienes razón como siempre erudito. Pero no es como tu piensas─ explicó de manera seria. Faltaban doce pisos. Paciencia ─Soy un caballero, así que no me gusta hablar de estos temas, pero tu insistencia no me deja otra opción─ suspiró ─Accidentalmente vi a Jungkook teniendo sexo con alguien, un omega─ recalcó ─Solo entré al baño y me topé con ellos, supongo que los instintos de Jungkook reaccionaron al verme como una amenaza, su olor de alguna manera me impregnó─ dijo calmado, miró a Namjoon quien parecía haberse tragado la mentira ─No pasó nada inusual. Solo Jungkook y su falta de cortesía en lugares públicos.

El alfa no despejó su vista de los ojos del omega ni un momento, intentando verificar que no quedaran dudas de su historia ─¿Por qué preguntas sobre él, acaso te gusta?

El moreno dio una mueca de asco ─No me van los alfas─ dijo mirando con cautela al castaño ─Solo me pareció interesante verlo hoy  ¿A ti no?─  preguntó ─ Además lo vi hace rato con el señor Chang, ya te digo yo que todo eso me da mala espina.

─Namjoon por favor, a Jungkook nunca le han interesado esas cosas ─se burló  ─Estoy seguro que ese solo está en la misma carrera que yo porque su papá lo obliga y porque realmente le gusta amargarme la vida todos los días. Puede que tenga buenas notas pero ese idiota nunca movió ni un dedo por la propia empresa de su padre.

Namjoon ignoró las burlas de su primo hacia Jungkook recalcándole lo importante ─Exacto, siempre se ha mantenido al margen, pero sus inversiones han aumentado más que las nuestras y lo sabes Jimin. Debe haber un propósito por el que Sunghoon allá mandado a Jungkook─ El omega acomodó sus lentes serio, una pequeña manía que poseía cuando estaba demasiado tenso ─De todas formas seria bueno mantenernos alerta.

Jimin soltó una risa burlona, dio unas palmadas en el hombro de su primo intentado relajarlo un poco ─¿Alerta?─ sonrió ─Jeon es más inofensivo de lo que piensas.

El moreno le devolvió una sonrisa sarcástica─¿Estas seguro de eso?

[🔪]

Por supuesto que no estaba seguro.

Sentía que algo raro estaba pasando. No sabe que, pero estaba al cien por ciento que Jungkook tenía todo que ver.

La verdad era que sabía muy en el fondo que Jeon quizás no haya asistido solamente a fastidiarle, no era tonto, también había visto la interacción del señor Chang con el alfa.

El viejo era uno de sus mejores socios, dejando a parte sus ideas retrogradas era un buen empresario. No tan inteligente como él pero esperaba que fuera lo suficientemente listo como para no caer en cualquier cosa que Jungkook podría decirle.

Sabia que no podía obligar a Chang a decirle lo que había hablado con Jungkook, pero no venia mal recordarle un poco a quien debe tener como aliado.

Eso era algo común para él, aunque muchos piensan que el mundo de los negocios eran uno de los más tranquilo en el sistema laboral, la verdad es que eso era una completa mentira.

En cualquier momento algo podría salir mal: pruebas de laboratorio, manifestaciones, caídas de acciones, etc. Todo se puede venir abajo de la noche a la mañana si algún sucio de la empresa salía a la luz. 

O si alguno de los dueños estaba involucrado...

Si algo había aprendido Jimin es que todos meremos tener secretos, algunos morían enterrados y otros solo esperaban el momento perfecto para ser revelados.

No importa cuan sincera sea una persona, siempre tendrá uno que ocultar y cualquiera secreto tendrá sus consecuencia. Ya sea hablar o callar.

Jimin tenía sus propios demonios con quienes lidiar, sus propios pecados, su propia cruz sangrante en la espalda. Jungkook era una de esos clavos apretando su piel a la madera, presionado fuerte una y otra vez hasta hacerlo sangrar.

Hasta hacerlo enloquecer.

No quería romperse la cabeza pensando tanto en él pero a veces era inevitable, de alguna forma siempre llegaba su nombre a sus pensamientos.

Dio un suspiro apoyando su cabeza en volante de su coche, luego de despedirse de su primo pensó que la idea mas sensata seria irse a su departamento y dormir un poco, lamentablemente no podía hacerlo.

Inhaló hondo sintiendo todavía el aroma de Jungkook en el. De manera extraña su olor logró mermar un poco su cansancio haciéndolo relajarse de a poco.

Había pensado conducir primero hacia su departamento a ducharse y cambiarse de ropa pero sinceramente se sentía cómodo como estaba, además ya no había nadie más por quien preocuparse.

Después de todo Yoongi no podía sentir las feromonas.

Claro porque no había ido precisamente a su departamento, estaba estacionado frente al departamento del pequeño alfa pelimenta. Cansado y todo pero Jimin cumplió su promesa de ir a verlo, era un hombre de palabra después de todo. 

Se arregló lo mejor que pudo abotonando perfectamente su camisa quien le ayudaba a cubrir los chupetones de su piel. Satisfecho dio dos toques en la puerta para que esta sea abierta por un pequeño pelimenta con pijama ─Bienvenido─ sonrió, Jimin revolvió sus cabellos con suavidad.

─Que bonito, un pijama de gatitos─ se burló cariñosamente el castaño.

─Es la que me diste por mi cumpleaños─ Rodó los ojos.

─Lo sé─ respondió burlón. El castaño se sentó tranquilo en el sofá con el pequeño alfa y el control en sus manos ─Así que... ─ pensó ─¿Qué película deberíamos ver? ¿Comedia, terror, acción? ─ esperó pacientemente la respuesta del otro lado, pero solo permaneció en silencio ─¿Yoongi? ─ miró de soslayo al pelimenta que lo observaba atentamente ─¿Pasa algo? ─preguntó confundido.

─Jimin.─ habló serio. El castaño se desconcertó por el tono de voz del pequeño alfa. Por lo general Yoongi no solía poner ese tipo de mirada. ─Tu olor...

Park lo miró confundido oliendo su propia ropa. No tenía mal olor, solo menta, chocolate y...whisky.

Sus ojos se abrieron con sorpresa, su lado racional se apagó siendo reemplazado por su estado de euforia  ─¡No lo puedo creer Yoongi, puedes olerme!─ sacudió feliz el cabello pelimenta, el alfa avergonzado bajó su mirada a sus pies ─Hey, mírame─ consiguió hacer que levantara la cara aún roja de Yoongi ─No tienes por qué sentirte mal, es solo cuestión de tiempo para que tus sentidos funcionen por completo.

─Solo cuestión de tiempo...─ susurró, giró su rostro para esconder una pequeña lagrima que resbalaba por sus mejillas.

Bien, no es que el pelimenta no oliera nada, más bien solo podía oler los aromas fuertes que llegaban a él y eso solo si estaban muy cerca de su nariz, pero no podía oler las feromonas menos olores leves de omegas y eso era una de las cosas que más le entristecían, él nunca había podido oler a Taehyung.

Yoongi había luchado por mucho tiempo con su condición, no era un alfa común. Su presentación tardía como alfa trajo algunos problemas. Sus instintos y sentidos no estaban completamente despiertos, incluso la conexión con su lobo era demasiado débil.

Había sido el objeto constante de demasiadas burlas por no ser "un alfa de verdad" demasiado femenino, demasiado débil, demasiado frágil.

Y por fin, después de tanto tiempo estaba obteniendo lo que deseaba.

─Pudiste sentir mi aroma sin olerme directamente el cuello─ alagó el alfa.

─Si, pero... no se si huelo bien del todo─ habló con cautela ─Por que podría jurar que tienes encima el aroma de otro alfa─ murmuró confundido.

Jimin quedó hecho piedra. Que venga alguien y lo meta a tres metros bajo tierra.

─¿En serio? ─ rio nervioso ─Debe haber chocado alguien conm-

─El de Jeon Jungkook─ interrumpió.

Jimin guardó silencio.

Yoongi solo había olido tres personas en toda su vida. Todos en su familia eran beta, así que había problemas por esa parte, porque no pudo permitirse oler a nadie de su familia, las únicas personas que había olido eran su doctor, Jimin y Jungkook.

Oler a Jungkook no había sido intencional, sucedió cuando intentaba separar a los dos alfas de la gran pelea que estaban teniendo, ese día los dos habían estado enojados y soltando muy fuerte su aroma.

El aroma de Jimin ya lo había olido antes, por lo que solo quedaba el aroma que había olido aquella vez en el pelinegro. Whisky y tierra.

Jimin sabia que no podía tener escusa a ese hecho, Yoongi sabia que ese era el aroma de Jeon ─Nos encontramos en la fiesta─ habló.

Yoongi se quedó mirando a un punto en blanco hasta que decidió hablar, una pregunta que se tornó como un débil susurro ─¿Por qué?

El alfa le miró confundido, no entendía su pregunta ─No lo sé, solo nos cruzamos nada m-

─No─ interrumpió el pelimenta ─Su olor está demasiado fuerte ¿Por qué estuviste con él?─ lo miró con preocupación con lagrimas brotando de sus ojos ─¿El te hizo algo? ¿Te golpeó?─ preguntaba de manera apresurada llorando e intentando levantar su camisa en busca de marcas en su cuerpo.

Los movimientos de Yoongi eran muy bruscos queriendo a todo costa levantar su camisa. Jimin no podía permitirlo, porque el alfa efectivamente iba a encontrar marcas, pero no precisamente de peleas.

Park logró bajar su camisa a tiempo sujetando con algo de presión las manos por lo alterado que se veía el pelimenta─¡Para!─ habló exaltado mirando como el alfa por fin había dejado de tocarle pero seguía temblando, arrepentimiento surgió en su pecho al haberle gritado. ─Tranquilo Yoongi, estoy bien─ lo agarró de los hombros de manera suave ─Jungkook no me ha hecho nada ¿de acuerdo?─ su tono de voz fue lo más calmado que pudo.

Yoongi reguló su respiración más tranquilo ─Jimin─ llamó.

 ─¿Si?─ contestó acariciando sus hombros de nuevo.

─No quiero que te acerques otra vez a Jeon─ las caricias del castaño se detuvieron observando la mirada determinada del alfa.

─¿Qué?─ titubeó.

─Por favor Jimin, ya no debes acercarte a Jungkook, siempre que ustedes están cerca solo terminan golpeándose─ hizo una pausa dejando soltar a algunas lagrimas ─Tu siempre terminas lastimado ¿Qué pasa si Jungkook te golpea demasiado fuerte un día y te mata?─ soltó un sollozo ─Jimin ustedes dos son alfas puros, sabes que eso es posible y lo que más me duele es que si eso pasara, aunque si estoy ahí, no podría ayudarte, no podría salvarte─ susurró agachando su cabeza ─Por que soy una vergüenza de alfa─ susurró.

Miró con tristeza a Yoongi, ahora entendía sus preocupaciones. Estadísticamente estaba comprobado que dos alfas puros en la adultez eran capaces de terminar muertos en un enfrentamiento cuerpo a cuerpo. 

Si bien ahora están en una sociedad racional, es bien sabido que la categoría "puros" puede ser una leve excepción, ya que estos se dejan llevar un poco más por sus lobos, sus instintos.

Dos alfas puros no podían estar juntos sin no querer asesinarse mutuamente.

Pero había una cosa en la que Yoongi se equivocaba. 

Puede que no confiara en Jungkook pero había algo en que estaba totalmente seguro. Jungkook jamás le haría daño.

─Yoongi, ya te he dicho que no eres ninguna vergüenza de alfa ─limpió sus mejillas ─Hoy hiciste un gran avance, basta de ponerte triste por boberías que ni siquiera han ocurrido─ sonrió ─Además, no puedo creer que pienses que ese tonto me ganaría. En todo caso el sería el tieso─ bromeó intentando aliviar el ambiente.

─¡Jimin!─ regañó.

─Tranquilo, nosotros ya no somos los mismos mocosos de antes. Ya no peleamos.

Yoongi borró su mueca triste, volviendo sonreír ─Está bien, pero aun así por favor si puedes evítalo lo mas que puedas y no caigas ante sus provocaciones.

Jimin volvió a revolverle el cabello ─Que si hombre, no me acercaré a Jungkook.

─¿Lo prometes?

─Lo prometo.

Ambos sonrieron y dejaron el tema de lado, comenzarían con su noche de películas.

[🔪]

Jimin tenia a Yoongi recostado en su hombro, totalmente dormido. Lastimosamente el no podía hacer lo mismo. Su consciencia no le dejaba dormir. Sabía que iba a romper su promesa.

Intentó cerrar sus ojos y descansar un poco pero la vibración en su bolsillo lo aturdió. Con pesadez lo prendió para ver de que se trataba y al leer la única linea de mensaje de su celular juró que miró todo rojo.

"Quiero vender todas mis acciones"- Sr. Chang.

Sus dientes crujieron de la rabia que estaba teniendo ahora ¡Que le pasaba a ese viejo! 

Despacio quitó a Yoongi de su hombro para acomodarlo en el sofá, saliendo del departamento para ir por su auto a toda prisa.

La rabia salía por todos sus poros y sabia que había una única persona involucrada en todo esto.

Cerró la puerta de su auto prendiendo de nuevo su celular buscando el numero del origen de su estrés. Por suerte estaban en la misma catedra y tenia su número en el chat grupal

[+54911024592]

Necesitamos hablar.

¿Qué necesitas?
Ahora no puedo.

Me chupa un huevo
Voy a tu departamento.

¿Cómo sabes dónde vivo?🤨

Hacete el gil de mierda
compraste el pent house
que yo iba a comprar,
claro que lo conozco.

Te dormiste rey,
Te toca soportar

Espero que tengas
un buen seguro por que
hoy te reviento la cara.

Te estas tardando.
✓✓

Y sin más, Jimin arrancó el auto.

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