❝Te amé, te amo, y te amaré en todas mis vidas con todas mis fuerzas porqué eres alguien que simplemente no puede ser olvidado❞

—¡Vamos hermano! No te enojes. —apenado el pelirrojo se fue como perrito callejero sacando pucheros atrás de Yoongi. Recibió un muy cordial “muerete” de su parte. —¡Pero Yooonngiii! —chilló como un bebé.

—Dejá de gritar. —regaño sumiendo su cabeza en su abrigo, la atención de las personas se las estában llevando ellos por los gritos del Alfa, y no es como que le interese mucho tenerla.

—Sólo te estoy pidiendo que me acompañes al festival ¿Qué tanto problema te haces? —se cruzó de refuñando.

—Ya tengo planeado ir con alguien más. —los ojos del pelirrojo se abrieron y fueron hacia él.

—¿Estás de joda verdad? —alzó una ceja.

—No, la verdad es que tengo planeado ir con alguien más.

—Oh... ¿De casualidad es la delegada? Ustedes pasan mucho tiempo juntos pícaro. —molestó dando un sutil golpecito con una cara pervertida. Yoongi frunció el ceño asqueado.

—Ni que estuviera loco.

—Pero si no es ella ¿Entonces quién? ¿Quién podría ser lo suficientemente cercabo a ti para tener salida en plan romántico de tu parte...? —dos segundos, un gritó agudo redundó en los pasillos y Yoongi ya se encontraba contra los casilleros estupefacto. —
¡¿Acaso es Taehyung?!

Otro golpe -peor que ese anterior- chilló entre los pasillos junto con él gritó que pegó Hoseok.

—¡Idiota! ¡¿Qué asquerosidades estas diciendo?!

—¡Pero no me pegues hyung! —
lloriqueó sobando su cabeza mirando a un Yoongi bastante molestó.

Min le gruñó y el pobre alfita le huyó a los ojos. Quizá hacer ese escándalo con Yoongi no había sido buena idea del todo.

—No sé de dónde sacaste que a mí me podía gustar tu pervertido hermano, —levantó su mochila que se había caído en el proceso. —pero no es él, de hecho, tú ni siquiera lo conoces — sacudió la misma. —Oye, ten más cuidado con mis cosas.

Hoseokie ignoró olímpicamente su comentario, se había quedado prendado en sus palabras ¿Cómo que él no lo conocía? Estaba totalmente seguro que conocer a cada persona de la vida de Yoongi, eran casi hermanos por no exagerar, su amistad había sido desde hace tres años, y sí, le parecía bastante increíble que no hubiera notado nada raro en su amigo.

—¿Quién es? —preguntó al rato, Yoongi ya estaba planeando darle un cachetada para que reaccione.

—Ya te dije que no lo conoces. —se limitó a decirle. Hobi frunció su ceño.

—¿Y no puedo conocerlo? —alzó una ceja mirando en su dirección.

—Tal vez, te lo presentaré cuando salgamos con él. —el pelirrojo sonrió.

—Se te ve muy emocionado.

—No es nada. Vamos a clases.

Dos horas de clase, matemáticas compartido con lenguaje, dos libros diferentes, y al fin eran libres. Hoseok no había despegado sus ojos de su mejor amigo, se extrañó mucho cuando lo vió sacar libros de biología ¿Por qué? Se preguntó, era algo extraño que el joven de cabellos azabache este concentrado en otras cosas. 

Se acercó cautelosamente hacia él.

—¿Qué haces? —el Alfa mayor pegó un saltito en su lugar y cerró su libro a tiempo récord.

—Nada importante. —respondió rápidamente, el pelirrojo observó con curiosidad a Yoongi.

—Estás raro.

—Soy raro.

—Pero estas más que de costumbre. —afilo sus ojos en su cuerpo, el pálido le devolvió los mismos ojos fríos y cortantes, torció sus labios al tiempo que se levantaba de su lugar. Ambos no paraban de verse mutuamente, Min con el ceño fruncido y Hoseok con la mirada insistente.

—Dejá de verme así, —se levantó, Hoseok creé que está molestó. —ya te dije no es nada.

Le gruñó, Min no quería le preguntará nada. Hoseok lo observó, no entendía eso que le ocultaba, quizá es injusto que le doliera más.

—No te creo. —respondió con el mismo tono que él, ambos Alfas, ambos dominantes.

Un suspiro salió de los labios de Yoongi. Antes que cualquier cosa pasará prefería mil veces no pelearse, no con Hoseok.

—¿Recuerdas al chico que Taehyung dejó de forma irresponsable a mi cargo? —asintió. —Tengo unas dudas respecto a su condición, quiero saber más sobre eso. —miró el libro. —Creí que sería la forma adecuada de entenderlo.

Levantó la mirada hasta toparla con la de Hoseok, su mejor amigo parecía sorprendido.

—Yoongi...

—¿Qué? —abrió sus ojos de forma grande cuando otro cuerpo más grande que el suyo se abalanzó en su contra. —¡Oye! ¡Maldito, sueltame!

—Mi Yoonie se preocupa por los demás... ¡Es taan tierno! —lo apresó contra su pecho con una sonrisa.

Yoongi sólo quería matarlo. Respiró hondo, bien, le daría el gusto. Uno.

Dos...

Tres.

—¡Ya sueltame carajo! —le dió una patada en su muslo. Un chillido y adiós al cuerpo y la masa de más. 

—Va-valió la pena. —sonrió desde el suelo con un dolor punzante cada vez más extendido en la zona. —Oye... Sí dolió. —puchereó.

—Muerete. —le gruñó.

—Ahs ¿Me puedes explicar cómo es qué somos mejores amigos? —le respondió el silenció pesado de Yoongi. —Tks pero ¿Por qué estás siendo tan amable con él?

—Es algo así como un amigo... Creo. —Hobi lo miró extrañado.

—¿Un amigo que invitaras al festival? —se sentó en en suelo con una sonrisa.

—Cállate, la otra vez fuimos nosotros juntos y no parecías tan molestoso. —
guardo sus cosas. —¿Vamos o te quedas?

—Tengo práctica.

—Entonces nos vemos. —tomó sus monedas, listó para salir, pero Hoseok se levantó al mismo tiempo.

—¿Por qué no quieres ir con ellos Yoongi?

—Eso no te importa. —le respondió cortante, Hobi alzó las cejas.

—Antes eras muy unidos a los chicos, ambos lo éramos.

—HoSeok, no tengo nada encontra de ellos, en serio. Pero no me gusta jugar.

—Entraste por una beca deportiva, YoonGi. —arrugó su ceño.

—Y jugare cuando deba; en los juegos olímpicos —sentenció—. Estoy por graduarme, necesito mantener mi beca, no puedo perderlo por tener notas bajas.

—¿Y por qué no les hablas a los chicos?

—Me dí cuenta que son unos imbéciles, es todo. —intentó pasar por su lado, Hoseok le agarró su brazo.

—¿Entonces por qué no me haz dicho que me alejé?

—Son tus amigos ¿No? Yo no soy tu padre o tu madre para decirte algo. Ahora sueltame. —ordenó.

—Nunca me dices la verdad, estoy cansado de eso ¿Por qué me ocultas cosas importantes para ti?

—Sueltame. —jaloneó y el pelirrojo lo agarró con más fuerza. —¡Hoseok sueltame!

La piel del chico menor se erizó pero ne se movió.

—... La voz no funciona conmigo, Yoongi. —murmuró.

El mayor al darse cuenta se alejó instintivamente un poco, sintió la culpa meterse en su pecho.

—Joder... perdón, yo sólo... en serio odio que me quieran retener, HoSeok.

El otro le miro fijo, sin responder. 

—Te conozco desde que tengo memoria, sí, dejamos de vernos un tiempo pero recuerdo que solías jugar todos los días con tu tío y tu papá, al volver también jugabas, pero no entiendo cómo este año pudo hacerte cambiar, ¿Qué pasó?

Silencio, una profunda cárcel encerrada entre sus cuerpos, entre Yoongi, entre su Alfa. Entre heridas. ¿Qué pasa con su mejor amigo? Yoongi no responde ¿Alguna vez me dirás algo? Yoongi lo evita, tal vez grita pero muy dentro de su corazón, tal vez le dice muy a su modo que espere, que si no responde es porque después le dirá, o tal nunca reciba palabras específicas, tan solo lo necesita ahí, en ese lugar.

Tal vez solo nunca se sentirá lo suficientemente humano para hablarle cara a cara.

—Teníamos ocho cuando dejamos de vernos, pasaron nueve años y en esos años yo no la pasé bien —murmuró—. Me volviste a ver hace tres años, Hoseok. No es que desmerezca nuestra amistad pero hay cosas que no puedo decirte, no porque me haga el interesante o por mierda... Pero hay cosas que son demasiado privadas para mí. Y nada tienen que ver esos chicos, me agradan por muy idiotas que sean, es más personal.

—¿Es lo suficientemente grande como para que detestes jugar?

—Sí y no, yo amo el básquet —sus ojos brillaron levemente—, amo ese deporte. Pero jugarlo me trae nostalgia.

HoSeok ladeo su cabeza, deseando conocer más a YoonGi, porque por muy amigo que fueran, aún no distinguía al YoonGi sincero del mentiroso, ni el real del falso.

—Quisiera conocerte, YoonGi. En serio, siento que eres muy solitario.

Aquello sorprendió a YoonGi.

—Yo estoy acompañado todo el tiempo.

HoSeok lo observó un poco sin poder decir nada más.

—Estás más solo de lo que piensas, pero tienes razón, cuando estés listo para contarme o cuando necesites algo estoy aquí —al fin HoSeok le soltó, y le miro con esos ojos sinceros suya—. No tienes que estar solo.

YoonGi inahlo, luego exhalo, y finalmente le dio un pequeño golpe amistoso, ambos rieron y se entendió que estaba todo bien.

—Nos vemos después de clases Hoseok.

Amo ese fan-art.❤️

¡Espero les guste! 💖

L@s amo 🌹🥀

¡Tengan bonita tarde!