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savytolkins here i am!! 😘
📍 Dolby Theatre
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user1 😍😍😍
chrisevans siempre me he preguntado... ¿Porqué el blanco te luce tan bien?
user2 corrección, lo que Chris quiso decir fue: "siempre me he preguntado... ¿Porqué aún no te he dicho lo bella que eres al usar cualquier cosa que te haga lucir aún más bella?" #chrisvannah
anthonymackie no pude haberlo dicho mejor @user2
user3 mierda, creo que me he enamorado 😍❤
a tomhardy le ha gustado éste comentario
user4 OMG VIERON ESO????
wordilu puta madre, shit just got real
linah.campbell a goddess 😍
markwahlberg espero que tengas una bufanda para cubrir ése hueco en el medio de tu vestido señorita :)
robertdowneyjr estoy de acuerdo con el #2 ^^
user5 okay, Tom Hardy acaba de darle like a ésta publicación
user5 eso siGNIFICA ALGO???
user6 probablemente sólo sea para jugar con los medios, u know @user5
allytent damn nena 🔥🔥
aarontaylorjohnson luces bien Sav! ❤
user7 @user5 por favor, Savannah Tolkins muy a penas y logró llamar la atención de Sebastian Stan antes de que él la dejara por alguien mejor, ¿porqué Tom Hardy se atrevería a siquiera mirar en su dirección?
a margosha777 le ha gustado éste comentario
chrishemsworth fuck off @user7
A imsebastianstan le ha gustado la publicación de savytolkins
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Savannah bloqueó su teléfono al tiempo que la camioneta se detenía. No iba a mentir, se encontraba parcialmente nerviosa por el inminente reencuentro entre ella y Sebastian, ni hablar sobre conocer al resto del cast del universo de Marvel.
Sin embargo, aquel comentario había logrado bajarle por completo los ánimos. Sí, ella podría mirarse frente a un espejo y sonreír porque era, en efecto, muy linda. Pero comparada con otras mujeres, ella era nadie. Completamente inútil y poco agraciada si la ponían a un lado de Margarita Levieva, o de la propia Charlotte Riley.
Así que descendió de la camioneta con la sonrisa más falsa que pudo poner. Tenía deseos de volver al interior del automóvil, pedirle al chofer que la llevara de vuelta a la casa de Downey y encerrarse horas y horas en la habitación de huéspedes para poder hablar con Indio sobre música, comida y bandas de rock.
Robert sonrió al verla, no siendo consciente de la falsedad en su sonrisa. Los fans a su alrededor enloquecieron cuando vieron al actor acercarse hacia ella para estrecharla en un abrazo.
-¡Luces preciosa cariño!
Cuando Downey se alejó de ella, otros brazos la envolvieron con fuerza y un sonoro beso se estampó en su frente. Savannah reconoció de inmediato el exquisito aroma de la colonia de Chris Evans.
-¡Hey, Sav! Luces bien, eh.
-Evans, luces horrible. ¿Porqué vienes vestido igual que Robert?
-Y que conste que yo me vestí primero.
Robert envolvió un brazo alrededor de sus hombros y mientras se carcajeaba, la arrastró junto a él y junto a Evans hacia la zona de fotógrafos.
-¡Oigan, ustedes! ¡Quiero miles de fotos junto a mí bella hija! Así Mark Wahlberg comprenderá al fin quién es el #1.
Los fotógrafos sonrieron con amplitud y comenzaron a sacar fotografías a diestra y siniestra. Era diferente a la premiere de Transformers del año pasado. Había mucha más gente en los alrededores y escuchaba a lo lejos a una que otra persona gritar su nombre.
Savannah sólo alzaba su mano y sonreía mientras la agitaba de lado a lado, saludando a los de la multitud.
Finalmente, tras otro par de fotos en compañía de Chris y en solitario, fue capaz de continuar el recorrido sobre la alfombra roja, con Evans siempre a su lado. Downey se había adelantado para ir en busca de su esposa, que se hallaba ansiosa por ver de nueva cuenta a su hija adoptiva.
-¿Te encuentras bien?
La rubia giró un poco su rostro hacia su alrededor y suspiró al momento de negar.
-No realmente, es... No lo sé, una extraña sensación en la boca del estómago que no me deja sentirme tranquila.
El castaño la observó en silencio y le dedicó una pequeña sonrisa, en un intento por tranquilizarla. Sin embargo, aquel mismo instante distinguió una cabellera entre la multitud y le fue imposible no maldecir.
-¡Savannah Tolkins! -Scarlett apareció justo a tiempo para evitar que la rubia viera a Sebastian, atrayéndola en un abrazo que sin duda la hizo sonreír-. ¡Oh Dios, es un gusto al fin conocerte! ¡Pero mírate, estás preciosa!
-Oh Dios mío.
Savannah no podía creerlo. Podía oír de fondo los gritos de los fanáticos al ver el abrazo entre ambas mujeres, pero era algo sin duda alguna emocionante para ella al fin poder conocer a Scarlett Johansson. Nate iba a morirse de envidia.
-Eres mucho más hermosa que en fotografías.
Scarlett le sonrió antes de tomar gentilmente el brazo de Evans para llevárselo a la sección de fotógrafos. Savannah miró a su alrededor sin saber muy bien que hacer. Se hallaba sola de nuevo.
-Te ves hermosa.
La sonrisa de la chica se borró a medida que la voz dejaba de hacer eco en el interior de sus oídos. El mundo se detuvo conforme ella giraba, y los sonidos que los rodeaban desaparecían. Sebastian se hallaba de pie frente a ella, luciendo una chaqueta negra lisa, junto a una camisa de color azul que resaltaba sus ojos, y unos pantalones oscuros junto a unos zapatos cafés.
La respiración de la rubia se quedó dentro de su cuerpo, siendo incapaz de moverse o de decir algo siquiera.
-¿Savannah?
Savannah se obligó a sí misma a decir algo, a realizar siquiera una mínima acción para no permitir que la parálisis se prolongara. Respiró antes de hablar, y cuando fue capaz de recuperarse, sonrió lo más cortés que pudo.
-Ho-hola.
Sebastian sonrió levemente al escuchar su tono nervioso, pero al mirar a su alrededor, dándose cuenta de todos los ojos indiscretos que los miraban, la borró. Quizás no estaba siendo justo con ella.
-Savannah...
-No -En el minuto en el que recuperó su voz, pensó en lo patética que se debió haber visto con aquel inusual temblor en sus cuerdas vocales. Recordó lo que Linah le había dicho, así que decidió no ser más la chica débil de la que podían burlarse-. No hagas ni un comentario, Sebastian, no los necesito.
Savannah irguió la espalda y sonrió tanto como pudo mientras pasaba por su lado. No iba a mentir, las piernas le temblaban como si fueran de gelatina y sentía unas inmensas ganas de llorar, estaba también esa rara opresión en el pecho que no le dejaba respirar adecuadamente. Verlo nuevamente había despertado sentimientos en ella que creía ya muertos.
-¿Vas a ignorarme entonces?
-Eso es lo que hacen los ex cuando las cosas no terminan bien entre ellos.
Stan rió suavemente y se colocó a su lado. Ella lo miró de reojo, descubriendo una amplia sonrisa en su rostro. Incluso de perfil terminaba siendo más atractivo.
-¿Y en dónde está tu novio? ¿Qué acaso no quiso acompañarte?
-¿Porqué tendría que decirte en donde se encuentra Tom? -Savannah se giró y lo miró con una ceja alzada-. En donde se encuentre o no Tom, no es de tu incumbencia.
-Entonces no vino, uh.
-No.
Savannah siguió de largo, intentando ignorar al hombre pero éste se mantenía reacio a permitir que eso sucediera.
-¿No vas a preguntar por Margarita? -Al no recibir respuesta, Sebastian la tomó gentilmente del brazo y detuvo su andar-. Antes eras bastante curiosa.
-Antes -Savannah giró el rostro y lo encaró. Stan descubrió que sus ojos verdes, esos que había llegado a amar, lo miraban con una frialdad indescriptible que le hicieron sentir de la mierda-. Ha pasado un año, Sebastian. Intenta meterte en tu cabecita que tú, para mí, ya no tienes importancia.
Savannah se soltó de su agarre y al mirar al frente, descubrió a Susan Downey esperando por ella. Una amplia sonrisa se deslizó por sus labios y con paso firme, avanzó hacia quien era su madre adoptiva, dejando atrás a Sebastian, con su mundo dado vuelta.
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