- Debo retirarme un momento, debo ir al sanitario- se levanta y se aleja del lugar.

- Dime Shun- dice el rubio- ¿Por qué te fijaste en Asuna?.

- Pues bien- tomo un trago de su limonada- Comprendo muy bien su situación y las de ustedes, se que han pérdido a sus seres queridos y eso es un dolor muy doloroso- dice y con triteza y luego sus ojos toman un leve brillo- Me llamó la atención aquella chica de cabello castaño y de ojos miel tan solitaria y muy reservada, me acerqué de a poco pero siempre que lo hacía me esquivaba y me ignoraba o me miraba fugazmente a los ojos y no me dirigia la palabra, notaba tristeza y soledad en su mirar- sonrie- Un día me acerqué a ella y le conté mi historia... al principio se interesó y cuando iba por la mitad rompió en llanto y eso me preocupó, entre lágrimas amargas y sollozos, me comentó lo que pasó con sus padres y su onii-san y supe enseguida que podía ayudarla a superar lo que había pasado ya que a mí me pasó igual, con el tiempo la ví sonreir más seguido y no dejaba de pensar en ella, hubo un día el cual no apareció y eso me preocupó, traté de tranquilizarme y meterme en la cabeza que al día siguiente iría a la escuela pero no ocurrió, no apareció en una semana y eso me tenía altamente preocupado, no sabía donde vivía para ir a verla y eso me ponía más nervioso- toma otro trago largo y suspira- Al volver se alejó de mí y no comprendía el porque el leve brillo que habían tomado sus ojos en ese tiempo volvió a desaparecer y volvió a aparecer la misma soledad y la tristeza fue aún peor esta vez, otra vez traté de acercarme a ella y esa vez me fuí más difícil ya que siempre me esquivaba y me ignoraba, cuando logré que me dirijiera por lo menos un "buenos días", me dispuse a volver a adquirir su confianza y eso me tomó un año y medio- voltea su mirada fugazmente de nosotros mirando sobre mi hombro y vuelve a mirarnos- Me comentó que ella había vivido en las calles y que tus padres y padrino... Naruto...- muerde su labio y suspira- La llevaron con ellos, me hubiera encantado conocerlos, debo decir que les debo las gracias por salvarla y no dejarla ni menospreciarla como los demás lo hicieron- aprieta su mandíbula y su mirada se oscurece llena de rencor- Me comentó que no asistió por la muerte de tus padres y eso le dolió demasiado ya que les había empezado a tomar cariño, fue por eso que se cerró de esa forma cuando empezaba a abrirse- desvio mi mirada y veo a Naruto-kun quien está serio y atento a lo que dice el azabache, dejo de mirarlo y lo veo a él- Nuestra relación se fortaleció y nos volvimos los mejores amigos y llegué a sentir algo muy fuerte por ella, nunca tuve el valor de decirle lo que sentía y de eso me arrepentí los años que dejé Konoha- la mesera aparece con nuestra orden y sirve los platos, nos pregunta que si se nos ofrece algo más a lo que negamos y le decimos que la llamaremos si necesitamos algo, se retira y me es raro no ver a Asuna-san todavía- Cuando volví la busqué desesperado, todo el tiempo que duré lejos de Konoha no podía dejar de pensar en ella y en lo que estaría haciendo, si tendría a algún hombre a su lado y casa vez que pensaba eso me llenaba de ira, al encontrarla una alegría inmensa me llenó al volver a verla convertida en la mujer hermosa que es ahora- un brillo se hace presente en sus ojos y sonrio- Seguía siendo la misma chica solitaria y cerrada con las personas y al enterarme que no tenía una pareja formal no perdí la esperanza de que estuviera a mi lado- alza la vista y sonríe, volteo y Asuna-san viene caminando algo preocupada se para detrás de él y pone sus manos sobre sus hombros con suavidad - Me prometí a mi mismo que no la dejaría ir por nada del mundo y me propuse enamorarla y logré conseguirlo- Asuna-san al escucharlo le sonríe y besa su cabello.

- Te tomó un buen tiempo pero todo salió como querías y ahora me tienes muy enamorada- se sienta en su asiento y pone su celular sobre la mesa, ¿Acaso se lo llevó al sanitario?.

- Me alegro escuchar eso- dice Naruto-kun con una gran sonrisa.

- Es mejor comer o se enfriará más- menciono y todos asienten.

......

Definitivamente Asuna-san oculta algo y no estoy segura de llegar a saber que es lo que oculta, además esa mirada que se dieron ellos... ambos ocultan algo y eso no me gusta, espero que nada malo pase, Naruto-kun ya ha sufrido mucho por sus pérdidas y ahora no sería bueno que recibiera una noticia devastadora, espero que Neji-niisan logre encontrar más información sobre ella y sobre Shun-kun para averiguar si ocultan algo.

- Oye Hinata- escucho una voz llamandome demo le resto importancia- Hinata, te estoy hablando- sigo sin prestarle atención- ¡Oye Hinata no me ignores!- escucho la voz alterada de Sakura-chan y volteo a verla, le sonrio nerviosa y ella resopla.

- ¿Qué decías?- digo sonriendo falsamente.

- Deja esa sonrisa falsa, eso es del estúpido de Sai- me reprende y asiento riendo por lo bajo- ¿Cómo te fue con Asuna y su novio?.

- Bien, conocí partes del pasado de Asuna-san y conocí a fondo al azabache por Naruto-kun ya que en todo el almuerzo le hizo un interrogatorio muy molesto demo no pareció molestarle, él también perdió a perdonas importantes para él, perdió a su onee-chan y luego a su madre- digo recordando la historia que me comentó sobre su onee-chan.

- Aunque no nos demos cuenta muchas personas han sufrido la pérdida de un ser querido y encuentran a alguien que entiende su dolor y terminan enamorandosen, por ejemplo, Naruto y tú, él sufrió más pérdidas que tú demo eso no implica que no comprendas su dolor.

- En eso tienes razón- sonrio recordando a mi rubio- ¿Cómo te fue en la cita con Sasuke-kun?.

- Es todo un amor...- dice emocionada poniendo sus manos sobre sus mejillas que están al rojo vivo- Sasuke-kun sabe cuando ponerse cursi y hasta cariñoso, demo eso solo pasa cuando estamos a solas, sabes que él no es muy expresivo y demostrativo.

- En eso tienes razón, es el polo opuesto a mi rubio- digo arrecostandome en mi cama- Aún me sorprende que sean mejores amigos conociendo sus diferencias.

- A mi también me sorprende y eso es lo bueno ya que se saben leer entre líneas y se soportan a su manera- su mirada adquiere más brillo y sus ojos jades se hacen más oscuros- Ni pensar que esos dos eran mis mejores amigos, como extraño esos días cuando jugábamos en el parque los tres y Sasuke-kun y Naruto me defendían de los que me molestaban, incluyendo a la perra de Karin- hace una mueca de desagrado y yo me rio.

- Jajaja, si eran muy unidos y aún lo siguen siendo, aunque eres mucho más unida a Sasuke-kun- sonrio pícaramente y ella se sonroja y toma una almohada estampándola contra mi cara- ¡No seas sucia Hinata!, ¿Acaso tanta influencia de Naruto te ha hecho eso?- dice burlona y yo me rio a carcajadas.

- Para nada, esa es Ino-san- escucho la risa de Sakura-chan y se me contagia.

Me agrada pasar estos buenos tiempos ya que mi humor cambia y dejo de preocuparme por lo que pasa a mi alrededor y eso me mantiene tranquila, agradezco tener a alguien con quién hablar con todo confianza, Sakura-chan es mi mejor amiga y eso nunca va a cambiar.

......

Otro día pesado en la preparatoria ya que empieza lo mejor, la semana donde se celebra el festival de la prepa y tenemos que planear que se supone que vamos a hacer. Nos dividieron en grupos así que el mio está constituido por Ino-san, Sasuke-kun y Temari-san, mi rubio está con Sakura-chan, Shikamaru-kun y Sai-kun cuatro miembros por grupo, a nosotros nos asignaron un puesto de comida y estuvimos de suerte al saber que es de dulces y postres, lo bueno es que sé cocinar e Ino-san y Temari-san también, mi preocupación es Sasuke-kun y no se como puede ayudarnos en esto.

- ¡Oye Sakura!- dice Ino-san apartandome de mis pensamientos, la pelirosa la voltea a mirar confusa- ¿Tú novio sabe cocinar o hacer algo en la cocina?.

- Te sorprendería saber lo bueno que cocina, ponganlo a seguir una receta o a hacer algo él mismo y le quedará exquisito- dice guiñando un ojo y uniendo su dedo pulgar con el índice y los otros tres extendidos.

- Ah ok- dice la rubia algo sorprendida- ¿Qué les tocó a ustedes?.

- Un puesto de juegos de puntería- dice la ojos jade haciendo una mueca de asco, nos reímos de ella- Pero sera sencillo si necesitan ayuda con los postres solo pidanlo.

- No te preocupes- dice la rubia de cuatro coletas- Con tú hombre ayudándonos nos irá de maravilla.

- Jajaja eso es seguro- sonríe ampliamente la pelirosa.

........

- ¡¿Aún no aparece el baka de Sasuke?!- grita Ino-san molesta.

- No- respondo- Y tampoco contesta el celular- le muestro el registro de llamadas- No me ha contestado los diez llamados que le he hecho.

- A mi tampoco me contesta- dice la rubia de cuatro coletas.

- ¡Maldición!- grita exasperada Ino-san- ¡¿Cómo es que ese estúpido Uchiha nos va a dejar abandonadas a nuestra suerte?!.

- Calmate Ino-san- trato de tranquilizarla- Sabes como es Sasuke-kun de seguro debe de tener una buena razón para no aparecer todavía- digo tomándola de los hombros y dándole una sonrisa amistosa, ella suspira pesadamente y me devuelve el gesto.

- De no ser por ti, hubiera acabo con cualquier cosa que estuviera cerca de mi, arigatou Hinata- dice mas tranquila.

- No hay de que.

- Ya que Sasuke no ha aparecido, lo mejor será comenzar a hacer los postres o nos cogerá el tiempo y no haremos nada- dice la ojo aguamarina y nosotras asentimos.

- Bien- dice la rubia- Ya saben, Temari, te harás cargo del postre de maracuyá, Hinata te harás cargo del postre de limón y yo con el postre de tres leches ya que tengo más habilidad.

- Si claro- dice Temari-san entre cerrando los ojos- Lo escogiste porque es el favorito de Sai, tú no me engañas rubia- la señala con el dedo índice.

- Quizás....- dice y sonreímos divertidas la rubia y yo- Bueno eso es lo de menos, comencemos de una vez.

- Si chef- respondemos divertidas y ella se ríe.

Me es extraño saber que Sasuke-kun no haya aparecido todavía, espero no le pasara algo malo, me ubico en mi parte correspondiente de la encimera de la cocina y comienzo a leer la receta de postre de limón y es fácil de hacer sino que yo lo hago de forma diferente y no se si les guste como lo hago así que usare la receta que encontré en un libro que estaba en la biblioteca que pertenecía a mi madre, la he cuidado muy bien y la he limpiado como si fuera mía, sonrio nostálgica al pensar que mi gusto en la cocina lo herede de ella, empiezo a sacar tazones, recipientes e ingredientes y como va diciendo la receta la voy siguiendo al pie de la letra, una media hora después la meto a la nevera y me dispongo a esperar a que se enfríe y tome forma, mi onee-chan entra a la cocina seguida por el azabache que tanto hemos estado esperando y viene con una bandeja cubierta por aluminio y no puedo ver que ha traído.

- Por fin apareció el hombre del grupo- dice Ino-san dándole una mirada envenenada- ¿Se puede saber donde ha estado toda la tarde?.

- No empieces con tus interrogatorios Ino- bufa molesto- Estuve en mi casa haciendo los estúpidos postres.

- Al menos nos hubieras llamado y avisado que estabas en eso- dice Temari-chan rodando los ojos.

- Lo tenía en vibrador, además estaba pasando tiempo con Itachi y olvidé que existían por un momento- deja la bandeja sobre la encimera de la isla del centro de la cocina y retira el aluminio dejando ver un postre de chocolate.

-¿Eso estuviste haciendo?- dice la rubia de las cuatro coletas.

- No estaba perdiendo el tiempo, ¿Y ustedes que han hecho?.

- Temari-san y yo ya terminamos de hacer nuestros postres, Ino-san aún no termina ya que le ha tocado hacerlo dos veces.

- ¿Dos veces?, no me esperaba menos de tí Ino- dice burlón y la rubia lo fulmina con la mirada.

- Si tanto sabes hazlo tú- lo reta y le cede el lugar, el azabache roda los ojos y camina donde Ino-san, se detiene y mira lo que lleva- ¿Qué?, ¿Algún problema Sasuke?.

- Ino- la voltea a mirar- ¿Se supone que es de tres leches, no?

- Hai, ¿Que tiene de malo?.

- Estas usando solo dos clases de leche, tú postre es de dos leches, ¿Piensas darle eso a los clientes?.

- Con razón no me quedaba como en la foto- una lagrimita baja por la nuca del azabache.

- Yo me hago cargo de este, si quieren no quedarsen ahí sin hacer nada, hagan uno entre las tres y que a Ino no le toque hacer la mayor cosa.

- Ok, Don Uchiha- dice Temari-san burlona y Sasuke-kun la ignora.

- Onee-sama- dice una voz aniñada y volteo a verla- ¿Puedo ayudarlas?- dice y hace ojitos de perrito.

- Claro cariño- dice Temari-san y le acaricia el cabello con cariño.

......

- ¡Hemos terminado!- digo y paso mi muñeca por mi frente.

- Hinata, tienes harina en el rostro- dice mi onee-chan sonriendome.

- Tú igual Hanabi, tienes sobre tus mejillas.

- Se ven más blancas con la harina en el rostro- dice la rubia de cuatro coletas y reímos por su comentario- Oye Sasuke, ¿Ya terminaste?.

- Hai- dice y se echa agua en el rostro.

- Bien- dice Ino-san- Con esta tarta de manzana, tenemos cuatro postres, ¿Qué dicen?, mañana hacemos las galletas y el pastel.

-Bien, eso es todo, nos vemos después- dice el azabache y deja el trapo que usó para secar su rostro y las manos.

- Sasuke-kun- digo y se detiene mirándome de perfil- ¿No quieres comer o tomar algo?, ya es muy tarde.

- No gracias Hinata, mi kachan debe haberme guardado la cena y...- la melodía de su celular se escucha y lo busca sacándolo de su bolsillo del pantalón trasero, se aleja un poco y habla por un momento, noto su ceño ligeramente fruncido y suspira pesadamente, cuelga y se acerca- Acepto tu propuesta Hinata.

- ¿Qué ocurrió?- digo algo preocupada.

- Tal parece mis queridos padres y hermano, se fueron a comer afuera y pensaron que ya había cenado- roda los ojos molesto y guarda su celular con frustración.

- No te preocupes no es molestia- le digo sonriendo- Si quieren pasen a la sala y pongansen cómodos, Hanabi, ¿Me ayudarás a hacer la cena?.

- Claro onee-sama- dice emocionada.

- No deberíamos ir a relajarnos, deberíamos ayudarte- menciona la rubia de ojos azules y uno niego con la cabeza.

- Es mi casa y ustedes son mis invitados así que yo los atenderé y no dejaré que ninguno me ayude, así que a la sala minna- los echo por decirlo así de la cocina y me pongo manos a la obra a cocinar algo no muy pesado.

Decido hacer un chocolate caliente y sirvo un trozo en cinco platos del ponque relleno de mermelada de mora y de fresa (para Hanabi e Ino-san ya que no le gusta mucho la mora) que preparé ayer, el timbre de la puerta suena y Hanabi sale disparada de la cocina para que las visitas no la abran, termino de servir el chocolate y alcanzo a escuchar un grito lleno de felicidad por parte de Hanabi, me asomo y abro los ojos como platos al ver a mi rubio platinado entrando por la puerta y trae una bolsa en sus manos, esa es muy mala señal, pasa por la sala y saluda a los presentes, entro en la cocina antes de que me vea y hago como si terminara de lavar los platos sucios (agradezco que Hanabi no haya terminado), un agarre cálido se hace presente en mi espalda y miro de reojo encontrándome con sus ojos azules observándome.

- Hina....- siento su respiración en mi nuca- Te queda bien el aroma a harina y manzana.

- Naruto-kun... ¿Qué haces por aquí?- pregunto eso ya que su ¿Cumplido?, me ha dejado algo confusa e incómoda.

- Solo venía de paso a saludar a mi hermosa novia, ¿Acaso está mal?.- termina su frase con voz de niño triste.

- No para nada, es solo que no me esperaba tú visita- digo nerviosa, cuando siento sus labios cálidos sobre mi cuello me sobresalto causándole una risilla algo divertida- No hagas eso- digo y me volteo.

- Así está mejor- susurra y se acerca para darme un beso corto en los labios-Me hicieron falta tus labios en todo el día, al igual que tu presencia- susurra y vuelve a besarme demo esta vez me besa mas tiempo y con cariño, nos separamos por la falta de aire.

- Naruto-kun...- sonrio nerviosa y puedo notar por el rabillo del ojo a Hanabi con una expresión de asco y divertido- Hanabi- la llamo y noto como reacciona y se acerca- Porque en lugar de espiar no vas y le llevas eso- se lo señalo con la mirada- A la sala donde están nuestros amigos y recuerda que a Ino-san debes llevarle el de fresa.

- Esta bien- sonríe y coge dos platos y sale de la cocina.

- Sabes Hina, hay algo de lo que debo hablar contigo.

- ¿Es algo malo?- pregunto preocupada.

- Creo que si y a la vez no, así que a parte de venir a verte venía a hablar- Hanabi vuelve a entrar y se lleva un plato y un pocillo.

- Claro, ¿Puede ser después de que se vayan los minna?

- Seguro- sonrie- ¿Te sobró chocolate caliente?.

- La verdad es que no- pone cara de perrito triste- No pongas esa cara me rio- Puedes tomar del mio, ahora- digo tomando dos pocillos- Ayudame a llevar esto a la sala.

- Como digas mi amor...