Capítulo 7. Un mal sentimiento

Abrieron sus ojos, estaban en la sala del salón, se miraron entre ellos, estaban sorprendidos. — por fin llegaron — habló Naomi

— ¡NAOMI! — gritó Tanizaki abrazándola — estaba tan preocupado

— hemos estado cuidando de Miushi, puedes estar tranquilo

— ¿donde está ella?

— síganme

Todos siguieron a Naomi, ella les llevó a una habitación cerrada, allí, yacía la chica descansando, también estaba Ranpo, Gin, Yosano, incluido Akutagawa

Atsushi se había emocionado al verlo bien y no evitó abrazarlo, aunque Higuchi lo empujó, — Creí que debíamos morir todos — dijo Fyodor mirando a Dazai

— No, solo darle un gran día — respondió Dazai

— ¿Donde está Chuuya? — preguntó Mori

— ¿y Toru? — preguntó Atsushi

— están jugando con Miushi — dijo Yosano — nosotros solo cuidamos su esencia

— Jinko usa olfato

— no soy perro, ni pokemon — se quejo. Aún así lo hizo.

Las organizaciones le siguieron, Atsushi fue por la mansión hasta llegar a una sala de televisiones— estuvo aquí, no tiene mucho que se fue

— es cada escenario que estuvimos — mencionó Kaiji — es una pequeña genio

Atsushi siguió avanzando hasta toparse con un enorme comedor, allí, Miushi estaba en medio, Sousuke y Toru a sus lados — tardaron mucho — dijo Sousuke

— era fácil de resolver

— acertijo — dijo Ranpo. — ¿por eso me sacaron al inicio?

— no me quedaba de otra Ranpo-San — dijo sonriente Miushi — Dazai y Fyodor fueron más fáciles de engañar

— Creí que todos moriríamos — se quejó Fyodor

— A mi me distrajo con alcohol — se digno Dazai a decir

Miushi sonrió — es aburrido siempre tener a Toru

— oye

— opinó lo mismo — mencionó Sousuke

— traidores

Miushi les sonrió — ¿cenamos?

Las organizaciones se miraron y se sentaron. Atsushi le miró — Miushi ¿no vas a comer?

— no puede comer — dijo Fyodor — si lo hace se quedará aquí

— bien dicho Fyodor, es por eso que Gogol te ama — respondió haciendo sonrojar a más de uno

— fue divertido, espero poder volver a hacerlo algún día, el día de mi muerte quizá pueda jugar con ustedes siempre

Dos hombres aparecieron, cada uno tomó los hombros de la chica — maldición, Jacob, Wilhelm; no lleguen como si nada — se quejó Toru

— bien, llegaron por mi — mencionó levantándose — gracias por jugar conmigo.

Los Grimm desaparecieron junto a la chica, todos se miraron — ¿no tienen el sentimiento que algo malo pasará?

El piso se volvió un hoyo negro donde todos cayeron.

Despertaron en sus casas, con fuertes dolores de cabeza y una enorme duda de lo sucedido. Habían pasado 2 días y ninguno recordaba nada; sentían un horrendo escalofrío.

Una sensación a humedad, y una sensación a que algo faltaba, el mirar al cielo era lo único que les quitaba aquellas ansias 

...

Fue divertido, la siguiente historia comienza en el próximo capítulo

🖤💀🤍

¡Gracias por leer!