*Narra Cevans*

Las manos de Minka acarician mi pecho mientras dejan pequeñas marcas de sus uñas de vez en cuando. Yo tendría que seguirla el juego con las caricias, pero no me sale ser cariñoso en estos momentos. Ahora no necesito amor, necesito olvidarme de los problemas.

Minka comienza a besarme la oreja y termina con un pequeño mordisco. Dejo escapar una corta risa y abro los ojos. Unos ojos azul cielo me miran expectantes, con una sonrisa juguetona.

- ¿Iria? - pregunto al ver unos ojos distintos a los ojos marrones de Minka.

- Sí - dice su voz. Pero es imposible que este ella aquí - No seas tonto, soy resultado de tu mente. No quieres estar con Minka, sino conmigo. Habéis recaído tantas veces que ya nada es nuevo para vosotros.

- Pero no hay peligro de que nos enamoremos.

- ¿De verdad crees que puedes evitar el amor? Además, estoy aquí. Creo que esto ya demuestra que tu corazón ya no es del todo tuyo.

- No quiero sufrir.

- Nadie quiere - dice sin quitar esa sonrisa de su cara. Joder, como me gustaría poder esos labios de verdad.

- ¿Cómo sé que sientes lo mismo que yo? Solo eres un producto de mi imaginación. ¿Quién es ese Eric?

- ¿Te has enamorado de mi pasado? Tendrás que aceptarme, olvidando todo lo de anterior. Y por supuesto yo también olvidaría lo que quieres hacer con esta... Pero tú ahora puedes impedir cometer un error que lo será en el futuro.

- Vale - contesto mirando esos ojos.

- ¿Vale qué? - pregunta la voz de Minka. Abro los ojos con fuerza y vuelvo a la realidad.

Mierda, no me acordaba de ella. ¿Cómo me escapo de esta situación? Joder Evans, te mereces una bofetada.

- Esto... Yo... - tartamudeo mientras noto los besos de la morena por mi cuello. Mierda, mierda, como siga así no voy a poder parar.

- ¿Si, cariño? - habla ella, con ninguna gana de hablar.

Me aparto de su cuerpo, antes de que me lleve a hacer algo que no quiero. Bueno, sí que quiero hacer, pero no con ella.

- Lo siento, no puedo - digo sin mirarla. Cojo mi camiseta del suelo y me la pongo, mientras ella se levanta de la cama.

- No sabía cuánto tiempo ibas a fingir más. Me alegra que hayas parado.

- No sé a qué te refieres Minka pero... Creo que lo mejor será que no nos veamos en un tiempo. Necesito aclararme.

Me voy del piso lo más rápido posible. No puedo volver al bar, no me siento capaz de ver a Iria ni a nadie de mis compañeros. Tampoco quiero irme al camerino de los estudios tan pronto.

Mis pies empiezan a marchar por si solos, a través de las calles, sin un rumbo fijo. Mi mano va hacia mi bolsillo, desbloquean con rapidez el móvil y marcan el número de la única persona que podría entenderme y ayudarme.

- ¿Evans? ¿Ha pasado algo?

- Necesito un café - pido.

- Uno detrás de otro, te espero en veinte minutos en la puerta de mi casa.

Cuelgo y pido un taxi.

_____

- Déjame entenderlo todo bien - pide Robert mientras se sirve su tercer "café" en su copa de Iron-Man - Estabas con Minka en su apartamento, te pegaré por eso más tarde - me advierte - Unos ojos azules aparecen por tu mente y te fuiste.

- Sí - afirmo. Él asiente y al acto me propina un golpe en las costillas - ¡Oye!

- ¡Te habíamos prohibido volver a ver a Minka de esa forma otra vez!

- ¡Lo sé, lo sé! Pero tuve miedo, un error lo tiene cualquiera.

- ¡Tú sí que eres un error! ¿Esto lo sabe Scarlett?

- No y espero que siga siendo así. Al final y al cabo no hemos hecho nada... - una colleja en mi nuca me impide acabar la frase - ¡Que pares de pegarme joder!

- Te mereces muchas más.

- ¿Me vas a ayudar de forma pacífica o no?

- Es más eficaz la física pero bueno... Como la rubia quiera. ¿Qué te pasa?

- Esperaba que pudieses explicármelo tú - contesto un poco molesto. Entre los golpes de Scar y Rob, quedarme a medidas con Minka y la visión de Iria, solo quiero que le día acabe de una vez.

- ¿Puedo saber quién es esa chica misteriosa?

- ¿Cómo sabes que era una chica?

- No lo sabía - bufo sonoramente. Acabo de caer en el truco más viejo de todos - Nadie importante - miento - Pero de repente vino a mi mente y tuve que parar...

- Claro - dice sin creerse una sola palabra que digo - Puedo sospechar que te pasa, pero no sé si es eso.

- Dímelo - pido.

- ¿Quién es esa chica?

- Nadie.

Robert entrecierra los ojos y me dice que sin nombre de la chica no hay más ayudas. Me voy de su casa de muy mal humor y pido un taxi dirección a mi cama. Quiero que se acabe este día lo más pronto posible.

*Narra Iria*

- ¡Buenos días! - me grita la voz de mi hermano en mi oído.

- Ho vamos... Te odio - balbuceo entre las sábanas y mi almohada - Quiero dormir más... Hemos llegado a las ocho pasadas a casa.

- Pero tengo hambre - se queja él - Son las tres y no he comido nada.

- Despierta a Jer - sugiero para que me deje en paz - Seguro que está encantado de hacerte el desayuno.

- Como me digas - dice. Noto como salta de la cama y sale de mi habitación. Jeremy lo matará, pero así me aseguro de poder dormir un ratito más.

_____

- ¿Cómo va la búsqueda de oficinas? - me pregunta Iker, cotilleando mi portátil.

Como el vago de Renner no se levantó de la cama, es más, ni siquiera mi hermano pudo despertarlo. Tuve que desayunar con el idiota de Iker y ahora aprovecho a adelantar cosas del trabajo, que voy muy atrasada.

- Bien, ya he encontrado una que no supera el presupuesto que me dieron y está bien situada. Solo me queda buscar empleados, hacer transferencias bancarias, conseguir...

- Si, si, cosas aburridas - me corta Iker - Luego os extrañabais de que eligiera una carrea de ciencias puras.

- Y dicen que somos mellizos, que locos están.

Pasamos unos momentos en silencio, mientras él busca algo interesante en el salón de Renner, ergo, mi hermano cotillea cual vieja detrás de su visillo. Mi móvil suena y lo miro al momento.

"Tenemos que hablar sobre la fiesta de estos dos" dice un número que desconozco en el grupo de WhatsApp del cumpleaños de Scar y Mark.

"Evans, tú lo has creado, haz acto de presencia" dice otro número.

"Lo siento, hasta el viernes no haré acto de presencia en nada. Ya he avisado a los Russo de que no iré" contesta Evans.

Miro el móvil extrañada, por lo que había oído, Evans nunca falta a los rodajes ni nada por el estilo. Qué raro. Seguramente quiera pasar tiempo con Minka. Rechino los dientes al recordarles juntos.

La curiosidad me puede y googleo el nombre de Evans. Al momento, miles de enlaces a revistas, entrevistas, páginas de fans, su twitter... Aparecen ante mí. Filtro la búsqueda a las más recientes, pero nada interesante aparece: solo teorías sobre Civil War, imágenes promocionales, una entrevista de Selena Gómez en la que revela que Chris Evans es su nuevo crush... ¿Qué narices? ¿Más competencia? Genial, todo perfecto sí.

¿Estoy tonta? Pero si ni siquiera le gusto y tiene a ese pivón de exnovia, novia, amante o lo que sea...

- Hey - Iker llama mi atención - ¿Has visto que Renner tiene una foto de nosotros tres cuando vino a España en Navidad?

Me levanto de la silla y voy a dónde está mi hermano: está sentado en el suelo, con un armario abierto de par en par y todo sacado de su lugar.

- ¿No podías desordenar un poco más? - pregunto molesta. El pelinegro me tiende el marco de la foto y veo un selfie de nosotros tres, con el fondo de una fuente congelada. Los tres enfundaos en abrigos, gorros, bufandas y guantes, la noche más fría de ese año, como no - Ni me acordaba de esta foto.

- Yo tampoco, pero me alegra saber que la tiene guardada él. Es muy buen amigo.

- Lo es, el mejor de todos - siempre podré contar con Jer, de eso estoy segura.

- Tiene un montón de fotos con todos sus compañeros también. Debería hacer limpieza o por lo menos ponerlas fuera del armario.

- Ordena todo esto - le ordeno y le doy la foto de Madrid.

HOLAAA, nuevo cap (un poco más tarde de lo que pensaba, más vale tarde que nunca, ¿no?) No hay tanto drama como quería , pero poco a poco, disfrutadlo mucho.

Nos leemos y os loveo!!