— ¡Poder activado!. — alcé una carta de poder. — ¡fuego solar y cuchillada!.

  Al instante ambas Bakugan se acercaron hacia la única Bakugan que seguía en pie, la fémina llamada Dwight solo mantenía la mirada fija en la batalla y no mostraba interés por hablar al respecto, a diferencia de sus compañeros e incluso su hermano mayor Barodius. Su mirada solo expresaba seriedad, por lo que el capitán Elright explicó hacia unos días atrás ella fue capaz de derrotar a un ejército sin la ayuda de las demás órdenes.

  Dan la habia enfrentado e incluso me llego a advertir que no debía de confiarme en la batalla ya que ella podría atacarme por la espalda.

— Poder activado. — Dwight alzó una carta. — vórtice espectral.

  Su Bakugan alzó su mano en dirección a ambas Bakugan, haciendo un vórtice el cual comenzó a arrastrar a Dren y a Harpus.

  Los Gundalianos comenzaron a a atacar por la mañana, por lo que nosotros y los demás caballeros de Neathia estamos aquí para defender el planeta y evitar que ellos tomen el segundo escudo nuevamente. Absolutamente todos nosotros se encontraba frente a varios miembros de las órdenes Gundalianas, todo para defender el bienestar de Netahia.

— ¡Poder activado!. — me sostengo de la Bakugan, ya que me encontraba en el hombro de Dren y ella estaba siendo arrastrada, junto a Harpus, hacia aquel vórtice obscuro. — ¡Get psyco y golpes infinitos!.

  Dren había avanzado hacia la Bakugan de Dwight, ella se mantenía concentrada en el vórtice que no percibió cuando Harpus se acercó a su espalda y comenzó a atacarla, después Dren solo ejecutó su armamento para que la Bakugan regresará en su forma original hacia su dueña.

— ¡Bien hecho!. — exclamó Harpus dando una gran vuelta hacia Dren.

  Dwight se mantuvo en silencio, su mirada expresba disguto solo eso, así que solamente se marchó junto a sus demás compañeros.

— No deberíamos celebrar aún. — anuncio Dren.

  Observo a mis alrededores intentando buscar a mis compañeros, necesitaba ayudarlos, así que mi mirada se habia centrado en alguien que reconocía. Drago se encontraba en el suelo mientras que Dharak se veía totalmente decidido a atacar en cualquier momento, aunque algo había cambiado desde la última vez que lo había visto. Tenía una enorme armadura.

— Oigan....

— Ya lo vi. — agregó Dren.

— ¡Debemos ayudarlos!. — exclamó Harpus.

— Harpus tu protegerás a Dan y Drago, Dren atacaremos. — propongo, ninguna Bakugan se opuso ante aquello. — ¡poder activado!. — alce una carta. — ¡máximo dragón!.

  Cuando Dren estab apunto de acercarse a Dharak, este lanzó un ataque hacia Drago, aumentando mi preocupación hacia ambos. Afortunadamente la Bakugan logró llegar a tiempo, resistiendo su ataque y al mismo tiempo atacandólo.

— Algo no está bien, su ataque fue en verdad poderoso. — añadió la Bakugan, mientras se recuperaba.

— No puede ser, ¿qué fue lo que le hizo a Dharak?. — pregunto mientras observo la nave del emperador Gundaliano, no solo encontrando su mirada de molestia sino también encontrando a un ex compañero, Ren.

— No puedo creer que Blink no se encargará de ambas. — expusó el Bakugan de Barodius.

  Cuando pensé que Dharak estaría apunto de atacar, la silueta de Ren y Linehalt aparecieron frente a Dan y Drago, este último se encontraba en el suelo debido a los constantes ataques de Dharak.

— ¡Harpus!.

  La Bakugan se colocó en posición de batalla mientras Dren avanzaba hacia ellos, estábamos un poco lejos cerca de donde se encontraba Dharak.

  Aquello había dado un giro inesperado, ya que Ren no estaba completamente decidido a atacar a Dan, sino a Dharak. Linehalt atacó al Bakugan de Barodius gracias a su armadura, logró que este retrocediera unos pasos.

  Dharak había dejado su armadura y al instante de varias de ellas comenzaron a crecer patas, como si se trataran de arañas Bakugan, todas ellas se dirigieron hacia Linehalt.

— (T/N). — habló Dren.

  Drago ya no se encontraba en la batalla pero, Dan aún seguía allí junto a Harpus. Sabia que el estaría bien, Ren ya había tomado una decisión al respecto, solo podría observar como es que recibía los ataques de los Bakugan. Debía de ayudarlo.

— ¡Poder activado, fuego solar!. — alce una carta.

  Dren lanzó una gran bola de energía hacia Dharak, quien estaba apunto de atacar a Linehalt, dispuesto a ignorar a cualquier enemigo cercano. Lo que me confundió, en verdad los Gundalianos estarían dispuestos a terminar a cualquiera que los traicionará.

— ¡Deben alejarse de esto!. — formuló el de cabellos platinados, mientras se acercaba Dren. — agradezco la ayuda, pero esta batalla no les concierne.

  Fruncí el entrecejo cuando escuché aquellas palabras, en serio Ren estaba dispuesto a enfrentar a Barodius sin ningún tipo de ayuda, el emperador tenía un inmenso truco bajo su manga y Dharak tenía un gran poder.

— No puedes pedirnos eso. — anunció con molestia. — no podrás vencer a Barodius tu solo.

— ¡Estaré dispuesto a enfrentar ese riesgo!. — exclamó el Gundaliano.

  Su mirada expresaba decisión, quizás solo estaba interfiriendo en sus rebelión contra el emperador.

— Vámonos Dren. — la Bakugan asiente mientras nos alejamos hacia en donde se suponía que estaba Dan y Drago. — no estoy segura de que esta pasando, pero si hay peligro entraremos.

  Harpus se acercó y asintió, para que después Dren me bajará de su hombro.

— ¿Están bien?. — pregunto después de ver a Dan y Drago, para acercarme más a ambos.

— No hay nada de que preocuparse. — Dan sonrió.

  Ren recibió un ataque directo de los Bakugan de Barodius, provocando que ambos cayeran brutalmente hacia el suelo. Cuando observamos aquella escena nos acercamos hacia el de cabellos platinados.

— Estamos bien. — agregó Ren para cuando Dan logró levantarlo del suelo, Dren ayudo a su Bakugan a levantarse de igual manera.

  Barodius al poco tiempo comenzó a hablar de Ren y Linehalt, pronunciando que había sido una mala idea perdonar todos sus errores y entre otras cosas. Cuando Ren estaba apunto de responder, Linehalt lo interrumpió justo cuando comenzó a emanar un cierto destello púrpura que al poco tiempo se convirtió en uno verdoso brillante.

  Cuando Linehalt expulsó una gran cantidad de energía provocó que nosotros fuéramos arrastrados por la energía del Bakugan.

— ¿Que fue eso?. — pregunto justo cuando algo en color blanco comenzó a volar hacia donde se encontraba Linehalt.

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— ¡(T/N)!. — algo comenzó a golpear mi mejilla, cuando mis ojos se abrieron por completo observo como es que Harpus era la responsable de aquello.

— Que dolor. — mi mano se acercó a mi frente, mi cabeza dolía, no me había percatado que las Bakugan regresaron nuevamente a su estado de esfera.

— Me alegro que estés bien, de pronto hubo una explosión por Linheart y todo se oscureció. — anunció Dren.

— Eso parece.

— ¡(T/N)!. — exclamó una voz familia, se trataba de Dan, el venía acompañado por nuestros compañeros. — ¿estás bien?.

— Si, si y ¿ustedes?. — les pregunto cuando me levante del suelo.

— Nosotros estamos bien. — respondió Marucho.

  Cundo el pronuncio aquello logramos ver como es que las naves Gundalianas abandonaban Neathia y por los lejos logré ver la silueta de Ren, quien se acercó a nosotros.

— Ren ¿estas bien?. — Dan se acercó al Gundaliano.

— Jamás estuve mejor, finalmente me di cuenta. — formuló el antes mencionado.

— Darte cuenta de ¿que?. — preguntó Dan sin entender.

— De la verdad sobre mis deberes como protector obscuro. — respondió Ren. — yo debo evitar que Linehalt libere la energía prohibida de manera destructiva.

— ¿A que te refieres con energía destructiva?. — le pregunto a Ren.

— Es una maldición que tengo por ser un Bakugan obscuro. —respondió Linehalt alado de Ren.

— No es tu culpa Linehalt, es mía por no entender cuales eran mis deberes. — explicó Ren. — prometo que no volverá a pasar, era mi responsabilidad y les fallé a todos, debíamos vivir reclusos por la seguridad de todos los demás. Adiós amigos míos. — el Gundaliano se dio media vuelta.

— Aguarda, no Irán a ninguna parte. — les llamó Dan. — una energía como esa puede ser de ayuda si se utiliza contra las fuerzas del mal.