Capítulo 33.

La de mechas moradas se dirigió hacia sus amigos que la esperaban en la parte exterior del barco, las cuales al verla, se confundieron al no ver con ella a su hermano...

-¿Y Luka?

-Mi hermano no va a estar con nosotros el día de hoy...

-¿Otra vez salió?

-No, de hecho él está en su camarote, pero se encuentra dormido, hoy en la mañana amaneció sintiéndose mal, de hecho no fue a trabajar y dice mi mamá que hace rato vino el médico a revisarlo y que parece que tiene una fuerte infección de garganta, así que le administraron unos medicamentos que le producen somnolencia...

-Oh, no... —habló Iván— ¿Cómo se enfermó?

-Ayer salió, comenzó a llover, él se mojó y para hoy se enfermó...

-Que mal por él... ¿Entonces no vamos a ensayar?

-Yo digo que ensayemos aunque él no esté... Llevamos solo un ensayo en semana y media cuando normalmente hacemos 3 a la semana, no podemos estar frenando demasiado esto...

-¿Luka no se molestará?

-No lo creo... Así que todos a sus puestos...

Dijo antes de que comenzaran a acomodar sus cosas para comenzar el ensayo de la banda.

Mientras tanto en la mansión Agreste se encontraban el par de primos en la habitación del modelo viendo la televisión en un canal de historia, cosa que al Graham le entretenía, a comparación de su primo que estaba aburrido...

-Félix... ¿No quisieras... No sé... Jugar videojuegos?

-No me gustan...

-Jummm... ¿Qué me dices de jugar basketball?

-Prefiero algo con más lógica que solo lanzar una pelota a un aro, quizá un Scrabble o memorama...

-Ah... La última vez me dijiste que aun sabias hacer trucos de magia con cartas... ¿Y si me enseñas a hacer un par de trucos?...

-Solo necesitas decirme que te aburriste de ver la televisión y simplemente le cambiamos de canal.

Soltó sin siquiera verlo, cosa que causó sorpresa en el otro joven que no pensó que pronto captaria su punto, a lo que sonrió con un poco de nervios...

-¿Cómo lo supiste?

-Crecimos prácticamente juntos, te conozco y sé cuando no quieres ser directo respecto a algo que te incomoda o aburre...

-Lo lamento, es solo que no me gusta historia... Saco buen promedio, pero me aburre...

-Perfecto... —apagó el televisor para verlo— No era tan difícil...

-¿No estás molesto?

-¿Luzco como alguien molesto?

-Pues... —observó su rostro y no notó ninguna expresión— No es como que seas muy expresivo...

-Lo lamento... —fingió una leve sonrisa y relajó su rostro— ¿Ahora?

-No, no lo estás... —sonrió— ¿Qué me dices sobre que me enseñes tus trucos de magia?

-Digamos que no hay mucha gracia en hacerlos... ¿Para que quieres aprender?

-Porque quiero pasar más tiempo con mi único primo...

-Dime eso... Hace mucho no nos veíamos y creo que hay mucho que no conocemos del otro... ¿Qué te parece si pasamos tiempo pero nos conocemos?

-Me parece estupendo... ¿Cuál color es tu favorito?

-El negro y el gris... ¿El tuyo?

-Creo que no tengo... Pero uso más el tono negro, así que diré que ese

-De acuerdo... ¿Qué te gusta hacer en tus tiempos libres?

-Salir con mis amigos, bueno, cada que mi papá me deja salir...

-No entiendo... ¿Por qué te impide salir?

-Desde que mi mamá desapareció, mi papá se volvió muy sobreprotector conmigo, pero todo empeoró cuando comenzaron los ataques Akuma, desde ahí mi padre siempre me tiene bajo cuidado las 24 horas del día y bueno, mi recámara es uno de los pocos lugares donde puedo tener privacidad ya que en la calle a veces me reconocen y los fans no me dejan siquiera respirar... No me molestan, son agradables, pero extraño cuando todo era más tranquilo, por así decirlo...

-Comprendo... Y... ¿Cómo te llevas con Chloé?... —notó la confusión en su primo, a lo que repuso su pregunta— Pregunto porque últimamente veo que casi no están juntos a comparación de como cuando éramos niños...

-Bueno, desde que Chloé me ayudó a entrar al colegio, yo conocí a nuevas personas y creé nuevos amigos, cuando antes mi única amiga era ella...

-Es decir, ¿cómo ya tienes nuevos amigos, ella ya queda de lado?

-¿Qué?... No, claro que no Félix es solo que—

-Claro que si, Adrien... —lo interrumpió— No hay que ser muy inteligentes para darse cuenta de que te la pasas evitando a Chloé...

-No la evito... Pero hay muchas cosas que no puedo hacer con ella... A Chloé no le agradan mis amigos y a ellos digamos que ella no les agrada del todo, más que a Nino que es neutro...

-¿Y por eso le mientes para no salir con ella?

-Ya te di las razones por las que hice lo que hice el día del cine...

-No lo digo por ese día, lo digo porque estoy casi seguro que no es la primera vez que inventas algún compromiso para no salir con ella y sinceramente, no se me hace justo que le mientas con tal de no salir con Chloé... La has lastimado bastantes veces y no te has dado cuenta de eso... Solo quiero que seas sincero con ella... Piensa en esto, pese a todo tienes un lugar muy importante en su vida y su corazón, un lugar que terminarás por perder por tus acciones...

-Gracias por ese consejo, Félix.

-No era un consejo, primo, era una advertencia sobre donde puedes caer si no piensas bien tus acciones, dejando de lado que Chloé ya está teniendo como una especie de nuevo mejor amigo...

-¿Hablas de Luka?... —lo vio asentir— Sinceramente no creo que él vaya a ser su mejor amigo...

-¿No confías en su amistad?

-Claro que lo hago, pero digamos que de lo que conozco a Chloé, Luka puede ser más para ella...

-¿Así sin más lo dices?... ¿Acaso olvidaste lo que te dije sobre lo que sentía por ella?...

-No, por eso te digo esto... Tú caminas con 2 pies izquierdos hacia ella, lo he visto en el colegio, en vez de parecer que te gusta, parece que la acosas, eres demasiado intenso y ella te terminará detestando... Así como tú me advertiste, yo te advierto a ti y antes que nada tengo que ser sincero, no estoy a favor ni de Luka, ni a favor de ti, puedo ayudarte a que la conquistes, pero si no es lo correcto, lo lamento...

Sin decir algo más, se puso de pie y comenzó a caminar hacia el baño de su recámara, dejando pensando al Graham, quizá y su primo tenía razón, puede que quizá estaba comportándose algo "aventado" con ella y por esa misma razón, Chloé lo evitaba pero... Nunca había vivido tranquilo, ¿cómo podría no querer demostrar todo lo que guardaba desde hace tiempo?

Escuchó varios gritos de fondos y aunque se removía una y otra vez en su cama con el fin de callar aquellos sonidos, simplemente no lo logró, por lo cual abrió los ojos y se sentó en la orilla de su cama mientras sostenía su cabeza al sentir como el sonido era más molesto y aunque rápidamente distinguió que se trataba de Rose, no pudo evitar desear que se callara en ese momento.

Volteó a ver el reloj en su pared y notó como aún era tarde, pues había cerrado todas sus cortinas para evitar que la luz le diera y lo despertara, iba a tomar su celular de su mueble cuando se detuvo al ver un sobre blanco que tenía escrito el nombre de "Chloé" a lo que no pudo evitar sonreír un poco antes de tomar el mismo para abrirlo con cuidado de no romperlo, sorprendiendose al ver adentro su anillo y un papel que tomó para leerlo:

Su sonrisa se acentuó un poco más antes de que se colocara el anillo donde siempre solía usarlo para entonces ponerse sus pantuflas y dirigirse con lentitud al origen del "ruido", no sin antes ponerse una bufanda como "cubrebocas".

La rubia de baja estatura cantaba cuando de pronto vio al de mechas azules con su cabello desordenado, en playera de tirantes con un short que le llegaba a la altura de las rodillas, cosa a la que no pudo evitar soltar una pequeña risa, pues nunca había visto al Couffaine de esa manera, cuestión que atrajo la atención de todos...

-Sigue riendote, Rosita... —bromeó en voz débil— Luego te vas a enfermar y ya veras mi venganza...

-Perdón Luka... —sonrió— Es raro verte así...

-Descuida... —tosió— Juleka...

-¿Qué haces fuera de cama, Luka?... —se acercó a él— Deberías estar descansando, ya les dije sobre tu enfermedad...

-Gracias por eso... —carraspeó con la garganta— Es que no puedo dormir con la música... —vio la confusión en el rostro de su hermana— Sabes que me gusta el escándalo, pero ahorita mi cabeza está a nada de explotar...

-Desde hace rato comenzamos y apenas lo notaste...

-Es que supongo que tengo fiebre de nuevo, que eso fue lo primero que me despertó y ya después fue el escándalo...

-Ya veo, ¿tomaste tus medicamentos ya?

-Aún no me tocan, ¿y mamá?

-Desde hace un buen rato salió a justificar tus faltas al trabajo y dijo que de ahí iba a ir a ver otra cosa...

-Entiendo... —estornudó— Iré nuevamente a descansar... Estaré despierto pero acostado, me duele mi cuerpo...

-Okey, con cuidado...

El azabache simplemente meneó su mano en forma de despedida antes de comenzar a caminar hacia su camarote para acostarse, tomando de nuevo la hoja azul en manos y leyendola otra vez para entonces ponerla con cuidado en el sobre y tomar su celular para marcarle a la rubia, la cual se encontraba en su habitación pensando sobre como haría las invitaciones que su madre le había pedido, tan solo tenía un par de días y no tenía ni una idea de que hacer, cuando pronto escuchó su celular sonar y lo tomó para ver de quien se trataba, sonriendo al ver que era él...

-Hola Couffaine, ¿cómo sigues?...

-Hola Chloé... —alejó un poco el celular de su cara y tosió— Viviendo, nada más puedo decir eso, ¿y tú?

-¿Estás muy mal?... —preocupada— Te escuchas cansado...

-Si, algo, es que como no suelo enfermarme de vías respiratorias o algo más, cuando sucede, me enfermo muy fuerte...

-¿Y ya te atendió algún médico?

-Si, tengo una infección muy fuerte en la garganta, es contagiosa y al menos me dio 2 semanas de descanso, pero —alejó su celular y de nuevo tosió— no quiero pasarmela dormido todo el tiempo, ya que me mandaron medicamentos como clorfenamina, naproxeno y esos medicamentos que te producen sueño, además de que mi cuerpo me duele...

-Me siento triste por ti... No me gusta escuchar que estás mal...

-Solo es una gripa que pronto se me va a quitar... —sorbió con la nariz antes de tomar un pañuelo— Esperame tantito... —avisó par alejar su celular y sonar su nariz, tirar el papel a la basura y nuevamente acercar su celular— Listo, te decía que pronto se me quitará, sobre todo porque tiene que quitarse rápido para que disfrute mi estabilidad emocional, ¿no crees?

-¿Ya leíste la carta?... —escuchó un sonido de afirmación— ¿Te gustó?

-Es un muy bonito detalle, me hizo sentir mejor... Gracias.

-No es nada... —sonrió con un poco de timidez— Se me olvidó que probablemente tendrías la nariz tapada y le puse perfume... Jajaja... —soltó una risita nerviosa— Que cosas, ¿no?...

-Si, pero descuida, seguramente huele muy bien, —soltó una risa gutural— imaginaré que huele a fragancia de Jazmín...

-Menos mal ibas a oler a chica... —soltó una pequeña risa al recordar New York— Y terminó gustandote

-Es un olor sutil y relajante...

-Cuando te mejores, ahora si prometo que te arreglaré tu cabello con un tratamiento frutal, cuyo olor te va a gustar mucho, o bueno, eso espero...

-Estoy casi seguro que si va a gustarme...

-Oye, cambiando un poco de tema... No creas que te regresé tu anillo porque no me gustara, te lo regresé porque no quiero que se me vaya a caer y lo pierda...

-Descuida, —estornudó— gracias por eso...

-Salud... —lo escuchó agradecerle de nuevo— De nada, aunque tus pulseras me gustan... Las estoy cuidando muy bien... Lo prometo, pero si quieres cuando nos veamos te las doy...

-Puedes cuidarmelas por el tiempo que quieras, confío en ti.

-Gracias por tu confianza... La valoro... —escuchó como tocaban su puerta y le decía su mayordomo que bajara con su madre— Pfff...

-¿Todo bien?

-Si, es solo que ya me esperan abajo en el vestíbulo... Mi mamá invitó al señor Gabriel, a Adrien y Félix a venir para quien sabe que cosas aburridas...

-¿Félix?...

-Tampoco lo entendí, pero bueno... Ya tengo que irme...

-Suerte...

-Gracias, la necesitaré... Hablamos luego, ¿si?

-Si no estoy dormido, claro que si

-Cuidate, Luka.

Mencionó antes de colgar, para entonces guardar su celular en su bolsillo del pantalón y salir de su suite hacia el vestíbulo, donde apenas llegó y efectivamente, ahí estaba Félix, Adrien, el señor Agreste y... ¿Émilie?

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