Muchas gracias por todo el apoyo <3 de verdad. Wattpad hace lo posible por eliminarme la historia así que es bonito ver que el esfuerzo a válido la pena.

Respondiendo una duda, no hay Naegiri en esta historia. Ellos dos mantienen una amistad, casi como hermanos. XD ¿ustedes no ayudarían a su mejor amigo (a) a superar sus nervios?

~७~

Makoto se despertó a las cinco de la madrugada, ni siquiera pudo conciliar el sueño. Maldita sea, ojalá Togami no note sus ojeras. Por lo que llegó muy temprano a la escuela.

–«Bien, tranquilizate Makoto, no tienes nada que perder».

Un poco de humillación tal vez, pero podrás vivir con eso. Naegi se sienta en su pupitre, y recuesta la cabeza en su mesa, cerrando sus ojos. No sería la primera vez que dormiría en clase. No hay maestro ni compañeros ¿no es suficiente?

–«Que cansancio...»–Fue lo último en lo que piensa antes de quedarse dormido.

Pero no se preocupen, no despierta en un salón con las ventanas selladas ni nada parecido, tan sólo sus demás compañeros lo ven, y algunos no pueden evitar reírse. Asahina toma un plumón e intenta pintarle la cara.

–Uhmm...–Naegi se despierta antes de eso–Asahina ¿qué haces?

–Eh...¡nada, buenos días Naegi!–Esconde el plumón detrás suya–No era mi intención levantarte.

–Esta bien, gracias, hubiese sido malo si el profesor me viera durmiendo–Casi de puro instinto mira hacia el pupitre de Togami, él ya esta ahí, sentado y sacando sus libros–«Genial, ahora quede como un holgazán, bien hecho Makoto».

Los últimos compañeros terminan de llegar, entre ellos Kirigiri quien se sienta detrás de Naegi.

–Durmiendo en clases ¿qué tanto hiciste anoche?–Pregunta la detective.

–Lo peor de todo es que nada, sólo no pude dormir–Mira de reojo a Byakuya–Maldición...

–¿Ya te arrepentiste?

–¡No, jamás! Pero...

Son de esas pocas veces en las que se ve a Naegi tan desganado. Kirigiri le pone una mano en el hombro, este levanta la mirada y ella le dedica una sonrisa.

–Eres muy buena persona Makoto, quizás un poco ingenuo pero no hay nadie igual a ti–Levanta su pulgar–Pase lo que pase no dejes de ser tú.

–Kyoko...muchísimas gracias–Se inclina y se dan un abrazo, de verdad no pudo tener una mejor amiga que Kirigiri, es un chico con suerte sin duda.

El resto del salón no comprendía porque esos dos se estaban abrazando. Pero fue una imagen esperanzadora. Togami los mira desde lejos ¿cuando fue la última vez que recibió un abrazo?

Aún mantiene la carta entre sus libros. Anoche la volvió a leer, buscando una pista para averiguar al remitente:

Byakuya Togami, sólo quería decirte que aprecio poder tener un compañero como tú. No hablamos mucho pero realmente te admiro. De hecho, me gustas mucho. Se que te parecerá una tontería esta carta pero de verdad te quiero un montón. Si alguien como yo puede aunque sea saludarte por las mañanas, esta bien para mí. Sería un detalle muy lindo de parte de la vida.

Espero que algún día podamos ser amigos. No sólo conmigo, me refiero a yo y los demás. Eso sería todo.

Anónimo ↖(￣▽￣")

Togami estuvo siete minutos anoche creyendo que lo último era un mensaje codificado, pero no, tan sólo era una carita feliz.

–«Nunca había visto gestos como esos ¿de verdad hay gente que los usa?»

Pero no hay necesidad de buscar más. Ya tiene un sospechoso y las pruebas que el propio Togami tiene son sus pruebas legítimas. Dentro de poco el culpable será señalado.

Pero eso no quita el hecho de que Naegi y Kirigiri se estén abrazando y eso le hace sentir raro.

~७~

La hora del almuerzo llegó, todo el mundo estaba entusiasmado por descansar un rato. Naegi y Kirigiri bajan al comedor, sentados en una mesa; platicando de cualquier tema. Esta vez Junko e Ikusaba no los acompañaron.

Naegi intentaba tranquilizar sus nervios. Al acabar las clases, le pediría a Togami hablar con él a solas, entonces se confesará. 

Claro, sus planes serian esos, pero ni él ni Kirigiri previeron lo astuto que puede ser Togami. Bueno, es el enemigo por ahora. Porque el timbre suena y los alumnos regresan a sus salones, Makoto se encontraría con un sobre encima de su pupitre, al abrirlo revelaría una carta. Al leerlo fue como recibir un cubetazo de agua fría por la espalda.

Para Makoto Naegi:

Te espero bajo el cerezo después de clases. Que no se te ocurra huir.

Atte: Anónimo

Mira directamente a Byakuya, está sacando sus libros, con esa expresión de seriedad. Luce normal, como si todo a su alrededor fuese una pérdida de tiempo.

Naegi decide no contarle a Kirigiri. Quiere resolver esto él solo. Durante las últimas clases estuvo pensando en que quizás esto fue un error. Que ahora Togami está enojado con él. El que no podrán ser ni siquiera amigos.

Pero aún con eso, Makoto intentó mantener viva su esperanza.

Togami mira de reojo a Naegi. Ya todo está listo pero aún necesita una bala final; abre su cuaderno y comienza a garabatear algo. Hay dos cosas que Togami aprecia en este mundo: descubrir misterios y la valentía de acusar a alguien, y ya a llegado el momento de hacer la segunda.

~७~

La última campana del día sonó. La gente comenzó a despedirse, y Naegi y Kirigiri están en la puerta principal.

–Te desearía suerte pero ya tienes de sobra, así que diré que ojalá todo salga bien–Expresa la detective.

–Si...gracias.

Kirigiri se va mientras Makoto la despide con la mano. Estando ya solo, se va al patio, donde un único cerezo florece en todo el sitio.

Pero al llegar, se toparía con Togami. Casi se cae del susto.

–Vaya, Togami ¿qué haces aquí?

–Es obvio ¿no? Recibiste mi carta.

Las manos de Makoto comienzan a sudar. Hace lo posible para no bajar la mirada.

–¿Y porque el anonimato?–Pregunta el suertudo.

–Porque sé que también tienes una curiosidad enorme, al igual que yo, no podrías dejarlo pasar.

Makoto se sorprendió de lo bien que Byakuya lo conocía. Es verdad, si hubiese puesto directamente "Atte: Byakuya Togami" habría pedido una explicación en ese mismo momento.

–Supongo que lo dejaste durante el almuerzo.

–Se lo pedí a Celes, ella siempre es la primera en llegar al salón así que es una excelente cómplice.

–No era necesario, pudiste hacerlo tú mismo.

–No, porque eso sería copiar tu modus operandi–Aprecia como Makoto lo mira confuso–Sé que fuiste tú Naegi ¡y tengo pruebas que lo corroboran!

–¿Qué, de que hablas?–Se sorprende tanto que su cabello se levanta de golpe.

–Tú dejaste la carta anónima en mi mesa ayer, sólo pudiste ser tu.

Naegi podría decir simplemente "si, así es" pero esto es lo que Byakuya quiere. Dar clímax y cierre al caso. Hacer un debate continuo hasta llegar a un fuego cruzado y lanzar la prueba más crucial.

Por eso Makoto adora tanto a Togami. Su pasión y lucha por encontrar la verdad es una esperanza máxima. Y si esto hace feliz al heredero, Makoto no piensa ponérselo fácil.

–No sé de que cartas hablas.

–Ayer recibí una carta, una declaración de amor y sé que fuiste tú–Saca la carta del bolsillo.

–¿Porqué crees que fui yo? ¡A mí no me gustan los chicos!

–La carta en sí deja una pista, y sólo te conduce a ti.

–No sé que pista pueda ser ¡P-Pero no tiene nada que ver conmigo!

Byakuya lo señala con el dedo. Makoto casi se queda sin aire de la sorpresa.

–¡Eso no es verdad!–Nunca se había visto a Togami tan emocionado–La frase "No sólo conmigo, me refiero a yo y los demás", es un error ortográfico garrafal, debería ser "Me refiero a los demás y yo".

–¿Así?–Makoto ahora a quedado como un analfabeta.

–¿Recuerdas lo que me dijiste ayer? Te dije que tu apego a Kirigiri era como el de un perro faldero ¿cuál fue tu respuesta a eso?

–Te dije " Somos amigos, yo y Kirigiri hemos hablado desde el primer día "....¡Ah!–Si esto fuera un videojuego ahora mismo perdería un corazón de vida.

–Naegi, estos errores son de un niño de preescolar, lo correcto es " Kirigiri y yo".

–Ya...¡pero aún no has demostrado nada!–Makoto también comienza a emocionarse, esto de debatir es divertido–Sólo porque haya dicho eso no signifique que sea yo.

–Ayer hablé con absolutamente todos en el salón, y sólo tu cometiste ese error fatal.

–Eso es una conjetura...necesitas una prueba si quieres incriminarme.

–¿Una prueba?–Sonríe de manera clásica–La propia carta lo es, tiene otro factor que te señala a ti.

–¿C-Cuál? Ni siquiera he visto el contenido de la dichosa carta.

–No hace falta, tú mismo la escribiste y sabes que contiene–Hecha un vistazo al papel–Hablemos de la cara que está hasta el final.

–¿Qué cara?

Togami saca un trozo de papel, aquella donde hizo el garabato en la última clase. Era pequeña y aunque no tenía ninguna palabra su mensaje era bastante claro:

↖(￣▽￣")

De alguna manera, para Naegi, aquella cara demuestra su terror.

–Eso sólo es una cara, e-es muy común–Reprocha Naegi.

–Hoy en la mañana, llegue como es habitual al salón, fue una sorpresa encontrarte dormido ahí mismo.

–Estaba un poco cansado ¿y qué?

–Ya te tenía como sospechoso Naegi, decidí hecharle un vistazo a tus cuadernos.

–¡¿Hiciste qué?!–La cara de Makoto se sonroja al instante.

–No fue la gran cosa, no seas llorón–Claro pero si hubiese sido al revés de seguro te enojas–Además lo encontré enseguida, un cuaderno de tareas llena de caras de ese estilo.

Makoto se quedó boquiabierto, de verdad Togami es increíble joder.

–¡Confiesalo aquí y ahora Naegi!

–N-No...porque...¡no sólo yo hago esos dibujos! ¡Sayaka también los hace!

De hecho, fue gracias a Maizono por la que le tomó cariño a esos dibujos de niño pequeño.

–No, es imposible, sé que Maizono también los hace, la he visto hacerlos, pero noté que en tu mochila hay un cuaderno de cuadrícula grande, el mismo tipo de hoja que la carta, revisé la mochila de Maizono y ella no tiene.

–¡Eso puede ser una coincidencia! ¡Además estás mintiendo!

–¿De qué hablas? ¡Es un hecho que la carta anónima está en cuadrícula grande!

–¡Eso no es verdad!–Makoto lo señala con el dedo–¡La carta fue escrita en raya!

Hay un momento de silencio. De golpe, Togami ríe en voz baja. Si, es cierto.

"Togami saca la carta. Es una letra torpe, en un encuadernado de raya, quizás haya sido algo precipitado, (...)"

–Naegi ¿cómo sabes que la carta fue escrito en raya? Tú mismo lo dijiste "ni siquiera he visto el contenido de la dichosa carta".

Que conste que Naegi no quería darle la razón a Togami y dejarle ganar. Es sólo que es muy tonto.

–Oh...–Ahora es Makoto quien suelta una risa–Parece que he perdido ¿no?

–Entonces...¿de verdad fuiste tú?

Makoto se lleva una mano al pecho. Que alivio. Que sanador.

–Si, yo la escribí... –Mira a Togami a los ojos–De verdad me gustas un montón, Togami.

Ambos se quedan en silencio. Las hojas del cerezo caen. El corazón de Makoto late tan fuerte que teme que le de un paro cardíaco. Vaya sorpresa se llevó cuando Togami se sienta en la hierba, esperando a que Naegi haga lo mismo, este obedece.

Estando bajo la sombra del cerezo, en silencio, Makoto esperando una respuesta y Byakuya felicitándose así mismo por su gran trabajo como detective.

Y bueno, también podemos añadir que se siente un poco extraño al recibir la confesión directa de Makoto.

–¿Togami?–La voz del afortunado a perdido un poco de confianza.

–Para ser un mero plebeyo, tienes agallas–En ello muestra una sonrisa engreída–Mira que una carta anónima ¿en qué estabas pensando?

–No lo sé, fue un impulso de idiotez.

–Típico de ti...–Suelta un suspiro cansado–Naegi ¿qué esperas que diga?

–Sólo sé sincero, lo soportaré–Baja la mirada, sus manos tiemblan–¿Aceptas mi confesión?

Byakuya tuvo que desviar la mirada, no puede con esto. Naegi es tan amable y dulce ¿porqué alguien como él se tuvo que fijar en alguien como Togami? ¿Acaso no ha visto lo desgraciado y mamón que es?

Es aquí y ahora. El juego del gato y del ratón debe terminar. Byakuya quería esto, ahora le toca ser sincero con Naegi.

En un acto de puro impulso adolescente, Togami toma los hombros de Makoto y le planta un beso en los labios, cerrando sus ojos mientras que Naegi los abre de un golpe.

–«Che ¿qué cojones?»–Era lo único que podía pensar nuestro pelopincho.

El heredero se aparta. Makoto se toca ligeramente los labios, sonrojado y mirando a Togami con asombro. Todo es tan confuso...pero la felicidad del momento lo compensa en exceso. Ahora es él quien se abalanza a Togami para besarle. El hecho de que Byakuya envuelva sus brazos en la cintura de Naegi para más cercanía lo deja todo claro.

Un beso seguido de otro. Todo es muy desenfrenado, Naegi abre un poco la boca para respirar pero sólo obtiene la bienvenida de parte de la lengua de Togami.

Los labios del heredero son deliciosos, finos y con un sabor peculiar. Makoto no puede seguirle el ritmo. Ambos se apartan, con la respiración algo acelerada.

–Si de verdad quieres estar conmigo, te diré que pierdes tu tiempo–Confiesa Togami.

–No me importa, de verdad me gustas Togami, no me rendiré hasta que lo comprendas.

–Ja...supongo que será interesante–Con una sonrisa más bien tierna, añade algo más–Tú también me gustas Naegi.

Comparten otro beso, el anonimato jamás había traído nada bueno hasta ahora.

Fin ↖(￣▽￣")

¡Espero que les haya gustado! <3
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