•37: Reiniciar para corregir
-Flashback-
—Eh, oye...—vuelve a hacer una pausa, rebuscando una vez más entre sus recuerdos—. Abby, tengo una pregunta que quisiera saber si podrías responderla...osea discúlpame jaja no quiero aburrirte con mis cosas...
—Oye no, tú pregúntame. Dime. —La felina se sienta de su lado izquierdo, atenta en afinidad del erizo que parece estar preocupado dentro sus rodeos mentales.
—...¿Cómo sabes cuando una persona sufre de algún problema mental? —La mueca de la chica es preocupante, mas por no tener una respuesta resolutiva que la carga de las palabras que ha dicho—, osea...hasta qué punto algo que...¿algo que tú lees y estas notando puede ser preocupante?
—Rayos Sonic, si esto tiene que ver con esa persona creo que...bueno. Quizás en el momento que tú ya sientes o notas algo raro, puedes cuestionartelo, y ser franco con esa persona. Pero desde el campo comprensivo y no recriminatorio, obviamente—Hace una pausa notando la amargura idea de la realidad en los ojos verduzco del erizo—. Quiero creer que debe ser así porque deseas ayudar a esa persona, porque la quieres y te importa.
—Claro que si, claro que la quiero y me importa, mucho.
-Fin del Flashback-
—No tenías por qué venir a avergonzarme... —arrastrando las vocales y con la voz quebrada, mira las manos pálidas de su compañero, sujetando el sobre rojo que recuerda a la perfección y de tan solo viajar a los párrafos que están tatuados dentro de su memoria, le asfixia.
Y le acelera el corazón de muchas maneras. Shadow pocas veces se ha dejado ver vulnerable con personas de carne y hueso, más con su bolígrafo y el papel conserva la intimidad encarnada.
—...¿Avengorzarte? ¿Sabes por qué estoy aquí, Shadow? —Él no responde, y tampoco le mira mientras se remueve en la cama para sentarse, fingiendo estar más cómodo—...Bueno, yo tampoco sabría decirte por qué estoy aquí, pero solo sé que, no me imaginé nunca un escenario en el que la persona que me gusta desde hace más de un año, que a su vez es mi ídolo, estuviera internado aquí, con la vida rota y el corazón roto—Estrangula un poco la carta llevándola cerca de su abdomen y luego, ocultandola detrás de él—. ¿Bajo qué causas? No las sé con certeza, mas con inseguridades uno se puede creer lo peor; ¿Las consecuencias? Bueno...creo que ambos las conocíamos dentro nuestro y nunca quisimos que se hicieran realidad, pero ¡Henos aquí! Victima y victimario...los papeles han cambiado, eso creo...—Cierra su letanía rascándose la nuca, aparentemente confuso por lo que acaba de decir, ya no le encuentra mayor sentido.
Shadow alza su rostro para por fin mirarle con mayor conciencia, respondiendo a lo que ha oido:
—Eres maestría, Sonic—expone liberando una ligera mueca de alegría—. La mejor obra literaria que no puede ser juzgada por su portada. Aprendiste de mis enseñanzas mejor que yo al ser el autor, y eso es lo que me avergüenza; y aún más, ahora que has utilizado la palabra ídolo: ¿Cómo es posible que tu "ídolo" haya vuelto a caer tan bajo, en osadía de cometer actos vandálicos contra sí mismo y aún así, querer darle la cara a su única musa pulcra, que temeraria ha decidido llegar hasta este cuarto?
Traga grueso, queriendo anotar cada una de esas palabras en el lienzo blanco de su psique, de su arrepentimiento por no saber Sonic dominar los nudos en su pecho y garganta.
—...porque mi ídolo nunca dejará de ser de carne y hueso, y eso me fascina, muchísimo, ¿sabes por qué? —El vetas rojizas niega, todavía con una postura y mirar avergonzado—, porque...sé que no eres inalcanzable, eres tú; y eso quiero que lo veas. Quiero que sepas q-que...—Lucha contra el temor de verse envuelto en el rechazo, con el pensamiento de sentirse humillado y desplazado como un sentimentalista e iluso joven vulnerable por mostrar sus emociones—, quiero estar contigo, y-yo q-quiero ayudarte... —Con esa pausa, da un respiro profundo queriendo evadir el llorar—, quiero que veas, lo que mis ojos ven en ti: el ser zoomorfo más imperfecto que adoro y amo de manera invaluable.
Su voz se quiebra, en segundos cae en la idea vergonzosa de verse tonto y le da la espalda a su contraparte para huir, para refugiarse en el tallar de ojos y en guardar esa hoja membretada en el bolsillo toda aplastada pero, Shadow le ha detenido con su llamado.
—Tengo algo que contarte. Continué escribiendo Háblame de nosotros, ¿Tienes alguna idea del por qué? —Sonic niega, todavía le da la espalda—. Antes tengo que disculparme por...por no cumplir con eso. Sé qué debí hacerlo pero, tú me dijiste que no tenía caso seguir escribiendo porque no había material para ello, y afirmaste que, sentimiento que no conocía, sentimiento que me inventaba...y no, fallaste en eso. Porque sí que conocía el sentimiento, sí que lo sentía y lo arraigué a mis entrañas con las palabras más profundas que pudieron salir y ser plasmadas de mi muñeca y...es por eso que continué hasta el final con háblame de nosotros, porque ya no podía seguir fingiendo que ese sentimiento no lo estaba sintiendo y que temía por verme involucrado en algo que con dolor no deseaba experimentar, sino dejar escapar en letras y en una historia que me torturó hasta el desenlace...
—Jamas pensé qu-que una historia pudiera causar tantas cosas...Tus historias me han enseñado y, algo de ello es que, no le puedes dejar el significado de tu vida a algo, ha alguien en particular.
—Así es, tienes razón —Con cierto afronte y temple en el tono, mira al chico azul con suspiro y mayor júbilo para transmitir desde la cama tranquilidad y seriedad—. No está bien basar tu vida en alguien o algo, pero yo no he dejado de...de arraigarme a las personas. Entonces quiero decirte que acepto tu apoyo y tu ayuda, pero no puedes brindarmela ahora. Quiero ser tus ojos y mirar directamente a mi alma para quererme un poco más cada día, pero para ello, no puedes estar divagando en mi inestabilidad, no es justo para ti así que, quiero estar contigo, pero no es este el momento.
—Entonces, ¿po-por qué n-nos hemos tardado tanto? —Vuelve a sollozar con una desolación que abruma al vetas rojas, siendo el peor de los villanos en una historia egoísta—. ¿Por qué hemos actuado...así?
—Porque ambos nos merecemos enteros, lo sabemos. Ya basta de darnos migajas, así que tal como tú has sido claro al venir aquí sabiendo lo que quieres, yo también lo soy diciendo esto.
—Esto es tan raro shadow, me siento tan raro...—Acercandose con inseguridad, el erizo oscuro le extiende la mano y el cobalto le toma su muñeca para recargarse cerca de su cama—, no sé ya qué decirte...¿Qué hago?
—Sonreir, siempre lo haces, no tienes por qué detenerte ahora —Con un gesto atípico pero tranquilizador, el cobalto le mira apretando con ambas manos su muñeca y dedos—, yo también me siento...confuso. Pero te lo he dicho, y está es una promesa que no voy a romper: Voy a estar mejor para poder tener lo que estamos deseando.
—¿El uno al otro? —Sus facciones parecen melosas pero en el fondo se está sintiendo algo asqueado—, ¡P-perdon! Creo que dejaré de leer novelas románticas...
—Es mi culpa por escribir tantas, a la próxima haré algo más...distinto.
Shadow pega su frente con la de Sonic, ambos empiezan a respirar lentamente para ir disipando tanta presión y tensión que se han generado mutuamente con tal encuentro y expresión de si mismos.
Pero ambos han generado un vínculo que se empieza a sentir tan bien. Un vínculo que corregirá sus situaciones y pretende mantener el reinicio como la mejor de las opciones.
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