•12: Alago de Amateur
Prácticamente su semestre se ha terminado, ¡enhorabuena! Lo han finalizado sus amigos con pocas bajas y como suelen decir siempre, no les fue tan mal.
Silver se enojó de no haber podido asistir por última vez con Cielo a la toma de su última calificación y clase esa mañana, pero estuvieron a mano, porque ambos, ninguno llegó a tiempo.
Pero no llegarían tarde a esa mega peda de fin de año. Claro que no.
Ni Silver ni menos el zorro, únicos amigos de Sonic, se quejó de la invitación hacia Shadow, por el contrario, se volvió una verdadera innovación y sorpresa que el peliazul lograra eso, tener la iniciativa de invitarle luego de tantos sucesos.
Silver le ha mandando un mensaje de texto, informando que ha ido por Tails y que, los esperarán fuera del inmueble, en la dirección de dicha fiesta. Al cobalto no le queda de otra que ir a la parada de autobús esperando que Shadow no se tarde o, en el peor de los casos, le falle.
Sentado en la alargada banca de metal, la noche empieza a caer y no es que le tema a la inseguridad, pero recuerda noches en las que...veía a Scourge irse con sus amigos y no regresar más que a altas horas de la noche. Agita su cabeza no queriendo seguir aunando en recuerdos, sino que decide, seguir leyendo la obra de Zhack.
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𝑞𝑢𝑒𝑟𝑖𝑎 𝑔𝑟𝑖𝑡𝑎𝑟 𝑠𝑢 𝑛𝑜𝑚𝑏𝑟𝑒 𝑦 𝑜𝑙𝑣𝑖𝑑𝑎𝑟𝑠𝑒 𝑑𝑒 𝑠𝑢𝑠 𝑝𝑟𝑖𝑛𝑐𝑖𝑝𝑖𝑜𝑠, 𝑝𝑒𝑟𝑜 𝑢𝑛𝑎 𝑏𝑎𝑟𝑟𝑒𝑟𝑎 𝑖𝑛𝑡𝑒𝑟𝑛𝑎 𝑒𝑛 𝑠𝑢𝑠 𝑐𝑜𝑠𝑡𝑢𝑚𝑏𝑟𝑒𝑠 𝑙𝑒 𝑖𝑚𝑝𝑢𝑙𝑠𝑎𝑏𝑎𝑛 𝑎 𝑟𝑒𝑐𝒉𝑎𝑧𝑎𝑟 𝑒𝑠𝑒 𝑠𝑒𝑛𝑡𝑖𝑟.
𝑌𝑎 𝒉𝑎𝑏𝑖́𝑎𝑛 𝑡𝑟𝑎𝑛𝑠𝑔𝑟𝑒𝑑𝑖𝑑𝑜 𝑠𝑢𝑐𝑒𝑠𝑜𝑠 𝑐𝑎𝑡𝑎𝑠𝑡𝑟𝑜́𝑓𝑖𝑐𝑜𝑠 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑠𝑢 𝑐𝑜𝑟𝑎𝑧𝑜́𝑛, 𝑖𝑛𝑓𝑎𝑙𝑖𝑏𝑙𝑒𝑠 𝑝𝑎𝑟𝑎 𝑠𝑢 𝑟𝑎𝑧𝑜́𝑛 𝑦 𝑠𝑜𝑙𝑜 𝑙𝑒 𝑐𝑜𝑛𝑐𝑒𝑟𝑛𝑖́𝑎 𝑢𝑛𝑎 𝑐𝑢𝑒𝑠𝑡𝑖𝑜́𝑛:
"𝑄𝑢𝑖𝑒𝑟𝑜 𝑎𝑟𝑟𝑎𝑛𝑐𝑎𝑟 𝑒𝑠𝑎𝑠 𝑖𝑛𝑠𝑒𝑔𝑢𝑟𝑖𝑑𝑎𝑑𝑒𝑠 𝑑𝑒 𝑡𝑢 𝑝𝑠𝑖𝑞𝑢𝑒, 𝑑𝑒𝑠𝑎𝑠𝑖𝑟 𝑙𝑎𝑠 𝑎𝑡𝑎𝑑𝑢𝑟𝑎𝑠 𝑑𝑒 𝑡𝑢 𝑎𝑙𝑚𝑎 𝑦 𝑙𝑙𝑒𝑣𝑎𝑟𝑡𝑒 𝑎𝑙 𝑓𝑖𝑛𝑎𝑙 𝑑𝑒 𝑛𝑢𝑒𝑠𝑡𝑟𝑜𝑠 𝑑𝑒𝑠𝑡𝑖𝑛𝑜𝑠"
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Háblame de nosotros se está convirtiendo en la mejor de sus narraciones. No cabe duda, está embelesado con esa manera de escribir, es como si sintiese que tiene mayor uniformidad y fidelidad esa historia en... ¿en qué? ¡No lo sabe, con un demonio! Pero ríe y se siente internamente bien de leer tal revuelta de sentimientos y amor que...
—¿Así que si te gusta mucho leer a ese escritor virtual? —Alza su cabeza bruscamente sin verle frente a él, sino a su costado derecho, en la otra división de la butaca.
Sonriente y apenado, responde —Oh, Shadow, es que...¿a ti nunca te ha pasado cuando...sientes que entre líneas de una obra se encuentra tu pasado, presente y futuro? —El azabache no responde, sin embargo, mira hacia la acera con una ansia extraña—, quizá te suene ridículo pero es que, cada vez que leo una historia...no sé, me transmite tanto que hasta digo tonterías jajaja —Termina riendo rascando su cuello, parece estar nervioso ahora por tenerlo ahí, oyendo sus idas de olla.
—Sí...en realidad, creo saber a lo que te refieres —Por primera vez el chico oscuro parece tener parentesco con Sonic. Luego de tantos momentos y situaciones en las que, solo era corazonada para el pelo azul, ahora, podía oir de sus labios del azabache una respuesta que, le daba la razón—... cuando leo siento que todos esos sueños de literatura se vuelven tangibles, se transmiten a nuestra realidad.
—¿Y sientes eso cuando escribes también? —Ya ha guardado su celular para platicar y prestar más atención a lo que dice. Shadow abre un poco más los ojos y deja de mirar hacia la nada para concentrarse en él —. Lo digo porque tú escribes increíble —Shadow sonríe, sintiendo una elocuente burla y ganas de negar de forma repentina—. ¡Es en serio! Lo haces...maravilloso, hasta siento envidia...recuerdo tu autorretrato y...
—Es tan viejo y bobo...como yo en general, jugando a ser un amateur. —murmura el veteado y mira hacia el lado contrario, evadiendo al joven azul.
—¿Qué? ¡No, claro que no! —Eufórico, se pone de pie. El Sonic escandaloso ahora está de vuelta en la parada de transporte —. Escucha, no sé cómo le haces para ser tan bueno en muchas cosas, pero en verdad...me fascina todo lo que haces.
El oscuro no puede evitar seguir en esa sintonía sinica, sintiendo hervir su garganta con extrañeza. El azulado frente a él, queriendo que reaccione de una manera y que sus palabras penetren su cabeza, no parece conseguirlo y eso le molesta, porque puede ver la expresión del azabache en tan mala sintonia.
Ese silencio le agobia a Sonic y, expulsa —¿Por qué te cuesta trabajo entender que eres maravilloso? —El azabache se pone erguido sobre su asiento y, se miran a los ojos.
—No sé por qué te esmeras en seguir diciéndome esas cosas tan...
—¿Tan qué, Shadow? ¿Absurdas? ¿Tontas? Si crees que estoy mintiendo, que quiero eh...alagarte o algo estás equivocado. —El pelonegro también se pone de pie, mirando a Sonic con ligera rabia.
—¿Entonces para qué decirlo? ¿Que obtendrías con decir todo ello hacia alguien como yo? —En esos segundos, donde sostuvieron miradas, el chico azulado recordó lo que acababa de leer hace minutos y, no lo medita lo suficiente para expulsarlo como si parafraseara:
—...Arrancar esas inseguridades de tu psique, des-desasir las ataduras de tu alma y... —Agita su cabeza de golpe, atónito de lo que hace, de lo que está pasando y de los escenarios imaginarios que se formaron en su cabeza de golpe.
Shadow ya no responde nada, simplemente sería tonto responder aquello. Siente que su pecho está siendo comprimido con fuerza, con absoluta tensión hacia su corazón y sus ideas derivadas...
Suena un claxon, las puertas del autobús se abren detrás de Sonic y la incomodidad le detiene por completo. Cuando estuvo a punto de volverse con vergüenza de toda la situación, olvidando la fiesta, Shadow toma a Sonic de su antebrazo y lo sube al autobús con fuerza, ¿sé lo esperaba? Por supuesto que no. Creía que para ese puntos ambos se separarían y simplemente marcharian hacia otras direcciones.
Se acomodan en asientos de en medio, del lado del chófer. La unidad no está vacía pero no está saturada como en las mañanas caóticas donde todo el mundo piensa en sus bonos de puntualidad.
Ahora el silencio es más incómodo, ninguno de los dos quiere hablar ya. ¿Qué podrían decir, para iniciar una charla?
—Sh-Shadow, yo... —balbucea con súbitos nervios espresarse en todo su pelaje y su timbre.
—Olvidaré esa charle, ¿Sí? No quiero creer que realmente pasó...
—Pero...¿por qué...? —Quiere que se lo trague la tierra, que el camión lo aviente por una ventana o alguna locura. Sus mejillas están ligeramente rojas y sus nervios se posan sobre sus extremidades melón temblorosas, ni siquiera puede verle de reojo, prefiere mirar el borde sucio de la ventana de ese autobús.
—Porque...no estaría bien creer que yo... —No termina lo que fuese esa idea el azabache, su voz se ahoga y pega su frente con el tubo del asiento delante suyo.
Y otra vez, se inunda su ambiente de silencio incómodo, hasta que llegan a la calle de dicha fiesta.
Maratón! Okno xD pareciera, pero en realidad me encarreré con la historia y bueno, ahora tengo ganas de acabar y seguir con muchas~ así que, si llegan a ver bastantes actualizaciones de todo en los próximos días, tranquilidad, será normal UuU
Aunque últimamente, esta historia fallaba cuando publicaba, me saltaban los capitulos a medias, y por eso tuve que resubirlos una vez más desde el 9, en fin. Si tienes algún fallo así o tal, no duden en decirlo, es importante porque así reviso qué puedo hacer.
Bueno ya, nos leemos pronto ^^
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