Capitulo 17: Cortocircuito
Se viene algo muy interesante aquí. Sin más que decir, aquí el capitulo.
Un par de días más tarde
Carol amanecía en su cama un día más, estirando sus miembros y dando un gran bostezo. Aún adormilada caminó hacia el baño, al cual ingresó para lavarse la cara y hacer sus necesidades, como en toda mañana. Tras esto, se sentía como nueva para arrancar el día. Bajó las escaleras, fue en dirección al comedor, donde ya estaban desayunando Scott, Bucky y Bruce.
- ¿Que hay jefa? - saludó el hombre hormiga tras notar la presencia de la mujer.
- Buenos días, ¿como están? - dijo la mujer correspondiendo al gesto de Lang.
- Como siempre, un día más en la oficina - comentó riéndose el soldado del invierno.
La capitana rió ante lo dicho por Bucky y luego se sentó en una silla, al lado de Bruce.
- Supongo que estaré de nuevo en el laboratorio como suelo hacer - habló el profesor Hulk resumiendo lo que iba a ser su jornada.
Antes de que la rubia pudiera decir algo, fue interrumpida por Scott.
- Carol, te iba a proponer si quieres entrenar conmigo y con Bucky, hace mucho no medimos nuestras habilidades con las tuyas - sugirió el hombre hormiga, mientras el supersoldado asentía con la cabeza en señal de aprobación. Al parecer se estaba aburriendo de patearle el trasero a Sam. Claro que ambos eran grandes luchadores, pero la experiencia, el conocimiento y el brazo de vibranio de Bucky le daban una gran ventaja sobre el hombre volador.
- Si claro, no hay ningún problema - aceptó con una sonrisa la líder del equipo.
- Excelente - dijo Scott.
- Solo no se quejen luego cuando los haya vencido - bromeó Carol con una sonrisa.
- No, ¿como crees? - comentó la hormiga, aunque en realidad pensaba que la mujer les iba a dar la paliza de su vida aún sin que ella usara sus poderes. Por un momento lamentó involucrar a Bucky en esto, pero si quería entrenar de igual a igual con la capitana, no le quedó más opción que incluir al soldado. Éste solo había aceptado la propuesta de Scott para tener una practica diferente, pero nunca había enfrentado a Carol en un combate. Hoy sería el día en el que descubriría lo que es un entrenamiento de verdad.
- Tu también puedes participar Banner, si es que no estás muy ocupado - le sugirió el supersoldado a Bruce, mirándolo.
- Lo voy a pensar - dijo el gigante verde sin más.
- Como digas - soltó Bucky dando un sorbo a su taza de café.
Al cabo de un rato, los demás vengadores bajaron para desayunar la par del resto y hablar sobre diversos temas.
Mientras tanto, en otra parte
Peter desayunaba junto a su tía, ambos se habían levantado medianamente temprano para disfrutar el día.
- Dime Peter, ¿que planeas hacer hoy? - preguntó May amablemente y un tanto curiosa, aunque la respuesta ya la sabía.
- Lo de siempre, pelear contra el mal, salvar ciudadanos.... - respondió el arácnido disfrutando de su tazón de cereal con leche.
- ¿Aún no sabes si volverás con los vengadores? - volvió a preguntar la mujer castaña.
- No may, aún no lo sé - contestó el joven.
Cabe aclarar que su tía no estaba al tanto de lo que había ocurrido con Carol allá en el complejo, ni mucho menos de la conversación que habían tenido hace unos días.
- ¿Se puede saber que pasó Peter?- cuestionó la mujer, sabía, por experiencia y por las actitudes de su sobrino, que el castaño le ocultaba algo.
Los sonidos de unas sirenas de policía que pasaron enfrente de su edificio lo ''salvaron'' a Peter de tener que hablar sobre un tema más que delicado.
- Debo irme - aseguró el joven, mientras tomaba su traje de hombre araña y salía por la ventana de su cuarto, dejando a su tía con más dudas que antes.
Mientras el chico de Queens se columpiaba, no se quitaba de la cabeza la reciente conversación que tuvo con May. Sabía que tarde o temprano iba a tener que explicarle a la mujer castaña el conflicto que había tenido con Carol y por que había vuelto a vivir al departamento suyo. Hoy le blanquearía bien la situación, así al menos se sacaría un peso de encima, ¿quien sabe?, tal vez hablar con su tía le ayude a manejar mejor sus asuntos.
4 horas más tarde, en el complejo de los vengadores.
Se podían divisar dos personas jadeando rápidamente frente a una figura femenina que apenas se había esforzado. No eran más que Bucky y Scott, quienes tenían una rodilla apoyada en el suelo y la otra la usaban de soporte para apoyar su mano. Delante de ellos se encontraba Carol, de pie y, a simple vista, sin muchas marcas de golpes. Los 3 estaban practicando combate cuerpo a cuerpo, como habían acordado, en uno de los rings del gimnasio. Mejor dicho, practicaron, puesto que parecía que todo había terminado.
- ¿Qué pasa, eso es todo lo que tienen chicos? - preguntó bromeando a sus compañeros de entrenamiento.
La mujer no era una heroína cualquiera, y eso lo pudieron notar ambos hombres. Para empezar, Carol en ningún momento utilizó sus poderes de energía fotonica, por lo que creyeron que tendrían una oportunidad. Segundo, eran ellos dos contra la capitana, había diferencia en numero, era cierto, pero eso no hizo ninguna diferencia. Por último, pese a que combatió en igualdad de condiciones que el soldado y la hormiga, sus habilidades eran demasiado para éstos dos. La rubia había contado que, al disparar al núcleo de aquella nave hace ya mucho tiempo, no sólo había adquirido poderes de energía y fotones, sino que sus habilidades de base mejoraron sustancialmente. Para resumir, tenía más fuerza, velocidad y flexibilidad que cuando era una soldado de las fuerzas aéreas. No se trataba de una supersoldado como Bucky, pero tampoco era muy diferente a él.
Los hombres suspiraron resignados.
- Nos venciste Carol - dijo Scott mirando la lona del ring.
- No somos rivales para ti - agregó James poniéndose de pie con mucho esfuerzo.
En ese momento, Bruce ingresó a la sala, con una carpeta en su mano.
- Al final terminé antes mis cosas en el laboratorio - comentó el científico verde dejando lo que sostenía en un asiento cercano.
La mujer volteó todo su cuerpo, puesto que le daba la espalda, para mirar a Hulk.
- Que bueno, por que éstos dos necesitan un respiro - expresó Carol riendo un poco mientras señalaba con su pulgar a los dos héroes detrás de ella.
El grandullón vio en que condiciones habían quedado Bucky y Scott y solo pudo pensar una cosa.
'' Espero no terminar como ellos '' se dijo mentalmente para caminar y subir a la arena, que era abandonada por los otros dos hombres que se sentaron en una banqueta cerca del ring.
Mientras tanto, con cierto arácnido
Peter volvía al departamento balanceándose de edificio en edificio con sus telarañas. Ya era de noche, por lo que consideró correcto volver a su casa a esta hora. Fue un día como cualquier otro, criminales intentando robarle la cartera a una mujer, niños jugando descuidadamente por la calle, lo de siempre. Se preguntaba si algún día iba a tener algo más de diversión durante sus deberes de héroe, algún incendio o quizás que aparezca uno de sus archienemigos, algo más ''interesante''.
Al hacer contacto con la pared de edificio, buscó la ventana de su cuarto para ingresar. Una vez dentro, se cambió de ropa y llamó a su tía desde lejos.
- May, ya volví - exclamó casi gritando para hacer notar su presencia.
No hubo respuesta. Volvió a llamar a su tía y obtuvo el mismo resultado. Se preguntó si acaso ella había salido para hacer alguna compra o algo por el estilo. Abrió la puerta de su habitación para explorar la casa en busca de su ser querido. Al revisar el lugar, descubrió que la mujer estaba en el sofá, con la televisión encendida, y se había quedado dormida. Delicadamente, se sentó a su lado y movió su brazo para despertarla despacio. La castaña abrió lentamente los ojos y pudo visualizar la cara de su sobrino.
- Veo que regresaste Peter - dijo para luego dar un bostezo y estirar sus extremidades.
- Si, fue un día aburrido - expresó el arácnido. Ahora fue él quién bostezó, pero no por sueño, sino por lo poco interesante que había sido su patrulla de hoy.
- Significa que no están ocurriendo cosas muy graves, eso es bueno - destacó May.
- ¿Qué quieres decir? - preguntó el muchacho sin entender.
- Que por lo menos no aparecen extraños sujetos que quieran matar por diversión o tipos con alas tecnológicas que te quieran matar por meterte en sus asuntos - aclaró la mujer haciendo referencia al buitre, alias ''Vulture''.
Peter movió la cabeza rápidamente al recordar al hombre que por poco hubiese llamado suegro. Adrian Toomes era el típico traficante que le gustaba meterse con cosas que el ser humano no comprendía. La tecnología chitauri con la que negociaba con sus clientes, además de ser poderosa, era también muy peligrosa y también desconocida. Peter no podía dejar que el sujeto continuara manipulando tales objetos y debió detenerlo. Gracias a su irrupción, el padre de la chica, con la que había desarrollado sus primeros sentimientos de amor, estaba en prisión. Incluso recordaba el momento antes de entrar a la escuela para el baile de fin de curso, Adrien le había dado una oportunidad para que no lo molestara con sus asuntos y lo dejó ir. Pero bueno, sus prioridades como héroe estaban por encima de su relación con cualquier chica, por lo que tuvo que dejarla sola para detener a su padre, vaya anécdota.
El joven salió de sus pensamientos y miró a May.
- Tranquila May, si vuelve a aparecer alguien así, le voy a dar una paliza hasta que aprenda a comportarse - aseguró Peter riendo por lo bajo.
- Como digas Peter, lo único que te pido es que tengas cuidado, esos tipos no saben cuando detenerse - advirtió la castaña preocupada por su sobrino.
El joven asintió calmando un poco a su tía.
- Ya que estás aquí, ¿me puedes decir que es lo que ocurrió entre tú y los vengadores?
En ese momento, el arácnido se quedó paralizado, comenzó a sudar de los nervios y un escalofrío recorrió su columna. Ni él mismo entendía por que ese tema lo incomodaba tanto. Con todo el valor que pudo sacar, decidió hablar.
- Bueno lo que pasó fue que..... - empezó a explicar el muchacho mientras se llevaba una mirada atenta de May.
Volviendo con los vengadores
Carol daba por finalizado su entrenamiento, tras vencer sin mucho esfuerzo a Scott y a bucky y derrotar, usando un poco más de su fuerza, a Bruce.
- Perdí, pero fue un buen combate capitana - dijo el profesor Hulk buscando una toalla con la cual secar las gotas de sudor que caían por su frente.
- Concuerdo, hace mucho que no me entretenía tanto luchando - explicó la rubia caminando hacia la salida.
- Gracias por ayudarnos con la práctica jefa - agradeció Scott quien, junto al soldado del invierno, habían visto la pelea entre el gigante y la líder desde una banqueta cercana.
La mujer volteó la cabeza para esbozar una sonrisa hacia el hombre hormiga.
- No hay problema, si vuelven a necesitar mi ayuda ya saben a quien llamar - explicó la capitana saliendo del gimnasio.
Todos en la sala se retiraron a sus respectivas habitaciones para ducharse luego de semejante jornada de entrenamiento, nada más ni nada menos que con la poderosa capitana Marvel.
Por su lado, Carol recorría el complejo hasta que pudo ver a Wanda cruzando la puerta, quien estaba volviendo de hacer unas compras. Dejó las bolsas en una mesada cercana y se topó con la presencia de la rubia.
- ¿Qué hay? - saludó secamente la bruja.
- Nada, recién termino de entrenar con el equipo - respondió la líder poniéndose de brazos cruzados.
- Ah bueno, adiós - dijo la pelirroja, caminando a un lado de Carol. Ésta notó que Wanda estaba un poco rara, por lo que decidió hablar con ella.
- Maximoff - alcanzó a escuchar la de Sokovia antes de alejarse lo suficiente.
La joven se detuvo al escuchar el llamado por parte de Carol.
- ¿Qué sucede? - preguntó molesta.
- Quisiera hablar contigo sobre algo - aclaró la capitana.
Wanda se acercó a la rubia con una cara de pocos amigos.
- ¿Sobre que quieres hablar? - cuestionó la bruja escarlata.
- Acerca de lo que pasó esa noche, que tú estuviste sola con Peter - contestó la líder.
- No hay mucho de que hablar, le dije a Peter lo que sentía por él y me rechazó sin decírmelo directamente, hasta para eso es muy noble - argumentó Wanda.
Carol podía notar la indiferencia con la que le hablaba la pelirroja, aunque al principio juró que pudo ver una lagrima correr por la mejilla de la joven.
- ¿Acaso tu sientes algo por él? - interrogó la rubia levantando una ceja.
- Si, estoy enamorada de Peter, ¿tienes algún problema?, igual tranquila que no te lo voy a quitar, el sólo tiene ojos para ti - confesó la de sokovia cruzándose de brazos, al parecer molesta por su amor no correspondido.
Si bien Carol se imaginaba esta situación, no era lo mismo sospechar que escuchar tales palabras con sus propios oídos. Era cierto que el arácnido era guapo y que fácilmente cualquier chica se podría enamorar de él, pero no estaba lista para una situación así.
- Aunque debo admitir que yo sería mejor novia que tú - agregó la bruja. Éste comentario hizo enojar un poco a la capitana.
- ¿Eh?, ¿por qué lo serías? - preguntó Carol frunciendo el entrecejo.
- Yo soy más joven y estaría mejor visto que estemos juntos, en cambio tu eres mucho mayor que él y te podrían tildar de asalta cunas, además yo podría darle todo el amor del mundo, cosa que tu no podrías - explicó la pelirroja.
Se pudo notar una vena que resaltaba en la sien de la capitana, puesto que lo que dijo Wanda la había sacado de sus casillas. Como si hubiera escuchado el peor insulto que le dedicaron en su vida, le dio una fuerte cachetada a la bruja, dejando ver una clara marca rosada en su pálida piel. La pelirroja se sobaba el rostro justo en la zona donde había recibido el impacto.
- No vuelvas a hacer eso - dijo de manera intimidante.
- Y tu no vuelvas a decir eso, ¿crees que me gusta que me haya enamorado de alguien que es mucho mas joven que yo y tener que soportar lo que puedan decir otros? - reprendió Carol sin rodeos.
- Es lo que aceptaste cuando decidiste estar con el - afirmó la bruja.
- Si, por que lo amo sin importar lo que me digan - reveló la rubia notando como una lagrima se resbalaba por su mejilla.
- Bien por ti - soltó fríamente la de Sokovia.
- Y estas equivocada en algo, si puedo darle todo el amor del mundo a Peter, es lo que hago básicamente desde que él decidió venir a vivir aquí - sostuvo Carol.
- Si, y por eso ya no vive con nosotros, se dio cuenta de lo poco que te necesita - dijo Wanda, sin saber que ese tema ponía de muy malas a la capitana.
Parecía que viejas heridas comenzaban a abrirse en el corazón de la rubia, y era aún peor con cada comentario que escuchaba de la boca de Wanda.
Carol estuvo a punto de impactar una segunda bofetada en el rostro de la pelirroja, quién la detuvo tomando su muñeca.
- ¡Veo que no entendiste lo que te dije! - exclamó irritada la de sokovia, cuyos ojos reflejaban un brillo rojo, característico de ella. Esa mirada podía hacer tambalear a cualquiera, pero al parecer a la capitana no le importaba.
- Vamos afuera, verás que yo soy capaz de proteger a Peter - comentó la rubia caminando hacia la puerta del complejo, en dirección a un amplio terreno de pasto.
- Me parece bien, te mostraré la magnitud de mis poderes - avisó Wanda siguiendo a la capitana al ''campo de batalla''.
Sin mencionar el alcance que esta discusión había alcanzado, la siguiente sería una de las peleas mas épicas que jamás se haya visto.
Una vez afuera
Ambas mujeres se colocaron una enfrente de la otra, a una distancia de 20 metros aproximadamente. Carol comenzó a emanar desde su cuerpo esa luz amarilla que tanto la caracterizaba, mientras que la bruja empezaba a manifestar un humo de color rojo claro en sus manos y unos ojos brillantes del mismo color.
- No creas que me voy a contener solo por que eres parte del equipo - avisó la rubia colocándose en pose de combate.
- Nunca te pedí que lo hicieras, yo tampoco seré piadosa - respondió con otra advertencia Wanda.
Pasaron unos segundos en silencio hasta que la pelea comenzó.
Un rayo de fotones salió desde el brazo de Carol, con dirección a su rival, que usó sus poderes para protegerse, pero no esperó que tras ese ataque la capitana se abalanzara sobre ella, golpeándola en el rostro. Danvers prosiguió a darle puñetazos y alguna que otra patada, pero eran todas desviadas ya que Wanda lanzaba ráfagas de energía a las manos y pies de la rubia, haciendo que ésta falle en sus intentos. Para no ceder terreno, la sokoviana levantó a Carol de los pies con su poder y la arrojó hacia un árbol cercano. Fue tal la fuerza con la que fue lanzada que su cuerpo atravesó el tronco, pero logró caer de pie y con una mano en el suelo. El árbol se cayó producto del hueco causado por la mujer mayor. Por su parte, la pelirroja se acercaba caminando de manera amenazante hacia Carol.
- Necesitarás más que golpes y rayitos de luz para pelear conmigo - dijo Maximoff sonriendo y provocando a su adversaria.
- ¿Ah sí, qué te parece esto? - preguntó de forma burlona la rubia, agarrando con sus manos una gran roca que estaba cerca de ella y lanzándosela a la bruja. Ésta creó un rayo de poder escarlata e hizo añicos el proyectil rocoso. Tras ésto, Carol recurrió de nuevo a la naturaleza para atacar a Wanda, golpeándola en el rostro con una rama bastante gruesa, que se partió al hacer contacto con la cara de la joven. Ésto último fue suficiente para aturdir un poco a la sokoviana, que se tomaba la cabeza debido a que sentía un mareo intenso. La capitana aprovechó el despiste de la bruja para darle un golpe cargado de fotones en el abdomen, mandándola a volar hacia una pared del complejo.
Del otro lado del muro, se escuchó un gran estruendo.
- ¿Qué fue eso? - preguntó Hope a Scott. Ambos estaban mirando la televisión abrazados hasta que escucharon un temblor cerca de ellos.
- No tengo idea, pero no creo que haya sido grave - respondió el hombre hormiga volviendo a posar su mirada en la gran pantalla de la sala.
La avispa siguió sospechando, a tal punto que se levantó del sofá y miró a través de la ventana. Se sorprendió al notar dos figuras femeninas luchando entre ella, lanzándose ráfagas escarlata y rayos de color amarillo.
- ¡Wanda y Carol están peleando, hay que detener esto! - exclamó la castaña caminando apurada hacia la puerta del complejo.
- ¿Cómo sabes que no están entrenando? - cuestionó Scott mirando atentamente a la avispa.
- Están usando sus poderes y ya han destruido una parte del jardín, te quedas corto si a eso llamas entrenamiento - aseguró la mujer sin detener su marcha.
El hombre no tuvo más opción que apagar la televisión y levantarse de su asiento para ir detrás de Hope.
- Joder, espero que al menos no rayen mi coche - soltó el hombre hormiga preocupado al recordar donde había estacionado su auto.
Volviendo al combate, Wanda se reincorporaba luego de chocar contra el muro de las instalaciones, observando como la capitana aparecía entre los arboles con sus manos iluminadas por su poder fotónico.
- No lo haces mal para ser la líder - dijo la pelirroja caminando hacia donde estaba la mujer mayor.
- Gracias por el halago, tu también eres fuerte - reconoció Carol mirando a los luminosos ojos rojos de la joven.
La rubia disparó un rayo de fotones, pero Wanda formó un escudo protector enfrente de ella con su magia para bloquear el ataque. La capitana volvió a cargar contra su rival mientras se distraía con su ataque anterior para darle una patada doble en el pecho. Pero se sorprendió al sentir sus piernas inmovilizadas, solo a centímetros del cuerpo de la pelirroja, quien atrapó las extremidades inferiores de la líder con su energía. Acto seguido, le dio un puñetazo en el rostro a Carol y la lanzó hacia unas rocas cercanas con sus poderes.
La líder sintió bastante dolor al impactar contra esas piedras, debía admitir que ese recurso ya no era útil. Atacar desde lejos y luego sorprender con un golpe cuerpo a cuerpo no era una estrategia que sirviera contra Wanda por mucho tiempo. Dos veces le resultó pero a la tercera se llevó un buen coscorrón en la espalda.
No tuvo tiempo de analizar la situación ya que vislumbró varias dagas de color rojo que iban en dirección a ella. Danvers se levantó del suelo y comenzó a volar sobre el terreno, esquivando los proyectiles escarlata, aunque 2 de ellos la alcanzaron en la zona abdominal. La bruja siguió lanzando dagas hacia la capitana, que esquivaba con algo de dificultad, puesto que la velocidad que alcanzaban esos cuchillos era infernal. Carol decidió acercarse a la sokoviana para darle una serie de golpes, que fueron desviados gracias a la magia de la joven. No obstante dos puñetazos llegaron a dar en el blanco, uno en el estómago y otro en el pecho. Como contraataque, Wanda le dio una patada a la rubia en el abdomen. Como resultado, ambas mujeres salieron disparadas en dirección opuesta, quedando una algo lejos de la otra.
Las dos se pusieron de pie sin esperar demasiado, Carol tenía algunos cortes en el rostro, su labio inferior estaba partido y su traje había sido rasgado producto de las dagas escarlatas. Wanda no estaba mejor, un hilo de sangre descendía desde su boca, tenía varios moretones en la cara y su chaqueta y pantalón estaban un poco destruidos. A juzgar por las apariencias de ambas féminas, la batalla estaba igualada.
- Esto es mejor que entrenar - comentó la bruja volviendo a encender sus poderes color rojo.
- Tienes razón, es más entretenido luchar contigo que con el inepto de Scott - dijo la capitana tronando los nudillos de sus manos.
- Ey, eso no es cierto - gritó a lo lejos una voz masculina.
Era el hombre hormiga, quien iba corriendo junto a Hope hacia la zona de combate. Ambos ''minihéroes'' observaron lo caótico y desastroso que se veía el jardín de la base debido a la pelea entre ambas chicas.
- ¿Pueden explicar que están haciendo? - preguntó la avispa con ambas manos en la cintura.
- Esto no te incumbe Van Dyne, no te metas - advirtió Wanda mirando a la mujer castaña con sus ojos rojos brillantes.
- Maximoff tiene razón, esto es entre ella y yo - agregó la rubia quien poseía ojos amarillos debido a la energía fotonica que rodeaba su cuerpo.
- Esto es ridículo, para pelear de esta manera vayan al gimnasio - aconsejó Scott poniéndose en el medio del campo.
Esas palabras no inmutó a ninguna de las dos mujeres, puesto que Wanda apartó tanto a la hormiga como a la avispa con una ráfaga de su magia. Ambos vengadores cayeron al pasto, pero a varios metros lejos del lugar donde se llevaba a cabo el combate. Al recuperarse, Scott pensó en como detener la pelea, hasta que se le ocurrió una idea. Rápidamente sacó de su bolsillo su celular, marcando un número familiar.
- ¿Qué estás haciendo? - preguntó confundida Hope levantándose del césped.
- Estoy llamando a alguien para que nos ayude - respondió el hombre hormiga, esperando por ser atendido.
En otra parte
- Y eso fue lo que pasó - resumió Peter. Le había contado la verdad de los sucesos a su tía, quien estaba más que sorprendida.
- Entiendo, ¿sabes?, aunque hayas tenido tus diferencias con la capitana, estoy segura de que ella no quería que te fueras del complejo, sólo se dejó llevar por lo que sentía en ese momento - explicó May posando su mano sobre el hombro de Peter.
- ¿De verdad piensas eso? - cuestionó el muchacho sin entender bien lo que quería decir su tía.
- Si, por que ella ..... - hablaba la castaña, pero algo la interrumpió
Un teléfono comenzó a sonar de repente, siendo atendido unos cuantos segundos después.
- Hola - saludó Peter.
- Si, ¿estas ahí? - preguntó Scott desesperado.
- ¿Eres tu Scott?, ¿que sucede? - dijo el arácnido sin entender lo que deseaba su compañero.
- ¡Tienes que venir rápido, Carol y Wanda están peleando y están armando un gran alboroto, date prisa Peter! - exclamó la hormiga.
- ¿Qué Carol y Wanda están qué? - preguntó sorprendido el joven, pero la linea se cortó de forma abrupta.
Peter no entendía bien lo que pasaba, pero dejó el teléfono sobre la mesa y fue a buscar su traje, para luego prepararse para saltar por la ventana.
- Tia May, hubo una emergencia, debo irme - dijo el hombre araña, para luego saltar y comenzar a columpiarse por los edificios de la ciudad.
- Ten cuidado Peter - rogó la mujer mientras veía como su sobrino se alejaba de su vista.
De nuevo en el complejo de los vengadores
El dúo de ''héroes insectos'' salía de entre los árboles, solo para ver horrorizados la siguiente escena.
Carol se encontraba encima de Wanda, quien esta tirada en el suelo. La capitana le propinaba varios puñetazos en el rostro, dándole una golpiza brutal. La bruja logró extender su brazo hacia un pedazo de tronco cercano, que atrajo hacia la rubia para poder golpearla con éste y poder sacársela de encima. Una vez que se pudo liberar, formó una cuchilla con magia escarlata en su mano derecha. Tenía varias marcas en la cara, producto de los golpes que sufrió por parte de su rival, pero debido a la adrenalina del combate, no le importaba.
Se acercó a Carol para poder asestarle con el filo de su hoja mágica, pero apenas podía rozar el cuerpo de la mujer mayor. Era notorio que Wanda no era una experta en el combate cuerpo a cuerpo, pero no le quedaba otra opción si quería derrotar a la capitana. Para hacer que la rubia perdiera el equilibrio, la sokoviana disparó un ráfaga de energía roja a los pies de ésta, haciéndola trastabillar. La bruja aprovechó ese momento para hacerle un corte a su adversaria en el hombro y en el abdomen. Carol gritó de dolor y, disparando un rayo de fotones, alejó a la pelirroja de allí, quien pudo protegerse con sus poderes pero aún así retrocedió unos metros.
- Esto acaba aquí Danvers - afirmó Wanda empuñando su arma escarlata.
- Eso ya lo veremos Maximoff - respondió la rubia volviendo a ponerse en guardia.
Ambas mujeres estaban por atacar, pero sus manos fueron inmovilizadas y envueltas por una sustancia pegajosa. Las dos alzaron su mirada hacia la figura que había interrumpido su pelea, que aterrizó al costado de un árbol cercano. El hombre araña hacía llegado para detener ¿un encuentro amistoso?.
- ¿Qué es lo que les pasa, dejo los vengadores por unos días y montan este alboroto? - preguntó irónicamente Peter.
- Peter, ella no es para ti, sólo has sufrido desde que estás con ella - dijo Wanda forcejeando para liberarse de las telarañas que cubrían sus manos.
- Eso no es verdad, esa mocosa está peleando por que tiene celos de que yo esté contigo y no lo puede aceptar - contestó Carol haciendo lo mismo que la bruja con sus brazos.
- A ver, si el motivo de esta pelea soy yo, deténganse y hablemos sobre ésto - aclaró el arácnido intentando hacer razonar a las mujeres, quienes no hicieron caso a dichas palabras.
- Lo siento Peter, pero ella se lo ha buscado, le demostraré que yo puedo protegerte - aseguró la rubia encendiendo sus manos para destruir las telarañas. Luego comenzó a acumular energía de a poco, cubriendo su cuerpo de un destello luminoso de color amarillo claro.
- Te liberaré de sus ataduras Peter, solo hazte a un lado - ordenó la bruja, deshaciendo la sustancia que retenía sus manos y comenzando a concentrar todo su poder escarlata a su alrededor. Un aura de color rojizo comenzó a cubrir el cuerpo de Wanda, mientras algunas ondas escarlata giraban a su alrededor.
El muchacho había llegado al lugar para detener la pelea, pero resultó ser el detonante para que ambas mujeres decidieran atacar con todo lo que tenían.
- Carol, Wanda, por favor no lo hagan - suplicó el castaño mientras observaba la mezcla de luces que envolvían a todo el campo de batalla. Sino fuera por que el combate tuviera consecuencias de magnitudes inimaginables, podría jurar que estaba viendo un excelente espectáculo de colores.
- Lo siento, pero ya es tarde - dijeron ambas mujeres a la vez.
- ¡Ya basta! - rogó con voz mas fuerte el muchacho. No hacía falta decir que ninguna de las dos estaba escuchando las palabras del arácnido.
- ¡Toma esto! - exclamó Wanda lanzando una gran y potente ráfaga escarlata en dirección a la capitana.
-¡Es tu fin! - gritó Carol disparando de sus brazos un enorme rayo fotónico dirigido hacia la bruja.
Ambos ataques iban a impactar entre sí, hasta que.....
- ¡Deténganse de una vez! - exclamó Peter, que, de un impulso, corrió hacia donde se encontraban luchando las dos mujeres, pero fue demasiado tarde.
Los dos potentes rayos chocaron, desatando una tormenta de destrucción que arrasó con todo lo que se encontraba en aquel campo de batalla, provocando un gran destello de luz debido a la potencia de los dos ataques.
Bueno por fin termine el capitulo 17, uno repleto de acción y con un final incierto.
¿Qué es lo que sucederá más adelante?. Solo hay un modo de saberlo.
Gracias por dedicar su tiempo a esta historia, no saben lo que significa para mi.
Ya son 1800 quienes leyeron esto, no parece mucho pero para mi es un gran orgullo que lo estén viendo.
Si quieren pueden ver mi otra historia, un spider-witch que hace unas semanas empecé.
¡Un saludo y hasta la próxima!
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