Era tarde del 24 de diciembre y en cierto barco se encontraba un chico de 26 años arreglándose en frente del espejo del baño de su hogar, sintiéndose indeciso sobre cómo acomodar su cabello de manera que se viera bien pero sin perder su estilo "libre" de siempre, cosa que mientras más hacía, más parecía alejarse del resultado que quería obtener pues el mismo se desordenaba.

Bufó, realmente quería verse espectacular para esa noche y no era para más, iba a ser la primera cena de Nochebuena y recibimiento de la Navidad que pasaría sin su familia para pasarla únicamente con su novia, a quien había convencido de que ambos la pasarán por primera vez juntos y sin algún familiar o amistad de por medio y realmente deseaba que todo saliera bien, comenzando por su vestimenta que no quería "ayudar" a la ocasión...

-Ay Luka... —habló su hermana con un toque de diversión mientras lo veía batallar con su cabello— Deberías dejar en paz tu cabello... Cada que tratas de arreglarlo terminas por arruinarlo más...

-No Jules, debo arreglarlo... Hoy es una noche muy especial, tú sabes porque...

-vaya, vaya... Me da gusto saber eso... ¿Por fin se lo pedirás?

-Si, por eso estoy nervioso...

-¿Cuanto llevan siendo pareja?

-6 años...

-Wow, ¿y nunca se lo has insinuado siquiera?... No sé, entre líneas o frases, algo de ese estilo...

-No, nunca...

-Entiendo tu nerviosismo, pero en serio, no te sientas tan nervioso... Ella aceptará, estoy segura...

-¿Y si no acepta?... ¿Qué haré?... Ya tengo todo listo...

-Pues si no acepta vas a tener que esperar un tiempo más... Pero como ya te dije, dudo que no acepte, ella te ama demasiado además de que de alguna u otra forma te ha insinuado algo como esto... Tan solo el otro día con su: "anda Couffaine... Hay que compartir más días juntos", dijo mucho...

-Esto es un gran paso para ambos, bueno, si ella acepta, claro está...

-Ambos estarán bien... —se acercó a su hermano y le quitó el cepillo de la mano para ella iniciar a peinarlo para que se viera bien— Los dos se aman con locura y los dos quisieran estar más días juntos... Ninguno tiene algún obstáculo...

-Es que puede que sus padres no quieran que—

-¡Shhh!, —interrumpió— deja de crearte obstáculos inexistentes, ambos ya han tenido suficiente drama... Si bien es cierto que al comienzo ninguno de sus padres te querían, bueno, creo que André si, pero ahora ya hasta te dicen que para cuando la boda, jajaja, ¿en serio crees que impedirían el que ustedes estén juntos?...

-No lo digo por ellos exactamente... Sino porque ella es su única hija y además puede que piensen que le puedo hacer daño...

-No lo creo, después de tantas comidas con ellos, creo que ya te conocen lo suficiente como para saber que no vas a hacerle daño a su hija... —dejó de peinarlo para dejarlo observarse en el espejo— ¿Así está bien?

-Está perfecto, muchas gracias Julieta... Perdón, quiero decir, Juleka...

-Jajaja, no te preocupes hermano, aunque eso si, luego nos tendrás que llevar a mamá y a mi a cenar porque no vas a estar con nosotras esta Navidad...

-Lo haré, lo prometo... ¿Qué horas son?

-Son las 9:15 p.m...

-¿¡9:15!?... —rápidamente comenzó a moverse por todo el lugar en busca de algo— Rayos, tengo que irme ya... Quedé en ir por Chloé al 15 para las 10...

-¿Qué se te perdió?

-Nada, solo mi cartera...

-Luka, la tienes en el bolsillo interno de tu saco...

-¿En serio?... —se detuvo y metió su mano en su saco, comprobando lo dicho por su hermana— Cierto, perdona pero tengo la cabeza en otro lado... Hermanita, sé que mamá ahorita no ha llegado, pero por favor tengan una muy bonita cena de noche buena...

-Descuida hermano, todo estará bien, sobre todo porque la pasaremos con Jagged, bueno, nuestro nuevo papá... Seguramente rockearemos mucho...

-¿Todavía no te acostumbras a que mamá se haya "casado" con Jagged?

-No es eso, o sea, me da mucha alegría que ambos sean felices, es solo que "papá" es una palabra a la que no estoy acostumbrada y menos cuando es hacia alguien a quien siempre llamábamos por su nombre, pero creo que es cuestión de tiempo...

-Efectivamente, hermanita...

-¿Regresarás a dormir?

-Si, quizá no tan temprano porque quiero llevar a Chloé a dar un paseo nocturno después de cenar, pero si regresaré, tengo que hacerlo...

-De acuerdo, con mucho cuidado...

-Si, gracias...

-Aparte de tu cartera, ¿llevas lo otro?

-Por supuesto que si... Hasta mañana en unas horas...

El azabache se acercó a su hermana y con un abrazo se despidió para entonces salir de su hogar, subir hacia la avenida y abordar el auto que hace un par de meses se había comprado, comenzando a manejar hasta la casa de la Bourgeois, donde una vez hubo llegado, sacó del cajón del auto su loción y se puso un poco de manera que oliera bien para entonces guardarla y descender del vehículo, dirigiéndose a la puerta de la casa de su novia y tocar.

Esperó un par de segundos a que la puerta fuera abierta, encontrándose con la rubia que al verlo no pudo evitar sonreír ampliamente para acercarse a él y sin permitirle decir algo, abrazarlo por el cuello para atraerlo a ella y poder juntar sus labios en un dulce beso de bienvenida que a los segundos fue finalizado...

-Hola corazón... ¿Cómo estás?...

-Mil veces mejor de lo que llegué, ¿cómo no estarlo con una bienvenida cómo la tuya?

-¿En serio?... Me encanta crear ese efecto en ti... Por cierto, te ves súper guapo, más que de costumbre, además hueles a la loción que te regalé...

-Es mi favorita, ¿se nota?

-Sin dudarlo... Aunque cómo puedes ver, aún no me pongo el vestido que usaré, apenas terminé de peinarme...

-¿De verdad?... —la miró de pies a cabeza— No lo había notado, como luces tan hermosa como siempre, ni cuenta me di...

-Adoro cuando me dices todas esas cosas bonitas que solo tú sabes decir...

-Es que son especialmente para ti...

-Jaja... —lo miró embelesada antes de negar con la cabeza— Bueno, basta de cursilerías... Hoy estoy siendo muy cursi, más que de costumbre cuando no lo soy... ¿Gustas pasar y esperarme en la Sala en lo que me termino de arreglar?... En 5 minutos estoy lista para irnos...

-¿5 minutos tuyos, 5 minutos míos o 5 minutos literales?

-Jaja, —rodó los ojos con diversión— no seas tonto y solo esperame en la Sala, no tardo...

-De acuerdo, yo cierro aquí, cielo... Tú ve a hacer lo tuyo...

-Gracias...

El joven la vio irse y entró a la casa cerrando la puerta a su paso para luego dirigirse a la Sala de la Bourgeois, viendo las fotografías con las que decoraba su estancia, deteniendo su vista especialmente en la primera fotografía que ambos se tomaron, la cual se trataba de la captura de pantalla de una ocasión en la que él estaba enfermo y habían decidido hacer una videollamada, sintiéndose profundamente afortunado de formar parte de la vida de la chica, el amor de su vida.

Tomó asiento en la Sala y sin hacer algo en especial esperó a que ella terminara de arreglarse, sorprendiéndose al verla llegar en 5 minutos literales; vestía con un hermoso vestido que le llegaba hasta las rodillas, era de color blanco con "vuelo" en la parte de la falda mientras que la parte superior era totalmente lisa de mangas largas y de color negro, haciéndola lucir demasiado hermosa a los ojos del aún guitarrista que al verla se puso de pie con una sonrisa y un ligero sonrojo en sus mejillas.

-Wow...

-¿Cómo me veo, cariño?

-Mi reina, —se acercó a ella y tomó su mano— usted luce realmente asombrosa...

-Gracias...

-No deberías agradecer por decirte la verdad... —alzó su mano y la hizo girar en su eje— Wow... Realmente te ves asombrosa...

-Terminarás por sonrojarme si sigues haciendo eso...

-Quizá es lo que busco...

-Eres todo un galán, mejor vámonos ya o perderemos la reserva...

-Por supuesto señorita, ¿aunque no olvida algo?

-¿Olvidar algo?... —unos segundos quedó pensando antes de hablar— Cierto, mi abrigo, ahora vengo... Gracias por recordarme de el...

-De hecho yo hablaba de que me dieras un beso, pero está bien, ve por tu abrigo...

-Ay, puedes tener cuantos besos quieras de mi, pero para poderte llenar de besos necesito no enfermarme...

-Lo sé, anda, te espero...

-Gracias...

Pasaron los segundos y una vez que ambos estuvieron listos, se dirigieron hacia el restaurante en donde al llegar al cabo de unos cuantos minutos, fueron colocados en la mesa en la cual habían encargado su reservación y tomaron asiento en espera a que les trajeran su comida después de haberla ordenado, comenzando a platicar entre ellos, sin imaginar los nervios que cada uno sentía por razones distintas...

-Este lugar es muy bonito... —habló la Bourgeois mientras veía alrededor— Hiciste una buena elección...

-Sabía que te gustaría...

-¿Te acuerdas de nuestro primer aniversario?

-Jajaja, si... ¿Cómo olvidar que esa vez terminamos en el hospital por mi culpa?

-¿Quién imaginaria que te ibas a caer de esa manera?... —tomó su mano— Cuando vi que te desmayaste tuve mucho miedo...

-Si, recuerdo que a los segundos, según yo, en cuanto desperté ya me estaban llevando al hospital... Esa vez me salvaste la vida literalmente... Fuiste por mi...

-Esa vez ni yo entendí como pasó todo, recuerdo que en cuanto te resbalaste giraste por arriba del barandal que rodea tu barco pero antes de caer al agua se escuchó un golpe en metal, entonces yo me asomé al agua y no vi nada de movimiento por eso me lancé al agua por ti y te saqué rápido, pero me asusté muy feo porque por el agua se veía como si fuera mucha sangre la que salía de tu cabeza cuando realmente era poca... Esa vez de verdad me preocupé como nunca...

-Ay amor... —tomó su mano y besó sus nudillos— Perdón por asustarte aquella vez... En serio no quería preocuparte...

-No fue a propósito, está bien...

-Lo bueno es de que nuestros demás aniversarios han sido sin percances... Y no puedo creer que ya vamos a cumplir 7 años el siguiente año...

-Si... 7 años que se han pasado volando... No puedo esperar a compartir mi vida contigo siempre...

-Ni yo... Es por eso que... Te quiero decir algo muy importante...

-¿De verdad?... —no pudo sorprenderse y ponerse un poco nerviosa— Y-Yo también tengo algo muy importante que decirte... Algo que podría cambiar nuestras vidas para siempre...

-¿En serio?... ¿Qué tienes que decirme, bonita?

-Tú primero hazlo... —comenzó a buscar algo en su bolsa— No te preocupes...

-¿Segura?

-Si, ¿qué pasa?

-Chloé... Yo... ¿Quisiera pedirte si quisieras... —el joven dirigió la mano a uno de sus bolsillos y sacó una libreta pequeña, cosa que confundió a la rubia— Pfff... No sé cómo decirte esto...

-¿De qué trata?

-De algo diferente... Mi reina, sé que tu familia es muy importante para ti es por eso que me siento tan nervioso, ya que lo que te quiero pedir tiene que ver en gran parte con tu familia...

-No estoy entendiendo...

-Chloé, como regalo de Navidad quiero que tú y yo nos vayamos mañana mismo a New York... Quiero pedirte que por primera vez viajemos a otro país solo tú y yo, quiero que pasemos año nuevo justo en donde te conocí...

La de cabellera dorada al oírlo quedó en shock por unos segundos antes de sonreír ampliamente y asentir con la cabeza...

-¡Luka, por supuesto que si, acepto viajar contigo!

-¿¡De verdad!?

-¡Si, totalmente!... —emocionada—  O sea, será nuestro primer viaje juntos a otro país, otra ciudad y será la primera vez que pasemos año nuevo juntos, solo tú y yo... Además de que es un viaje a un lugar tan especial...

-En vista de que aceptaste, en cuanto te deje en casa, empaca tus cosas porque nuestro vuelo sale mañana a medio día para llegar a New York como a las 6-7 de la noche, podamos ir a cenar y quizá luego a patinar...

-No vamos a descansar mucho pero me parece un plan estupendo, gracias por esto...

-No es nada... Aunque antes de que lo olvide... Perdón por decirte las cosas de un día para otro y también perdón por citarte hoy aquí cuando podrías estar con tu familia... Pero no nos habíamos podido ver y no quería decírtelo por celular además de que solamente pude hallar vuelos para mañana...

-No te preocupes... Tú también eres mi familia, por eso no me importó tanto el que por este año no estuviera con mis papás, Félix y Zoé, sobre la otra cuestión... Gracias por esperar a decirme algo así en persona, tomando el riesgo a que te dijera que no iba contigo...

-Gracias por entenderme y por considerarme como parte de tu familia... Ahora bien... ¿Qué era eso tan importante que tú igual querías decirme?...

-Eh... Yo... —mordió un poco su mejilla interna y sonrió con nerviosismo— Lo olvidé...

-No lo creo... Te conozco y esa carita que estás haciendo no es de que hayas olvidado lo que querías decirme...

-Ah, jaja, no amor, no olvidé lo que quería decirte, más bien, olvidé lo que te iba a dar...

-¿Me ibas a dar algo?

-Si... Yo también conseguí un regalo de Navidad para ti y creí que lo había traído pero no, lo olvidé en mi casa y estoy tratando de recordar en donde lo dejé porque estaba segura que lo traía...

-¿No lo habrás dejado en el auto?

-No sé, puede ser, pero hasta terminar de cenar lo sabremos, en lo mientras, gracias por esta sorpresa tan genial...

-Gracias a ti por volverte mi compañera de viajes...

Ambos acortaron la distancia entre si para darse un tierno beso durante varios segundos antes de separarse y comenzar a recordar juntos sobre como había sido que habían terminado juntos pese a varias circunstancias que al comienzo de su amistad habían tenido, ambos esperando a que las horas pronto pasarán y el mañana en New York llegara.

Este pequeño capítulo va dedicado a noyanista, una hermosa personita que siempre ha estado apoyando esta historia y que el día de hoy cumple años. ✨

Espero que hoy te la pases súper cool en compañía de tus seres queridos y que recibas mucho amorsh, te mando un abrazo psicológico. ❤