Twitter


- Y por cierto, yo también tendría que haberte pegado a ti o a Evans. Creo que tú también tienes mucho que contarme.

No me giro, no quiero girarme. Si ve mi cara sabrá que algo ocurre. Mis músculos se tensan al momento. Dios, no, no, no quiero que sepa que me gusta su amigo.

- ¿A qué te refieres? - disimulo como puedo.

Me giro con la mejor cara que se poner de póker y le mantengo la mirada. Jeremy también la sostiene pero acaba riendo a los tres segundos.

- Vale, vale, debo de haberme imaginado que os habéis besado en tu balcón.

- ¡¿Qué?! - ahora sí que estoy alterada. Él levanta los brazos en señal de rendición.

- Lo sé, lo sé. Menuda locura - ese comentario me molesta profundamente, sobretodo con su risita asquerosa adornando su estúpida cara.

- ¿Por qué sería una locura? ¿Acaso Chris Evans no puedo besarme o es que nadie puede querer besarme?

- Sabes que no pienso eso... - su expresión acaba de pasar a la confusión máxima - Pero no puedes estar con Evans.

- ¿Cómo que no puedo estar con Chris? ¿Quién te crees que eres para decirme con quien salir o no?

- ¡No estoy diciendo nada de eso Iria! Por el amor de dios, me conoces, sabes que nunca diría algo asi.

- ¡Pero lo piensas y, si pudieras, nunca me dejarías salir con ninguno de tus amigos!

- ¡¿Es que te gusta Evans?!

- ¡Es no es el punto Jeremy! El punto es que si un amigo tuyo y yo decidimos salir, tú enloquecerías y no nos dejarías estar juntos.

- No quiero que sufras, ¡¿es algo tan raro?! Ya lo has pasado realmente mal y no quiero vuelvas a pasar por lo mismo. Si estuvieses con algunos de nuestros amigos serias carne de presa para los paparazzi. ¡No quiero que vuelva a sufrir lo de ese verano en Madrid!

- ¡Solo fue un desmayo! Uno y nunca más me pasó. ¡¿Quieres olvidarlo de una vez?!

- ¡No puedo! ¡Tú no sabes lo que es ver como una persona a la que quieres se cae en medio de un país en el que no sabes el idioma ni entiendes a la gente! ¡Por un momento pensaba que te perdía y que era culpa mía!

- ¡Pero eso fue hace mucho tiempo! Nos han pasado muchas cosas desde entonces. Sabes que puedo cuidarme yo sola.

- Lo sé, ¡lo sé! Solo quiero que estés a salvo.

Resoplo. No aguanto más esta conversación. Siempre con lo mismo y ya no aguanto más. Le dejo con la palabra en la boca, entro al garaje y me siento en el mercedes negro. Tanteo cinco segundos que voy a hacer ahora. El ruido del motor me sorprende y decido dejarme llevar y salgo de la casa de Renner.

*Narra Cevans*

- ¡Oh vamos, a mí no me engañas! Tú e Iria os estabais besándoos cuando me fui a por el móvil.

- Que no Sebs, más quisiera yo.

- No me creo que solo te acercaras a ella y pudieses contenerte de besarla.

- Ya te lo dije: es amiga de Renni, así que no intentaré nada con ella.

- Seguro - mi amigo no sé cree una palabra. Yo tampoco para ser sincero.

Tiene la boca abierta para añadir algo más, pero su móvil empieza a sonar por su salón y contesta casi al momento.

- ¿Jeremy? - Sebs me mira con complicidad - Tranquilo... No, no hemos sabido nada de ella. ¿Os habéis peleado?... Vale, vale. Pero dudo que nos llame... ¿No me digas? Qué curioso... No, no, por nada. Vale, ya nos contarás. Adiós.

Espero impaciente a que me diga su conversación, pero el muy cabrón de él ni me mira y no dice una palabra. Empiezo a perder la paciencia y me tiento de darle una colleja pero me controlo por la información que él tiene y yo no.

Me mira y finge como que nada acaba de pasar. Le miro con mucho odio.

- ¿Y bien? - pregunto de mal humor.

- ¿Pero no querías olvidarla? Me confundes Evans...

- Sebastian... Te voy a matar sino me...

- Tranquilo rubia - me corta - Por lo visto Iria y él han discutido y ella se ha ido de casa y no sabe a dónde. Me llamaba para saber si habías¡mos hablado con ella o algo.

- ¿Nosotros?

- Sip, por lo visto ella hablaba mucho de ti... Y creo que empezaron a discutir por ti.

Me levanto casi al momento y miro la hora: las dos y media de la mañana casi. Conociendo a Iria estoy seguro que no llamaría a nadie para no molestar; seguramente este en su casa.

- Me voy - anuncio de camino a la puerta.

- Lo sé. Compra pizza, eso siempre anima.

_____

Aparco en una calle paralela a la casa de Iria y veo su ventana encendida. Cojo la caja de pizza que tengo en el asiento del copiloto y salgo directo a su portal. Pico a su piso y espero muy impaciente.

- ¿Sí? - pregunta más que desconfiada. Seguro que piensa que soy Jer.

- Pizza's Luigi - finjo un patético acento italiano - La señorita pidió una pizza de jamón y queso.

Oigo a Iria dudar, a mí apetecería mucho una pizza estas horas la verdad. Espero que a ella también.

- ¡Es verdad! Ya era hora.

Rio para mí mismo y subo corriendo las escaleras hasta llegar al piso de Iria. Llamo dos veces a la puerta con los nudillos. A los pocos segundos la puerta se abre y una Iria en camiseta larga y pantalones cortos se planta en mi campo visual. Trago saliva al momento, "¿por qué habré venido si seguro que no me voy a poder controlar?".

- Por fin, llevaba esperando un buen rato - se queja ella.

- Nuestro servicio tarda un poco, pero lo compensamos con el buen ver de nuestros repartidores.

Ella me mira de arriba abajo y me deja sitio para pasar. Mientras cierra la puerta yo dejo la pizza en la mesita que tiene en frente del sofá y me tiro en él.

- ¿El repartidor querrá una cerveza? - pregunta ella desde la cocina. Asiento y veo como coge dos - Y ahora me vas a responder un par de preguntas, ¿cómo narices sabias que estaba aquí? ¿Y dónde has encontrado una pizzería abierta? Porque quiero su número ahora mismo.

Pego una risotada importante a la vez que ella se sienta en sofá y me da la cerveza. Ambos estamos en extremos opuestos del sofá y lo agradezco internamente.

Algo empieza a vibrar en la cocina e Iria bebe rápido su cerveza con una mueca en la cara.

- ¿Problemas? - pregunto ya sabiendo la respuesta.

- ¿No te ha llamado Renner preguntando por mí?

- A Sebs - ella resopla. Tengo que cambiar de tema lo antes posible. Recuerdo que tengo la pizza y saco dos trozos - La pizzería no es que esté abierta las veinticuatro horas del día, pero el dueño me debía un favor y...

- Espera, espera. ¿Has despertado a un amigo y le has obligado a hacer una pizza a las casi tres de la mañana?

- No, ni loco, me mata - no puedo evitar reírme sin control; la imagen de Josh recién despierto, con ganas de pegarme y sus casi dos metros se hace presente en mi cabeza y niego. Sus puños son como los de Hems - Solo sé dónde esconde las llaves de su local y le deje una nota.

Iria choca su trozo de pizza con el mío y reímos a la vez. A mi móvil le llega una notificación de twitter y ruedo los ojos.

- ¿También te acosan a estas horas? - pregunta curiosa.

- No, no, solo es twitter. Las fans, que no pueden vivir sin mí - saco el móvil para enseñárselo pero veo que Jeremy ha tuiteado. "¿Por qué lo tendré con la maldita estrellita?". Intento ocultárselo a Iria para que no pensemos en él pero me coge el móvil y se queda mirando la foto que ha subido.

- Eso ha sido un golpe muy bajo - dice Iria a la pantalla de mi móvil. Sus ojos brillan.


HOLAAAA, me echabais de menos? Yo a vosotras si ;-; Solo estoy de paso. Para demostrar que sigo viva (a ratos) pero volveré a desaparece un mes o así...

Nuestra Kaya está embarazada asdfghjkl voy a llorar de emoción!!

puuuuuuues, pues eso. Nos leemos y os loveo <3  ps: me cuesta la vida photoshopear en esta novela, socorrito

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top