— ¡Asahi! —El castaño tembló ante el grito del entrenador—. Concéntrate o no entrarás a jugar.

El Karasuno se encontraba practicando antes del inicio de los partidos y todos podían notar lo distraído que se encontraba la estrella del equipo, llegando hasta el punto donde Ukai no dudaría en dejarlo en la banca si recibía el balón con el rostro una sola ve más.

— ¡Sí! —Exclamó tratando de sonar seguir, fallando totalmente en el intento.

Su atención no estaba para nada dentro de su práctica en lugar no podía parar de dirigir su mirada hacia el otro lado de la cancha donde se encontraba cierta chica de Nekoma, la cual desde hacía un rato se encontraba charlando, casi unilateralmente, con Kenma. Por alguna razón quería ser él.

Dedujo que era parte del equipo femenino por su uniforme rojo, sin embargo aquella era la primera vez que la veía.

La chica era bellísima ante sus ojos; se le notaba bastante alta notando su diferencia de estatura con su compañero, podía ver unos ojos bastante llamativos y un cabello que lo invitaba a ser acariciado. Ella vestía unas mangas negras junto a unas rodilleras del mismo color.

El balón volando junto a su cabeza lo regresó a la realidad haciendo que volteara para ver a Nishinoya recibiéndolo con facilidad.

—Si la sigues viendo así ella se dará cuenta —se burló su amigo peligris soltando una carcajada a su costado.

Como si fuera un llamado de alerta, en un instante tuvo al escandaloso dúo de segundo año cada uno a sus costados.

—Y... —llegó el más alto mientras alargaba la palabra—, ¿quién es la bella chica que enamoró a la estrella de Karasuno?

—No la conozco, solo la vi —se apresuró a decir mientras alzaba sus manos en su defensa.

— ¡No lo negó! ¿¡Es ella!? —Gritó el líbero teniendo de inmediato la gran mano del castaño cubriendo su boca para evitar su escándalo, sujetando su brazo con su otra mano para que dejara de señalar a la chica.

Antes de darse cuenta el pequeño pelinaranja apareció junto a ellos, involucrándose en la charla—. Ella está hablando con Kenma, ¿quieres que vaya a hablarle?

Sin embargo la voz del entrenador llamándolos interrumpió su conversación, ordenándoles a los jugadores acercarse a él los obligó a dejar de lado el tema para ir a sentarse justo donde el rubio les había indicado.

Tan solo que Hinata había corrido en dirección opuesta, infiltrándose entre los jugadores de Nekoma.

—Primero será el partido de las chicas, será bueno que le presten atención a su juego. Son parte de su escuela también y no les vendría mal que as ayuden con algún consejo.

Todos asintieron ante la frase del entrenador, notando a ambos equipos de chicas entrar cada uno de un lado de la cancha, se dieron por terminadas las charlas que podían tener los chicos fastidiando un montón a Noya y Tanaka quienes querían seguir sonsacando al pobre de Asahi.

El castaño de pelo largo aún no podía apartar su mirada de la chica de uniforme rojo, junto a su equipo se acercó a la cancha, pero lo que le llamó la atención fue que no se colocó junto a sus compañeras sino que se juntó al resto del equipo que básicamente estaría en la malla.

"Pero su número es el 5, no creo que sea nueva"

Interrumpiendo sus pensamientos llegó la pequeña mandarina casi rodando en el suelo mientras era regañado por el capitán.

—Se llama Iwasaka Nana —anunció haciéndole lugar entre los números 4 y 5.

Por un momento apartó la mirada y la atención de la conversación a su costado para ver de nuevo a la muchacha una vez que el partido dio inicio y ella seguía fuera de juego. Esta se encontraba atando su cabello en una coleta mientras mantenía la pequeña liga entre sus dientes.

En ese instante se encontró con la mirada de la chica sobre la suya, haciéndolo correr el rostro con rapidez debido a la vergüenza.

—Ella es la líbero y según Kenma sus habilidades son casi tan buenas como las de Nishinoya- senpai —aseguró el pelinaranja haciendo que los más cercanos giraran para ver al aludido quien se encontraba viendo a la chica con un brillo de clara competencia en sus ojos—. Él dice que es bastante agradable y conversadora, más de lo que parece.

— ¿Te ha dicho algo más? —Dijo en voz baja el castaño mirando tratando de evitar la divertida mirada de Suga.

—Oh, casi lo olvido, salía con Ushijima-san —comentó sin más recordando lo que su amigo le había dicho.

— ¿¡Qué!? —De nuevo fueron regañados por el capitán pidiéndoles hacer silencio.

—Creo que dijo que ellos terminaron hace unos pocos meses —habla en un susurro disimulado para no escuchar algún regaño.

El silbato dio por finalizada la charla, todos enviaron sus miradas hacia el partido notando a las chicas colocándose en sus posiciones mientras que el resto de las jugadoras de Nekoma animaban a su compañera que salía a sacar. Por un momento y sin quererlo, Asahi se encontraba viendo de nuevo a Nana.

Ni él ni ninguno se la imaginaba saliendo con Ushijima.

El partido continuó de igual manera, las chicas vestidas de rojo llevaban una gran ventaja contra las de Karasuno a pesar de que estas le estaban dando una buena batalla. Todos lucían asombrados ya que era la primera vez que veían jugar a las chicas de Nekoma dándose cuenta que eran idénticas a sus compañeros masculinos: tenían una defensa inquebrantable, sobre todo con su única líbero.

Y hablando de la líbero, la chica había estado intercambiando divertidas miradas con la estrella del equipo masculino del Karasuno, en momentos sus miradas cruzaban de forma casual haciendo que el chico moviera con rapidez su rostro mientras se sonrojaba de forma violenta divirtiendo más y más a la chica.

Luego de dos sets, el partido entre las gatas y las cuervos había dado con la victoria hacia Nekoma, sin embargo todos había notado lo mucho que habían mejorado las chicas de Karasuno, nada más les restaba seguir practicando y con esto seguirían mejorando cada vez más.

Los chicos se pusieron de pie ya que su partido venía a continuación, no obstante Asahi se quedó paralizado cuando notó a Nana caminando en su dirección y poniéndose justo frente a él.

Lucía como si fuera a desmayarse en cualquier momento.

—Hola, soy Iwasaka Nana —dijo mientras hacía una leve reverencia frente a él—. Sé que usted es Asahi Azumane, la estrella de Karasuno. Es un gusto por fin conocerlo, senpai.

El pobre chico estaba paralizado y por completo sin palabras, a su espalda sintió a Hinata susurrando que la chica era de segundo año. Tan solo la saludó debido a Sugawara que se puso junto a él mientras sujetaba su mano y la sacudía como un saludo.

—Me has llamado la atención desde hace mucho tiempo y he notado que hemos cruzado miradas en varias ocasiones, ¿le gustaría tener una cita?

Si es que antes se encontraba paralizado, ahora estaba en completo shock debido a lo que acababa de escuchar.

¿Ella? ¿Acaso ella? ¿En serio ella? ¿Cómo ella había?

¿¡Una cita!? ¿¡JUNTOS!?

No solo él sino que varios de sus compañeros, los cuales habían estado espiándolo, se quedaron por completo boquiabiertos ante aquella proposición de la chica, siendo traído de nuevo a la realidad con un golpe por la espalda de parte de Tanaka quien le "gritó" en susurros para que aceptara ya.

—M-Me encantaría —dijo aún con un leve tartamudeo y todo su pánico se esfumó cuando vio a la chica sonriendo justo frente a él.

Tuvo que contener unas inmensas ganas de abrazarla con fuerza.

— ¡Genial! Podemos intercambiar números cuando se acaben las prácticas —hablaba con sumo entusiasmo lo que ensanchaba cada vez más la sonrisa y el sonrojo de Asahi—. ¡Suerte en el partido!

Con la misma rapidez con la que llegó, se fue una vez que los chicos fueron llamados a la cancha para su partido con los gatos, llegando junto al resto de su equipo quienes empezaron a regañarla por animar a sus contrincantes.

Y por otro lado estaba Asahi, el chico no se dio cuenta el momento en que se había colocado en posición ni notaba qué equipo iba a sacar primero, su mirada, atención e interés se encontraban gobernados por la bella líbero de Nekoma y de no ser por el golpe en su nuca, así se habría mantenido el resto del partido.

—Deja de soñar despierto, ya tendrás mucho tiempo para admirarla en su cita —bromeó el capitán regresando a su posición justo detrás de él.

Claro, ellos tendrían una cita. ¡Saldrían en una cita!

Editado el día: 7 de mayo de 2021

Reesubido el día: 10 de mayo de 2021