ACTO I (Octava Escena )

Escena VIII: La historia de Curtenlo Rotilo Gómez

Fecha: 13 de octubre del 2022 (Tarde)

Personajes:

· Curtenlo Rotilo Gómez

· Esther Rutfile Gómez

· Oscurto Prutero

· Ruita Gortel Nuntino

Lugar: El interior del bosque

(Descripción del lugar: El interior del bosque es un espacio amplio que consiste en un espacio amplio. En el lado izquierdo, se encuentran unos árboles que se ubican en el bosque. En el lado derecho, se encuentra unos árboles que se ubican en el bosque. En el centro, se halla una leña que se encuentra en el centro.

(Se abre el telón) (Ingresa Curtenlo Rotilo Gómez caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa Esther Rutfile Gómez caminando al escenario por el pasillo derecho)

Curtenlo: (respetuoso) Madre, creo que recordarás mis primeros días siendo un cazador de brujos. Empecé a odiar la magia negra gracias a que el Diablo ha roto un pacto conmigo, porque parece que ese ente diabólico solo quería deshacerse de mí. Si quieres te cuento sobre esa macabra experiencia para que no puedas dormir hoy en la noche.

Esther: (miedosa) Curtenlo, tengo miedo de que vayas a contarme esa experiencia aterradora. Me acuerdo que en ese instante te mantuviste en la cama mientras el Diablo intentaba convencerte de venderte tu alma, porque parece que ese ente diabólico buscaba que te convirtieras en un monstruo terrible. Creo que debemos evadir esta historia.

Curtenlo: (grosero) Te lo voy a contar. Ese hecho me marcó para siempre, porque me hizo convertirme en alguien que odia la magia negra por ese pacto fallido del Diablo. Creo que ahora necesitas que te lo cuente más despacio. Cuando era un niño, el Diablo quiso entrar a mi cuarto para persuadirme de venderme su alma.

Esther: (quejona) Lo que pasa es que tú de niño eras una persona a la cual le encantaba la magia negra, pero me acuerdo que una vez por andar jugando de ser un brujo, pues invocaste al Diablo. No pude dormir esa noche, porque estabas gritando en tu habitación. Ahora eres diferente, porque pareces que odias lo que amabas de niño.

Curtenlo: (grosero) Claro que sí, madre. Cuando el Diablo entró, me dijo que quería quitarme mi alma, pero luego le dije que no se lo iba a permitir. Le juré que quería convertirme en un brujo, porque quería sentirme importante y valorado. No quería ser un chico ordinario El Diablo me traicionó, porque me dijo que no podía ser un brujo.

Esther: (quejona) Es que no puede ser tan caprichos con tus suenos. Tus ambiciones en la infancia no eran normales. Ahora mejor ve a tu habitación, porque tu padre va a traer algo para almorzar, porque hemos estado hablando durante toda la mañana y me ha dicho que no has ido a trabajar. Espero que logres cazar a un brujo o por lo menos un venado.

Curtenlo: (grosero) Me volví un cazador de brujos cuando el Diablo me traicionó. Aquella noche estaba tan herido que solo tenía ganas de estar resentido durante un tiempo, aunque luego apareció un gusto culposo que empecé a tener en esa época que era malograrles la vida a las demás personas. Me empezó a gustar mucho.

Esther: (quejona) Obviamente que pensabas en deshacerte del Diablo, porque te traiciono, pero no pensé que serías capaz de mostrarte con tanto odio al Diablo. Cuéntame de tus aficiones por ejemplo para que vaya recordando más aspectos sobre ti. Recuerdo que te gustan los juegos de mesa y exterminar a los brujos más poderosos.

Curtenlo: (grosero) Los brujos son una amenaza terrible, porque utilizan la magia negra como un acto de egoísmo. A veces quisiera exterminar a todos los brujos por ser tan desgraciados de quitarles las vidas a los demás. Creo que el Diablo debe morir, porque es una persona desgraciada que simplemente no quiere fallecer.

Esther: (quejona) Curtenlo, ahora solo quiero que te vayas al trabajo, porque te recuerdo que eres alguien desempleado y que no tienes dinero. Recuerda que el trabajo duro significa que tu esfuerzo es fuerte y permanente, pero si no te esfuerzas entonces yo no entiendo cuál es la razón de tu odio hacia la magia negra.

(Curtenlo Rotilo Gómez comienza a derramar lágrimas de sus ojos)

Curtenlo: (llorando) Esther, mi mayor trauma de la infancia es que nunca fui querido. Siempre fui desplazado por mi padre y parecía que siempre alguno de ustedes me desatendía, porque la verdad es que soy distante de mi familia. Tengo miedo, porque la verdad es que yo tengo un poco de problemas con mi padre.

Esther: (quejona) Curtenlo, creo que ahora debes intentar relajarte, porque debes intentar mostrarte como una persona bondadosa que es capaz de hacer el bien, aunque tengas ganas de hacer el mal. Ahora no te recomiendo que te empieces a sentir mal, porque estoy un poco harto de tu comportamiento. Me gusta que seas callado a veces.

Curtenlo: (llorando) Esther, ahora dudo de que me quieras ayudar a sentirme mejor, porque tengo un poco de conflictos contigo. Creo que ahora me debería sentirme mejor, porque el Diablo ya no me visita. Ahora mi vida ha cambiado desde que empecé a odiar la magia negra al instante. Siempre supe que el Diablo era muy traicionero.

Esther: (quejona) Curtenlo, no puedes reclamarle al Diablo por ser tan malo contigo, porque la verdad es que siempre has tenido un comportamiento distinto a los demás niños, porque tienes problemas para concentrarte. Digamos que tu padre siempre te ha querido proteger del mundo y sobre todo de la magia negra por completo.

Curtenlo: (llorando) Qué bueno que sea así, porque la magia negra es inmunda. El Diablo no existe, aunque recuerdo haberlo visto cuando era un niño pequeño. Creo que en ese momento se me apareció ese ente diabólico y pensaba que era mi fin por completo. Pensaba que era una persona normal hasta que conocí al Diablo.

Esther: (quejona) Curtenlo, espero que no quieras más sorpresas, porque tu padre siempre va a intentar que siempre te alejes de él. Ahora solo quiero ayudarte a hacerte sentir bien. Tu padre siempre va a querer tu bien, pero a veces actúa de una forma precipitada. A veces pienso que debes ocuparte de lo que diga ese hombre.

Curtenlo: (llorando) Esther, creo que ahora yo me siento tan mal, porque la verdad es que tengo un poco de problemas con mi padre. Siempre se comporta de una forma distante, pero ahora quiero sentirme tan bien conmigo mismo. Ahora creo que necesito llegar a sentirme bien, pero creo que debo comportarme de una forma terrible.

Esther: (quejona) Curtenlo, ahora solo quiero que empieces a tomarte en serio lo que te diga tu padre, porque ahora parece que ese hombre va a querer perjudicarte de alguna manera. Ahora solo quiero que me ayudes a sentirme mejor conmigo mismo. Me siento tan mal después de todo lo que me has dicho. Creo que necesito tener un poco de contacto.

Curtenlo: (llorando) Esther, por favor no te alteres conmigo, porque la verdad es que yo no quiero tener mayores problemas. Parece que siempre quieres alterarte por cualquier razón. Creo que ahora debo ir a trabajar, porque parece que simplemente me quieres evadir cualquier razón, porque parece que siempre quieres estropear todo.

Esther: (quejona) Curtenlo, por favor no quiero que hagas enojar a tu padre, porque no puedo dejar que ese hombre te haga daño. La verdad es que no podemos dejar que él vaya a ocasionar tanto daño ahora. Me parece que nosotros vamos a tener un almuerzo en este momento, pero parece que pronto necesitamos estar tranquilos.

Curtenlo: (llorando) Madre, me voy a tranquilizar, pero solo si me prometes que me dejarás tranquilo. Ahora creo que necesitamos prestar atención a lo que estamos haciendo. En este momento, solo quiero descansar un poco para no sentirme tan bien. La verdad es que yo quiero tener un poco más de cercanía contigo, porque mi padre puede venir.

(Ingresa Oscurto Prutero caminando al escenario por el pasillo izquierdo)

(Ingresa Ruita Gortel Nuntino caminando al escenario por el pasillo derecho)

Oscurto: (cordial) Curtenlo, perdón por haber sido tan distante, pero en realidad yo he tenido varios problemas conmigo. Creo que enseguida nosotros tendremos que charlar sobre algunos temas pendientes como el trabajo que tienes, porque parece que siempre quieres tener problemas con ciertos brujos malignos. Espero que captures a uno.

Ruita: (nerviosa) Señor, creo que usted me raptó. Yo pensaba que era el padre de Hagfio, pero ahora creo que usted no es su padre. Quizás deba irme a otro lugar para intentar no incomodar a esta familia que no conozco. Me siento nerviosa, porque hoy seguro que pronto me tendré que ir para otro lugar con el objetivo de que no me sienta incómodo para nada.

(Curtenlo Rotilo Gómez se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Esther Rutfile Gómez se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Oscurto Prutero se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)

(Ruita Gortel Nuntino se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)

(Cierre del telón) (Fin de la escena VIII)

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top