La Bourgeois llevaba varios minutos esperando en el lobby del hotel, cuando te pronto escuchó un par de pasos acercarse, los cuales la hicieron voltear, encontrándose con su media hermana que iba acomodandose su gorro...

-Hasta que por fin llegas, Zoé...

-Lamento haber tardado, Chloé... —le dedicó una sonrisa de emoción— Estaba buscando mi bolsa pero no la encontraba...

-Está bien... ¿Qué quieres hacer?... ¿Conocer la torre Eiffel, el Museo de Louvre, el arco del triunfo, la plaza de la Concordia?...

-Vamos a donde quieras, me quedaré unas semanas, así que tenemos tiempo...

-¿Estudias o algo?

-Si, pero ahora que estoy aquí, supongo que ya no...

-En mi colegio ya estamos en las últimas semanas, no creo que el señor Damocles, o sea, el director, tenga problema en admitirte unas semanas... ¿Quieres ir a tomar clases o más bien, a conocer gente nueva?... Sé que es aburrido estar sola durante muchas horas y bueno, aunque somos "hermanas" también tengo mis responsabilidades y no siempre puedo estar contigo...

-Yo... —su sonrisa disminuyó notoriamente— Entiendo y si, estaría bien el tener amigos o más gente con la cual hablar para no interrumpirte o causarte una molestia...

-Pfff... Zoé... No quiero que me mal entiendas, ¿de acuerdo?... Mira, no me gustaría que creas que te digo esto o que soy así porque te quiero lejos de mi, cuando la verdad es de que realmente quisiera que nos pudiéramos llevar bien, es solo que me es difícil, muy difícil comprender todo lo que sucedió, cosa que hubiera sido mil veces más fácil de procesar hace 10 años... Y bueno... El cariño no se crea de un día a otro o como por arte de magia... Eso es muy tonto, ya que el cariño es algo que se trabaja poco a poco...

-Entiendo y estoy de acuerdo contigo, de un día a otro no te voy a querer como mi hermana y sé que tú tampoco me vas a querer de la misma forma, pero créeme que me da gusto que estemos tratando de sobrellevar la situación juntas...

-También me da gusto... Solo te quiero pedir paciencia... Zoé, yo soy algo... Ehmmm... No tan afectiva, no soy alguien que siempre sonría o se lleve bien con todo el mundo, pues siendo sincera, tengo muy mala reputación aquí en París por mis errores pasados y aunque ya no soy del todo igual, hay mucha gente que todavía no confía en mi, por lo que existe una tensión evidente, así que es usual que me comporte algo "ruda" con la gente...

-¿Por qué me cuentas todo esto a mi?... Eso es algo más personal...

-Lo sé, pero como te dije, estoy esforzandome en qué podamos tener una buena relación, pero a la vez quiero que comprendas que no soy "linda" con todo el mundo, ya que tengo que protegerme de que me dañen, ¿de acuerdo?... No es algo personal...

-Descuida, comprendo...

-Entonces ya que quedaron las cosas en claro, ¿a dónde dijiste que querías ir primero?

-A donde sea...

-De acuerdo, entonces iremos al Museo del Louvre y después ya veremos a donde ir...

-Me parece genial...

Ambas rubias comenzaron a caminar hasta salir del hotel, en donde el chofer ya las esperaba con la puerta de la limusina abierta, por lo que ambas abordaron y esperaron a que el mayor subiera para iniciar a conducir...

-Al Louvre, por favor... —avisó a su chofer antes de ver a la neoyorquina— Te seré sincera, Zoé... No creo poder ayudarte mucho en el aspecto de darte una guía turística con la información de la ciudad y todo eso, ya que no soy buena en la escuela y sobretodo en historia, así que llegando al Museo, si quieres contratamos una guía turística...

-Me parece muy bien, yo tampoco soy muy buena en la escuela...

-¿Por?

-Bueno, no lo sé... Voy a las clases, estoy poniendo atención, tomo nota, en el momento comprendo lo que aprendí pero a los días simplemente ya no recuerdo como eran muchas cosas, pero termino recuperando el año en exámenes de recuperación, por eso tengo buen promedio...

-Entonces no vendrías siendo tan mala estudiante, tu problema es la memoria, quizá...

-Si, eso me temo... ¿Tú por qué dices que eres mala estudiante?

-Me distraigo muy rápido, entonces aunque esté en clase, mi mente está en otros lugares, aunque de momento me da por ponerme a hacer garabatos en las hojas traseras de mis cuadernos, a ver mi cabello, a hacer otras cosas porque no puedo concentrarme, lo cual es algo malo, ya que "aunque saco" buen promedio, no es de la manera correcta pero ahora que hice las cosas bien, temo salir mal...

-¿A qué te refieres con "hacer las cosas bien"?

-A que toda la semana pasada estuve estudiando mucho porque presenté mis exámenes de final de año, es solo eso...

-Ya veo, seguramente saldrás bien, ánimo...

-Gracias... —le dedicó una leve sonrisa— Zoé, ¿hoy tienes algo que hacer en la tarde?

-No, planeaba estar contigo si me lo permitías, ¿vas a estar ocupada?

-No, bueno, es que una de mis mejores amigas me... —escuchó su celular sonar y lo sacó— Es mi papá, permíteme un momento por favor, ¿si?

-Claro, adelante...

-Gracias... —la joven apretó algo en la pantalla para entonces acercar su celular a su oído— Hola papá

-Hola princesita, ¿cómo estás?

-Bien, gracias... ¿Y tú cómo sigues del dolor de cabeza que tenías?

-Ya descansé un poco y tomé unas pastillas para el estrés que tu mayordomo me recetó, así que ya me siento mucho mejor...

-Que bueno, me da gusto saber eso, ¿ya te tomaste el té de tila que te regaló la señora Couffaine?

-No, todavía no, pero quisiera dejarlo para más al rato cuando ya me vaya a dormir...

-Está bien...

-¿Saliste del hotel?

-Si, te iba a avisar pero supuse que estabas dormido, por eso no lo hice

-Y no suponías mal... ¿Estás con Zoé?

-Si, ella está conmigo...

-¿Ya le comentaste tu idea de que vaya al colegio para que no se sienta sola mientras tú estás estudiando?... Hablé con el director y dijo que no había problema...

-Si y me dijo que si le gustaría...

-De acuerdo, entonces voy a necesitar que ella esté aquí antes de las 4:30...

-¿Qué?... ¿Por qué?...

-El señor Damocles dijo que por cuestión de protocolo y seguridad por todo esto de que han incrementado los ataques de Shadow Moth, es necesario tener un expediente de Zoé, aunque sea improvisado, pero ni tú, ni yo sabemos los datos de ella, así que dijo que necesita que vaya a esa hora al colegio para que pueda hacerle un par de preguntas...

-Entiendo... —volteó a ver a la Lee— Yo le comentaré...

-Entonces nos vemos en un rato...

-Si, papá, hasta luego... —cortó la llamada y guardó su celular— Zoé, yo ya tenía contemplado el que estudiaras, entonces mi papá me apoyó y habló con el director...

-No se puede, ¿cierto?

-Descuida, si se puede, solo que parece que no vamos a tener tanto tiempo el día de hoy...

-¿Por qué?

-Bueno, supongo que ya sabes sobre Shadow Moth, los superhéroes y todo eso... Entonces por cuestión de seguridad necesitan crearte un expediente, así que tenemos que estar a las 4:30 en mi escuela para que te tomen tus datos, ¿trajiste documentación tuya?

-Si, pero está en el hotel...

-Entonces hay que regresar poco antes al hotel, sacamos unas copias de tus documentos y nos vamos al colegio, ¿te parece?

-De acuerdo, muchas gracias por su ayuda...

-No es nada...

-¿Y bien?... ¿Qué querías decirme antes de qué tu papá te marcara?

-Iba a decirte sobre si querías acompañarme a un lugar que me invitó una de mis mejores amigas... Pero era estar ahí a las 4...

-No te preocupes, Chloé, si quieres tú ve con tu amiga, no hay problema, yo voy a hacer lo de mi expediente, solo necesito que me digas como es físicamente el director y como llegar al colegio...

-No, prefiero acompañarte, solo por si hay algo o es necesario...

-¿Segura?... Quizá luego no puedan verse...

-Descuida, ellas van en mi salón y probablemente mañana puedas conocerlas, ya sea a la entrada, la salida o en una hora en la que coincidamos...

-Eso estaría genial, ¿crees que nos toque en el mismo grupo?

-No lo creo, ya que eres mayor que yo y te deberían asignar otro grupo, además de que hace no mucho llegaron Rossi y Graham a nuestra clase y los únicos 2 lugares que estaban vacíos, se llenaron...

-Comprendo, hablando de que soy un año mayor que tú... ¿Cuándo es tu cumpleaños?... El mío es el 1 de septiembre...

-Vaya... El mío es el 22 de agosto, una semana y media antes que el tuyo...

-Es curioso... ¿Tú naciste a los 9 meses justos?... Es que yo nací a los 7 meses, mi cumpleaños debió ser por finales de octubre o principios de noviembre, bueno, eso dice mi papá...

-Si, nací a los 9 meses... Zoé, ¿me permites realizar una llamada?

-Claro... Adelante...

-Gracias... —la joven sacó su celular, apretó unas cosas en la pantalla del mismo y lo acercó a su mejilla-oído— Mmm...

-Hola mi niña hermosa, ¿cómo estás?

-Hola, hola... —canturreó un poco mientras una sonrisa se formaba en su rostro, cosa que notó la otra rubia que la veía discretamente— Bien, gracias, ¿y tú?

-Menos preocupado que hace unas horas porque te ví...

-Me da gusto saber eso... Oye, hoy no podré ir con ustedes...

-¿Por?... ¿Todo bien?...

-Si, todo en orden, solo que voy a acompañar a Zoé a que haga unos papeleos para que en las semanas que esté aquí, pueda ir al colegio y no se la pase sola por las mañanas

-¿Idea tuya?... —la escucho hacer un sonido de afirmación— Fuiste muy inteligente, más que de costumbre y eso es un lindo gesto de tu parte...

-Es distinto a como pensé que sería... Me agrada, pero tengo que ver más...

-¿Está contigo, cierto?

-Si, ¿cómo supiste?

-Porque hablas como si se tratara de una situación cualquiera, más no de una persona...

-Que atento es, acertó al clavo, por algo me gusta mucho, ¿no crees?

-¿Hablas de que acerté o de mi?

-De ambas cosas, pero obviamente siempre será la segunda al doble

-Me encanta que hablemos en cosas que solo ambos comprendemos...

-Es un lenguaje único, como el color azul, mora azul...

-¿Me dijiste mora azul?

-Morita, mejor...

-Tus apodos son lo mejor del mundo...

-Lo sé, soy asombrosa...

-Y fantástica...

-Efectivamente, pero en fin, diles que mañana nos vemos, ¿si?

-Por supuesto...

-Gracias... Ya voy a colgar... ¿Si?

-Claro, te quiero...

-Yo también pero al revés, en vez de a mi, a ti, pero eso multiplicado por 3... Nos vemos luego...

-Hasta luego...

La de mirada azul zafiro colgó y volteó a ver a su media hermana que la veía con una sonrisa de lado...

-¿Era tu novio?

-No tengo novio, Zoé...

-Yo pensé que si

-Pues no, te equivocaste, ¿por qué pensaste que si?

-En todo el día no habías sonreído como hace unos segundos...

-Es que hay gente que es capaz de cambiar mi estado de ánimo muy rápido porque son muy especiales para mi, es solo eso...

-Te entiendo y me da gusto que tengas a personas así, ellas valen oro...

-Valen más que eso, créeme.

Poco más de una hora había pasado y el par de rubias se encontraban llegando afuera del Colegio "Françoise Dupont", a lo que poco tardaron en entrar, pues en 10 minutos tenían que estar con el señor Damocles.

Caminaban tranquilamente hasta que se detuvieron al escuchar como alguien llamaba a la Bourgeois, quien volteó seguida de la de mirada cielo, viendo como se acercaba a ella el Agreste que sonreía, seguido de la Tsurugi que lucía seria, ambos vestidos con trajes de esgrima...

-¡Hola, Chloé!

-Hola Adrikins, se me había olvidado que estudiabas esgrima...¿Cómo estás?

-Muy bien, gracias, aunque algo preocupado por ti... Juleka dijo que no habías venido porque tenías mucho vómito, ¿cómo sigues?

-Ah, si... Es que supongo que comí algo que no debía y en la mañana mi estómago estaba súper revuelto y no paraba de vomitar, pero ya se me pasó y me siento mucho mejor, gracias por preocuparte...

-Si... Se ve que la pasaste mal... Luces muy cansada y con ojeras... Pero me alegra que estés mejor... ¿Mañana si vendrás a clases?

-Si, ya estoy bien, así que no hay razón para que no venga...

-Adrien... —atrajo su atención la japonesa— Nosotros—

-Cierto, se me olvidaba presentarte... Chloé, ella es—

-Kagami, —puso un rostro serio— lo sé...

-¿Se conocen?

-Si, nos conocimos poco antes del día del estreno de la película de Miraculous y de hecho ella junto con Marinette estaban molestandome...

-Claro que no...

-Claro que si... Yo no les agradaba y tú sigues sin agradarme

-Bueno, —interrumpió el modelo— eso era antes y Chloé ya cambió, Kagami... Quizá y así como pudiste llevarte bien con Marinette, ahora ustedes 2 puedan llevarse bien...

-Jamás

Dijeron las 2 al mismo tiempo, sorprendiendo al de ojos verde esmeralda y a la otra blonda...

-Okey, las conozco y no las obligaré a que se lleven mejor... —fijó su vista en la acompañante de su mejor amiga— ¿Y tú quién eres?... Te me haces muy familiar...

-Adrikins, ella es Zoé, mi media hermana... —su confesión hizo a la azabache y a él abrir los ojos con sorpresa— Recién llegó de New York y se va a quedar unas semanas aquí en París...

-Pero pensé que tú—

-Lo sé, —interrumpió— es una larga y tediosa historia... Luego te la contaré, ¿si?

-Hmmm... —el modelo entendió y no dijo nada más— Está bien... Un gusto Zoé, yo soy Adrien Agreste, el mejor amigo de Chloé...

-Un gusto... Zoé Lee... —volteó a ver a la de ojos marrones— ¿Cómo te llamas?

-Yo soy Tsurugi Kagami, —sonrió un poco— un gusto

-El gusto es mío...

-Que bueno que ya se conocen y todo, pero Zoé y yo ya tenemos que irnos porque nos espera el señor Damocles, nos vemos...

-Adiós...

Se despidieron y las vieron caminar, antes de que ambos regresaran a su clase e iniciaran a practicar...

-Creí que Chloé era hija única...

-Yo igual... Ha sido mi mejor amiga desde la infancia y nunca había mencionado una media hermana y supongo que recién la conoció... Quizá por eso no vino hoy...

-Es factible... Después le podrás preguntar...

-Si, Kagami, se que apenas lo sugerí, pero en verdad deberías tratar de hablar con Chloé... Ella últimamente cambió mucho su forma de ser, quizá y puedan volverse amigas, así como te sucedió con Marinette...

-No Adrien, ya nos oíste, eso jamás va a pasar...

-¿Por qué?

-Simplemente hay personas que no son destinadas a ser amigas...

-Pero no has hablado con ella...

-Y no necesito hablar con ella...

-¿Y por qué con su hermana fuiste distinta?...

-Porque el ser hermanas no hace que sean iguales en su forma de ser, pues yo sé que podría llevarme mal con Chloé pero bien con Zoé...

-Ay, Kagami...

-No es personal contra ti, solo que en mi cultura las cosas son diferentes, cuando no confías en una persona desde un inicio, usualmente es por alguna cuestión y convencerse de lo contrario es algo complicado... —dejó de pelear— Puede que luego trate de llevarme bien con ella, pero te aseguro que no será hoy, ni mañana, igual en la semana y seguramente tampoco en lo que queda del mes... Además algo no me cuadra...

-¿Qué cosa?

-Tu primo y Zoé ya se conocen...

-¿Por qué dices eso?

-El Jueves cuando nos encontramos en la plaza y tú ibas al baño, ¿recuerdas qué me dijiste que Félix estaba en la librería?

-Si, lo recuerdo...

-Bueno, en cuanto te fuiste al baño, volteé a ver la librería y Félix le dio un libro mientras platicaban unos segundos antes de que él la dejara

-No lo creo... Probablemente era alguien parecida...

-Deberías preguntarle, solo digo... ¿Seguimos peleando?

El rubio asintió no tan seguro y ambos reanudaron su combate, mientras por otro lado las chicas hacían el registro.