Prólogo
POV Narradora
La "divertida" rutina del diseñador se vió interrumpida, fue un día como cualquier otro, fue un momento de creatividad.
Donde buscaba un ingenioso plan para conseguir los miraculous de Ladybug y Cat Noir.
Todo era, simplemente, monotonía, ese silencio, esa soledad que siempre le acompañaba en su altier, junto a la mirada de su esposa, desde su cuadro, que le recordaba tu objetivo en esta vida.
Parado en su podio, estaba dibujando en su tableta, algunos diseños simples, quizás luego le añadiría otras cosas, aunque eran simplemente para pasar el rato mientras maquinaba su siguiente plan.
Fue ahí, justo allí, cuando su querida asistente apareció por la puerta, con una leve expresión de desconcierto en su rostro.
—Señor.
Su voz logró que el diseñador la mirase, ella, parada junto a la puerta, revisó su tableta antes de hablar.
—Una mujer quiere hablar con usted, dice que lo conoce.
El mayor frunció el ceño, tratando de recordar de qué mujer podía estar hablando su asistente, pues la única que, muy raramente, quería hablar con él era su ex cuñada, o la esposa del alcalde, y ni siquiera eso era posible.
—Ignora la llamada, Nathalie. — respondió sin darle importancia.
—Si me permite opinar—la voz le tembló, desconcertando al mayor—, debería contestar, parece importante.
Gabriel bajó la mirada un segundo, soltó un suspiro y le hizo una seña a su asistente para que le pasara la llamada al teléfono de su altier.
—¿Si, diga?— preguntó de mala gana, viendo con cierta gracia como Nathalie esperaba curiosa.
—¿Gabriel?— una voz femenina susurró del otro lado de la línea — ¡Dios mío, cuánto tiempo!
—Disculpe, señorita, no quiero ser grosero pero no entiendo a qué se debe su llamado.
La paciencia del mayor se perdía, en primera odiaba hablar por teléfono, en segundo odiaba hablar con gente, y en tercera odiaba hablar con algún extraño.
—Lo lamento, Gaby, pero necesitaba hablar contigo. — con ese simple apodo bastó para culminar con la poca amabilidad del diseñador.
—¿Quién es? ¿De qué está hablando?
—Disculpa, Grassette, pero en serio necesitamos hablar.
Y eso bastó, con simplemente eso, el mayor diseñador de moda de París y posiblemente del mundo, reconoció a la voz femenina.
—_____...— exclamó sorprendido, casi atónito después de años sin saber de ella.
—Hola, Gaby— soltó una ligera risa, antes de volver a ponerse seria —, pero ya en serio, necesito pedirte un favor.
—Claro, sabes que no hay nada que no haría por ti, ____— respondió con una ligera sonrisa.
—Gaby, necesito el divorcio.
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CHAN CHAAAAANNN
Holiiiis holiii!!! Cómo están? Djkdkd
Nueva historia de Gabriel!!
Hasta ahora es un simple impulso pero espero que les guste xjdkdk
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