En tierras humanas lo único que se veía eran cuerpos de gente que caían ante las armas del ejercito de Apocalipsis, Alemania y Turquía eran los últimos en presentar una frontera solida, si ellos dejaban que la linea de defensa se desplome entonces toda Europa estaría a merced del enemigo y la recuperación seria imposible, dejando solamente a Japón en sus islas y a la Unión Latinoamericana, cosa que podria terminar con una rendición.

La gente estaba perdiendo la esperanza mientras el Hambre, las enfermedades, la misma muerte se expandía como plaga sobre todos, se dijo que esa era la Generación Perdida, estaban perdiendo a tantos jóvenes que quizás lo que quedaba de su generación eran niños, quizás era cierto, o quizás todavía había esperanza.

En la Linea Magna lo que quedaba de la tecnologia del Eje, los remantentes de Elites estaban frenando el avance de las legiones muertas, mientras los ciudadanos trabajaban noche y dia produciendo armas, municiones, nuevos equipos militares, todo estaba preparandose para una ultima resistencia, aprovechando que los seres sobrenaturales parecian haber detenido sus ataques contra ellos y dejaban un solo frente de batalla.

Inglaterra misma estaba preparandose para propones una incomoda tregua e incluso cooperacion con el Eje, ya que estaban quedandose sin recursos y las meldiciones tambien les estaban afectando, pero una plaga involuntaria eran los malditos Ghoul.

Esos desgraciados seguian avanzando contra todos los que eran alumento, multiplicandose por miles o quizas millones en todas partes, en America se implemento la politica de cremar todos los cuerpos, pero resulto en una hambruna para los Ghoul, quienes comenzaron a atacar a todos para alimentarse.

Pero ellos tenian algo que nadie mas conocia, el unico que sabia de ellos y sus origenes era Muerte, el Jinete mas antiguo vio el nacimiento de esa raza abominable en la era de la Guerra del Abismo, cuando dioses externos a esa realidad vagaron por la tierra, cuando Big D los desterro usando todo el poder de sus legiones de angeles.

El mismo Muerte vio como esos seres eran humanos corrompidos por una entidad conocida como "Ktrian", el amo de la Carne, era la naturaleza del cuerpo en toda su degeneracion, solamente los dejaron existir porque nadie se molestaba en una plaga menor, hasta este momento, en que ellos estaban devorando pueblos enteros, ciudades eran citiadas y ejercitos eran destinados a destruirlos, lo peor es que gracias a la bonansa estaban evolucionando.

Tanta abundancia estaba llevando a una rápida evolución, eran más fuertes, más resistentes y lo que antes era inteligencia pseudo humana ahora se acercaba mucho mas a verdadero intelecto humano, eran una nueva amenaza que nadie quería ver llegar a su punto crítico, posiblemente devorarian todo hasta que no quedara nada.

Tanya comenzo expediciones de exterminio masivas, ciudades enteras tomadas por las criaturas fueron reducidas a hornos que ardian con fuego magico, el poder de la Demonio del Ring estaba aumentando cada dia, y los enemigos que tenia mas les valia comenzar a temer el poder de la maga humana mas destructiva.

La esperanza se perdio hace mucho, la humanidad ya no luchaba por tierrra o por conquistar al enemigo, lo hacian por la supervivencia, todos estaban mandado recursos de todas partes del mundo a Alemania y Japon, siendo quienes estaban frenando todo el avane en direccion a los oceanos Atlantico y Pacifico, si caian, entonces las flotas de Apocalisis llegarian al resto del mundo.

Cada pais estaba creando sus propias lineas defensivas, ciudades y pueblos levantaron sus murallas para protegerse como lo hicieron sus ancestros, en Mexico, la madre de Ignacio dirigia esfuerzos para fortificar los pueblos montañosos, para tener ventaja sobre el enemigo, aunque lo que tenia como mano de obra eran mujeres y niños.

Los Hombres se fueron a la guerra, dejando a sus familias atras, por lo que muchos pueblos estaban indefensoss ante las plagas, y debido a esto es que estaban vulnerables a los ataques de seres como los Ghoul y demonios monstruosos que ahora vagaban por la tierra, a la espera de su siguiejte comida.

Asgard

Los gigantes estaban pereciendo ante la fuerza de ataque que Thor habia dirigido a la batalla, la sangre y fragmentos de cuerpos se esparcieron por todas partes, la guerra era un cataclismo que afectaba la tierra tambien, durante el combate las bajas eran colosales para todos, y solamente los mas poderosos estaban logrando mantener el ritmo en un combate de intensidad tan grande.

La sangre baño el campo de batalla, mientras el dios del trueno avanzaba contra la ciudad, buscando a Loki, queria hacerlo pagar, su padre, sus hermanos, todos murieron por su culpa, ahora era momento de la retribucion, Asgard se levantaria de nuevo y esta vez él estaria al mando.

Mientras estaba avanzando vio como Luis se acercaba al lider de los Jigantes de Fuego, esos seres estaban tratando de bloquear al guerrero hiberico, pero estaba demasiado furioso para permitirse detenerse, Luis sabia que si decidian detenerse ahora, nunca podrian volver a atacar Asgard, no sin una fuerza de combate lo suficientemente grande y con muchas mas bajas de las que podrian permitirse.

El gran enemigo al que se estaba por enfrentar era Surt, el rey de los gigantes de fuego y quien representaba la mayor amenaza de todas, un gigante de tresientos metros de altura, quizas mas, su espada era tan grande que su la utilizaba sin cuidado cortaria a sus compañeros de batalla, y era algo que trataba de que no sucediera.

Llegar ante el rey no fue tarea facil, mientras Luis avanzaba noto como la tierra se partia, el calor que emitian los gigantes transformo el suelo en lava, sus botas se estaban derritiendo y tenia que saltar entre grandes trozos de roca que flotaban a la deriva en mares de piedra fundida, todo mientras luchaba contra otros gigantes y los eliminaba uno por uno.

Xenovia estaba dirigiendo la banguardiade magos, tratando de mantener a los gigantes atras de una linea imaginaria mientras los magos disparaban, pero era complicado cuando sentia que el aire que respiraba se volvia hielo dentro de sus pulmones, era como respirar pequeñas navajas de afeitar,

Pero no se rendia, cada que su espada se movia era al menos un enemigo muerto, no caeria tan facilmente, aunque los enemigos no se iban sin dejarle recuerdos, tenia cortes y golpes por todo el cuerpo, aun con la pieza de torre sus resistencia comenzaba a fallarle, necesitaban cortar la cabeza de la serpiente.

Tezcatlipoca estaba avanzando mucho más rápido que los demás, las sombras que emitía su espejo lo volvían invisible ante los ojos de sus enemigos, él estaba dirigiéndose a la sala del trono para aniquilar a Loki, el dios de las mentiras era su antítesis, donde uno era fuego el otro eran tinieblas, donde uno engañaba el otro odiaba la mentira, el dios nórdico vestido de Blanco contra el guerrero se obsidiana Mexica.

En la distancia, sobre el puente arcoíris, Luis estaba luchando contra un contingente de gigantes que le habían dejado arrinconado ante el vacío que existía entre los diferentes reinos, las tropas estaban muriendo, quedaba poco tiempo, todos los magos y tropas se estaban replegando y muchos mas estaban escapando para salvar sus vidas.

Aquel rey de los gigantes de fuego avanzo en su contra, para tratar de aniquilarlo, ese era el punto decisivo de su vida, el momento donde mostraría que clase de persona era realmente, si lucharía hasta el final, si escogería escapar, o si solamente tomaría a quien le importa para sobrevivir otro día.

Luis: cielos, Dios, si esto es una prueba de mi fé al menos me hubieras dado opción múltiple, esta bien, veamos cuanta fuerza me permites usar esta vez, por favor, solamente has que esto funcione —Le dio vuelta a la alabarda y apunto la punta al suelo, una gran cantidad de poder se unió en un solo punto, el Rey de los gigantes era tan grande que apenas noto lo que hacia— ¡Si eh de morir hoy! ¡Entonces vengan todos ustedes conmigo!

El golpe fue un cataclismo que se sintió en todos los reinos conectados al árbol del mundo, terremotos remodelaron la tierra, montañas se levantaron, islas se hundieron, los mares por un momento amenazaban con cubrir la tierra, de no ser porque los dioses estaban atentos y lograron bloquear los efectos del maremoto y no permitieron a todos los volcanes cubrir la tierra de lava ardiente.

El puente se destruyo por completo, las puertas que conectaban el mundo se rompieron con un horrible estruendo y las mismas murallas de Asgard se desplomaron a tierra, Xenovia desde lejos solamente grito el nombre de Luis, mientras veía como el puente se desplomaba, Luis estaba en el puño del rey, mientras él solamente sonreía y la veía de reojo, le guiño un ojo y después se perdió en las profundidades de las tinieblas.

Lugar desconocido

Walfrid estaba observando al ser frente a él, era una sensación que le sobrepasaba, no podía creer que de verdad estuviera allí, Big D le miraba o eso suponía, era sentirse tan pequeño, insignificante, trato de moverse pero su cuerpo astral se estaba convirtiendo en arena, no quedaría nada.

D: es difícil estar en mi presencia sin renacer otra vez, permíteme ayudarte -Con solo pensar eso, Walfrid sintió que su cuerpo se estaba moviendo de nuevo, se colocó de pié y observó al ser frente a él- ¿Quieres comenzar de nuevo iremos directamente al grano?

Walfrid: ¿De verdad eres Dios? Es decir, se que no es exactamente lo que esperaba, pero, al menos esperaba un humano glorificado, no esto... Pero no importa, ya debes saber que hago aquí -La entidad creo una sala de estar, con dos sillones individuales, uno frente a otro, con una mesa central-

Era un lugar familiar y agradable a la vista, le recordaba un poco a la primera vez que estuvo solo con Tanya, entonces D cambio de forma a algo más mortal, al menos en forma, un hombre muy grande, si rostro no podía distinguirlo, pero prefirió no mirarlo a la cara, era una sensación enfermiza para él, como estar vestido de payaso en medio de una elegante reunión.

Frente a él se materializó una taza de chocolate, la cual tomo con la mano todavía temblorosa, observó su reflejo en el oscuro reflejo y suspiro cansado, tantos años en guerra, tanto tiempo peleando y discutiendo, pensando a cada momento en su siguiente movimiento, al fin su mente estaba en paz.

Tomo la taza colocada frente a él, bebiendo el contenido con cuidado de que no fuera a generar un agujero en su estómago, fue tan relajante, era un sabor que trasciende la percepción física del gusto para ser algo que llenaba el alma de gozo.

D: dime algo, Walfrid ¿Cuánto tiempo llevas en guerra? -A diferencia del militar, la entidad escogió beber una taza té, agregando miel para endulzar el loquito- es agradable lo dulce de ve en cuando

Walfrid: desde que tengo memoria tengo que pelear, pero en una guerra, desde que entre al ejército, planeaba seguir activo hasta que muriera, creo que logré lo que quería -Dio un largo tragó a su taza, hasta dejarla vacía, una vez satisfecho la dejo en la mesa y está desapareció- quiero saber una cosa, nones un reclamo o algo así, solo quiero escuchar una respuesta de ti ¿Por qué has permitido esto?

Otra platica incomoda, una pregunta que estaba seguro de que muchos hicieron en el pasado y que él solo hizo en voz alta una vez que tenia al gran jefe de frente, e incluso podria ser que ahora no tuviera una respuesta, después de todo, era Dios, si quería solo lo ignoraría y lo mandaría al infierno.

Pero la entidad decidió hablarle, toda la realidad a su alrededor se retorció hasta que se mostraba una gran habitación, que contenía en su interior toda la galaxia, veía mundos muy extraños, con gente viviendo en ellos, veía también como civilizaciones crecían hasta conquistar grandes extensiones de la galaxia.

Narración de Big D

Esta es tu galaxia, tantos mundos que te volverás loco al contarlos, al tratar de comprenderlos, la humanidad fue hecha como un acto para mostrar la luz y oscuridad que tienen todos en su interior, siempre e tenido un plan, diseñe mundos que estaban planificados, vi todos sus futuros y siempre los lleve a los mejores destinos posibles.

Pero entonces apareció la primera anomalía, el día en que mi reloj se detuvo, Zero llego a este mundo, cuando tu estabas sufriendo el lo directo y le pareciste interesante, por eso es que te dio ese poder, le arranco un engranaje a mi Reloj Universal, lo recupere cuando moriste, ahora puedo controlar mejor algunas cosas, pero nunca volverá a ser como era antes mi plan, y todo estaba por empeorar a partir de aquí.

Walfrid: ¿Me estas diciendo que soy yo el responsable de que todo empeorara?

No, solamente fuiste un desencadenante, pudo ser ahora o dentro de cincuenta años, pero no vale la pena pensar en lo que sucedió y lo que pudo ser, aunque si quieres puedo decirte que pudo suceder... tu no estabas en la vida de Rias y de los demás.

Todos morían solos, Luis debió morir en realidad en una pelea de bar, una mala elección de oponente y termino con una navaja en el estomago, Ignacio debió vivir tranquilo como un campesino, ignorando su divinidad, Ralph habría ganado el circulo mas profundo del infierno en lugar de la posición de limbo en la que esta su alma, incluso Ali debió quedarse en el desierto, Dimitri y Nero directamente no debieron existir.

Walfrid: me estas ocultando todavía algo, finalizaste cuando hablabas de nosotros, que hay del grupo de nosotros -Ver esa expresión, seria mejor que le mostrara, en un segundo vio todo lo que habría sucedido, y logre ver como partía la mesa de una patada-¡Como puede existir semejante atrocidad y estupidez! ¿Se te acabo el sentido común? ¿En que momento el universo se alineo para crear esa realidad?

Te podria decir alguna mentira, pero en realidad los deje de ayudar, desde que esos seres del Exterior llegaron no e podido ayudar mas allá de lo que hace Azrael, si Zero se quedaba al margen pude dejar todo como estaba, me enfocaría en dejar el mal afuera, pero no, ya no es una opción, y con mis armas sueltas, el reloj esta a punto de llegar a media noche.

Mira, lo que te mostré es en realidad era la galaxia antes de que llegara la Guerra del Abismo, déjame mostrarte lo que queda, paramos desolados, mundos que han dejado de existir o explotaron en caprichos de dioses ajenos, salve pocos sistemas, pero se han estado corrompiendo, por eso la Tierra tiene a los Jinetes como botón de destrucción, la Joya de la Corona de mis creaciones nunca caera en manos de mis enemigos.

Tras la guerra contra mis hijos corruptos me retire a este lugar para protegerlos, pero tambien para seguir creando, si yo intervengo directamente, bueno, ya te imaginaras que clase de cosas haría Zero para llevar la contraria, la cura seria un veneno peor que la enfermedad.

Observe a Walfrid, esa expresión con sus dientes crujiendo, sus puños puños se apretaron tanto que sus nudillos se volvieron blancos, sabia que estaba haciendo su mayor esfuerzo para no explotar e ir a la tierra para tratar de matar a ese demonio de cabello castaño.

Tienes pocas opciones, Walfrid, puedes pedir que te mande al paraíso, te lo mereces, tantos años sufriendo, tantas cosas que hiciste para proteger a la humanidad, por mas atroz que parezca no veo tu corazón tan corrompido para no merecer las promesas del descanso eterno en el reino que cree para ustedes.

Pero veo por tu expresión que no es lo que quieres, veo algo mas, veo todavía el fuego de tu alma ardiendo, puedo ver que siempre lucharas para tratar de llegar a protegerlos, no estas listo para descansar, por lo que tienes dos opciones, te puedo mandar al infierno, en los circulas menos terribles, para purificarte y quizás reencarnar como un ángel o quizás...

Walfrid: ¡Lo que sea! Hare cualquier cosa si con eso logro proteger a mi equipo, lograr que esta realidad no llegue a su final

Fin de la Narracion

Narra Soldado Simon Petrico, en alguna parte de la frontera con Polinia y Alemania

Pertenezco a un regimiento de soldados de Inglaterra que fue capturado durante los inicios de la campaña, habíamos estado al tanto de la situación del mundo exterior ya que se nos permitía escuchar una radio de manera libre, al inicio nos parecía sospechoso, y realmente lo era, pero también pudimos saber la escala del horror de afuera.

Se nos ofreció nuestra libertad a cambio de cinco semanas en el frente, esperaba una situación horrible, pero esto era el maldito infierno, disparabanos día y noche, solo podíamos dormir cuando se nos terminaban las balas y el campo de batalla estaba ardiendo, por lo que nadie se acercaba.

Estábamos comiendo poco ya que las raciones de comida estaban terminándose, muchos de mis compañeros ya murieron por una infección muy contagiosa, los tuvimos que quemar junto al pabellón médico, como una clemencia ametrallamos la zona con los moribundos, no los podíamos salvar y nadie los queria quemar vivos.

Las arma químicas mataron la tierra, creo que ya nadie tiene esperanza, peleábamos para vivir, muchos se habrían cenado una bala de no ser por el miedo de todos a despertar como una de esas cosas, ni vida ni muerte, la más absoluta desesperación.

Yo miraba el cielo y en medio de delirios veía como desfilaban criaturas indescriptibles para mí, siguiendo un camino de arena negra, veía almas levantándose en el aire y siendo consumidas por un devorador absoluto, mire a tierra y tome mi pistola, me quedaban cinco balas, tome el arma y la coloque en mi boca.

Tire del gatillo, el mecanismo hizo su trabajó, pero el maldita arma se había encasquillado, por lo que no hizo más que romperme los dientes con el movimiento y quemarme el paladar, grite desesperado de no poder ni siquiera morir como quería, estaba por tomar una granada cuando frente a mi apareció una figura de luz dorada que tomo mi mano, estaba sonriendo, era lo único que se veía, su cabello desordenado cubría casi todo su rostro.

???: Aún tienes esperanza, en la vida y muerte aún tienes esperanza, pide ayuda, dile a todos que lo hagan -Su toque era calido, era una sensación acogedora, como la sensación que tienes cuando abrazas a un ser a quien amas, sentí las lágrimas caer por mi cara manchada-

Simon: ¿Esperanza? Cómo quieres que tenga esperanza en medio de la oscuridad? Rodeado de un limbo del las absoluto mal, por favor, solamente quiero descansar -Me arrodillé ante él, pero me tomo de los hombros y me puso de pié, mirándome a los ojos con lo que parecían llamas doradas que brillaban con la intensidad del sol, pero no me quemaba los ojos-

???: ¿Mal? ¿Oscuridad? Te diré la verdad universal, la oscuridad lo absorbe todo, se expande por todas partes, pero cuando aparece la luz retrocede, es cobarde y con la luz suficiente perece, tengan fé, tengan esperanza, porque su sufrimiento fue escuchado y es hora de que sean salvados, pero tienen wue pedir -Se quejo de él y comenzó a desintegrarse lentamente-

Simon: ¿Quién eres? -El mensajero le guiñó un ojo y se sello los labios con el dedo índice, desapareciendo del lugar, dejando al soldado confundido-

Esperanza, fé y pedir, sonaba como su maestro de escuela dominical, hablando todo el día de la fé y de un dios que estaba muerto según decían, pero aún así, cuando comenzaron a llegar de nuevo los enemigos, pensé en tomar mi arma para luchar, pero estaba destruida, solamente pedí en mi mente por un milagro y me lance al ataque.

El arma disparo una vez más y el enemigo había caído en el primer ataque, entonces comencé a pedir fuerza, poder contener al enemigo, tome una pala que habíamos usado para cavar trincheras y golpe todo lo que estaba cerca, me sentía vivo una vez más, la fuerza regreso a mi cuerpo, no me cansaba al luchar y podía sentir como mi corazón ardía de una manera inexplicable.

Fue entonces que los vimos, justo sobre nuestras cabezas se escuchaban cantos de un sonido tan puro que hizo perecer a muchos de los no muertos, el fuego sagrado levanto inmensas murallas frente a nosotros, mire al cielo y los ví.

Ángel muy diferentes a cualquier cosa que hubiera visto, con túnicas más puras que la nieve, con hilos de oro creando patrones y símbolos que no comprendía, su idioma era diferente a cualquier otra cosa, pero de alguna manera sentías lo que transmitía, estaban adorando al creador.

Fin de la narración

Las legiones de ángeles se estaban congregando en la tierra, su sola llegada fue un signo de que la marea de la guerra estaba cambiando, fuego sagrado destruyó todo lo que estaba en el campo de batalla, volaron por el aire a gran velocidad, atacando con arcos a distancia, los soldados al ver esto se desplomaron al suelo, pero los magos permanecían listos para pelear.

Pero ningún ángel los atacaba, solamente marchaban contra el enemigo de los humanos, la batalla era lenta, pero no parecía haber un alto, avanzaron por decenas de kilómetros, hasta que al llegar a los cien kilómetros de avance de detuvieron y se desvanecieron tan rápido como habían llegado.

Base de Armagedón

Los terremotos que habian sacudido el mundo llegaron a la isla, muchas estructuras resultaron dañadas, otras se desplomaron, pero el monumento que se levanto conmemorando a Walfrid seguia en pie, aunque la cripta donde había descansado su cuerpo ahora estaba abierta.

Ralph era el único que estaba en la isla en el momento de los terremotos, por lo que fue el primero en llegar a la zona, varios soldados estaban vigilando la zona a sabiendas de que quizás algún enemigo pudo acercarse aprovechando el desconcierto de la situación, pero al llegar el soldado Austriaco se quedo con la boca abierta.

La cripta estaba abierta, entro al lugar con un cuchillo en mano, casi sintiendo lastima por aquel que se le ocurrió profanar el lugar de descanso del hombre a quien casi veía como un padre, busco en todas partes, pero no se veía nada, fue hasta donde estaba la vitrina donde habían dejado el cuerpo, pero al llegar estaba roto el cristal supuestamente irrompible de los asgardianos.

Por un momento pensó en un robo, algún enemigo que quería profanar la memoria de Walfrid, pero no había rastros de desorden, la mortaja estaba doblada en los pies del ataúd, tampoco había mas violencia mas allá de los vidrios rotos, y la mayoría estaban alrededor.

Cuando su mente comenzó a comprenderlo, se arrodillo al lado del lugar y se pregunto si de verdad seria posible, o si se trataba de una broma cruel de algún enemigo, se sentía confundido, necesitaba buscar a los demás e informarlo.

Al salir pudo notar un poco mas de luz ene el entorno, levanto la mirada y observo una estrella en el cielo, la única estrella que quedaba, era nueva, brillaba con un peculiar color purpura, Ralph se quito la gorra y tras murmurar algunas palabras en su idioma natal regreso a su puesto, mandando el mensaje a los demás, tendrían que esperar, pero ahora sabia algo, Walfrid no los había dejado desamparados, ahora, cuando mas necesitaban de un líder que unificara a todos.

Dominio Egipcio

Todo se estaba quemando, los soldados y guerreros corrían aterrados mientras el fuego se esparcía por todo el territorio a la velocidad de un relámpago, las cabezas rodaban por el suelo, mientras los pasos se escuchaban por el puso, los grandes tapices y jeroglíficos eran destruidos ante una gran luz.

Algunos sirvientes recogían las cabezas y al hacerlo estas perdían la piel, dejando ver solamente calaveras con el nombre de las victimas grabado en la frente, todos eran lanzados a una gran pirámide que estaba siendo tomada como trofeo por el guerrero, estaba furioso, su ira quemaba como el sol, el sabia de eso.

Ignacio: mataron al sol que flotaba en el cielo, destruyeron a incontables dioses, quedando pocos , quieren un mundo donde el humano esta con la frente en el suelo, donde solamente digan plegarias y mueran segun sus caprichos, pues yo les digo que se vayan a la mierda —En su mano tenia a una guerrera con la heráldica de la luna en su armadura, pero no logro hacerle daño al dios guerrero del sol— una nueva era llego, las semillas germinaron y ahora amanecerá

La lanzo contra un muro y este se partió, sepultándola bajo toneladas de escombros, camino entre los pasillos del palacio, quemando todo hasta que no había nada mas que cimientos carbonizados, sin sobrevivientes, algunos escapaban, pero estaba dispuesto a ir tras ellos, nadie escapaba de su ira.

Primero Egipto, después Grecia, al final China, ahora le mostraría a todos los que sometían a la humanidad la fuerza de los hombres, estaba caminando entre las cenizas, cuando vio algo peculiar, un brillo entre el polvo negro, se acerco y tomo una invitación marcada en metal, aunque reconoció que la tinta era sangre humana.

Leyó el contenido y tras asegurarse de haber entendido la olio, sintiendo cada olor y fragancia, el rastro del mensajero, pudo sentir incluso como la escribió el autor, era un simple escriba, poco mas que un esclavo, pero sintió cuando colocaron el sello de una familia noble de Europa oriental, esto seria divertido.

Ignacio: vampiros pidiendo entrar a la guerra para no quedarse sin comida, dicen que ya tienen listo todo, incluso reservas de alimento —Le dio la carta a uno de los siguientes, un hombre que se había convertido en jaguar, pero retomo su forma humana— guarda esto, mi siguiente parada son los dominios de los vampiros ¿Crees que puedan ocultarse del sol para siempre? todos arderán

La noticia se esparció demasiado rápido, en una semana ya todos sabían que Ignacio estaba de caza, todos los que hicieron tratos con Apocalipsis estaban en alerta máxima, la ira de un dios solar no era una broma, la humanidad también lo vería, pronto todos verían el nacimiento de un nuevo sol sobre el mundo.