Capítulo 2: El Rey De Talocan

Ya había pasado una hora desde que los asesinos del norte habían destrozado la cuidad de Tenochtitlan. Y ahora mismo se encontraban navegando directo a su hogar. Mientras eso pasaba en Mesoamerica los dioses regresaban de una "reunión" en Egipto, los dioses Aztecas estallaron en furia al ver a su pueblo en ruinas, en especial el dios
Huitzilopochtli, Dios de la guerra, al ver que masacraron a su pueblo y asesinaron a su campeón: Mixcóalt o El Demonio Azteca. Ordenó a los dioses Tezcatlipoca y Tláloc buscar al culpable de esto por el cielo y mar.

Aquellos dioses mandaron asu campeón: Yaotl rey de Talocan, dándole las indicaciones de lo que tenía que buscar el poderoso rey de Talocan emprendió su búsqueda. Yaotl recorrio 400 km en menos de 20 minutos por el mar, siguiendo el rastro de sus enemigos, estuvo así unos 30 minutos hasta encontrar su objetivo un barco con características vikingas, sin perder tiempo Yaotl salto encima del barco cayendo en el centro de este, los asesinos del norte lo miraron un poco raro por su vestimenta.

-Ustedes deben ser los guerreros que destruyeron Tenochtitlan y asesinaron a Mixcóalt- habló con un pequeño tono de furia y sorpresa Yaotl - Pero no lo entiendo ustedes son solo hombres comunes, ¿Cómo esque asesinaron a un demonio? - preguntó el rey, notando que aquellos guerreros parecían no hablar su idioma- ¿Quiénes son?.

Un vikingo se acercó lentamente por la espalda de Yaotl, con su hacha en mano intentó atacar lo pero grande fue su sorpresa al ver que el hacha se destruyó al entrar en contacto con la piel de Yaotl.

-¿Cómo te atreves? - Preguntó con cierto enfado, dándole un golpe en el abdomen mandándole a volar fuera del barco, al instante todos los vikingos del barco se abalanzaron encontrá del rey de Talocan.

Yaotl tomó a dos vikingos del cuello para acto seguido arrojarlos encontrá de sus enemigos. Poderosos truenos y rayos comenzaron a caer del cielo, esto llamó la atención de Yaolt quien miró fijamente al cielo y rápidamente intuyo que esto no era obra de ninguno de sus dioses.

-¿¡Cómo te atreves a imitar los poderes de Tláloc!? ¡Baja de ahí y enfrentame falso Dios!- Grito el rey de Talocan, en respuesta un poderoso rayo impacto contra el barco del cual salió Thor.

-al parecer tu también eres uno de esos guerreros- Intuyo el poderoso dios- jajaja, compartirás el destino de tus hermanos.

-No te entiendo ni una mierda- Afirmó Yaotl mientras corría directo hacia su enemigo.

Thor se alzó en el aire para luego lanzarse directo asu enemigo apuntó de darle un martillazo en la cara al rey, este último fue capaz de pararlo usando sus dos manos para luego empujarlo unos cuantos centímetros hacia atrás, y en un rápido movimiento el rey tomó del brazo derecho a Thor para luego romperlo y darle un golpe en el rostro rompiendo le la nariz.

-¡Bastado!- Grito Thor lleno de furia, para después tomarlo del cuello y azotarlo contra el suelo para después impactar Mjolnir contra la cara de Yaotl una y otra vez.

El campeón de Asgard viendo que el rey de Talocan ya no se movía, decidió tomarlo de la cabeza y usando sus pulgares los clavo en los ojos de Yaotl matando lo.

-Te lo dije- dijo Thor mirando el cadáver de Yaotl, rayos comenzaron a caer del cielo, esto llamó la atención del asgardiano para luego ser mandado a volar por un rayo, Thor se levantó del suelo viendo como otro rayo cayó del cielo y impactó contra el cuerpo de Yaotl desapareciendo.

...

El cuerpo de Yaotl, apareció a los pies de un hombre.

-¿Qué haremos con el mi señor?.

-Lleven lo a su pueblo, Yaotl murió como un guerrero- Dijo Tláloc, observando como sus seguidores se llevaban asu campeón- No, él murió como un rey...

-¿Qué pasó Tláloc?- Preguntó Huitzilopochtli, acercándose a Tláloc.

-Ese maldito monstruo asesino a mi campeón- respondió con furia Tláloc- pero se hacía donde se dirigen.

-¿Dónde?

-Se dirigen al norte, a una tierra llamada Noruega.

-Está bien, yo mismo iré a encargarme del problema.

-yo te acompañar...- El dios notó que Huitzilopochtli ya se había ido - ¿Por qué siempre hace lo mismo?

...

El barco vikingo por fin había llegado a sus tierras, desembarcando la pequeña flota de vikingos salió del barco cargando un cofre que contenía algunas joyas de la destruida Tenochtitlan, Thor salió del barco siendo recibido por su padre Odín.

-Veo que te fue mal hijo mío- aseguró Odín al ver el brazo lastimado de Thor - Pero no fue Amaterasu y sus dioses

-No padre, nos perdimos en el viaje y llegamos a unas tierras extrañas, donde arrasamos con una ciudad pero tenían guerreros bastante poderosos, aunque no fueron problema para mí, me confíe y esto pasó- explicó Thor mostrando su brazo derecho.

-Ve con Eira a sanar tus heridas, después hablaremos de esa cuidad.

-Esta bien padre -dijo mientras se marchaba del lugar.

Horas después Odín entraba en un gran salón donde se encontraba Thor bebiendo junto a los Vikingos que perecieron en mesoamerica.

-Thor- Escucho el dios del trueno a sus espaldas

-Padre- Respondió Thor dándose la vuelta, alzando su cuerno lleno de agua miel- ¡Padre! Ven y brinda con nosotros la victoria de hoy.

-¿Cuál victoria?, la destrucción de aquella ciudad.

-Por supuesto padre

-Al destruir esa ciudad, despertaste la furia de sus dioses y ahora ellos te buscan - Explicó de forma breve el padre de todo.

-Eso puede esperar padre- Respondió sin interés Thor.

-¡Claro que n...¡-Algunas oraciones de sus adoradores inundaron su cabeza- Al parecer ya está aquí.

Huitzilopochtli destruía barcos, casas y a cualquier guerrero que se le cruzará en su camino, hasta que Odín se materializó enfrente del dios Azteca.

-Huitzilopochtli, Dios de la guerra, hijo de Coatlicue- Odín camino firmemente hasta quedar cara a cara con Huitzilopochtli.

-¿Me conoces?- Preguntó con sorpresa el Azteca, analizando a Odín con la mirada.

-Tengo un amplio conocimiento- aseguro el padre de todo.

-¿Quién eres?- Preguntó el dios de la guerra.

-Tengo muchos nombres e incontables títulos, Óðinn, Woden, Wotan, Odín, Padre de todo, pero mis enemigos me llaman el señor de la guerra- Aseguró el dios de la sabiduría.

-¡JAJAJA!, no digas estupideces- Se burló el dios de la guerra- Odín ¿eh?, bueno sabés aque vine ¿no?

-Mi hijo devastó tu ciudad, Tenochtitlan y...

-y asesino a los campeones de mis tierras- terminó de decir el colibrí zurdo- Te lo pondré fácil entregame a tu hijo, y te dejaré ati y a tus tierras en paz.

-¡Ja!, te daré ami hijo sobre mi cadáver- respondió ante aquella amenaza el padre de todo chocando su lanza contra el suelo provocando una nube de polvo.

-¡Que así sea! - Grito el colibrí lanzando una gran llamarada de fuego que Odín repelio con gran facilidad.

Huitzilopochtli se abalanzó sobre Odín con su espada por delante, atacando a Odín pero al instante el padre de todo bloqueo el ataque de Huitzilopochtli, aún así fue tanto el poder liberado que los dos dioses fueron mandados a volar.

-Esto será divertido- Aseguró Odín mientras sonreía de forma sádica.

-Tienes toda la razón- Afirmó el dios de la guerra, mientras lanzaba su escudo hacia su enemigo para después volver a correr directo a Odín.

Odín creo distintas copias de él, las cuales lanzaron sus lanzas directo a Huitzilopochtli quien con una agilidad increíble esquivo todas las lanzas para aparecer enfrente de las copias de Wotan para después lanzar una gran llamarada de fuego, ante esto el verdadero Wotan creo un escudo, para después aparecer delante del colibrí atacando lo con su lanza haciéndole un corte en el pecho, Huitzilopochtli trató de darle un golpe en el rostro pero Odín lo detuvo con su mano para después darle un cabezazo rompiendo le la nariz, en un rápido movimiento Huitzilopochtli logró darle un golpe en el estómago a Odín haciéndolo retroceder unos centímetros para después lanzar su espada hacía el padre de todo quien bloqueo el ataque con su lanza.

-Esto será más difícil de lo que pensé- aseguró el colibrí mientras lanzaba una poderosa ráfaga de fuego directo a Odín quien volvió a bloquear el ataque creando un escudo de energía.

-¿Eso es todo?- Preguntó el padre de todo mientras un portal se formaba en el suelo del cual salieron unas cadenas las cuales aprisionaron a Huitzilopochtli- Debo decir que es un poco decepcio....- un fuerte rayo cayó del cielo impactando contra Odín mandandolo a volar.

Otro trueno cayó en Huitzilopochtli creando una nube de polvo que al disiparse no había ningún rastro del colibrí.

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