Hasta la Ultima Vela

Joven amo ¿aun le tienes miedo a la oscuridad?, ¿ aun te aterra que esas personas vengan por ti? ¿ aun tienes miedo que todo se vuelva a repetir?

Enciendo las velas del candelabro y recorro el mismo camino hasta tu habitación, toco tres veces la puerta pero no hay repuesta, entro a tu habitación tan vacía y fría donde una vez hubo  vida. Me siento al lado de tu cama y dejo el candelabro en la mesita, y soltando un suspiro empiezo a recordar quien estaba debajo de esas sabanas blancas. ¿ Aun tienes miedo?

Joven amo tranquilo ya, yo estaré a tu lado y no me separare de ti esta en el contrato. Eso te lo prometí unos años atrás cuando con vida te paseabas por el lugar, pero ahora dentro de mi estas. El contrato cumpliste, hiciste tu parte al pie de la letra y con tanto detalles, te vengaste, ganaste, tu alma entregaste y como un soplido te esfumaste.

Hice mi parte también te ayude a obtener la victoria, nunca me aleje te seguí como perro faldero, estuve ahí en tu dolor desde el comienzo, estuve ahí cuando no pudiste más y dejaste caer parte de tu mascara, revelando a un niño perdido, a un niño que le quitaron todo lo que amaba. Y yo estaba ahí para ti, para que pudieras seguir recogí cada pedazo de tu miserable alma y volví a pegar tu mascara.

Pobre niño, pobre alma que fue abandonada desde el más alto, un fuego eterno se le condeno, la puerta al cielo se le cerro, fue obligado no tenía opción. Obligado a ser un adulto en un cuerpo de niño.

Fui testigo de tus lágrimas de dolor, de alegría, de tu misteriosa y encantadora sonrisa que muy pocos fueron vistas.

Recuerdos y más recuerdos llegan, cuando hicimos el trato, cuando selle tu ojo, cuando los dos aprendimos ser amo y mayordomo.

Cuando aprendimos ser más que eso, cuando aprendimos ser uno solo.

Recuerdo cuando todo acabo, un dolor llega y no hay sanación. Por primera vez mi trabajo como demonio no era de tal agrado, me odio a mi mismo lo que a pasado, pero nada puedo hacer y tu alma tuve que comer.

Joven amo tu alma era tan exquisita que quisiera probarla otra vez, un sabor tan peculiar y exótico un placer a mi paladar quedo deseando más; pero no solo tu alma me enloquece, tu piel fría de porcelana tan fina me hacía estremecer. Tus labios tan pálidos y lechosos, tus ojos como la misma noche me hacías delirar, me hacías sentir,me hacías amar, siendo un demonio me hiciste pecar.

Me hiciste robar una parte de ti y me hiciste probar tu cuerpo y eres el único culpable en eso. Y tengo un testigo que puede confirmar y es la luna descubriendo tu pálida piel al iluminar la habitación donde unidos estábamos los dos.

Susurrando y suspirando nuestros nombres, sonidos obscenos se a de escuchar, el olor de nuestras pieles al transpirar, besos agridulces tan adictivos que nos hacía querer mas, hasta devorar cada gota de nuestras bocas.

Son los recuerdos que de ti conserve, tan recientes como si fuera ayer, pero se que no es así.

Oh pequeño joven amo, ¿que haz hecho conmigo?¿usaste un hechizo? porque tu partida marco en mi una gran cicatriz que no a parado de sangrar y no se quiere curar.

 Quisiera estar junto  a ti, pero las cosas no son fáciles en este mundo, no funciona así y si debo esperar a que el destino nos vuelva a juntar esperare mil años para poderte recuperar.

Miro el candelabro las velas se están consumiendo pero aun pueden iluminar, me quedare otra noche junto a mis recuerdos en esta habitación de niño pequeño, y no me apartare hasta que la última vela se consuma, y cuando se apague espero que el humo se lleve este dolor de a poco, para que tu espera sea mas llevadera y pueda tenerte en mis brazos y probar tus labios nuevamente y perderme en ellos.

Joven amo, pequeño Ciel cuanto te extraño, cuanto te anhelo, cuanto te amo y te seguiré amando hasta que sea nuestro final, donde no hay retorno y podemos finalmente hallar la paz que nos fue arrebatada.





Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top