11
Ya habían pasado unos 10 minutos desde que te habías ido de la casa.
Gyutaro aún sentía esa presión en el pecho, pero confiaba en que nada pasaría.
- ni-chan...
Dijo Ume mientras jalaba la manga de su hermano para llamar tu atención.
Él mencionado volteo a verla.
- que ocurre?
Le sonrió a su amada hermana mientras le acariciaba la cabeza.
Desde que te fuiste no paraba de pensar en ti.
- tengo hambre.
Gyutaro asintió y se levantó de donde estaba sentado, tomó la mano de su hermana y se fueron a la cocina a ver que podían preparar.
Eso ayudaría a ignorar la presión de su pecho que aumentaba por cada segundo que pasaba.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Pasos tranquilos.
Pasos tranquilos eran los que dabas, podías ir sin preocupaciones a la fiesta y llegarías a tiempo ya que saliste a buena hora.
Además así también podrías hacer notas mentales, sobre que hacer, que no hacer y como actuar frente a esas personas refinadas.
No podías estropearlo.
- " todo saldrá bien, respira"
Decías en tus adentros.
Ponías tu mano en el pecho para calmarte.
/sonido de tela rasgarse/
- ah?!
Por andar pensando no te fijaste que la rama de un arbusto se había atorado en tu kimono en la zona de la pierna derecha, provocando que un gran agujero se hiciera.
- carajo.
Soltaste observando el daño.
Soltaste un suspiro y metiste tu mano en tu manga izquierda, buscando algo que habías guardado ahí.
- menos mal que pensé en todo.
Dijiste mientras sacabas una hilera y aguja de la manga.
Te acercaste a la luz que brindaba la luna y colocaste el hilo en la aguja, te sentaste en una piedra, buscaste la zona rasgada y empezaste a costurar.
Solo fue cuestión de segundos para que quedara como si nada hubiera pasado.
- bien!, supuse que algo así pasaría, además si alguien le pasa lo mismo en la fiesta podré auxiliarlo y todos verán que soy precavida y tomo serio mi trabajo.
Sentiste orgullo, guardaste tus cosas, te levantaste y sacudiste tu trasero para tumbar el polvo o tierra.
.
.
.
.
.
.
.
Risas y Risas.
Se escuchan en la casa que compartías con tus dos seres queridos, Ume y Gyutaro.
Estos se encontraban jugando a las traes, corrían por toda la casa, evitando ser tocados por el otro.
Apesar de eso, tu amado aun sentía aquella presión en su corazón pero jugar con su hermanita hacia que no le tomar mucha importancia
- te toque, las traes!!
Y rápidamente Ume se alejó de su hermano para evitar ser tocada.
- corre que te alcanzo!!
Y más risas se escucharon, gyutaro perseguía a su hermana, aún que de manera lenta para que ella tuviera ventaja.
- no me alcanzas!! Blaaaa!!
Saco su lengua mientras corría por el pasillo.
- eso ya lo veremos!
Acelero sus pasos.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Ya había pasado media hora.
Seguías rumbo para la fiesta, quedaba algo lejos pero no tenias problemas con eso, sabias como llegar.
Mientras tanto admirabas la luz de la bella luna.
Aún no podías creer que todo esto estaba pasando, de más pequeña soñabas con este momento y al fin ese sueño se haría realidad.
- Aaahh!!
Gritaste.
Por andar en tus pensamientos tropesaste con una piedra y caíste al suelo.
Las cosas que llevabas en tus mangas cayeron y se esparcieron por todo el suelo.
Enseguida te medio levantaste para recoger todo, no podías perder absolutamente nada.
Con rapidez, con nerviosismo recogias todo y los guardabas en donde estaban.
Solo faltaba una hilera que estaba por un arbusto, estiraste tu mano para agarrarla...
Algo te mordió.
- AaaHHh! Ay...
Alejaste rápido tu mano y la miraste.
Dos puntitos rojos podías notar, dirijiste tu mirada de vuelta al arbusto, tus ojos se abrieron mucho y el miedo te invadió.
Una víbora negra.
Empezaste a sentir un ardor recorrer tu cuerpo y un gran dolor también.
Te levantaste lo más rápido que podías, trataste de correr para buscar ayuda.
Pero volviste a caer.
No sentías tus piernas.
Empezaste a exhalar e inhalar con rapidez y desesperación.
Trataste de gritar, pero ninguna palabra salía, solo ruidos de dolor.
- ah..aah!...ah...
Sentías tu sangre cuagulandose por el veneno de la serpiente, te dolía todo.
Poco a poco veías borroso.
Empezaste a sentir un gran frío golpear tu cuerpo.
" Gyutaro....ume.........lo siento"
Pensaste.
Aceptaste sin más tu destino mientras lágrimas caían de tus ojos.
Cuando menos podías irte tranquilamente sabiendo que no les faltara nada a tu amado y a la bella Ume.
A excepción de ti.
- Pero que tenemos aqui?~
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top