4 de noviembre, 1939

La fortaleza Astaroth era un gran castillo en las orillas de los dominios que tenían los demonios en el Inframundo, era considerada una de las fortalezas más antiguas del régimen de los antiguos reyes demonios que aún seguía en pie, aunque debido al paso de los años había perdido mucho de su antiguo esplendor.

Era cierto que era un edificio muy lujoso, pero en la actualidad sus defensas fueron sustituidas por cosas banales como estaturas, fuentes y solamente prevalecía la muralla exterior, dejando como mayor atributo un gran abismo sobre el que flotaba.

Diodora había vivido allí durante años, sumergido solamente en complacer sus apetitos carnales y confiando siempre en el poder que le otorgaba su rango como demonio de clase alta, olvidando siempre el entrenamiento para volverse más fuerte y que tarde o temprano lucharia de alguna manera.

Estaban llegando soldados de todas partes del Inframundo, levantaban muros extra, crearon trincheras para dificultar el paso de tanques y colocaron minas mágicas para hacer volar por los aires a quienes las tocaran.

Parecía que se preparaban para recibir el ataque directo de un gran ejército, pero en realidad estaban esperando solamente a un grupo de personas que no podría ser considerado ni siquiera un batallón, pero eran una pesadilla andante para los sobrenaturales.

En ese lugar no solamente se encontraban los demonios que estaban siendo llevados a gran velocidad, estaban llegando ángeles y ángeles caídos para poder hacer frente a una batalla contra los humanos más peligrosos que conocían y a una furiosa madre Yokai con el poder de un demonio de clase suprema.

Ajuka estaba furioso con esa situación, su hermano menor no solamente había arruinado su única oportunidad y defraudo una confianza casi inexistente, lo que hizo era el equivalente a tener una herida abierta y despues saltar a aguas negras para que se infectara y se fuera al infierno con mas facilidad.

Los peor de todo es que Sirzechs se entero de que fue él quien mando a Diodora a espiar a Armagedón y debido a las apuraciones no se le ocurrió enviar a nadie a vigilar que no hiciera nada tan estufido como secuestrar a la hija de una mujer que podría no solo metería a su facción, también atraer la atención del panteón japonés.

Todo se estaba volviendo un caldero infernal, todas las tensiones y el poder estaba convergiendo en ese lugar, Michael fue el único en llegar al lugar ya que sus hermanos estaban ocupados protegiendo el cielo, no querian tener un ataque sorpresa en casa en caso de que todos salieran de su base.

Azazel se había reunido en ese lugar dejando el labor de proteger Grigori en manos de sus compañeros, queria saber que tan poderosos eran que se dice que vencieron a Kokabiel con relativa facilidad e incluso se llevaron su cabeza, en realidad su principal razón para estar allí era para ver en persona sus poderes.

Al final del lado de los demonios se encontraba presente Serafall y Ajuka, Sirzechs se negó a ir, argumentando que tenia una misión mas importante que hacer mas allá de salvar el trasero de Diodora de las consecuencias de sus actos, pero eso no importaba, ya estaba todo preparado para defender la fortaleza y terminar con todo de una vez por todas.

En los calabozos se encontraba Asia, había estado atrapada desde que despertó y no había visto a nadie, pudo utilizar su Sacred Gear para curar su pierna, pero los barrotes tenían protección mágica y se habían llevado su arma por lo que no tenia muchos medios para planear un escape.

Diodora: mi linda Asia-chan al fin esta despierta —Del otro lado de la celda se encontraba el mismo demonio joven que veía a la joven rubia con una sonrisa— ¿Ya te dignaras a hablar con tu salvador?

Asia: lamentaras tenerme aquí —Se recargo en la pared, mirando al muchacho con desprecio, estaba furiosa y apenas tuviera la oportunidad lo mataría para irse de allí, aunque aun no sabia a donde iría de todas maneras—

Diodora: pero si tu eres la razón por la que estoy aquí, tu me salvaste cuando me encontraste herido y por eso decidí que haría que estuvieras a mi lado —Con tranquilidad desabrocho los botones de su camisa y le mostro una gran cicatriz en forma de equis en su pecho— tarde mucho, pero logre que te excomulgaran, aunque tu presencia en el vaticano fue inesperada, pero tenia todo listo, hasta que esos dos idiotas interfirieron

En la mente de la joven rubia todo comenzaba a cobrar sentido, las piezas se armaban como un rompecabezas, ella nunca había hecho nada para ofender a la iglesia, pero de manera repentina se le ordenaba ir a la santa sede, entonces comenzaba a entender todo, si ella moria en ese lugar entonces Diodora podría reencarnarla.

Ella estaba por pedir una explicación cuando un hombre de cabello verde peinado hacia atrás, Diodora lo miro sonriendo pero la respuesta del mayor fue darle una patada en la cara, la cual tuvo la fuerza suficiente para arrojarlo contra una pared y hacerle un agujero, Diodora se arrodillo tomando su cara y tratando de detener el sangrado de su nariz rota.

Ajuka: ve arriba, tienes que estar preparado para luchar, te di una sola tarea y no lograste hacer nada bien —Se estaba conteniendo mucho, de no ser porque era su hermano menor lo abría asesinado en el acto y abría buscado la manera de detener esa batalla— 

Diodora: ¡Mi maldita nariz! —Se sujeto la cara y trato de levantarse pero le era imposible, entonces su hermano le tomo del cuello del abrigo para levantarlo— tenemos soldados, los ángeles y caídos están aquí ¿Por qué me debo manchar las manos? cumplí la misión, incluso los obligue a llegar aquí

Ajuka: si, tenemos soldados, pero te harás responsable de todo esto maldito imbécil —Lo soltó y el mas joven se sujeto de una pared— pero te harás responsable, pelearas y traerás la cabeza de al menos un miembro de Armagedón, no te quedaras aquí dentro fornicando mientras otros mueren por tu estupidez

Con esas palabras el calabozo volvió a quedar en silencio, Asia se toco el cabello y pudo sentir una péquela pieza de metal que estaba oculta entre su cabello, tendría que esperar hasta que comenzara esa batalla de la que hablaron para poder ejecutar su plan, estaba por tomar la pequeña ganzúa cuando se sintió observada.

Miro a sus espaldas y allí pudo ver a un par de adolescentes, uno vetea un traje blanco con una gorra militar, mientras que la otra era una chica con uniforme de alguna escuela, tras ellos había una caja y parecían divertirse con esa inusual situación, los miro detenidamente y pudo reconocer a sus jefes.

Zero: buenos días señorita Argento, no la veía desde que le dieron una de mis piezas de ajedrez —La joven retrocedió y el joven de traje blanco solamente rio un poco— felicidades Asia Argento, oficialmente acabas de ser promovida, de un asalariado al grado asociado de rango medio

X: esta es una ocasión especial, planeábamos darles estas cosas antes pero Zero se quedo dormido y a mi no me importa —Tomo la caja de madera y la tiro a los pies de Asia la joven tomo el arma con desconfianza—pusimos a un armero para hacer esa arma ya que no sabíamos que darte

Ella tomo la caja y sus ojos se abrieron mucho al ver una especie de Ballesta, tenia varios sistemas que parecían llevar a una esfera en la empuñadura, debajo del arco había una especie de tambor donde estaban los dardos que se suponía dispararía, comparándolo con un arma parecía una especie de subfusil.

Zero: te presento la ballesta automática sagrada, no le puse nombre, te lo dejo a ti —Se acerco y señalo el tambor para que pusiera atención a las runas que estaban grabadas en el cargador— el mago que lo diseño sabe sobre todo tipo de magia, podrás modificar los atributos y con el tiempo los disparos serán mucho mas poderosos

Exterior de la fortaleza

Los vigías estaban observando el horizonte con atención a cada piedra que se movía, pasaron saliva a medida que el día pasaba, habían estado alerta desde el amanecer y nada estaba allí, los soldados se prepararon para una batalla inminente, pero ya había pasado un día desde que dieron la alerta y no había ningún movimiento.

Fuerzas en la fortaleza Astaroth

Demonios de elite: 500

Ángeles de elite: 400

Ángeles caídos de elite: 50

Tropas generales: 100.000

Familiares: 20.000 (Pueden varias en fuerza y numero)

Magos: 1.000 magos humanos 

Lideres presentes: 4 (Dos reyes demonios, un Serafín y Cadre)

Comandante supremo: Ajuka Beelzebub

Los nervios estaban a flor de piel, los soldados observaban a todas partes y no parecía que sus enemigos estuvieran cerca, los magos y familiares fueron desplegados en los alrededor para impedir que los enemigos llegaran a las orillas del abismo y atacaran la fortaleza de manera directa.

Los soldados estaban viendo al horizonte cuando pudieron sentir pánico, vieron como tres hombres de piel oscura caminaron sobre la colina, se escuchaba la marcha tras de ellos y desde donde se encontraban los soldados pudieron ver como luz dorada venia desde tras ellos.

Tras ellos aparecieron un gran numero de aparentes humanos, vestían ropa de apariencia acolchada y tenían las caras pintadas, podían ver algunos humanoides que parecían jaguares y otros águilas, llevaban lanzas, arcas y una especie de garrote con cuchillas negras en los costados.

Se escucharon los tambores de guerra y sonidos de los silbatos de guerra siendo escuchados por todas partes, parecían ser gritos humanos sacados del inframundo donde las armas eran acompañados de grandes columnas de humo que subieron hasta el cielo y crearon gigantescas nubes que limitarían la vista del campo de batalla.

A su lado se encontraban un gran grupo de soldados Yokai, con mascaras de animales y esta vez vestidos con armaduras de samurái, las espadas de madera fueron dejadas de lado para ser remplazadas por espadas benditas, arcos y lanzas de un gran largo.

Eran un numero mas pequeño que el del ejercito dirigido por aquellos aparentes humanos, pero se dieron cuenta que no deberían subestimarlos, los Yokai eran temidos por una razon y era que nunca se rendirían, ellos solamente conocían en la guerra la victoria o la muerte, antes que retroceder preferirían morir.

Al final estaba un grupo muy reducido de magos de combate humanos, flotaban en el aire produciendo luz como estrellas, al frente de todos estaba el equipo Armagedón, todos vestidos para la guerra y con sus acostumbradas mascaras para ocultar sus identidades al mundo.

Ejercito punitivo: Devastadores, Panteón Mexica y Yokai

Guerreros águila y jaguar:  5.000

Tropas elite Yokai: 2.000

Soldados facción mexicas: 100.000

 Familiares Yokai: 8.000

Alebrijes: 20.000

Magos humanos: 5.000

Lideres destacables: Yasaka, Walfrid Von Bismarck, Tanya Von Degurechaff, Quetzalcóatl y Tezcatlipoca

Grupo elite: devastadores

Líder general: Walfrid Von Bismarck y Tanya Von Degurechaff

Todos se prepararon para la primera carga sabiendo que posiblemente correrían directamente contra ellos, pero en su lugar los soldados de primera linea levantaron un muro de energia para proteger al ejercito mientras que los arqueros y los que tenían lanzas se preparaban para atacar primero.

Las flechas mágicas y las lanzas fueron rodeadas de energia y disparadas contra los enemigos que tenían al frente, eran tantas que produjeron la luz suficiente para que pareciera que era de día en el inframundo, la barrera mágica fue levantada y evito que los ataques causaran daños considerables.

Walfrid: preparen todo para un ataque total —A sus espaldas se creo un grupo de copias del oficial alemán y se preparo para mandarlos a la batalla, mientras que veía como los lideres de las facciones se preparaban para ganar— como diría un hombre en china, induce a tu enemigo a tener muchas defensas y mas vulnerable estará

Tanya: me alegra haber desayunado, creo que hoy cenaremos en el infierno —Se rio con amargura y cargo una bala en su rifle apuntando al frente, podía sentir el inmenso poder que había a su lado, realmente estaban combatiendo al lado de dioses—

Todos dispararon y de inmediato una gran cantidad de energia choco contra la barrera, un rayo de fuego azul proveniente de un zorro de nueve colas, una esfera de oscuridad arrojada por Tezcatlipoca y un rayo de energia lanzado por una gigantesca serpiente emplumada.

La fortaleza levanto una gran barrera de energia para impedir el paso del ataque y que todo se volviera un infierno, pero cuando el ataque conjunto llego la explosión creo una gran honda de choque que arraso con los alrededores, el polvo se levanto y la roca alrededor se vaporizo, dejando solamente un paraje desolado, pero la fortaleza seguía intacta.

Desde el interior de la fortaleza pudieron ver como comenzaba el ataque, diferentes explosiones y diferentes tipos de ataques fracturaron lentamente la defensa de energia que había alrededor, los soldados esperaron con paciencia la orden de atacar al ejercito enemigo, esperaron cinco minutos de ataques y finalmente se les ordeno atacar.

Los soldados demonios y los familiares corrieron desde el exterior de la fortaleza contra los guerreros que estaban avanzando, los gritos comenzaron, la batalla estaba comenzando y los guerreros de las facciones Mexica y Yokai fueron de frente contra sus enemigos.

Armagedón espero un poco y el equipo Vali fue el primero en desplegarse para cazar a los demonios de nivel mas alto, Arthur y Le Fay fueron los primeros en llegar al campo de batalla, el control de la espada y la magia crearon un escenario lleno de muerte, aunque debido al poder mágico sus ataques solamente desintegraban.

Cao Cao y su facción entraron al lugar utilizando la Sacred Gear de Leonardo para crear varios Golem para atacar al ejercito, aunque su principal propósito era ser la carne de cañón, las minas mágicas estaban causando problemas por lo que esas criaturas corrían por el campo minado para hacerlas detonar. 

La sangre corría por el piso y pronto se dieron cuenta que la batalla seria mucho mas interesante de lo que pensaban, los demonios de cuatro pared de alas estaban volando sobre el campo de batalla y causaban grandes bajas al bando invasor, pero en lugar de preocuparse por eso parecía que emocionaba a muchos de los guerreros.

En el frente de batalla como la vanguardia de Armagedón estaban Ignacio y Luis, los dos estaban listos para luchar y se encargarían de hacer pagar a quienes se metieron con sus amigos, los dos corrieron al campo de batalla sin temor, los familiares se arrojaban contra ellos pero las criaturas perecían con facilidad.

Luis: el lago de azufre y fuego, el lugar de castigo sin fin —Miro a un grupo de soldados ángeles caídos que se acercaban a ellos y tomo su alabarda con fuerza antes de levantarla en el aire como si fuera a hacer un corte vertical— ¡Les mostrare lo que es el infierno!

Su arma bajo a gran velocidad, quebrando el aire y la materia, un gran vendaval se libero, el aire era un arma mortal, el piso se partió e pedazos y creo una gran brecha que choco contra el escudo de energia de la fortaleza, pero seguía sin ser suficiente para hacerla ceder.

En el interior de la fortaleza Serafall y Ajuka observaron como el campo de batalla era llenado de cuerpos de sus seguidores, les era difícil creer que realmente se estaba avecinando una batalla de proporciones de la gran guerra en la facción bíblica, la mujer suspiro un tanto decepcionada de que sus decisiones hubieran llevado a ese desenlace sangriento.

Serafall: ¿Crees que pudimos evitar esta batalla? —Ajuka guardo silencio ante su pregunta, él sabia que era inevitable la confrontación contra los humanos, su raza era orgullosa y había dominado a la humanidad desde las sombras, con el aumento de poder de los humanos era inminente esa batalla—

Quizás lo que mas le llamo la atención fue que los humanos lograron adaptarse muy rapido a las inclemencias de la guerra, lograron incluso hacer aliados sobrenaturales, dioses y espíritus poderosos habían invadido el inframundo, no tenían muchas posibilidades acera de que hacer.

Michael hizo una pequeña plegaria y despues mando avanzar a los ángeles, los soldados avanzaron a gran velocidad y entraron en combate contra los guerreros águila, fue un choque de fuerzas muy parejo y cuando las espadas de luz chocaron con las armas de obsidiana el predecir la batalla se volvió imposible.

Pronto los dos dioses mexicas entraron a la batalla, Quetzalcóatl tomo la apariencia de una serpiente emplumada tan larga que parecía imposible de medir, rugió al ejercito enemigo y voló por el cielo, intentaron frenarlo pero todo aquel que lo tocaba recibía un ataque de luz solar que lo hería de manera mortal.

Tezcatlipoca corrió por el campo de batalla, sumiendo el lugar en la mas absoluta oscuridad, pensaron que estaban ciegos pero era solamente que la luz acababa de perecer ante el dios de las sombras, la oscuridad duro cinco minutos donde se escucharon los gritos de ayuda de los soldados que se encontraban con el feroz guerrero.

Cuando la oscuridad se disipo solamente había cuerpos mutilados por todas partes, su Macuahuitl estaba cubierto de sangre todavía, llevo el arma a su boca y probo la sangre, solo para escupirla y mirar a su alrededor con decepción.

Huitzilopochtli: ¡Esto es todo lo que nos has traído Michael! ¡Miserable traidor! —El líder de los ángeles observo al arrogante dios de las sombras burlándose de él y apretó sus puños antes de prepararse para la batalla— ¿La luz teme a un poco de oscuridad?

Michael: les ofrecimos clemencia al encerrarlos, cuando debimos exterminar hasta el ultimo de ustedes sin excepción —Salió de la fortaleza y creo múltiples lanzas de luz a su alrededor— esta vez no dejare el trabajo sin terminar

Tras de Michael estaban avanzando tres figuras, Irina y Dulio como ángeles reencarnados, además de Griselda Quarta quien se mostraba segura de la victoria, los tres estaban allí sabiendo que Xenovia estaría en el lugar, el principal deseo de Irina era que su amiga volviera con ella y al bando de la iglesia, que detuviera toda esa locura antes de que fuera demasiado tarde.

Tezcatlipoca no estaba solo, al encuentro de los ayudantes de Michael aparecieron Xenovia, Dimitri y la misma Tanya, los tres estaban dispuestos a permitir que el dios acabara con la vida de Michael y no permitirían que nadie les estorbara, por eso estaban allí para pelear contra ellos.

Dimitri: nos volvemos a ver Dulio, a pasado un largo tiempo desde que logre frustrar tu misión ¿Estas listo? —Sostuvo sus espadas de luz y una sonrisa apareció en su rostro mostrando sus alas, tres pares de alas, predominando el color negro— 

Dulio: maldito hereje —A su alrededor aparecieron esferas con diferentes elementos en su interior y desplego sus cinco pares de alas blancas, sobre su cabeza apareció una aureola dorada y se preparo para atacar— ¿Seguro que deseas morir?

Tanya: eres realmente muy arrogante, me encantara cerrarles la boca —Le apunto a la cabeza pero despues reconsidero su blanco cuando Griselda le apunto con un arco de luz—

Griselda: Xenovia, Michael a dicho que te dará clemencia si te rindes ahora y te entregas, solamente tienes que retractarte de lo que dijiste —La mujer tenia un tono maternal y parecía desear que su protegida realmente recapacitara en su decisión—

Xenovia: mataron a mis amigos y compañeros solamente porque no estábamos de acuerdo en luchar contra los humanos, porque no queríamos matar gente ¿Te parece que volveré? —Tomo la Excalibur y miro a la mujer y despues a Irina— ¡Todo es tu culpa Irina! ¡Confié en ti y mira lo que gane!

Irina no entendía de que hablaba hasta que recordó la conversación que tuvieron una semana antes de que la mandaran a Egipto, se mordió el labio pero de todas maneras creo un aro de luz para usar como arma, nunca espero luchar contra su amiga, pero no podía dudar si queria cumplir la voluntad de su amo.

Ninguno de los dos bandos se atrevía a atacar de inmediato hasta que Tanya tiro primero del gatillo, la bala fue detenida por Griselda, la batalla comenzó entre el bando de los creyentes y los que se negaban a creer, mientras tanto el dios de la oscuridad luchaba contra el representante de la luz.

Al final la barrera cedió y la fortaleza quedo expuesta a los ataques del ejercito invasor, los soldados del inframundo se prepararon para el ataque frontal y descuidaron un poco sus flancos, podían ver como los soldados enemigos estaban derribando las líneas de defensa y nada podría detenerlos.

Fortaleza Astaroth 

Pero mientras estaban enfocados en el frente había una pequeña fuerza de combate que estaba entrando a la fortaleza de manera furtiva, se trataba del mejor equipo de infiltración que pudiera tener el equipo Armagedón.

Ralf, Ali y Nero entraron a la fortaleza escalando los muros laterales sin ser vistos por nadie, el francotirador tenia preferencia por estar a distancia, pero bajo esas circunstancias necesitaban sus habilidades de sigilo para poder ejecutar la orden de rescatar a Asia y a Kunou. además de que con su nuevo armamento necesitaban nuevos campos de prueba.

El asesino con la capacidad de crear armas divinas con cualquier objeto que tocara recibió un collar extraño, tenia una cadena de plata que le rodeaba el cuello, pero podría rodear con ella su muñeca como si fuera una pulsera y la cadena se ajustaría, el ojo parecía ser sujetado por las manos de un humano, pero había una tercera mano esquelética.

Un artefacto que le permitiría que sus armas hicieran daño como si fueran malditas o benditas, dependiendo de sus necesidades, por eso era llamado el collar de la Contradicción, bendición y maldición, vida y muerte, era capas de hacer muchas cosas, pero si lo usaban demasiado podría terminar con la vida de su usuario.

Ali por su parte tenia un nuevo rifle, se trataba de un rifle especial diseñado por un mago que se encontraba al servicio de Zero, metal negro en su extendían, recubrimiento de mandar para evitar que el calor de los disparos quemara las manos del usuario, tenia gravados a los lados del cañón y la empuñadura.

No tenia una mira telescópica por especificaciones de Zero, pero tenia un par de hechizos para que el usuario pudiera escoger, además de un hechizo que ayudaría al tirador a apuntar a blancos a mas de un kilometro de distancia, era una obra maestra de la ingeniería mágica, sobre todo tomando en cuenta el poco tiempo que tuvo el hechicero para hacer el arma.

El grupo de comando  estaba caminando entre los pasillos de la fortaleza para buscar el calabozo donde podrían tener a Asia, no habían matado a nadie todavía pero estaban impacientes por comenzar el combate, una vez que tuvieran a Asia tendrían que salir antes de que toda la fuerza de su equipo fuera liberada.

Calabozo

En el calabozo se podía ver a tres guardias descansando en sus sillas, hasta cierto punto se sentían mas seguros cuidando de una niña que estaba desarmada a tener que estar afuera luchando contra un montón de soldados salvajes que hasta donde sabian eran capaces de las peores atrocidades.

Estaban tranquilos jugando cartas cuando escucharon un fuerte golpe proveniente de la celda, uno de ellos fue a ver que sucedía y vio a la joven inconsciente en el piso, el hombre abrió la celda y entro para saber que había sucedido, se arrodillo frente a ella y en ese momento sucedió.

Ella tomo la daga ceremonial que el guardia tenia en su cinturón y la clavo profundamente en la garganta para que no gritara, la muerte fue inmediata, dejo el cuerpo en el piso y tomo su arma, la cargo con cuidado y espero al lado de la puerta a que llegaran los compañeros del guardia.

Cuando llegaron ella salió de su escondite y varios dardos mágicos les quitaron la vida a sus enemigos, cuando los dos estaban muertos ella camino hasta la salida, toco la puerta un par de veces y la puerta a los calabozos se abril el guardia que entro recibió una patada en el estomago que lo hizo caer y despues le dispararon a la cabeza.

Avanzo entre los pasillos con sigilo, sabia que no podía confiarse habiendo incluso reyes demonios en el área, lo mejor que podía hacer era encontrar una salida trasera por donde escapar antes de que pudieran atraparla o que sus compañeros volaran en pedazos la fortaleza con ella todavía dentro.

Estaba corriendo cuando una lluvia de hechizos la hizo saltar a un pasillo cercano para evitar ser alcanzada por la explosión y despues vio a un demonio de tres alas siendo apuñalado hasta la muerte por su novio, tras él aparecieron Nero y Ali disparando contra sus perseguidores.

Francia 

Había una gran cantidad de soldados del Eje acumulándose en las fronteras francesas, los seres sobrenaturales estaban preparándose para la batalla, pero notaron que había algo extraño en los humanos, estaban armados con un nuevo equipo y estaban preparándose para atacar aun cuando se suponía que había un alto al fuego. 

Usaban trajes que consistían en gabardinas negra que llegaban a sus espinillas, sus cascos de metal con pintura negra cubrían sus cabezas hasta las orejas y estaban ocupando una mascara de gas de ultima generación, la mayoría usaba guantes y sus botas eran mas gruesas que otros modelos, además de ser un poco mas altas.

Los seres sobrenaturales se estaban preguntando que sucedía, pero en realidad no sabian que se acercaba un peligro aun mayor del que tenían, los mismos magos franceses estaban furiosos tras todos los actos que habían hecho y ver a su gobierno ser atacado por los seres sobrenaturales, por lo que querian que pagaran con sangre.

Los seres sobrenaturales estaban esparcidos en la linea del frente y estaban preparados para ir a luchar, pero lo que sucedió despues fue un acto que quedaría para siempre en la infamia, pues los mismos magos franceses dispararon contra los seres sobrenaturales.

La sangre mancho la tierra y la masacre fue enorme, dado que no estaban preparados para una batalla y solamente tuvieron tiempo para replegarse de vuelta a sus territorios en el inframundo o el cielo, pero dejando tras de si una gran masacre, ahora la guerra dejaba de tener cuartel y se recrudecería todavía mas.

Nota: Siento tardar una semana, pero realmente trate de conseguir que fuera un capitulo importante, pero es mas complicado de lo que piensan. Quitando eso el especial se dividirá en dos para hacerlo menos pesado.