***Perdón por cualquier error, esta es una adaptación de otra ship. Si es que hay algún error de nombre coméntenmelo.

POV OFF:

Mis manos estaban por todo el cuerpo de Gun, quería sentirlo, quería tocarlo y sentir su calidez. Mis labios tomaban los suyos, los chupaba y besaba. Mi lengua y la suya se la estaban pasando muy bien.

-Off – su voz era ronca, mi pene vibro bajo de mis pantalones. – Por favor para – seguía tocándome, sus palabras y sus acciones se contradecían – Por favor – dijo cuándo me separe para tomar aire. Lo mire a los ojos, pude ver como estos se aguaban.

Tuve mi primer momento de lucidez desde que entre en el bar. Sus lágrimas ya estaban cayendo.

-Estás borracho – dijo justificándome.

-No, no estoy borracho, no he tomado nada – susurré, tome sus mejillas.

-Entonces ¿Por qué lo haces? ¿Por qué estás jugando conmigo? ¿Qué clase de juego mental es este? – sus manos estaban en puños y me golpeaban el pecho.

-¿De qué hablas?

-¿Por qué me besas cuando quiero olvidarte? ¿A que estamos jugando? Por favor para, me duele – mi pecho de oprimió.

-Yo no...

- Ya deja de jugar conmigo, mañana me dirás que fue un error o lo ignoraras como los besos anteriores que te di, ya para. Déjame en paz, deja de hacer que me haga ilusiones – no sabía que decir.

-No estoy jugando.

-¿No? Entonces ¿Eres gay ahora? ¿Te gustan los hombres?- No sabía cómo contestar, no estaba seguro de nada. No me gustaban los hombres, enserio que no me gustaban, el imaginarme a Tay como un hombre me parecía desagradable, e incluyo New me parecía desagradable.

No era gay, de verdad que no me sentía gay. Lo único que sabía en estos momentos era que empecé con Mook por Gun, dejé a Mook porque estaba confundido por Gun, no he dejado de pensarlo, extraño sus intromisiones, sus constantes coqueteos, sus regalos, sus pasteles, y demonios explote cuando vi que se le acercaban los estripers.

No, no sabía lo que pasaba pero sabía que tenía que ver con él, además sus besos, SUS BESOS eran la mejor cosa de este planeta.

-No lo soy, ni me gustan los hombres. Pero te extraño, extraño que estés cerca, que me hables, quiero besarte – sus ojos se abrieron como platos.

-No comprendes ¿No? Solo es la costumbre, te acose por mucho tiempo que te acostumbraste. Tú mismo dijiste que te daba asco, que te humillaba, quizá creaste algún tipo de trastorno o yo que sé, solo por favor deja de hacerme esto – sus ojos seguían goteando.

-Pero me gusta besarte – sí, demonios, yo estaba en este momento tan confundido.

-A todos les gustan los besos, un beso, el beso de cualquiera. Un beso no significa nada. Trata de besar chicas con grandes pechos, quizá te des cuenta de eso, yo solo no quiero sufrir más- Ya te llore mucho Off – seque sus mejillas con mis manos. – Si yo no hubiera sido tan patético, sino te hubiera besado sin que quisieras nada de este estuviera pasando, por favor solo deja de hacerme esto y ayúdame a que recupere un poco de mi orgullo.

Se alejó de mí y salió del baño, me quede ahí plantado en el piso. Me tome los cabellos, lance todo el aire de mis pulmones.

Lo que quedo de la noche me mantuve lo más alejado posible de Gun, estaba tomando como nunca, todos estaban muy tomados. Los estripers no volvieron más.

A la hora de irnos Tay tomo a New en brazos, lo cargo a modo princesa y lo sao de ahí, Mix arrastro a Earth hacia afuera, Chimon tomó a Josh del suelo. Todos estaban cargando a alguien.

Yo no había tomado nada, estaba tan sobrio que me arrepentía pero cuando vi a Gun en el sillón dormido, supe que era el destino.

Lo tome en brazos, sus mejillas estaban coloradas, entre sueños hablaba y golpeaba al aire, sus labios estaban en un puchero y su cabello era un alboroto. La camisa negra que llevaba me mataba, era tan pegada, estaba un poco levantada. La baje frustrado. Caminé a la salida y me topé con Tay.

-Oh, justo iba por Gun. Dámelo me lo llevo en el taxi.- negué y lo pegue más a mi

-Yo lo llevo a su casa – Tay me miro por un segundo inspeccionándome. -Es mejor que lleves a New, te ayudare y me encargare – el pareció convencido.

-Toma sus llaves – me las dio.

Lleve a Gun a mi auto, lo coloque en el asiento del copiloto, le puse el cinturón de seguridad.

-Off – murmuro entre sueños y sonreí.

Conduje hasta su casa, me llene la cabeza de todo lo que Gun me había dicho. Estaba seguro que no me gustaban los hombres ni era gay pero con Gun, con él había algo. Una curiosidad y una necesidad de saber de él. Lo estaba haciendo sufrir, estaba consciente de eso, el me lo había dicho. Me dolía verlo sufrir. No quería esto.

Lo lleve hasta su casa, cuando entre a esta, encendí las luces. Me costó bastante encontrar su recamara, lo deje en su cama y lo arropé cuando le quite los zapatos.

Era increíble lo pesado de su sueño, me quedé un momento ahí, viéndolo dormir. Seguía murmurando cosas y tenía el ceño fruncido. Puse mi dedo en su ceño tratando que no lo frunciera.

Fue inevitable, me acerque y le di un beso en los labios, uno corto. Sus labios formaron un corazón al sonreír entre sueños. Sonreí también.

Listo, había terminado, Era hora de irme. Mire un poco a su cuarto husmeando. Era un lugar pequeño pero lindo, tenía fotos con sus amigos. En todas sus fotos reía y mostraba esa sonrisa que le hacía chiquitos los ojos y que iluminaba el lugar.

-¿Desde cuándo no lo veo sonreír así? Podía contar con los dedos esas sonrisas desde que lo desprecie esa vez, sus ojos aun me atormentaban en las noches.

Estaba siendo un imbécil con él ¿Qué esperaba? Yo seguía confundido y lo estaba perjudicando a él también.

Esa noche me fui de la casa de Gun con la esperanza de poder resolver mis dudas.

Los tres días después de esa noche fueron un caos para mí, me la pasaba en los clubes o bares, me ligaba a cualquier chica y as besaba, las besaba como a Gun. Estuve buscando todo el tiempo esa sensación. Él dijo, él me dijo que podía encontrarla con alguien más, busque con pechos grandes, pequeños, rubias, morochas, delgadas, gordas, altas y bajas, con todas.

Fue en el momento en que decidí ir a un bar gay que supe que estaba yendo mal. Fue fácil ligarme a un chico, pequeño, con piel blanca y suave, cabello azabache y labios grandes. Casi tan grandes como los de Gun pero no con su peculiar forma.

El beso fue una cosa extraña, tenía entre un sentimiento de repulsión como solo humedad y lenguas. Había mucha saliva, estaba consciente de que era un hombre, su respiración era pesada, su áspera piel raspaba a la mía, sus manos que me sostenían no eran cálidas. Con Gun, con Gun nunca era consciente de si era un hombre o una mujer, sus labios eran el único lugar al que quería pertenecer, la humedad de su boca era perfecta y sus manos me tocaban con delicadeza. Y todo eso lo había descubierto con un par de besos.

Cuando llegue a mi casa eran las 12 de la noche, me metí a bañar y enseguida fui a dormir. Rodé por la cama por un par de horas, mi cabeza no dejaba de pensar.

Mire a la hora y decidí llamarle a mi madre, ella contesto con una voz ronca del sueño.

-¿Está todo bien Off? – pasé saliva.

-Mamá, perdón por despertarte, no puedo dormir.

-cariño, está bien. ¿Qué pasa? ¿Es por Mook? ¿Te arrepientes de dejarla?

-No, no es ella ni tampoco estoy arrepentido. Quería hacerte una pregunta mamá.

-Claro Off , dime ¿Qué quieres saber? – suspire y me jale los cabellos.

-Mamá ¿Qué pensarías si te dijera que creo que soy gay? – Mi madre guardo silencio por unos segundos pero después hablo.

-Bueno cariño, no pensaría nada. Tus preferencias sexuales no me tienen que molestar, soy tu madre y lo que tú decidas sobre tu vida amorosa no me incumbe. Yo te amo y te seguiré amando –dios, era la mejor. – ¿Está todo bien cariño?

-Mamá, creo que me gusta un hombre – Oh si, demonios. Lo había dicho.

-Que bien hijo, estoy tan contenta.

-Mamá enserio he sido un idiota con él, no sé qué hacer – susurré.