Capítulo XIV

Era temprano por la mañana y se escuchaba la lluvia contra las ventanas del castillo. También se escuchaban unos golpes fuertes que provenían de la torre donde se alojaba Leo. De repente la puerta se abrió y salió corriendo.

Había hecho mucho barullo vistiéndose pero ya había acabado la jaula después de mucho trabajo y había dejado a secar las juntas de la puerta que tenían un liquido especial para que la diosa, o eso creía el, no saliera y si se mojaba tendría que volver a empezar.

Llegó a donde estaba la jaula y la escena que vio lo dejo perplejo, no se esperaba eso para nada, sobre la jaula había una pequeña carpa abierta por delante de manera que veía lo que había dentro.

La jaula estaba bien, Mark y Ron besándose contra uno de esos barrotes también. Leo decidió no interrumpir ya que supuso que habían sido ellos los que montaron la carpa, pero eso no quería decir que no le fuera a preguntar a Ron por como llegaron a esa situación. Quería saberlo todo porque, aunque Mark le cayera mal, Ron era su amigo y le gustaba verlo feliz.  

Siguió  durmiendo hasta que las clases empezaron, en la primera clase que tuvo con gryffindor se sentó junto a Ron.

- Y que tal hoy junto a la jaula?- Preguntó alzando una ceja.

Ron se puso rojo como su pelo, es decir, muy rojo. Además tenía los ojos muy abiertos lo que a Leo le hizo gracia.

- Bueno, yo... Me desperté mientras llovía y me acordé lo que nos habías dicho el día anterior, entonces salí corriendo de la habitación y me fui al bosque.

»Cuando llegué Mark ya estaba allí tenía una manta en la mano, estaba bastante mojada. Le pregunté que hacía y me dijo que tapar eso.

» Me pareció extraño pero no pregunté, simplemente me puse a ayudar. Después no me acuerdo de mucho más.

Leo pensó y le dió vueltas a su cerebro de ravenclaw. Llegó a una conclusión, bueno en realidad no pero es lo que dijo:

- Tengo una idea por lo que podría estar allí, ahora atendamos a la clase.

Pasaron la clases con tranquilidad. Al poco tiempo Leo ya no se acordaba ni de lo que le había dicho Ron, y si se acordaba se olvidó por completo cuando llegaron los semidioses que faltaban a Howarts.

Llegaron sanos y salvos atacados por tres dracaena. Pero sanos y salvos. Al llegar a la puerta todos se desmayaron y nadie sabía porque.

Entre varios los llevaron a la enfermería, allí, a parte de los tratamientos mágicos le dieron un poco de néctar, estés seguían dormidos.

Hermione se fue a la biblioteca nada más se aseguró de que los chicos estaban bien, bueno estables. No creía que el desmayo se debiera al esfuerzo físico.

Empezó a buscar en libros de mitología la respuesta de su problema. Miró y buscó hasta que lo encontró.

Se fue corriendo a la enfermería donde Leo y Nico estaban con los demás sentados en un asiento, preparándolo para dormir allí esa noche.

Harry y Ron estaban junto a la camilla de Hazel mirándola dormir inconsciente, se removía en sueños y Harry le acariciaba la mejilla para ver si se tranquilizaba.

- Chicos tengo la respuesta...

Todos se congelaron y la miraron con los ojos abiertos.

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Holi, sorry, tarde mucho... demasiados exámenes trabajos etc. Además es muy corto, no me mateis.

Pero para compensar la espera tenéis un nuevo libro, One-shots Jercy. Está en mi perfil, pasaros y votar😉

Besos,
Yo.

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