Estoy navegando
Abriendo un nuevo curso en el mar virgen
Porque tengo que ser libre
Libre de enfrentar la vida que tengo en frente
A bordo soy el capitán, así que subete
Buscaremos el mañana en cada costa
Y trataré
Oh Dios, trataré

Come sail away - Styx

Jongin sentía su corazón latir con velocidad mientras besaba los labios contrarios. Sabía que las adicciones eran peligrosas, pero no le importaba volverse adicto a esos besos. El cuerpo le quemaba y quería tocar más allá de la ropa que tenían puesta, pero no debían. Incluso en ese momento, donde solo quería seguir besándolo, se apartó de manera un poco brusca y vio la duda en los ojos de Kyungsoo.

— No debí —dijo y sin más salió del pequeño baño, huyendo de sus propios instintos.

Kyungsoo se quedó petrificado, había besado a un hombre que estaba a punto de casarse y que además estaba prohibido.

Su corazón empezó a sentirse oprimido, conocía perfectamente esa sensación de vacío en el pecho, la decepción lo estaba inundado y solo quería irse a casa.

El moreno salió nuevamente a la fiesta que estaba organizada en su honor, pero con el sentimiento de angustia en su pecho. De repente sentía que temblaba y que tenía muchas ganas de llorar, el mundo de Jongin se había movido de manera brusca con ese beso, porque ahora estaba más seguro que nunca que no quería casarse, él no quería esa vida. 

Sintió una mano posándose en su hombro, su abuela le extendió la mano y con la mirada le pidió que la siguiera. Jongin obedeció y caminó al lado de ella, quien no decía absolutamente nada, eso le empezaba a poner nervioso.

—¿Sucede algo? —preguntó.

—Mi loco, estás a nada de casarte.

—Si, haré feliz a la familia con esto.

—¿Qué ves en el cielo, Jongin?

—Estrellas.

—Son hermosas, ¿verdad?. —No quería contestar, pues en ese preciso momento no sentía que lo fueran—. ¿Qué pasa, mi niño?

—Mi corazón está confundido.

—Cuéntame.

—Preferiría no hacerlo.

—Se trata de mi joven payo, ¿verdad?

—No sé de qué hablas.

La mujer sacó de su falda las cartas que siempre cargaba, buscó tres en especial para dárselas a Jongin. Cuando las encontró, sonrió y se las puso en la mano.

—Mi loco, te has enamorado de un mago.

—No entiendo, además, no puedo estar enamorado, apenas lo conocí.

—¿Tú sabes cómo funciona el amor, Jongin? —negó—. El amor no funciona con tiempos, el amor es impredecible, es salvaje, a veces viene y ataca de una manera violenta. Otras veces va lento y seguro como un caracol a la meta. Tu corazón y tu vida ha estado cerrada en cuatro paredes de esta vida tan loca que decidimos vivir. Los gitanos antes éramos tan libres y decididos, ahora son cerrados y creen en cada uno de los mandatos de Dios.

—¿No eso es lo correcto?

—Lo correcto, mi querido Jongin, es vivir como uno quiere. Tú te has enamorado de un joven mago de ojos enormes y corazón noble, el chico es valiente y tenaz.

—Y yo soy un gitano que vive en una pequeña comunidad, aunque esté enamorado, no soy lo suficiente para Do Kyungsoo. Además, amar a un hombre es un pecado.

—El amor jamás va a ser un pecado. El joven payo es un chico estupendo, su vida es interesante y está rodeado de jóvenes talentosos.

—Yo no soy nada en comparación con ellos.

—Porque no has vivido como se debe Jongin. —La mujer tomó su rostro y lo miró—. Tienes que salir y buscar tu felicidad donde sea necesario, aquí simplemente vas a terminar casado y seguirás vendiendo las artesanías que hacemos con tu padre. ¿No querías ser bailarín?

—Ya estoy algo viejo.

—No creas lo que aquí te dicen, hijo mío. Tienes la edad correcta para salir y conocer el mundo a tu manera, vivir como quieras y amar a quien quieras.

Ni siquiera supo en qué momento empezó a llorar; se sentía ahogado, poca cosa, tan gitano y Kyungsoo era como esas estrellas que nunca podría alcanzar.

—Intentalo, mi pequeño, devuélvele el sentido a tu existencia.

✨

Cuando Kyungsoo llegó a su hogar se sentía pésimo, no quería regresar nunca más a ese lugar, no quería volver a ver a Jongin y sentir que su corazón dolía por no poder tenerlo. ¿Por qué la vida tenía que ser tan injusta con las personas buenas?

✨

Los días pasaron con velocidad; Kyungsoo se dejó la vida editando su reportaje, el cual representó una tortura diaria. Tantas imágenes de Jongin en todos lados no le estaban haciendo bien y, en lugar de olvidarlo, se clavaba un poco más en su corazón. Hoy era la boda y sabía que tenía que estar ahí, pero no podía ver cómo el hombre que le gustaba estaba siendo desposado. No habían tenido un final porque ni siquiera tuvieron un comienzo, simplemente se gustaban y había mucha tensión entre ellos, pero al no verlo empezaba a anhelarlo, comenzaba a sentir algo.

La puerta de su casa sonó, se levantó para abrir y cuando lo hizo miró a Baekhyun con una enorme sonrisa.

—Me hice novio de Chanyeol.

—¿Qué? —El rubio entró y se sentó en el sillón

—Sí, estos días que estuviste encerrado editando el reportaje hemos salido y me di cuenta de que en serio me gusta. 

—No sé qué decir, supongo que felicidades.

Baekhyun sonrió y dirigió la mirada hacia la computadora donde Kyungsoo estaba trabajando. Se acercó sin pedir permiso y miró lo que ya tenía hecho.

—¿Es él?

—Sí —suspiró.

—Vaya, es muy guapo. Por cierto, ¿hoy es la boda? —asintió—. ¿Por qué no estás ahí? Solo tienes que agregar esas imágenes y tu reportaje estará listo, ya nada más te quedan dos días, Kyungsoo.

—No quiero ir, no quiero ver a Jongin casarse.

—Kyung…

—Me gusta mucho, Baek, no puedo decir que estoy enamorado porque no lo sé, no puedo sentir eso tan rápido, pero cuando pienso en él mi corazón se acelera y tengo ganas de llorar. Leticia me habló tanto de ese chico que se ha metido muy dentro de corazón y ahora no quiero que se case.

—Soo…

—Él merece tener la vida que quiere y no la vida que le imponen, quiero que estudie en la universidad, que trabaje en algo que le guste, que conozca el mundo mientras cumple sus sueños. Por Dios, es guapísimo, incluso podría ser un modelo. Es extraño que viva encerrado siendo libre. 

—Pero él tomó su decisión.

—Él no toma decisiones Baekhyun, usa más decisiones que le dan. No es libre, yo quiero que lo sea.

—¿Por qué no le dices todo esto? 

—Porque tengo miedo de que no quiera arriesgarse.

✨

Jongin miraba el traje de novio que tenía puesto, la hora de la ceremonia del pañuelo se acercaba y estaba demasiado nervioso. Tendría que tener relaciones sexuales con aquella mujer para poder casarse bien y si ella no demostraba ser pura, sería una deshonra.

Sus padres estaban felices organizando cada una de las cosas y decorando la comunidad. Sabía que su abuela no se había estado sintiendo bien y que tampoco estaba de acuerdo con la boda, suponía que por eso ella aún seguía en su habitación.

Todos cantaban, se veía la alegría de todos en general, ¿por qué no se podía sentir así?. Se suponía que el payo estaría aquí para la boda, todo el proceso documentado fue justamente para llegar a esto, pero Kyungsoo no estaba. Quería verlo, sentía que lo extrañaba, llevaba noches soñando con el primer y último beso que compartieron. ¿Qué se sentirá amar libremente? Le tenía envidia a Taemin y a Minho porque ellos habían tenido el valor de alejarse y hacer la vida que quisieron. ¿Por qué él no tenía ese valor? 

—Jongin, llama a Leticia. —Fue su padre quien lo pidió.

El chico tocó la puerta varias veces, pero no hubo respuesta, así que abrió y no vio a su abuela. Cuando entró completamente la vio a un lado de la cama, desmayada.

—¡Abuela!, ¡abuela!

Tomó su pulso y se sentía tan débil, corrió hacia afuera para alertar a su madre, y ella entró muy preocupada a la habitación.

—Llamen a un doctor, por favor.

La comunidad estaba tan lejos que sabía lo mucho que tardaría en llegar, así que tomó en sus brazos a su abuela y se dirigió al auto de su padre. Cuando salió vio que Kyungsoo estaba llegando y este lo miraba con preocupación. El recién llegado bajó el vidrio gritó.

—¡Súbete al auto!

Nunca había manejado a tal velocidad, pero el llanto de Jongin lo estaba matando, además no podía ver a Leticia así, no cuando en pocos días le regaló tantas sonrisas.

Llegaron a un hospital que estaba en la entrada de la ciudad e inmediatamente los atendieron. Jongin sentía el mundo caerse a su alrededor.

—Que me falte todo, menos ella. Por favor.

No pudo evitar abrazarlo y dejar que el moreno llorara sobre su hombro; él también había empezado a llorar porque Leticia era alguien que se hacía amar con solo mirarla.

—Jóvenes. —El doctor se acercó a ellos y posó una mano sobre el hombro del moreno—. No pudimos hacer nada.

El grito de Jongin fue una de las cosas más desgarradoras que había escuchado Kyungsoo. Lo vio caer de rodillas y gritar una y otra vez: "es una pesadilla, vas a despertar". Entonces, el joven reportero se puso a su nivel y lo abrazó nuevamente.

—Jongin, tenemos que decirle a tus padres.

—No quiero regresar ahí.

—Tienes que hacerlo.

—Ella se fue tan decepcionada de mí, quería que yo fuese valiente.

—Ella te amaba, Jongin.

—Yo… la amaba mucho más.

Jongin no supo cuánto tiempo lo estuvo abrazando, pero en los brazos de Kyungsoo dolía un poco menos, en los brazos del chico se sentía cómodo, se sentía como un hogar.

—Jongin, vamos con tus padres.

El más bajo se acercó a hablar con el doctor y este le explicó lo que procedía. Era un proceso sencillo, pero que no podía hacerse ahora, pues tenía que llevar a Jongin con sus padres. Le habló a sus amigos quienes quedaron impactados con la noticia, pero Junmyeon quien estaba con Baekhyun en ese momento se ofreció a hacerse cargo de los trámites y los gastos fúnebres.

Manejar a la comunidad fue difícil, porque sabía que cuando llegara tenían que dar la noticia.

—Hoy era mi boda.

—Lo sé.

—Hasta parece que lo hizo a propósito. —Una sonrisa amarga salió de su boca—. No me voy a casar.

—Claro que no, al menos hoy no. Tu abuela acaba de morir, Jongin.

—No, no me voy a casar con Jovanka. Quiero irme a la ciudad y quiero cumplir las promesas que hice de niño.

El corazón de Kyungsoo latió con más fuerza. ¿De verdad Jongin haría eso?

—Quiero buscar a mis amigos, Minho y Taemin, les diré que necesito empezar de cero, sé que ellos me ayudarán.

—También cuentas conmigo, Jongin.

—No, quiero lograrlo por mi cuenta, quiero estar a la altura de tus sueños.

Kyungsoo se detuvo y lo miró, ¿que acababa de decir?

—Jongin…

—Voy a luchar por mí mismo, voy a lograr las cosas que quiero porque deseo ser suficiente para tomar tu mano. No quiero tomar tu mano y que digan "ahí va el presentador Do Kyungsoo, a lado de ese inútil que ni siquiera estudio" 

— No lo hagas por mí, hazlo por ti.

—Lo haré por ambos y por ella. —Jongin tomó la mano de Kyungsoo y la besó dulcemente. 

Era el inicio más amargo que tendría en su vida, pero era el inicio que ella le había regalado. Esperaba que, en donde sea que estuviera, viera el proceso hacia sus sueños, porque los iba a cumplir, todos y cada uno de ellos.