XXIII
Jungkook había aparecido después de algunos días. Lo dejaron tirado en el suelo frente a la entrada de su casa como si se tratara de una bolsa de basura. Se encontraba a totalmente golpeado, con heridas graves que debían ser atendidas en el hospital si o si y sin contar que debía tomar mucha agua para que no se deshidratara. La pasó realmente muy mal en aquel lugar donde lo encerró Park pero le quedaba más que claro: No debía meterse en donde no debía. Por qué si le interesaba, era su amiga después de todo lo que habían pasado.
Por otro lado, Taehyung seguía muy dolido por todo lo de Haneul, era más que obvio que no superaría en poco tiempo el tema. Había dejado a un lado el cigarrillo por ella pero ahora lo necesitaba. Se desplomó en la banca que se encontraba alejada de los juegos infantiles mientras inhalaba y miraba todo a su alrededor. Personas que se veían felices o tal vez venían a ocultar sus problemas tal y como él, no se sabía con exactitud qué era lo que le sucedía a cada persona. Taehyung había encontrado una forma de expresar sus sentimientos: Escribiendo. Si, empezó a escribir canciones que probablemente nunca serían grabadas pero elle resultaba un gran alivio como si se desahogara en cada letra.
De su pequeña mochila sacó el cuaderno que suele usar exclusivamente para sus canciones y empezó a pensar en todo su dolor para plasmarlo en una simple hoja que provenía de un árbol.
Una vez me fue dado desde el corazón de los sin amor. Juego con los rompecabezas que faltan piezas. Y parece que mi vida fuese perfecta pero detrás de la sonrisa realmente me duele. Estoy tratando de salvar a mi amor, salvándome a mi mismo con un paraguas.
Aún no terminaba del todo esa canción, sin embargo, sabría que seria perfecta y probablemente las vendería en un futuro. Su atención se desvió hacía una chica parecida a Haneul, su cabello rojizo y largo le había llamado la atención por completo y cuando se dio la vuelta...se dio cuenta que era ella. ¿Como no reconocerla? Sería un tonto. Se encontraba completamente sola, conectaron sus miradas y ella sin dudarlo camino hacía él aunque con un poco de inseguridad.
—Hola, Taehyung—Susurró, el chico la miró expectante mientras debatía en su mente si en verdad era ella o estaba alucinando.
—Han...Haneul—Balbuceó acariciando su cabello pero la chica dio un paso hacia atrás cuando sintió su tacto causando que le rompiera aún más su corazón.
—No tengo mucho tiempo Taehyung, decidí dar una vuelta mientras él no se encontraba en casa. Solo quiero decirte que en realidad lo siento y no es lo que tú crees—Mordió su labio inferior reteniendo sus lágrimas, no lloraría más. Se lo había prometido a ella misma.
—Haneul, quiero preguntarte...¿Por que? ¿Por que te fuiste con ese hombre?—Dijo sollozando, él no pudo retener todas las lágrimas acumuladas. Simplemente se desplomó frente a ella.
—Lo siento, en verdad. Cuídate mucho y a los demás, los amo. Yo tal vez no vuelva a verte en muchos años—Tomó su mano con delicadeza y la besó rápidamente antes de que los guardias que la cuidaban observaran sus movimientos. Le causaba mucho dolor verlo así de mal ¡sufriendo por ella pero no podía hacer más! Taehyung se dejó caer al suelo, sin embargo, Haneul solo se despidió y soltó su mano.
Dejando a Taehyung en el suelo sollozando y sintiendo el dolor de dejarla ir para siempre. No le importaba si las demás personas lo miraban o hablaban de él por su estado, solo se dedicó a llorar y a mirarla irse con esos hombres grandes que la cuidaban en todo momento. ¿Ya no la vería en verdad? ¿Cuantos años tendrá que esperar? No lo sabía pero necesitaba respuestas a sus preguntas, las cuales ella nunca le responderá. Sacó su cartera donde aún conservaba una pequeña foto de ellos dos sonriendo en la piscina, era hora de dejarla ir.
Haneul había prometido no llorar más por que estaba harta de la situación, harta de siempre sufrir y que nadie la tratara bien. Por eso, desde el día anterior cuando sucedió lo de su padre, estaba dispuesta a tomar venganza contra él. No se quedaría de brazos cruzados ni muchos menos le diría a Jimin que hiciera el trabajo, lo haría ella misma. Se adentró a la camioneta mirando por última vez a Taehyung que aún permanecía en el suelo llorando como nunca lo había visto, se sintió mal por no explicarle pero no podía hacerlo o Park en verdad actuaría muy mal contra ella y sus seres queridos. La camioneta avanzó y solo se dispuso a echar su cabeza hacía atrás acomodándose en el asiento y esperando llegar a casa, se encontraba algo lejos debido a que estaba un poco alejada de la ciudad.
Park Jimin la esperaba en la entrada con sus hombres detrás como siempre, la chica bajó con ayuda de uno de ellos y saludó a Jimin con un beso lento. ¿Que había cambiado en ella? Aún no pero estaba en proceso de cambiar muchas cosas. Park la tomó de la cintura para después adentrarse a casa donde estarían aproximadamente dos meses y después de volverían a Busan, primero debía llevar acabo su plan contra su padre y los tratos de Park con personas que no tenía ni la más mínima idea. Pero lo que si había cambiado era su forma de vestir, Jimin siempre la quería ver con ropa pegada y corta pero a la vez decente para resaltar lo hermosa que es y aún más siendo la "esposa de Park Jimin" para todo Corea del Sur.
Habían ocupado las revistas del país con una gran fotografía donde parecen verse con mucho amor...aunque no fuera así. Debido a eso, sus familiares se encontraban en completamente shock al igual que sus amigos y sin olvidar que habían repartidor las revistas y periódicos por toda la institución donde acudía, preguntándose: ¿En verdad es Haneul? ¿Por que escapó?¿Que sucedió? Preguntas que nunca serán contestadas con la verdad. Ella simplemente miró las revistas y periódicos al mismo tiempo que sonreía en grande por verse tan bien en ellas junto a Park.
—¿A donde fuiste?—Pregunto con voz dura y ronca al mismo tiempo que vertía un poco de whisky en un vaso de cristal pequeño.
—Al parque, necesitaba un poco de distracción—Miraba sus movimientos sin perderlos, le parecía sexy de una forma u otra. No llevaba su traje como todos los días, ahora simplemente vaqueros negros ajustados a sus piernas tonificadas y camiseta negra con detalles en blanco mientras que tres botones se encontraban desabrochados y aquellos botines que le encantaban.
—Ya, me parece bien con tal de que no te encuentres con otras personas—Bebió de su vaso mientras caminaba hacía ella y tomaba asiento a su lado.
—Eh no, sólo fue rápido...Jimin—Mordió su labio inferior cuando él volteó a verla esperando que prosiguiera—¿En verdad nos casaremos?
Park soltó una risita y se acomodó en el sillón de piel, abriendo sus piernas y pasando su brazo izquierdo por el respaldo.
—Por supuesto que si, Hanuel. En unos días estaremos hablando de todo eso ¿si?—La chica asintió con una sonrisa en su rostro, estuvieron algunos segundos en silencio hasta que Haneul se colocó en las piernas de Jimin, una a cada lado de las suyas.
Park alzó ambas cejas mirándola fijamente mientras mordía su labio inferior y sonreía. Haneul colocó sus manos en el pecho de este acariciando con lentitud hasta llegar a sus botones y desabrochar los que faltaban de su camiseta. Las manos de Jimin fueron a parar a la pequeña cintura de la chica acariciando de igual manera, con lentitud.
—Joder, Haneul. Me encantas—En un acto de desesperación levantó su vestido, le encantaba que fueran tan prácticos para momentos como este. A ninguno de los dos les importaba si se encontraban sus hombres o las sirvientes por toda la casa y probablemente los escuchen, bueno, eso era un hecho.
—Me doy cuenta que ya no te importa que te vean, eh—Susurro en su oído, Haneul rio y prosiguió a besarlo con lentitud
—También me encantas, Park—Respondió a sus cumplidos después de cinco minutos. Volvió a pegar sus labios con los de él mientras aquellos dos jadeaban entre besos, Haneul apoyó sus manos en los hombros de Jimin al mismo tiempo que lo miraba, su rostro era tan perfecto y verlo de esa manera suplicándole que siguiera, se quedaba sin palabras. Solo se dedicaba a jadear.
——
¿Se imaginan a Haneul como a una idol? Yo la verdad no, la imagino a mi manera
Disfruten, las quiero 💓
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