Todo el silencio del lugar comenzaba a formar una atmósfera de tensión, mientras que observaba a ambos presentes esperando a saber que es lo que estaba sucediendo.

— Esto no es lo que piensas. — afirmó Shun mientras se acercabas a mi dirección, con un semblante que expresaba que lamentaba la situación.

  Había decidido visitar a Shun, gracias a la carta de teletransportación que aún poseía en mis manos, debo admitir quea pesar de tener años la carta aún servía. Estaba visitando a Shun debido a su repentina desaparición, ya que el tiene varios días sin presentarse a las junta de los peleadores y cuando su abuelo fue a recibirme con gusto, veía como es que Shun se encontraba con la chica Neathiana.

— Ella es Fabia y solamente me estaba explicando lo que estaba sucediendo en su planeta. — expuso el de cabellos negros, mientras que los Bakugan que estaba mi lado se había retirado.

— Eres una Neathiana ¿cierto?. — la de cabellos azules asintió con un poco desconfianza ante lo que mencioné.

  Ren había estado totalmente extraño estos días y cuando tuvimos una batalla el simplemente la perdió, aquello había levantado mis sospechas. Cuando Fabia llego por primera vez lo único que Ren hizo fue hablar de forma serena, a diferencia de Fabia quien si se veía completamente molesta por la presencia del moreno. También Ren había mencionado que algunos Bakugan como; Goredem, Akwimos, etc., pertenecían a Neathia. Por el rostro de Fabia me había percatado que podría pasar naturalmente como una humana, a diferencia de Ren que poseía el iris de gato, igual que aquellos "Neathianos". Todo eso formo en mi cabeza que Ren estaba tratando de mentirnos a cada uno de los peleadores y estaba por contárselo a Shun.

— Te creo. — murmuraste con sinceridad. — últimamente Ren estaba haciendo cosas demasiado sospechosas, solo venía a informarte. — le explicaste con una media sonrisa.

  La de cabellos azules se acerco rápidamente en donde me encontraba, lo que me causó un poco de confusión.

— ¿Eres (T/N)?. — le afirmo con la cabeza. — Shun me ha dicho que en realidad tu eres la más fuerte del interespacio Bakugan.

— No lo pondría así, pero bueno. — suspiraste. — supongo que si.

— En Neathia nos vendría una buena ayuda como tu. — admitió Fabia de forma esperanzada.

— Primero tendrás que explicarme todo lo que está pasando. — la de cabellos azules asintió.

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  Después de haber llegado al interespacio Bakugan había recibido una señal de alarma en el BakuPod, el cual mencionó que había un área en la que habían entrado sin permiso. Sabia algo, podría tratarse de los famosos Neathianos que hablaba Ren.

  Para cuando había llegado Dan y Jake se encontraban en el lugar.

— Vaya (T/N), llegaste muy tarde. — pronuncio Dan mientras se acercaba a mi. — y eso que saliste desde muy temprano.

— Fui a investigar algo. — le explico. — pero primero debemos de saber quién entro a esta área.

— Pues aquí no hay nadie. — agrego Jake, entrando a la conversación.

  Dan comenzo a observar a sus alrededores.

— ¡Oye Marucho!. — exclamó tras ver al antes mencionado, quien había llegado junto a Ren. — ¿fue una prueba del sistema de alarma?.

— No, hubo un acceso. — expuso el menor.

— Entonces los intrusos están escondidos en algún lado. — murmuró Dan, nuevamente observando a sus alrededores.

— Trata de buscar bajo tu nariz. — pronuncio un sexto. — un antiguo proverbio Neathiano dice, tonto es el soldado que no conoce el rostro de su enemigo porque todas sus armas serán inútiles bajo el peso de su ignorancia.  — se trataba de un chico de cabellos castaños con las puntas rojizas, este tenía un libro y una sonrisa burlesca.

— ¿Quienes son ustedes?. — pregunto Dan.

  El chico recién llegado había dado un gran salto, colocándose frente a los presentes.

— Mi nombre es Jesse Glenn, es un placer conocerlos. — se presentó el supuesto Neathiano. — creo que es mi entrada. — Jesse se inclinó un poco.

— ¿Estas bromeando? Ahórrate la formalidad, no nos interesa. — alardeó Dan completamente fastidiado.

— (T/N). — murmuró Dren a tu lado, a lo que simplemente asentiste, tomándola entre tu mano

  Estaba dispuesta a desenmascarar a cada uno de los Neathianos por mi propia cuenta, así que empezaría por el tal Jesse Glenn. Me coloco frente a Dan, ya que este estaba apunto de regarlo a una batalla.

— Si quieres una batalla, con gusto aceptaré tu petición. — formulo, mientras lo observaba de manera fija.

— Estaba apunto de decirlo. — murmuró Dan a tu lado.

— ¿Pueden sentirlo?. — cuestiono em de cabellos bicolor. — es el viento de guerra que sopla.

— ¡Esperen!. — exclamó una nueva presencia. — él está mintiendo, no es de Neathia, es un impostor. — la fémina se acercó hasta quedar a mi lado. — y ahora deberás pagar por sus crímenes. ¡Yo pelearemos en esta batalla!. — exclamó decidida.

— Espera un momento, ¿qué está sucediendo aquí?. — pregunto Dan, sin entender lo que estaba pasando.

  .Habias dejado la residencia de Shun hacia una media hora, se suponía que el llegaría al lugar junto con Fabia. Lo único que debía de hacer, era que ninguno de mis compañeros se expusiera ante una batalla contra los "Neathianos".

— Entiendo. — formulo mientras me alejo de Fabia, me había acercado a Dan.

— Será mejor que retrocedan, está batalla es de Fabia. — la voz de Shun se escuchó a pesar de la distancia, este se encontraba a unos asientos alejado de Ren y Marucho. — Ella es la verdadera Neathiana.

  Al poco tiempo después los demás nos encontrábamos en los asientos de los espectadores, junto con Shun. Sabia que él, dejaría muy en claro quien es el causante de toda esta confusión.

— No comprendo, si Jesse es un impostor ¿de dónde es?. — pregunto Marucho. — y ¿porque debemos creerle a ella?.

— Que fuerte, estoy realmente confundido. — admitió Jake.

— Shun ¿qué demonios está sucediendo?. — pregunto Dan hacia el pelinegro.

— Deberían de preguntarle a su amigo. — giro su mirada hacia Ren, provocando que todas las miradas se centraran en el moreno.

— ¿Como podría saberlo?. — pregunto Ren, con un semblante calmado. — yo tampoco tengo idea.

— Lo oculta muy bien. — admitió Harpus a en mi hombro. — era de esperarse de un gran mentiroso.

— Por ahora veamos el desenlace de esto. — sugiero refiriéndome a la batalla.

  Me había colocado un poco más alejada de mis compañeros, aunque también de Shun.

— ¿Estabas apunto de luchar contra el?. — cuestiono alguien a tu lado, al instante reconociste a esa persona.

— Si. — respondiste con una sonrisa, mientras observabas al pelinegro de reojo.

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— ¿Que le está ocurriendo a Aranaut?. — pregunto  Dan con confusion.

  Todos observamos atentamente que el pie del Bakugan de Fabia comenzaba a hundirse en la arena, aquello simplemente había afirmado todas mis dudas acerca de Ren, ya que justo ante de que eso sucediera el ejercio una gran sonrisa.

— Parece que hay un virus en el software que causa que el ambiente virtual de la arena sea inestable. — expuso Ren.

— ¿Un virus?. — cuestiono Marucho con impresión. — pero ¿cómo?.

— No lo se aún, pero tendré que hacer un diagnóstico después de la batalla. — expuso el de cabellos blancos.

  El Bakugan de Jesse, Phliteon había lanzado un ataque en dirección a Aranaut, ganando el combate contra Fabia. Sabia que la chica hubiera ganado de no ser por lo que ocurrió en el campo de batalla. Al instante todos los presentes, incluyéndome, habíamos bajado hacia en donde se encontraba Fabia, quien solamente comenzó a sollozar debido a su pérdida.

— ¿Estas bien?. — cuestiono después de acercarme a ella tomándola del hombro, la joven había bajado la mirada retirando pequeñas lágrimas de sus mejillas.

— ¡Desgraciado!. — exclamó Dan con molestia. — ¡te crees muy rudo, pelea contra mi!.

— Trabquilizate, tal vez debamos partir. — formulo Ren.

— ¿Porque lo haría? ¿Esta arruinando tus planes?. — murmuró en dirección hacia el moreno. Quién me observa con completa confusión, al igual que los demás.

— ¿De qué planes?. — inquirio Jake.

— Piénselo, la falla en el ambiente en que cayó Aranaut. ¿Que probabilidad hay que suceda algo así, Marucho?. — cuestionó ahora el pelinegro hacia Ren.

— No es muy común. — respondió el rubio.

— Entonces weia algo razonable pensar que fue un acto de sabotaje perpetrado por alguien que originalmente querían que (T/N) y Dren perdieran. — aseguró Shun, mientras se cruzaba de brazos.

— ¿Quien haría algo así?. — cuestiono Dan.

— La persona responsable debe tener un gran conocimiento del interespacio Bakugan, alguien como el administrador. — expuso Shun, mientras observaba a Ren con una notoria molestia.

— Es que eso es una completa locura. — Ren negó la cabeza. — ¿porque haría eso?.

— Porque solo eres un Gundaliano mentiroso. — pronuncio Fabia observándolo. — Shun me contó todo lo que Ren les ha dicho sobre la guerra entre nuestros planetas, y esta lleno se mentiras. — afirmó apretando sus nudillos con una ligera fuerza.

— ¿Que?. — cuestiono Dan.

— Se que les ha dicho que Neathia invadió Gundalia, pero la verdad es que ¡Gundalia fue el que nos invadió!. — exclamó Fabia, hacia el moreno.

— Ren es el verdadero enemigo. — aseguró Shun.

— ¿Hablan en serio?. — pregunto dan observando a Ren.

— ¿Que? ¿De qué estás hablando Shun?. — cuestiono Marucho hacia el pelinegro, para después girarse hacia Ren. — ¿esto es cierto?.

— Por supuesto que esto no es verdad, ella es la que miente. — murmuró Ren, evitando todo contacto visual.

— Que barbaridad, hay más drama en este escenario de lo que puedo soportar. — expuso Jesse encogiéndose de hombros y llamando la atención de los presentes.

—¡No lograrás salirte con la tuya Neathiano!. — exclamó Ren hacia el de cabellos bicolor.— Nosotros nos encargaremos de ti.

— Buen intento Ren, pero el es un Gundaliano igual que tú.  — agrego, observándolo de mala manera.

— Creo que es mi señal, les dejo a todos un gran hasta luego. — formuló Jesse.

— ¡No te dejaré escapar!. — Ren señaló a Jesse con su dedo índice. — ¡ven a pelear!.

— Debo disculparme, pero no habrá segunda función esta vez. — Jesse ejercio una leve reverencia, para después irse del lugar.

— ¡Cobarde!. — exclamó Ren, aún observando por donde se había ido Jesse.

— Ya deja de fingir Ren. — formulo Shun, mientras que todos observamos al moreno.

— No tengo porque escuchar esto. — afirmó el antes mencionado, para después salir a toda prisa del lugar.

— Lo ven, esta escapando ¿qué otra prueba necesitan de que es tan culpable?. — cuestiono Shun observando por donde se había ido Ren.

— ¡No puedo creerlo!. — exclamó Marucho. — ¡Ren es mi amigo! ¡Jamás haría nada para lastimarnos o al interespacio Bakugan! ¿¡entienden?!. — me había sorprendido, esta era la primera vez que había visto gritar a Marucho de esa forma. — ¡No sabes de lo que estás hablando Shun! ¡No quiero oír una palabra más en su contra de nadie!.

— Marucho. — formulo intentando acercarme a él pero, rápidamente este también se había ido del lugar.