Thalia

Estaba aburrida y no sabía que hacer, me encantaba estar en el campamento pero extrañaba estar en las cazadoras, tuve que dejarlas porque últimamente no estaba dando todo de mí y Artemisa me dijo que tome un descanso y cuando entienda lo que me pasa podre volver con las cazadoras.


Mientras estaba sentada esperando que Annabeth aparezca queríamos pasar tiempo juntas, como hace mucho no lo hacíamos, porque cuando yo venia con las cazadoras solo permanecíamos muy pocas horas y no podía pasar tanto tiempo con mi amiga.


Después de unos minutos  recordé que Annabeth me dijo que me esperaría en su cabaña, porque Malcom se había ido una misión y podríamos estar solas sin que nadie nos moleste, me levante de donde estaba sentada y me dirigí a la cabaña de Atenea.


Mientras caminaba hacia las cabañas, vi que donde se preparaban las armas estaba abierta, eso me pareció raro porque la mayoría he los hijos de Hefesto siempre estrenan a esta hora, me acerque a la cabaña y ahí vi que un chico estaba haciendo armas.


-¿Quien eres? ¿y que haces aquí?- le pregunte.


-Mi nombre es Stephan Clark- el dijo con una sonrisa - soy del campamento romano y tu ¿Quien eres, preciosa?-


-Thalia Grace, hija de Zeus y teniente cazadora de Artemisa - le dije - y si vuelves a decirme así, no volverás a ver la luz del sol-


-Oh, que miedo- el dijo con una sonrisa.


-Vete al tártaro- le dije -Esta cabaña pertenece al campamento griego, no tienes ningún derecho estar aquí-


-Soy invitado en el campamento y tu no eres nadie para decirme que hacer, preciosa - el dijo molesto y se acerco a mi


-Vuelve a decirme preciosa y te fulminare con un rayo- le dije.


El inmediatamente largo una carcajada, me hizo una seña militar y me guiño el ojo.


-Como diga, mi teniente- el dijo y yo levante la ceja.


Ambos salimos de la cabaña y cerré la puerta para que no vuelva a entrar a menos que algún hijo de Hefesto este aquí, el sonrió  mientras yo hacia eso.


-¿Porque me miras así?- le pregunte -¿Quieres que te golpee?-


-No lo se- el dijo -Puede ser-


-Eres un idiota- le dije molesta y empece a caminar a la cabaña de Atenea.


- Adios Preciosa- el grito.


Yo me di la vuelta, vi que el me guiño el ojo, yo le mostré el dedo del medio,  entonces le leí los labios y me di cuenta que el me decía "Teniente Preciosa", yo rodee mis ojos y después me fui a la cabaña de Atenea.



A/N: ¿Que les parece? El chico del Gif es Stephan

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