13/02/xx
09:50 am

Por alguna razón, que ningún estudiante discutía, aquel viernes no había clases; todos habían decidido dedicar la mañana a no hacer nada, para acumular energías y disfrutar por la noche. Mike se había llevado a Jeremy fuera del campus, a una cita romántica para oficializar la relación, y Vincent invito a Scott a pasar el día juntos, hablando de temas al azar o conociéndose un poco mejor.

- y, como Roy es un pendejo, lo expulsaron de la universidad de música a la que tanto había deseado asistir- conto Vincent, jugueteando con un lápiz entre sus manos- asi que, desde que lo expulsaron, no me deja tranquilo.

- que molestia- concluyo Scott, lanzando la pelota de goma contra la pared- no se si me gustaría tener un hermano menor, pero Roy suena muy irritante- se distrajo, atrapando la pelota con la cara, ganándose una burla de parte del peli-morado- no te rías, maldita sea.

Vincent, aun riéndose, se levantó de la silla y camino hasta la cama en que estaba Scott, besando con suavidad el lugar donde había impactado la pelota- se lo mucho que duele ese golpe, por eso me rio.

Las mejillas del peli-negro se tiñeron de una suave tono rosa, con la mirada boba y una sonrisa discreta, apartó a Vincent con suavidad. A pesar de haber aceptado el cariño de Vincent, porque ninguno de los dos podía llamarlo de lleno amor, aún le molestaba un poco el contacto que mantenía el otro sin cuidado.

- no me vengas con que te molesta que te bese- se quejó Vincent, cruzándose de brazos- ya no me creo esa excusa.

- no es eso...- murmuro Scott algo apenado, apartando la vista de los ojos de Vincent- es solo que... Aún es un poco extraño para mí.

Soltando un suspiro, el peli-morado regresó a su sitio, dejándose caer pesadamente en la silla. A pesar de que el progreso en cuanto a la relación de ambos era muy notable, no entendía porque aún le parecía incomodo o extraño un ocasional beso, o alguna caricia. Tal vez, algunas veces, si se excedía con el menor, pero eso era algo ocasional.

- no te enojes conmigo Vincent, no tengo la culpa de que las cosas sean así- pidió Scott levantándose de la cama, tomando su chaqueta y encaminándose a la puerta- te go que ir a hacer algo, nos vemos en la tarde.

El mayor solo asintió con la mirada perdida, Scott sabía de sobra que Vincent estaba pensando en él y en la "fobia" que padece. Resignado, el peli-negro de retiro de la habitación, dejando solo a Vincent, solo con sus pensamientos.

- tal vez tenga razón... Tal vez voy muy rápido con él; no es fácil superar una fobia de un día para otro- tomo su celular, acariciando la idea de llamar al menor y pedirle disculpas por ignorarlo segundos antes- creo que puedo hacer algo mejor...

Decidido, envió un mensaje a Scott, pidiendo que pasara por la habitación cuando se hubiese desocupado. Solo necesitaba papel, lápiz y un poco de creatividad para ejecutar el plan más extraño que se le había ocurrido hasta la fecha: un sendero de notas.

12:45 pm

Scott se situó frente a la puerta de la habitación de Vincent, intrigado por la razón de la cita que le hizo el peli-morado horas antes, luego de aquella extraña discusión. Entró con ayuda de la copia de la llave que le había dado el mayor, encontrándola vacía por completa.

- no estoy de humor para bromas...- gruñó decidido a irse, notando que tras la puerta había algo pegado, algo nuevo- ¿que... Es esto?...

Cerró la puerta y contemplo con curiosidad la nota. Dudoso, la despego de su sitio para acercarla a su rostro y leerla.

"Scotty~ juguemos un juego. Sigue las notas hasta encontrarme; te aseguro que si me encuentras y muestras todas las notas, te daré un dulce premio.

V."

Scott suspiró algo cansado, decidió dejar la mochila que cargaba en la cama libre y seguirle el juego; dejó la habitación buscando con la mirada la siguiente nota, encontrándola pegada en la ventana al final del pasillo.

" en cada nota te diré algo que me gusta de ti, junto con la pista de donde está la siguiente nota. Empecemos.
Me gusta lo suave de tu cabello. Ahora baja al primer piso y revisa tras la puerta de entrada

V."

Scott tomó la nota, guardándola entre su chaqueta junto con la primera que había encontrado, se dirigió a las escaleras y bajó a pasos tranquilos; en su mente pasaban miles y miles de razones por las cuales Vincent podía estar haciendo tan extraña cosa, más no encontraba una razón lógica. Una vez en el primer piso, se acercó a la puerta, viendo la nota pegada en la pared tras la puerta.

" tienes una forma de hablar, y de insultarme, muy dulce~ ¡adoro el sonido de tu voz! 
Ve a la banca junto a la farola frente a los dormitorios.

V."

Mientras Scott salía de los dormitorios, buscando el lugar indicado; Vincent seguía los movimientos del peli-negro oculto tras un árbol, listo a salir corriendo a la siguiente ubicación cuando el chico encontrase la nota. Scott se aproximó al lugar, buscando por todos los sitios posibles la nota, sin encontrarla en algún lugar. Se sentó en la banca, creyendo que Vincent se burlaba de él y lo ingenuo que era.

- tal vez...- pasó su mano a la parte de abajo del asiento, encontrando chicles, algunas porquerías de dudosa proa esencia y una nota de papel pegada- Vincent, esto es asqueroso.

"Amo esa expresión de fastidio que pones cada vez que te beso o te doy un cariño; es muy tierna.
Ve a la cafetería, a la mesa donde solemos almorzar con Mike y Jeremy.

V."

Scott se levantó y camino hacia el lugar indicado, sacando su celular y contemplando el menaje que le había mandado el mayor horas antes, pidiéndole que se reunieran a hablar. "Ven a mi habitación cuando termines, tengo unas cuantas cosas que decirte y quiero verte. Te quiero Scotty."

Sonrío como idiota, ese apodo lo había detestado toda su vida, de todo lo que odiaba ese apodo estaba en segundo lugar; aunque de labios de Vincent le parecía de los más delicioso, dulce y cautivador que podía decir.

Encontró la nota luego de revisar unas diez mesas, habiendo olvidado donde se sienta a comer desde hace unos días.

"Adoro tu sonrisa, es extrañamente hermosas; aunque tienes rastros de solos, es muy bella.
¿Recuerdas cuando nos quedamos atrapados en la biblioteca? Ese es el siguiente destino.

V."

Ahora la cosa se ponía sería, ¿un sonrojo? Vamos, sólo había alargado su sonrisa, nada fuera de este mundo... Pero, había bastado para sonrojarlo. Aceleró el paso, ahora le intrigaba saber que decía la siguiente nota, y la siguiente; quería descubrir que tenía por decir al final el peli-morado, no lo admitiría, pero estaba ansioso por verlo de nuevo.

Frente a la estantería en que pasaron la noche, muertos del frío por culpa de Scott, encontró la nota; el papel ahora era diferente, de color lila, con uno que otro corazón o flor grabado en el mismo.

"Esos ojos que siempre estas distraídos, o centrados en tu teléfono me parecen curiosos; el tono verde que tienes en los ojos me mata.
Pasemos a la última vez que te ayude, en el pasillo de la facultad de tecnología, falta poco cariño.

V."

Ahora sí, no había forma de echarse para atrás con lo que empezaba a sentir. Corrió fuera de la biblioteca, buscando la facultad y luego el pasillo, con el corazón acelerado y las mejillas sonrojadas. La nota esperaba por él allí, en la esquina más escondida del pasillo.

"Que seas más bajo que yo me parece curioso, pero te da ese aspecto tierno que tanto me gusta.
Regresemos a donde empezó esto, ve a tu habitación y revisa tu escritorio. No preguntes cómo entre allí~

V."

Eso le resultaba extraño, no entendía cómo se relacionaba su habitación con lo que está pasando, pero no le importo y corrió hacia su habitación; abrió la puerta una vez estuvo en frente de la misma, entro sin siquiera cerrar y se acercó al escritorio, buscando la nota bajo sus cuadernos y libros. La encontró pegada en el libro de idiomas.

"Eres introvertido, tímido e inseguro, no te culpo por eso, pero me agrada que seas así, porque eso significa que solo yo puedo verte como realmente eres ❤️
Regresa a mi dormitorio y revisa la puerta de mi habitación, falta poco Scotty~.

V."

Suspiro algo cansado, ¿no era más fácil simplemente verlo allí desde un inicio y ya? A estas alturas ya no importa, solo importa descubrir a que pretende llegar Vincent. Bajo la velocidad, caminando apresurado de regreso al lugar donde inició el juego. Subió las escaleras y se plantó frente a la puerta, despegando la nota de papel rosado.

"La fobia que padeces es tan extraña que me llama mucho la atención, quiero descubrir todo de ti.
Sube a la azotea, la última de estas está allí.

V."

Scott subió los últimos pisos de a dos escalones, llegando en menos tiempo del usual. En el muro de piedra que evitaba que cayera estaba la última nota según la anterior, la tomo y leyó sintiendo como sus mejillas se teñían de rojo.

"Pero, de todo lo que he descubierto de ti, lo que más me gusta son tus besos. Sé que te molesta que te bese, pero es que tus labios saben delicioso.
Baja a mi habitación y entra, tu premio espera allí.

V."

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Sin duda uno de mis capítulos más largos. Aunque me gusto como quedo.

Últimamente leo muchas historias de notas y mensajes entre parejas, y pos, bueh este es el resultado.

Como pidieron romance y Lemmon, lo divido en dos porque #YOLO.

Nos leemos luego :)